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El mito de Ofelia

Un drama descrito en un cuadro favorito de muchos que somos románticos corregibles.

La desdichada Ofelia de la tragedia "Hamlet", es hija literaria de Shakespeare, como la gentil Desdémona o la dulce Julieta. Ofelia, prometida del atormentado príncipe Hamlet, se vuelve loca cuando éste, por confusión, mata a Polonio, chambelán de Hamlet y padre de Ofelia. En su desvarío, Ofelia vagabundea junto a un lago, recogiendo flores, y muere ahogada en las fangosas aguas. El nombre "Ofelia" parece estar inspirado en el griego "he ofeleía" (el socorro, la ayuda). Se ignora si Shakespeare se basó en algún precedente literario, como la novela pastoril Arcadia, publicada por el italiano Sanazzaro en 1504.

La mejor imagen de Ofelia puede verse en la londinense Galería Tate, en un famoso óleo del precoz pintor John Everett Millais, considerado como el sucesor de Turner. Es la obra emblemática en el más puro estilo del romanticismo inglés. Millais deseó realizar este tema inspirado en Shakespeare, si bien una joven ahogada no era muy habitual en los cuadros de mediados del siglo XIX. Ello brindó al artista innumerables posibilidades de experimentar lo relacionado con la ausencia de gracia y equilibrio. Como modelo posó Elizabeth Siddal, una bella doncella que trabajaba en una sombrerería y que se convirtió en la modelo favorita de los artistas del momento, casándose posteriormente con Rossetti. Lizzy posó en incómodas condiciones permaneciendo durante horas sumergida en un baño de agua tibia. El resultado es una obra hipnotizadora y escalofriante cargada de poesía, en la que encontramos el realista naturalismo de los prerrafaelitas, alejado de las tendencias académicas del arte oficial de su época.

Cuando Ofelia muere, pasando "de su melodioso canto a su turbia muerte" ("from her melodious lay to Muddy death"), se convierte en un imposible objeto de deseo. Ofelia cae cual estrella fugaz en un cielo de tragedia. Sentimos su sufrimiento y la vemos morir tan pronto, alejándose agua abajo con la luz de su sonrisa en los labios, como se desvanece cielo abajo la luz de los cometas fugitivos. Queremos quejarnos como ella en el único instante en que se lamenta: "To have seen what I have seen, see what I see!" (Haber visto lo que he visto, ver lo que veo). Porque hay un Hamlet en el fondo de todo corazón humano, y en la oscuridad de la conciencia de ese Hamlet, resta siempre el centelleo de alguna luz que no supimos recoger. La luminaria pasó, pero su estela queda, y jamás volverá aquella sonrisa a inundar con su hechizo nuestra existencia.

El primer amor es la forma genuina de la felicidad, quizá la única: Ánima vaga, impalpable, huidiza, como Ofelia. Momentánea en cada vida, eterna en la memoria. Como Ofelia, un cielo que se nos ofreció y desdeñamos. Podemos pensar que Shakespeare, al dar vida mental a la divina hechura de su alma, presintió que en ella fundía para siempre las eternas aspiraciones del sentimiento ideal de todo corazón humano en todos los países y en todas las edades. Nunca produjo el arte una creación más pura, ni divinizado una realidad más humana, ni concebido una verdad más esplendente. El arte no demuestra, pero el arte presiente.

¿A qué aspira el ser humano? A todo cuanto ofrece Ofelia: sencillez, candor, sinceridad, inocencia en deseos y en pensamientos, delicadeza en sentimientos y en actos, capacidad para todos los afectos, desde temblar ante la presencia de su amante hasta tambalearse en su delirio de huida.

El cadáver de Ofelia, ¡ay!, todavía sigue muriendo. Perecer como sucumbe Ofelia, nos sigue susurrando una belleza mágica, arrebatadora y sublime en el bosque sombrío donde aún habitan seres solitarios. Ojalá supiéramos encontrar los amores posibles, esas pasiones enfrenadas que posibilitan amores realizables y resistibles. Si nos moviésemos por buenos instintos, hallaríamos con facilidad querencias finitas, propias de amantes mortales que se atrevieron a amar.

Anagnórisis y peripeteia, desde Ulises a Luke Skywalker


La anagnórisis (del griego antiguo ἀναγνώρισις, «reconocimiento») o agnición es un recurso narrativo que consiste en el descubrimiento por parte de un personaje de datos esenciales sobre su identidad, sus seres queridos o su entorno, ocultos para él hasta ese momento. La revelación altera la conducta del personaje y lo obliga a hacerse una idea más exacta de sí mismo y de lo que le rodea. 

También se produce anagnórisis cuando un personaje principal revela su identidad hasta entonces oculta o velada a otros personajes secundarios cambiando así la relación, normalmente de un nexo débil o inexistente (un mendigo o simple huésped) hacia un nexo fuerte (el hijo de un enemigo que clama venganza, el retorno de un rey por largo tiempo ausente,...), produciendo un punto de giro en la historia que la hace avanzar hacia su desenlace.

Al regresar a Ítaca Ulises se presenta o revela hasta en diez ocasiones su identidad a sus seres queridos, puesto que sus rasgos físicos han sido cambiados por los dioses y el tiempo y no siempre le reconocen. El término fue utilizado por primera vez por Aristóteles en su Poética. Aunque la anagnórisis es un recurso frecuente en muchos géneros, Aristóteles la describió en relación con la tragedia clásica griega, con la que está asociada de modo especial.

De acuerdo con Aristóteles, el momento ideal para la anagnórisis trágica es la peripecia (giro de la fortuna): en un momento crucial, todo se le revela y hace claro al protagonista, con efectos casi siempre demoledores. Por ejemplo, el descubrimiento por parte del héroe trágico de alguna verdad sobre sí mismo, otras personas, o de algunas acciones que significan que, ahora que las sabe, toda la trama cambia de dirección como resultado de su reacción a las noticias. La revelación de esta verdad (que ya era un hecho, pero el protagonista ignoraba) cambia la perspectiva y la reacción del héroe, que se adapta y se acomoda aceptando su destino y en consecuencia ayudando a que este ocurra.
Ejemplos: Edipo, rey de Tebas descubre que el verdadero origen de las plagas que asuelan su polis son causadas por él mismo al cumplir sin saberlo con el oráculo de Delfos: "Matarás a tu padre y te casarás con tu madre", con quien ha tenido cuatro hijos. Un ejemplo clásico de anagnórisis en la tragedia griega se halla en el «Edipo Rey» de Sófocles, cuando Edipo se entera de que la persona que había matado era su padre y que su esposa es su madre. Otro caso especialmente emotivo es el de Ágave al final de «Las bacantes» de Eurípides, que llega a Tebas con lo que cree la cabeza de una fiera en su mano. A medida que el dios Dioniso se va retirando de su ser, comprende que se trata de su propio hijo, Penteo, al que ella y las demás bacantes han despedazado en una orgía de sangre.

En la comedia griega, la anagnórisis es también un recurso frecuente: en las obras de Menandro y sus imitadores latinos, abundan los personajes que han sido abandonados de pequeños y criados como miembros de una clase social inferior. Al entablar una relación con un personaje noble, su extracción humilde supone un estorbo; al final de la obra, se descubre por algún indicio (una marca de nacimiento, un objeto personal que la madre dejó junto al bebé) su verdadera identidad, y la pareja puede unirse felizmente en matrimonio.

En la épica griega tenemos un buen ejemplo de anagnórisis en los últimos cantos de la «Odisea», cuando Ulises vuelve a Ítaca, su patria, y varios personajes lo van reconociendo (su viejo perro Argos, su nodriza Euriclea, su hijo Telémaco, su padre Laertes,...), en una gradación que termina cuando su esposa Penélope, la más reacia a aceptar la revelación, lo somete a una última prueba para confirmar su identidad.

En la literatura española, la anagnórisis es moneda corriente en las novelas de caballerías, el teatro barroco (p. ej. «La dama duende», de Pedro Calderón de la Barca) y el drama romántico. Y también está presente en La gitanilla y en varias de las novelas ejemplares de Miguel de Cervantes. En la literatura inglesa renacentista, William Shakespeare también utiliza las características asociadas a este término en sus obras dramáticas, específicamente en sus tragedias. A pesar del momento de anagnórisis, de reconocimiento, todo acaba mal por el hecho de la inclusión del fatalismo, propio de las obras trágicas.

En la literatura prehispánica, específicamente en el drama Ollantay encontramos una hermosa anagnórisis cuando el inca Túpac Yupanqui encuentra a Cusi Coyllur, prisionera, y reconoce que ella es su hermana.

El ejemplo más moderno sería en el episodio V de la Saga cinematográfica de Star Wars: Cuando Darth Vader revela a Luke Skywalker que él es su padre, la trama pasa de ser una batalla entre el bien contra el mal a ser un conflicto existencial del protagonista entre su deber de luchar contra el mal o redimir a su padre caído.
La peripeteia (en griego antiguo, περιπέτεια) o peripecia es el acontecimiento de una trama que supone un punto de inflexión, un giro en la suerte de los personajes. Este término especialmente se aplica a las obras dramáticas. Dicha historia se presenta como una adversa y repentina que sucede accidentalmente y sin previo aviso, lo cual provoca un cambio en la situación actual que se vive en lo relatado.

En las tragedias supone el punto en el que la trama toma el cariz propiamente trágico, es decir, el punto de inflexión en el que la suerte del héroe protagonista se trunca y comienzan las desgracias que le llevarán inevitablemente a un final desdichado.

Aristóteles define la Peripeteia como «un cambio por el cual la acción gira hacia su opuesto, sujeto siempre a nuestra regla de probabilidad o necesidad». Según Aristóteles, la peripecia, junto con el descubrimiento, es la más efectiva cuando se trata de drama, particularmente tragedia: «la mejor forma de Descubrimiento es aquella que asiste a Peripeteia, como la que conduce al Descubrimiento a Edipo».

La peripeteia incluye cambios en el personaje, además de cambios externos. Por ejemplo, si un personaje pobre y oscuro se ha vuelto rico y famoso, ha sufrido una peripeteia, incluso si su personaje sigue siendo el mismo. La peripeteia o peripecia se distingue de la anagnorisis o agnición, cuando un personaje descubre una información que previamente ignoraba. Esta distinción proviene de la Poética, que consideró que la anagnórisis, que lleva a la peripeteia, un aspecto superior de la tragedia. 

Dos de estas obras son Edipo Rey, donde la información proporcionada por el oráculo de Delfos (que Edipo mató a su padre y se casó con su madre) provocó la muerte de su madre, Yocasta y su propia ceguera y exilio, e Ifigenia entre los tauros, donde Ifigenia se da cuenta de que los extraños que ella debe sacrificar son su hermano y su amigo, lo que resultó en que los tres escaparan de Tauris. Consideró estas tramas complejas y superiores a las simples sin anagnórisis ni peripeteia, como cuando Medea decide matar a sus hijos sabiendo que lo son y aun así lo hace. Aristóteles identificó a Edipo Rey como la principal obra para ejemplificar la peripecia.
Otro recurso literario citado en este vídeo es el Arma de Chéjov: "Elimina todo lo que no tenga relevancia en la historia. Si dijiste en el primer capítulo que había un rifle colgado en la pared, en el segundo o tercero este debe ser descolgado inevitablemente. Si no va a ser disparado, no debería haber sido puesto ahí", indicó Antón Chéjov.

El mejor libro de la Historia

Diez imprescindibles libros que todos deberíamos haber releído varias veces, y que pueden descargarse gratuitamente desde Internet.

Muchos críticos consideran que el mejor libro de la historia de la literatura universal es “El Ingenioso Hidalgo Don Qujote de la Mancha”, escrito por Miguel de Cervantes a principios del siglo XVII. Otros creen que también podrían optar al primer puesto “La Divina Comedia” de Dante Alighieri, “Madame Bovary” de Gustave Flaubert, u obras de William Shakespeare como ”Hamlet”, “Otelo” o el “Rey Lear”.

Entre los más clásicos más modernos, en la cumbre siempre han figurado títulos tan variados como “Los hermanos Karamazov” de Dostoievski (o “Crimen y castigo” del mismo autor que fue mi primer gran libro), “Guerra y paz” de Tolstói, “La montaña mágica” de Thomas Mann o el más reciente “Ficciones”, un texto de Jorge Luis Borges del año 1944.

Muchos creen que el libro principal es alguno de carácter sagrado: la “Biblia”, el “Corán”, o el “Talmud”,… Todos de innegable valor literario e indudable trascendencia histórica. Otras obras de reconocimiento universal, como el "Ulises” de James Joyce, se excluyen porque nunca facilitaron su lectura.

Cada persona mantiene sus propias preferencias. Por su valor educativo para quienes se inician en la lectura, quizá algunos profesores nos decantaríamos por “El Principito” de Antoine de Saint-Exupéry, “Moby Dick” de Herman Melville, “Las aventuras de Tom Sawyer” de Mark Twain, o “La vuelta al mundo en 80 días” de Julio Verne,… Como lema final, se podría apuntar que en todo tiempo y lugar el mejor libro fue y será el que a más personas y en más lenguas, con menos páginas y requisitos previos, enseña más, alegra más, libera más y aviva más.

Aprendiendo la vida que es como el teatro...

"El mundo entero es un teatro", decía William Shakespeare. Desde antes, un proverbio romano aseguraba que "La vida es como un teatro: vienes, ves y te vas". Proseguía con ironía Oscar Wilde: "El mundo es un teatro, pero la obra tiene un reparto deplorable". Quizá G. M. Valtour nos desvelaba una de las claves: "En el teatro de la vida, el apuntador se llama muchas veces egoísmo". Más apocalíptico, Jean-Paul Sartre lo describía: "La vida es un pánico en un teatro en llamas". Y con más humor, concluía el crítico teatral Alexander Humphreys Woollcott: "El teatro: la segunda más antigua profesión del mundo... arruinada por los aficionados".

Teatro es el mundo y marionetas las personas somos. Tal vez, como recordaba Julio Cortázar: "Un teatro no es más que un pacto con el absurdo, su ejercicio eficaz y lujoso". Por ello, aprender con teatro es algo sutil y eficaz. Por eso, uno de nuestros libros - Taller de Sabios - fue destinado a este menester, hace ya muchos años.

Para ilustrar el post hemos adjuntado el cortometraje "La clase, cortometraje educativo" de Beatriz M. Sanchís premiado en la sección de Cortos Documentales de los Premios Goya. Más posts con citas que concentran el saber.

El pañuelo de Desdémona (Shakespeare)

OTELO: El dolor de mi enfermedad me abruma, véndame la frente, de nuevo. DESDÉMONA: (Ofreciéndole un pañuelo) Toma.
O: No, quiero el pañuelo que te regalé. D: No lo tengo aquí.
O: Desdémona, ¡ten cuidado de no perderlo! Una poderosa hechicera tejió su misteriosa trama que encierra la brujería de un talismán. ¡Ten cuidado! ¡Perderlo o regalarlo puede acarrear una terrible desgracia! D: ¿Hablas en serio?
O: Hablo en serio. D: ¡Me asustas!
O: ¿Por qué? ¿Es que acaso lo has perdido? D: No.
O: ¡Búscalo! D: Iré dentro de un rato... O: No, ¡ahora!...

Antes de morir, vive

Antes de morir, vive 
Brian Dyson nació en Argentina en 1936, entró a formar parte de Coca-Cola en el 1959 y trabajó durante muchos años en Latinoamérica, el Caribe y México. Entre 1978 y 1983 fue presidente de Coca-Cola EE.UU. y asumió la presidencia de Coca-Cola North America en 1983. Del 1986 al 1991 fue el primer presidente y CEO del grupo Coca-Cola Enterprises Inc. 

Al retirarse ofreció un discurso corto, pero con grandes lecciones. Su mensaje es claro “enfócate en la cosas realmente importantes de tu vida”. A continuación, su transcripción.
Antes de morir, vive 

Imagina la vida como un juego en el que estás malabareando cinco pelotas en el aire. Estas son: tu trabajo, tu familia, tu salud, tus amigos, y tu vida espiritual, y tú las mantienes todas éstas en aire.

Pronto te darás cuenta que el Trabajo es como una pelota de goma. Si la dejas caer, rebotará y regresará. Pero las otras cuatro pelotas: Familia, Salud, Amigos y Espíritu son frágiles, como de cristal. Si dejas caer una de estas, irrevocablemente saldrá astillada, marcada, mellada, dañada y encluso rota. Nunca volverá a ser lo mismo.

Debes entender esto: apreciar y esforzarte por conseguir y cuidar lo más valioso. Trabaja eficientemente en el horario regular de oficina y deja el trabajo a tiempo. Dale el tiempo requerido a tu familia y a tus amigos. Haz ejercicio, come y descansa adecuadamente. Y sobre todo…crece en vida interior, en lo espiritual, que es lo más trascendental, porque es eterno. Shakespeare decía: Siempre me siento feliz, ¿sabes por qué?. Porque no espero nada de nadie, esperar siempre duele. Los problemas no son eternos, siempre tienen solución. Lo único que no se resuelve es la muerte. La vida es corta, ¡por eso ámala !.

Vive intensamente y recuerda: Antes de hablar…¡Escucha! Antes de escribir… ¡Piensa! Antes de criticar…¡Examina! Antes de herir…¡Siente! Antes de orar ¡Perdona! Antes de gastar… ¡Gana ! Antes de rendirte ¡Intenta!

ANTES DE MORIR…¡¡ VIVE !!
Antes de morir, vive

Divagaciones geniales de Tim Minchin

Nueve lecciones de vida del músico y comediante Tim Minchin, al recibir un doctorado honorario en la Universidad Western Australia en 2013. Aunque el vídeo está subtitulado al español, recogemos la transcripción de lo fundamental.

1. No es obligatorio tener un sueño.

Los americanos en los concursos de talentos siempre hablan de sus sueños. Bueno, si tenéis algo con lo que siempre habéis soñado de corazón, ¡id a por ello! Después de todo, es algo que hacer con vuestro tiempo: perseguir un sueño. Y si es uno suficientemente grande, os va a llevar la mayor parte de vuestra vida alcanzarlo, así que para cuando lo consigáis y estéis observando el abismo de la falta de sentido de vuestro logro, estaréis casi muertos, así que no importará.
Yo nunca tuve realmente uno de esos grandes sueños, así que soy partidario de dedicarse apasionadamente a la persecución de objetivos a corto plazo. Sed micro-ambiciosos. Agachad la cabeza y trabajad con orgullo en lo que sea que tengáis delante; nunca sabes dónde puedes acabar. Sólo tened en cuenta que el próximo objetivo que merezca la pena probablemente aparecerá en la periferia, que es por lo que deberíais tener cuidado con los sueños a largo plazo: si miráis demasiado lejos hacia adelante, no veréis esa cosa brillante con el rabillo del ojo.

2. No busquéis la felicidad.

La felicidad es como un orgasmo: si piensas demasiado en ello, desaparece. Manteneos ocupados, intentad hacer a alguien feliz, y puede que os llegue también un poco de felicidad como efecto secundario. No evolucionamos para estar permanentemente satisfechos; a los australopithecus afarensis satisfechos se los comieron antes de que transmitieran sus genes.

3. Recordad: todo es suerte.

Tenéis suerte de estar aquí. Fuisteis increíblemente afortunados por haber nacido, e increíblemente afortunados por haber sido criados en una buena familia que ayudó a que tuvierais una educación y os animó a ir a la universidad.
O, si naciste en una familia horrible, entonces mala suerte y tienes mi simpatía, pero aun así eres afortunado. Afortunado porque resultaste estar hecho del tipo de ADN que fabrica el tipo de cerebro que, al sufrir un entorno infantil horrible, toma decisiones que te llevaron, finalmente, a graduarte en la universidad. Bien hecho por arrastrarte a ti mismo por los cordones de los zapatos, pero has tenido suerte. No has creado la parte de ti que te arrastró; ni siquiera tus cordones.
Supongo que yo trabajé duro para conseguir los dudosos logros que he alcanzado, pero yo no creé la parte de mí que me hace trabajar duro, como tampoco creé la parte de mí que comió demasiadas hamburguesas en vez de ir a clase mientras estuve aquí en la UWA. Comprender que en realidad no puedes atribuirte el mérito de tus éxitos ni tampoco culpar a otros de sus fracasos, te hará humilde y más compasivo. La empatía es algo intuitivo, pero también es algo que puedes trabajar intelectualmente.

4. Haced ejercicio.

Lo siento, pálidos fumadores graduados en filosofía que arqueáis vuestras cejas en una curva cartesiana mientras veis a la muchedumbre en movimiento serpenteando a través de los minúsculos conos de tráfico de su existencia: vosotros estáis equivocados y ellos tienen razón.
Bueno, tenéis razón a medias. Pensáis, luego existís; pero también: corréis, luego dormís bien, luego no estáis sobrecogidos por una angustia existencial. No podéis ser Kant, y tampoco queréis serlo.
Haced deporte, haced yoga, levantad pesas, corred, lo que sea, pero cuidad vuestro cuerpo: lo vais a necesitar. La mayoría de vosotros va a vivir casi cien años, e incluso el más pobre de vosotros alcanzará un nivel de riqueza que la mayoría de humanos a lo largo de la historia ni siquiera podría haber soñado. Y esta larga y lujosa vida que tenéis por delante ¡va a hacer que os deprimáis! ¡Pero no desesperéis! Hay una correlación inversa entre depresión y ejercicio. Hacedlo. Corred, mis bellos intelectuales, corred.

5. Sed severos con vuestras opiniones.

Un famoso dicho afirma que las opiniones son como los agujeros del culo porque todo el mundo tiene una. Eso encierra una gran sabiduría, pero yo añadiría que las opiniones difieren significativamente de los agujeros del culo porque las vuestras deberían ser constante y exhaustivamente examinadas.
Debemos pensar críticamente, y no sólo sobre las ideas de otros. Sed severos con vuestras creencias; sacadlas a la calle y pegadles con un bate de críquet. Sed rigurosos intelectualmente; identificad vuestros sesgos, vuestros prejuicios, vuestras preferencias. La mayoría de las discusiones sociales perduran por no saber reconocer los matices; tendemos a generar falsas dicotomías, tratando entonces de mantener una discusión usando dos conjuntos de suposiciones completamente diferentes, como dos jugadores de tenis tratando de ganar un partido dando bellos golpes perfectamente ejecutados desde extremos opuestos… de diferentes pistas de tenis.
Por cierto, ya que tengo enfrente de mí a graduados en ciencias y en letras: por favor, no cometáis el error de pensar que las letras y las ciencias son cosas opuestas. Esa es una idea reciente, estúpida y dañina. No tienes que ser anticientífico para crear bello arte, para escribir cosas bonitas. Si necesitáis pruebas: TwainDouglas AdamsVonnegutMcEwanSaganShakespeareDickens… (para empezar).
No necesitas ser supersticioso para ser poeta. No necesitas odiar la manipulación genética para preocuparte por la belleza del planeta. No necesitas tener un alma para promover la compasión. La ciencia no es un cuerpo de conocimiento ni un sistema de creencias; es sólo un término que describe la adquisición incremental de conocimientos de la humanidad mediante la observación. La ciencia es asombrosa.
Las letras y las ciencias necesitan trabajar juntas para mejorar cómo se transmite el conocimiento. La idea de que muchos australianos (incluyendo nuestro nuevo primer ministro y primo lejano mío, Nick Minchin) crean que la ciencia detrás del calentamiento global es discutible es un claro indicador de la magnitud de nuestro fracaso en la comunicación. El hecho de que el 30% de las personas de esta habitación se hayan enojado es todavía mayor evidencia. El hecho de que ese enojo tenga más que ver con la política que con la ciencia es incluso más desalentador.

6. Sed profesores.

Por favor, por favor, por favor: sed profesores. Los profesores son las personas más admirables e importantes del mundo. No tenéis que hacerlo para siempre, pero si estáis en la duda de qué hacer, sed profesores increíbles, sólo mientras seáis veintañeros. Sed maestros de educación infantil, especialmente si eres un tío; necesitamos hombres maestros de educación infantil.
Incluso si no sois profesores, sed profesores: compartid vuestras ideas; no deis por hecha vuestra educación; disfrutad de lo que aprendéis, y difundidlo.

7. Definíos por lo que amáis.

Me he encontrado yo mismo hace poco haciendo esto: si alguien me pregunta qué tipo de música me gusta, digo “bueno, no escucho la radio porque la letra de la música pop me molesta”. O si alguien me pregunta que qué comida me gusta, digo “creo que el aceite de trufa se usa en exceso y es ligeramente desagradable”. Y lo veo constantemente en Internet: gente cuya idea de pertenecer a una subcultura es odiar a Coldplay, o el fútbol, o a las feministas, o al Partido Liberal.
Tenemos tendencia a definirnos en oposición a algo; como cómico me gano la vida con eso. Pero tratad de expresar también vuestra pasión por las cosas que os gustan: sed efusivos y generosos en vuestros elogios a aquellos que admiráis; mandad tarjetas de agradecimiento y dad ovaciones en pie. Sed pro-algo, no sólo anti-algo.

8. Respetad a la gente con menos poder que vosotros.

En el pasado he tomado decisiones importantes sobre la gente con la que trabajo (agentes y productores) basándome en gran medida en cómo tratan a los camareros en los restaurantes en los que nos reuníamos. No me importa si eres el gato más poderoso en la habitación: te juzgaré por cómo trates a los que tienen menos poder. Que lo sepas.
9. No tengáis prisa.
No necesitas saber ya lo que vas a hacer con el resto de tu vida. No digo que os quedéis fumando porros todo el día, pero tampoco entréis en pánico. La mayoría de la gente que conozco que estaba segura del camino a seguir a los 20 años, ahora tiene una crisis de mediana edad.
Dije al principio de esta divagación que la vida no tiene sentido. No era una afirmación superficial; creo que es absurda la idea de buscar un sentido en el conjunto de circunstancias que casualmente existen después de 13,8 miles de millones de años de eventos sin rumbo. Dejad que los humanos piensen que el universo tiene un propósito para ellos.
Sin embargo, no soy un nihilista. Ni siquiera soy un cínico. Soy, de hecho, más bien romántico. Y ésta es mi idea de romanticismo: pronto estaréis muertos. La vida a veces parecerá larga y difícil y… ¡dios!, agotadora. Y a veces estarás feliz y a veces triste. Y después estarás viejo. Y después estarás muerto. Hay sólo una cosa sensata que hacer con esta existencia vacía, y es llenarla.
Y en mi opinión (hasta que la cambie), la mejor forma de llenar la vida es aprendiendo todo lo que puedas sobre todas las cosas que puedas; estar orgulloso de lo que sea que hagas; siendo compasivocompartiendo ideas; corriendo; siendo entusiasta. Y también está el amor, viajar, el vino, el sexo, el arte, los niños, regalar, escalar montañas,… pero todo eso ya lo sabéis.
Es algo increíblemente excitante esta vida vuestra, única y sin sentido. Buena suerte, y gracias por esta oportunidad.

Enid Blyton supera a J.K. Rowling como autora más querida

Enid Blyton fue la prolífica escritora de quien más libros leí en mi infancia, y muchos años después mis hijos también leyeron sus mismas obras (aunque en una lengua diferente, el euskera). En alguna otra ocasión, hablé de su influencia con "Los cinco".

Hoy, nos alegra leer que ha sido elegida como la autora preferida por los británicos, seguida por Roald Dahl, autor de "Charlie y la fábrica de chocolate", J.K. Rowling, creadora de "Harry Potter", Jane Austen y Shakespeare.

Test de Personalidad de Jung según Myers-Briggs, para orientación laboral

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¿Quieres saber si eres una persona de uno de estos 16 tipos? En cinco minutos puedes saberlo y orientar, quizá, mejor tu profesión, metas, ámbito laboral,...
  • “ABOGADO” INFJ.    Callados y místicos, que sin embargo son inspiradores e idealistas incansables, como GoetheMartin Luther King, Gandhi,...
  • “MEDIADOR” INFP. Personas poéticas, amables y altruistas, siempre en busca de ayudar a una buena causa, como Shakespeare, Homero, Virgilio, Jesús de Nazareth, Longfellow,.
  • “PROTAGONISTA” ENFJ.  Líderes carismáticos e inspiradores, capaces de cautivar a quienes los escuchan, como Abraham Lincoln, Abraham Maslow, Mikhael Gorbachev,... ¡Es lo que me ha definido y lo ha clavado, con sus luces y sus sombras!
  • “ACTIVISTA” ENFP. Espíritus libres entusiastas, creativos y sociales, que siempre pueden encontrar una razón para sonreír, como Franz Joseph Haydn, Mark Twain, Robin Williams,... 
  • "CENTINELA" ISTJ.  Individuos prácticos y enfocados en los hechos, de cuya fiabilidad no puede dudarse, George Bush, Isabel II de Inglaterra,...
  • “DEFENSOR” ISFJ.  Protectores muy dedicados y cálidos, siempre listos para defender a sus seres queridos, como Louisa May Alcott, Tennyson, Charles Dickens, Madre Teresa de Calcuta,... 
  • “EJECUTIVO” ESTJ.  Administradores excelentes, inigualables al administrar cosas o personas, como Napoleón, Margaret Thatcher, Bill Gates, Bernard Shaw, Carl Sagan,...
  • “CÓNSUL” ESFJ. Personas extraordinariamente consideradas, sociables y populares, siempre en busca de ayudar, como Helena de Troya, María Magdalena, o en ficción: el personaje Nora de “Casa de Muñecas” de Ibsen, Scarlett O´Hara en “Lo que el viento se llevó”,... 
  • "EXPLORADOR" ISTP. Experimentadores audaces y prácticos, maestros en el uso de todo tipo de herramientas, Woody Allen, Frank Zappa, Clint Eastwood, MacGuiver (ficción),.... 
  • “AVENTURERO” ISFP. Artistas flexibles y encantadores, siempre listos para explorar y experimentar algo nuevo, como Mozart, Spielberg, Michael Jackson, Paul McCartney,...
  • “EMPRENDEDOR” ESTP. Personas inteligentes, enérgicas y muy perceptivas, que realmente disfrutan vivir al límite, como Ernest Hemingway, Winston Churchill, Madonna. 
  • “ANIMADOR” ESFP. Animadores espontáneos, enérgicos y entusiastas. La vida nunca es aburrida a su alrededor, Elvis Presley, Pablo Picasso, Bill Clinton,...
Carl Gustav Jung determinó en su obra "Tipos Psicológicos" que existen ocho tipos de personalidad que se forman a partir de la combinación de dos actitudes -extraversión e introversión-, y cuatro funciones –pensar, sentir, intuir y percibir. La teoría de Jung, aunque es un referente en el mundo de la psicología, ha sido acusada de difusa y poco comprensible. Por eso, el Indicador Myers-Briggs pretende transportar la idea del psicólogo suizo a un ámbito más divulgativo para que cualquiera pueda reconocer sus propios rasgos personales.

Existen pruebas de personalidad gratuitas que permiten obtener un código de cuatro-letras según estos cuatro dicotomíasExtroversión / Introversión, Sensorial / iNtuitivo, T - pensamiento (Thinking) / F - emocional (Feeling) y J - calificador (Judging) / Perceptivo. Las 16 combinaciones describen los prototipos definidos al inicio,... 

La primera dicotomía está en la actitud: si se es más propenso a lo externo a uno mismo (personas, cosas, acciones) se escogería la Extraversión (E), mientras si se prefiere centrarse en las ideas y reflexiones personales se es Introvertido (I). Una vez hecha la elección entre las dos actitudes, se debe analizar las funciones psicológicas de cada uno. El segundo parámetro hace referencia a cómo se prefiere analizar la información; si únicamente se hace caso a lo que se puede conocer con los cinco sentidos sería un rasgo Sensorial (S), mientras que si se deja llevar por los “pálpitos”, sería iNtuitivo (N). El tercer indicador, hace referencia a cómo se toman las decisiones. Pensador (T, de thinking) si se da prioridad a la lógica en una elección o Emocional (F, de feeling) si se prefiere responder según las personas y las circunstancias. La última categoría se basa en cómo se actúa con el mundo exterior, si uno está abierto al mundo exterior –Perceptivo (P) -o por el contrario se prefiere tener las cosas resueltas- Calificador (J de judging).

El cuadro superior, al inicio del post, sugiere profesiones donde estas diversas personalidades pueden desarrollarse mejor,... Para concluir, algunas citas (en inglés) que resumen el estilo de vida de cada una de estas formas de decidir, actuar,... ¿Te identificas con alguna? Es otro modo de hacer el test de Myers-Briggs.
Test de Personalidad de Jung según Myers-Briggs, para orientación laboral
Referencias: Odisea Jung,...

El futuro en cifras

A veces, el tamaño sí importa; especialmente cuando se refiere a los números que describen nuestra realidad socioeducativa presente, próxima y remota.

De esas personas excepcionales, de las que literalmente hay una entre un millón, en este momento China dispone de 1.300 de ellas. Y en India, existen 1.100 de esos genios. El 25% más inteligente del alumnado chino representa a muchas más personas que todo el alumnado norteamericano. Para el profesorado, ello significa que China dispone de más estudiantes de excelencia que todos los alumnos norteamericanos, con mayor o menor capacidad. El país del mundo con más angloparlantes, muy pronto será… China. En los cinco minutos en los que se lee este artículo, nacerán 60 norteamericanos, 244 chinos y 351 indios. Para dar tiempo a que nazca un vasco o vasca, será necesario leérselo 7 veces.

Estamos formando estudiantes para empleos que todavía no existen,… donde usarán tecnologías que aún no se han inventado,… a fin de resolver problemas que ni siquiera conocemos. Se estima que un estudiante actual pasará por 10 ó 14 trabajos distintos… antes de cumplir los 38 años. Uno de cada cuatro empleados de hoy día, lleva menos de un año en su empresa. Más de la mitad, no supera los cinco años de antigüedad laboral. Se calcula que las 10 especialidades más demandadas en el inmediato año 2010, no existían en 2004.

El país más rico del mundo, más fuerte militarmente, centro de toda la economía, con el mejor sistema educativo, líder en ciencia e investigación, con el más alto nivel de vida y cuya moneda era la medida monetaria… fue Inglaterra en 1900. En 2000, lo era EE.UU. En 2100 no lo será… El Gobierno Federal estadounidense invierte anualmente en innovación educativa menos de la mitad que lo que una sola empresa (Nintendo) destinó a investigación y desarrollo en 2002 (140 millones de dólares).

En distribución social de banda ancha, EE.UU. sólo ocupa la vigésima posición. La tercera generación de fibra óptica conduce el equivalente a 1.900 CDs o 150 millones de llamadas telefónicas simultáneas cada segundo. Esta velocidad se triplica cada semestre y seguirá creciendo a este ritmo como mínimo otros veinte años. Empleando la fibra ya distribuida, sólo cambiando switches y terminales, el costo marginal de este incremento será prácticamente nulo.

Vivimos una era exponencial, con billones de búsquedas mensuales en Google. Quizá debamos empezar a referirnos a información A.G. (Antes de Google). Los usuarios registrados en MySpace eran más de 106 millones en Septiembre de 2006. Si fuesen ciudadanos de un mismo país, éste sería el undécimo más grande del mundo, entre Japón y México. En promedio, cada una de las páginas de MySpace es visitada 30 veces… al día.

El número de mensajes SMS enviamos y recibidos cada día supera al de la población mundial. Se supone que existen más 540.000 palabras en inglés, cinco veces más que en tiempo de Shakespeare. Más de 3.000 nuevos libros son publicados… diariamente. Se calcula que la información semanal aparecida en un periódico actual (New York Times) es superior a la recibida por un ciudadano del siglo XVIII a lo largo de toda su vida.

La información generada anualmente hoy en día supera los 1,5 trillones de bytes (un 15 seguido de 17 ceros), una cifra mayor que la producida en los 5.000 años previos. La cantidad de nueva documentación técnica se duplica cada dos años. Para un universitario en una carrera técnica de cuatro años, esta celeridad significa que la mitad de lo aprendido en el primer curso es obsoleto en el tercer año. Y aún se está acelerando esta vertiginosa velocidad de duplicación.

El e-paper será más barato que el papel real. Parece imparable el crecimiento de ordenadores portátiles; más de 47 millones de ellos se facturaron el año pasado. El proyecto OLPC (Un laptop por niño) distribuirá anualmente entre 50 y 100 millones de portátiles de 100$ a escolares de países en vías de desarrollo.

Las predicciones apuntan que, en 2013, un carísimo superordenador superará la inteligencia del cerebro humano. En 2023, cuando los universitarios de 23 años finalicen su primera carrera, sólo costarán 1.000$ esos equipos informáticos que superen a la mente humana. Aunque es imposible prever el futuro en un horizonte más lejano de 15 años, los equipos de 1.000$ de 2049 superarán la inteligencia de toda la raza humana. Todo esto demostrar que el cambio ocurre y es imparable. Ahora ya lo sabemos…y seguimos educando al alumnado del siglo XXI con profesorado del siglo XX y métodos del siglo XIX.

Versión para imprimir en: mikel.agirregabiria.net/2007/cifras.DOC

Pensemos fuera de la caja


Pensar fuera de la cajaThinking_outside_the_boxLa charla de esta semana es de Michael Bahr, el director educativo del Festival de Shakespeare de Utah, y nos habla de la relación entre las reglas y la creatividad.

Pensar fuera de la caja (también pensar más allá de la cajathinking outside the box​) es una metáfora que significa pensar diferente, de manera no convencional o desde una nueva perspectiva. Esta expresión se refiere al pensamiento novedoso o creativo. Se cree que la expresión se deriva de consultores de administración de las décadas de 1970 y 1980 que retaron a sus clientes a resolver el juego de los "nueve puntos", cuya solución requería de pensamiento lateral.
El latiguillo —frase de constante repetición— o cliché se ha usado ampliamente en el ámbito de los negocios, especialmente por consultores de gestión y coaches (entrenadores) ejecutivos, y además ha sido mencionado en un gran número de anuncios. Pensar fuera de la caja es mirar más lejos y tratar de no pensar cosas obvias, tratando de pensar más allá.

La jubilación es un modo radical de pensar fuera de la caja para alcanzar una innovación disruptiva, exponencial, sobre aquellos mismos ámbitos y temáticas en la que se ha estado inmerso durante décadas. Una buena, única y gran oportunidad que habrá que explorar,...

Otro ejemplo de cómo encontrar una solución pensando desde fuera de la caja: Se trata de recorrer los 9 puntos con sólo una poligonal de cuatro líneas. 

Nomen est omen: El nombre es el destino

Shakespeare preguntó: “¿Qué hay en un nombre?” (What's in a name?). Plauto respondió, siglos antes: "El nombre es un signo, un presagio, un anuncio, un símbolo, una profecía,... El nombre ya lo dice todo... Lo que no tiene nombre no existe... El nombre es la clave".

Actualización a partir de un comentario (ver en otro post) remitido por el profesor Magnus Moser: La imagen procede de un proyecto realizado en un colegio suizo, web www.osduedingen.ch, que puede verse en alemán en su apartado Treffpunkt / Latein.

Euler, el Shakespeare de las Matemáticas


Reproducimos esta delicia, una de tantas de Nauskas 2014 en Bilbao.
Tomado de EITB y obra de Fernando del Alamo (Historias de la Ciencia).
Con el divertido problema de los siete puentes de Königsberg.
Mucho más sobre Euler,...

Cómo escribir relatos según Kurt Vonnegut

«The Shape of Stories», de Kurt Vonnegut, fue su tesis del máster en antropología en la Universidad de Chicago. En su autobiografía de 1981, dice que fue rechazado porque era demasiado simple y demasiado divertido para ser tomado en serio. Delicioso el chiste con la entropía (entropy), en vez de fin (end).

Kurt Vonnegut dibuja un gráfico en el que se puede trazar cualquier historia. El eje vertical representa la buena y mala fortuna que experimentan los personajes sobre el eje horizontal que representa el tiempo desde el principio hasta el final de una historia. Por buena fortuna o buena suerte se refiere a tener prosperidad y buena salud. Y por mala suerte entiende la muerte, la pobreza extrema, o la enfermedad. 
        
Los ocho tipos de historias, según Kurt Vonnegut:
  1. El hombre en el agujero. El protagonista comienza la obra estable (es decir, con una suerte ni buena ni mala), pero enseguida tiene que hacer frente a uno o varios hechos que le repercuten muy negativamente, sumiéndolo en un pozo. ¿Dejamos que nuestro protagonista se pudra dentro del hoyo? Aunque te sientas tentado de hacerlo, si quieres trabajar este tipo de historia tendrás que conseguir que supere sus obstáculos y termine la historia en una situación aún mejor de la que estaba en un principio. Aunque pueda sorprenderte, este patrón no se ajusta sólo a relatos dramáticos, sino que también lo puedes utilizar en historias cómicas. Un ejemplo es Arsénico por compasión (Arsenic and old lace) de Joseph Kesselring. 
  2. Chico conoce a chica. En este modelo de historia el protagonista encuentra algo maravilloso y lo consigue. Hasta este momento, la curva que se dibuja en el gráfico, como ya supones, es ascendente. ¿Dejarás a tu protagonista ahí, tan a gustito, disfrutando de su felicidad? Claro que no. Eso estupendo que consigue lo pierde (y ahora la curva la dibujamos en descenso). Pero como nos gustan los finales felices, hacemos que el protagonista vuelva a recuperarlo y nuestro gráfico culminará en una curva ascendente. ¿Cómo? Haciendo que eso que ha perdido lo recupere para siempre. Jane Eyre de Charlotte Brontë es un ejemplo de ello. 
  3. De mal en peor. En este caso debes ser algo sádico, no tener piedad del protagonista y dibujar esa curva en continuo descenso. Para ello se hace obligado que las circunstancias y los acontecimientos que viva el protagonista sean cada vez más negativos. ¿Tienes alguna obra en mente? La metamorfosis de Kafka se ajusta a este patrón. 
  4. Cenicienta. El gráfico que se obtiene en este tipo de historia es el siguiente: la línea asciende poquito a poquito como consecuencia de varios acontecimientos sucesivos. De pronto, la curva desciende mucho de forma brusca y, al final, asciende de manera brutal. Y si no te lo crees, mira lo que le pasa a la pobre Cenicienta, quien comienza su historia siendo huérfana de madre. Después, su suerte va cambiando a mejor debido a diferentes acontecimientos (le llega la noticia del baile en palacio, conoce a su hada madrina, ésta le ayuda a asistir al baile, conoce al príncipe, se enamoran…) Sin embargo, esa buena fortuna cae en picado (es la medianoche, finaliza el baile para ella y, además debe regresar a su vida anterior, tan desdichada). Pero, como nos encantan los finales felices, esto no puede quedar así. Un hecho inesperado supone una mejora drástica de su suerte (el príncipe la busca y la encuentra), conduciendo a la protagonista a una situación maravillosa (Cenicienta y príncipe son felices por siempre jamás).
  5. Hamlet. En este patrón la historia dibuja una línea recta, no hay curva. El paradigma para este modelo sería, como ya supones, Hamlet. Este tipo de historia, según Vonnegut, tiene cierta ambigüedad en si los hechos afectan al protagonista de forma positiva o negativa. De este modo, el arco ni ascendería ni descendería, sino que se mantendría neutro. Así, según este autor, la historia de Hamlet comienza me manera similar a Cenicienta: el padre del protagonista acaba de morir y su madre se casa con su tío. Sin embargo, Vonnegut considera que el desarrollo de los acontecimientos no repercute de forma clara en el personaje, ni de manera positiva ni negativa. El fantasma del padre se le aparece pidiéndole que le vengue. ¿Es esta petición de venganza buenas o malas noticias para Hamlet? Según este autor, hay cierta ambigüedad sobre ello. Hamlet es el príncipe, puede matar a alguien si lo desea y no ser arrestado y, finalmente, aunque muere, no está claro si irá al Cielo o al Infierno. A pesar de esto, Vonnegut opina que hay una razón por la que reconocemos a Hamlet como una obra maestra: es que Shakespeare nos dijo la verdad, y la gente rara vez nos dice la verdad en esos auges y caídas del protagonista. Y la verdad es que sabemos muy poco sobre la vida y realmente no sabemos cuáles son las buenas noticias y cuáles son las malas noticias. 
  6. Historia de la creación. En las historias de la Creación de diferentes culturas, la humanidad recibe regalos de una deidad. Primero, productos básicos como la tierra y el cielo, luego cosas más pequeñas como la fauna y la flora. Por tanto, el arco que se dibujaría sería creciente hasta el final. Este tipo de historia no es muy común en la cultura occidental. 
  7. Antiguo Testamento. Al igual que en el tipo anterior, la humanidad recibe regalos de una deidad tras su creación. De repente el ser humano es expulsado de esa situación privilegiada y el desarrollo de los acontecimientos hace que caiga en picado. Así, esta historia tendría una línea ascendente (momento de la creación) y después la curva descendería de manera abrupta, manteniéndose en ese punto bajo debido a que la situación no mejora. 
  8. Nuevo Testamento. Sería un modelo de historia similar a la anterior. Sin embargo, al final se le ofrece una recompensa positiva. En el caso del Nuevo Testamento, esa recompensa es el Paraíso tras la muerte. Y, como te avanzaba, aquí tienes la infografía que Maya Eilam ha diseñado sobre los modelos de historias enunciados por Vonnegut.


Cómo escribir con estilo, según Kurt Vonnegut en dos recopilaciones
  • Encuentra un tema que te importe. / No divagues, no obstante. No divagaré sobre este punto. / Escribe sencillo. / Ten el valor de recortar. / Suena como tú mismo. / Di lo que quieres decir. /Compadécete de los lectores. 
  • 1 Usa el tiempo de un total desconocido de manera que sienta que no lo ha desperdiciado. 2. Dale al espectador al menos un personaje con el que pueda enraizarse. 3. Cada personaje debe querer algo, aunque sea un vaso de agua. 4. Cada frase debe hacer una de estas dos cosas – desvelar al personaje o avanzar la acción. 5. Empieza tan cerca del final como sea posible. 6. Sé un sádico. No importa cómo de dulces e inocentes sean los protagonistas, haz que le ocurran cosas horribles para que el lector pueda ver de qué están hechos. 7. Escribe para agradar a una sola persona. Si abres una ventana para hacerle el amor al mundo, por así decirlo, tu historia pillará una pulmonía. 8. Dale a tus lectores la mayor cantidad de información lo antes posible. Al Diablo con el suspense. Los lectores deben saber perfectamente qué está pasando, dónde y por qué. Deben ser capaces de terminar por sí mismo la historia, por si las cucarachas se comen las últimas páginas.
Muchas más sugerencias de otros muchos grandes escritores y guionistas.
Cómo escribir relatos según Kurt Vonnegut
Otras varias imágenes con diferentes líneas de la historia
Muchos más posts nuestros sobre trucos para escritores.