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Pegatinas o distintivos ambientales vehículos según la DGT

Distintivo o pegatina ambiental vehículo ECO de la DGT
Hemos recibido nuestro distintivo o pegatina ambiental como vehículo ECO de la DGT para nuestro nuevo Lexus CT 200h, por tratarse de un coche híbrido no enchufable. Se puede ver en estas imágenes, debiendo ir colocado preferentemente en el ángulo inferior derecho del parabrisas delantero, si voluntariamente lo desea el propietario del vehículo..

Esta categorización de la DGT (Dirección General de Tráfico) se origina en el Plan nacional de calidad del aire y protección de la atmósfera 2013-2016 (Plan Aire) en el que se afirma que tanto las partículas como el dióxido de nitrógeno tienen en el tráfico rodado la principal fuente de emisión en las grandes ciudades y propone la clasificación de los vehículos en función de los niveles de contaminación que emiten. 

El 21 de abril de 2016 se publicó en el BOE la resolución de la DGT en la que se recoge la clasificación del parque de vehículos correspondiente al 50% más limpio (unos 16 millones). Esta medida tiene como objetivo discriminar positivamente a los vehículos más respetuosos con el medio ambiente y ser un instrumento eficaz al servicio de las autoridades municipales, que a partir de ahora podrá implementar políticas tanto restrictivas de tráfico en episodios de alta contaminación, como de promoción de nuevas tecnologías a través de beneficios fiscales o relativos a la movilidad, regulación de parquímetros,... 

En abril de 2015 la DGT enviara el distintivo categoría Cero Emisiones a los más de 10.000 titulares que tienen un vehículo de estas características: vehículos electricos, incluso con extensor de autonomía, o híbridos enchufables con más de 40 Km. de autonomía eléctrica. 

En este mes de julio de 2016, hemos recibido nuestro distintivo los 100.000 propietarios de vehículos catalogados como ECO -turismo, furgoneta ligeras, vehículos de más de 8 plazas y vehículos de transporte de mercancías clasificado en el Registro de Vehículos como vehículos híbridos enchufables con autonomía de menos de 40 Km., o no enchufables (HEV) como este Lexus, o propulsados por gas natural o gas licuado.

Esta segunda remesa, coloca a estos 75.000 Lexus o Toyota híbridos matriculados hasta la fecha, entre los 110.000 más respetuosos con la ecología, de un parque total de 32 millones de coches en España. Somos el 0,34% más responsables con la naturaleza en materia de emisiones contaminantes.

A partir del próximo mes de septiembre y de forma progresiva, la DGT finalizará los envíos de distintivos ambientales correspondientes del 50% de los vehículos más limpios del parque español y enviara el distintivo a los a los titulares de vehículos etiquetados como C (Turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas a partir de enero de 2006 y diésel a partir de 2014.) y B (Turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas a partir de enero del año 2000 y de diésel a partir de enero de 2006), como sería nuestro Audi de 2003.
Confiemos que pronto se adopten medidas que favorezcan a los vehículos menos contamiantes, a medida que cada autoridad con competencia en materias relativas a la fiscalidad, movilidad y medio ambiente decidan qué incentivos ofrecen a estos conductores. La clasificación de los vehículos está consignada en el registro nacional de vehículos de la DGT y a la misma podrán acceder en tiempo real los organismos con competencia en materia de movilidad, seguridad vial, tributaria o en medio ambiente. Los criterios para clasificar el parque de vehículos son el resultado de un largo y deliberado trabajo liderado por la DGT y en el que han participado otros organismos.

Muerte en la carretera

En todo el mundo, los traumatismos causados por el tránsito son la segunda causa de muerte, en orden de importancia, de los jóvenes de 10 a 24 años de edad. De los 1,2 millones de personas que anualmente pierden la vida en accidentes de tráfico, casi la tercera parte son jóvenes menores de 25 años. Más del 90% de los accidentes mortales ocurren en países de ingresos bajos y medianos. En estos países, las personas que con mayor frecuencia se ven involucradas en accidentes de tráfico son peatones, ciclistas, motociclistas y pasajeros, mientras que en los países de altos ingresos las víctimas son mayoritariamente conductores de automóviles. Se estima que en los países de ingresos bajos y medianos el costo de las lesiones por accidentes de tráfico es de alrededor del 1%-1,5% del producto nacional bruto y que en los países de altos ingresos llega al 2%. Si no se toman medidas, se prevé que las muertes por accidentes de tránsito aumentarán exponencialmente en los próximos años... (ONU, OMS,...)

InTertulia 8ª sobre guerra y paz según las diferentes generaciones


Como de costumbre, el último lunes de cada mes, en marzo de 2022 mantendremos una tertulia intergeneracional o InTertulia entre seis generaciones con personas nacidas entre los años '40 hasta en la primera década de este siglo XXI. 

En esta ocasión seremos los seis componentes actuales del Equipo de Titulares. Por orden de veteranía, Jesús Orbe Bidaurrazaga, nacido en 1947Mikel Agirregabiria Agirre, nacido en 1953Belén Varela, nacida en 1965Mentxu Ramilo Araujo, nacida en 1978; Maialen Olabe Aguirre,  nacida en 1993 Mikel Llona Allende, nacido en 2003
InTertulia 8ª sobre guerra y paz según las diferentes generaciones
- PRIMER EJE de conversación: Perspectivas, reflexiones, emociones, miedos, que ha despertado una guerra cruel en Europa, según las diversas generaciones,... 
- SEGUNDO EJE de debate: Acciones de solidaridad, cómo colaborar, cómo comprometernos, cómo hemos visto movilizarse a nuestro alrededor.... 

La RONDA FINAL será sobre qué nos ha sorprendido de otros puntos de vista, en la propia InTertulia. Visión fractal del resto de generaciones,... En las intervenciones, cabe incorporar lo que hemos visto a nuestro alrededor suscitado por este conflicto que sentimos más cercano por tener lugar en Europa.

Conductores de este programa: Maialen Olabe Mikel Llona. Al inicio comentarán que la desvirtualización de nuestra InTertulia  se ha pospuesto hasta el 31 de octubre de 2022 y que se celebrará en Aiala Valley, con una séptima generación añadida (la de los '80, la generación aparentemente más ocupada). 

Os esperamos en la VIII InTertulia:
Lunes, 28 de marzo de 2022 a las 19:00 en este YouTube.

Renault Zoe, un coche eléctrico operativo


Avanzamos las primeras impresiones del Renault Zoe, un utilitario eléctrico plenamente operativo que disfruta de una autonomía real de unos 120-140 Km. Lo estamos probando, en condiciones normales, durante dos días laborables y nos está sorprendiendo por la mejora que apreciamos en los vehículos  enteramente eléctricos (pronto probaremos ya hemos probado el BMW i3). Merece la pena repasar el post sobre el Nissan Leaf de principios del año 2012.

Nuevamente hemos podido realizar esta completa prueba (como hicimos hace ya más de dos años con el Renault Twizy -ver foto de ambos coches juntosgracias a la rápida respuesta de Renault (a través de su atendida web oficial), que tras solicitarlo inmediatamente nos puso en contacto con el Concesionario de Bilbao Gaursa Autoak, c/Gran Vía 63-65, 48011 Bilbao, tel. 944417450. Su Asesor Comercial Javier Peña Martín nos atendió nuevamente a la perfección.

El Renault Twizy es un automóvil biplaza del segmento A producido por el fabricante francés Renault en la planta de Valladolid desde 2011, según Wikipedia. Es uno de los cuatro vehículos Renault ZE (vehículo eléctrico). El Renault Zoe se demuestra como una opción razonable para usuarios responsables que primen la ecología (y la economía) sobre la autonomía y otros parámetros que no son tan determinantes en la mayoría de los desplazamientos anuales. 
Muy cómodo de conducir, con prestaciones urbanas (e incluso en carretera) propias de la aceleración de un motor eléctrico que ofrece los 88 CV en un tiempo mínimo, también resulta fácil de recargar (en la ya treintena de instalaciones de IBIL en Bizkaia, por ejemplo), que su navegador nos indica dónde encontremos en ruta o en las cercanías de donde nos encontremos. En una hora de hipermercado y tomando un café hemos recargado lo suficiente para recorrer otros 60 Km, tras consultar la APP de IbilMaps o en el propio navegador del Renault Zoe.

El Renault Zoe es un coche del segmento B, con poco más de 4 metros y cuatro confortables plazas (aunque permite cinco). Algo más amplio que un Clio, más altura de asientos (lo que facilita el acceso) y  un maletero de 338 litros (algo más de lo habitual). Dos modos de conducción, el normal y otro ECO (más ecológico que alarga la autonomía, pero reduce aceleración y recuperación).
Conclusiones: Perfecto como segundo coche, siempre que los recorridos entre cargadores sean con un máximo de 100-120 Km. Silencioso, ágil para callejear y suficiente en carretera para las velocidades legales (la velocidad máxima está limitada a 135 Km/h). No resulta caro, si aprovechamos las ayudas estatales y autonómicas, pudiendo adquirirse con un completo equipamiento Zen (el máximo) por unos 12.000 euros - foto con todos los descuentos posibles-, con baterías en alquiler desde 49 euros/mes. 

Quizá lo que más dificulta el despliegue de más coches exclusivamente eléctricos es, aparte de su limitada pero creciente autonomía (algo más mental que real en muchos casos), el cambio en algunas pautas de la mayoría de conductores: Hay que aceptar que son coches automáticos (perfectos para quien los haya conducido sin prejuicios), con una manguera que hay que conectar con frecuencia, que hay que remirar la batería en el salpicadero y que el cálculo de su coste total es más complejo (pero mucho más reducido). 

Álbum de fotos y vídeo de la prueba. Más entradas sobre motor, aunque nuestras pruebas son sólo de vehículos  enteramente eléctricos, o híbridos a lo sumo.
Post en elaboración que ampliaremos en los próximos días.

BMW i8: Un superdeportivo coche híbrido


Gracias a Enekuri Motor hemos probado el BMW i8, tras la conducción del BMW i3 (que publicamos en un post anterior). Si bien ambos productos son relevantes, sin duda el BMW i8 está destinado a convertirse en unos de los hitos del automovilismo híbrido, como el primer deportivo del futuro... que hoy se comercializa. Sin competidores aún en esta gama de más de 300 CV conjuntos. Que no se nos olvide que quienes deseen verlo de cerca podrán hacerlo en la Visita Blogger a Torre Loizaga, que está programada para el próximo sábado 24-1-15, con entrada gratuita e inscripción aún abierta.

Sin duda, ha sido el vehículo más emblemático de los coches que nos interesan, y que son aquellos que llevan motores eléctricos significativos para recuperar inercias de frenado, optimiza consumos y ser diseñados (y construidos como es el caso del BMW i8 en factorías eólicas autoestionadas energéticamente)  bajo criterios de sostenibilidad (otra cuestión, paradójica o contradictoria, es la exuberancia de su potencia, coste,..., pero esto queda a criterio de sus potenciales compradores).

Por todo ello, este post de análisis se etiqueta con el tag motor como la expresión máxima de todos los coches eléctricos y de los principales híbridos que se comercializan en nuestro mercado, todos los cuales han pasado por nuestras manos (eléctricos puros como Renault Zoe, Renault Twizy, Nissan Leaf,... o híbridos como Opel Ampera, Toyota Prius, Honda Insight,...

El BMW i8 es un cupé de diseño espectacular, que parte en precio desde 127.000 €, con una habitabilidad de 2+2 plazas, incómodas las traseras para adultos en viajes largos. Mide 4,69 m de longitud, apenas 1,29 de altura, pesa 1.560 Kg (a pesar de las baterías iones de litio de 5 Kwh) distribuidos al 50% entre ambos ejes, maletero casi simbólico de 154 litros y su excepcional Cx es de sólo 0,26.

Dotado de una potencia combinada de 362 CV (231 CV de su motor central tricilindrico de 1.499 cc que propulsa el eje trasero y los 131 CV del motor eléctrico que traccionan desde el eje delantero), dispone de una autonomía de 600 kilómetros,.. con el depósito de combustible opcional de 42 litros de capacidad, y menor con el depósito de serie de 30 litros.
Acompañamos a Dani Álvarez Lázaro, de Enekuri Motor, en una prueba de conducción -al tiempo que completaba la información, como se puede apreciar en los vídeos sobre estas líneas. requiere pensar un momento para salvar el estribo antes de entrar (salir tampoco es fácil), a través de las puertas basculantes -bien balanceadas, que se manipulan sin esfuerzo- y que se abren como un ala de gaviota hacia arriba (y hacia adelante).

Plagado de detalles, el BMW i8 es un compendio de innovaciones a cual más sorprendente. Novedades técnicas en aspectos muy diferentes, desde la opción de ser el primer coche que circula por nuestras carreteras con luces de láser (LaserLight), duplicando el alcance de los luces LED,... pasando la luneta trasera de Gorilla Glass hasta esa imagen cenital que sabe componer con cuatro cámaras en las esquinas del coche y que nos ofrece una visión como tomada por un drone a a unos metros sobre el vehículo, algo muy útil para aparcar y al estilo (se puede ver en el último vídeo). O la posibilidad de adquirir llantas de polímeros de fibra de carbono,...

Goza de un diseño exterior indiscutiblemente llamativo, y dudamos que haya alguien a quien no agraden sus líneas aerodinámicas que canalizan el aire a través de su carrocería de fibra de carbono reforzada con plástico obre su chasis de aluminio. Destaca asimismo su salpicadero digital futurista, con colores y entornos cambiantes y un cúmulo de información. El  BMW i8, al no ser eléctrico, no cuenta con el sistema "One pedal feeling", como su hermano menor.  
Conclusiones: El BMW i8 es una propuesta exclusiva, muy avanzada, y con ello arriesgada, dirigida a los fieles amantes de los productos BMW, una marca Premium en una amplia gama de vehículos... pero no la escala top de coches deportivos compitiendo con Porsche,... y su precio les equipara. Incorpora el BMW i8 tecnología punta híbrida del momento y abre un intervalo de oferta en el que no hay otros productos,... 
 
Recomendado para los refinados conductores "early adopters", sin problemas financieros, quienes busquen una singularidad, que se apreciará desde el sonido -levemente amplificado de su motor... térmico-, hasta la estilizada línea aerodinámica.

Pero ha de equilibrar muchos compromisos: Un peso contenido con una batería de 5 Kwh, para no lastrar la tara y cargarse rápidamente, pero ello limita el tiempo de uso combinado de ambos motores (si bien en la mayoría de los casos será suficiente, aunque no para quien quiera viajar al límite en una carretera ascendente a alta velocidad). Para evitar quedarse sin el doble motor, el BMW i8 incorpora una solución, no perfecta, recargando la batería -aparte de por regeneración de retención dinámica- utilizando el "tercer motor" (el sistema de alternador / motor de arranque) a cargo del motor térmico, cuando el nivel de batería anuncia su posible agotamiento.

Igualmente, el delicado ajuste de depósito de combustible (30 litros de serie) puede provocar un repostaje demasiado frecuente (en carretera) y un consumo medio muy oscilante (desde pocos litros por cada cien kilómetros en una conducción razonable -con vista a la homologación teórica de 2,1 litros/100Km, por ejemplo-, hasta decenas de litros si la regeneración de frenadas y descensos no colabora). 

Álbum de 12 fotos de Aitor Agirregabiria y nuestra colección.
Agradecimiento a Enekuri Motor. Facebook de Enekuri Motor.

La educación como ejemplo

En ocasiones, la enseñanza es noticia por disfunciones aisladas, pero el sistema educativo ofrece un servicio social inigualable.

Para la totalidad de la ciudadanía nuestra sociedad ofrece un puesto adaptado a las necesidades de cada persona. No importa a qué minoría étnica se pertenezca (todos pertenecemos a alguna), no importa qué minusvalía o déficit se tenga (todos tenemos algunos), no importa la familia de origen, el momento de llegada, no importa nada… entre los 6 y los 16 años se han dispuesto los necesarios recursos humanos especializados e ingentes presupuestos para una perfecta formación.

Todo el profesorado, en sus distintos niveles, funciones y especialidades, todo el personal de apoyo (conserjes, cocineras, conductores,…), todas las instalaciones y servicios,… atiende durante 10 años a nuestros hijos e hijas. En la práctica, la atención educativa se extiende una media de más de 20 años, desde los pocos meses hasta pasados los 22-24 años en el caso de la enseñanza superior de FP o universitaria (sin citar la formación continua, ocupacional o de personas adultas). Las condiciones son inmejorables, incluida la gratuidad para las familias que no pueden contribuir económicamente.

Llegará el día en el que los sistemas de protección social se ocupen de las necesidades específicas de atención, en los casos necesarios, para el estudio o el trabajo de la generalidad de la población… durante toda su vida. Mientras tanto, el complejo sistema de educación muestra el camino y cuida durante un largo periodo preparatorio a las generaciones más jóvenes.

Esta custodia es perfectamente compatible con la transmisión de un mensaje inequívoco desde la educación primaria: “Cada persona debe ir asumiendo, tan pronto como sea posible, todo el grado de autonomía y responsabilidad que le sea posible, colaborando con su esfuerzo y trabajo (incluido el de estudiar) a su propio crecimiento personal, profesional y familiar, así como al bien común de la sociedad en la que ha podido nacer y crecer”.

Versión para imprimir: mikel.agirregabiria.net/2006/educaejemplo.doc

Gente al volante

Honradas y afables personas en el coche pierden la compostura, el civismo y la vergüenza.

Una extraña mutación acontece cuando la gente se pone al volante. Desaparece el modélico ciudadano que todos conocemos, Dr. Jekyll y, en su lugar, arranca el automóvil un desaprensivo Mr. Hyde. Personas meticulosas que jamás incumplirían la más mínima norma de convivencia en su comunidad de vecinos, suben a su todoterreno y lo aparcan a la vuelta de la esquina en medio de un paso de cebra mientras se van de compras.

La tolerancia, por no decir desidia y connivencia, de las autoridades y policías municipales ha dado como resultado ciudades donde el tráfico rodado sólo rige por la ley… de la selva. Basta describir algo cotidiano, para darnos cuenta de adónde hemos llegado. Cada tarde me encuentro con amplias avenidas de cinco carriles, donde las dobles y triples filas de coches mal aparcados apenas dejan una vía libre, o colegios en hora de salida donde los padres enseñan a su prole a aparcar de cualquier forma.

Si conducir significa desinhibirse del pudor, los conductores profesionales llevan la desfachatez a grados supinos. Los repartidores son delincuentes habituales, con premeditación y alevosía en pleno mediodía. Al final, todos aceptamos sin la menor esperanza ni de arrepentimiento, ni de castigo, que el garaje de turno aparque coches en aceras mientras los repara, con una policía municipal que mira al cielo, porque si mirase a cualquier otro lado vería infracciones por doquier.

Todos sabemos que un único coche equipado con cámaras informatizadas para poner multas podría amortizarse en un solo día, aunque las multas fuesen de apenas un euro. Si se impusiesen sanciones, si no se eludiese su pago, si las grúas se llevasen los vehículos de los caraduras,… viviríamos en otra realidad social donde la carrocería de un coche no ofreciese impunidad total.

El tráfico es un pésimo paradigma contemporáneo, que transmite un funesto mensaje a niños y a adultos: “Haz lo que te dé la gana, porque sólo los tontos cumplen las normas, sobre todo cuando no hay riesgo de multa”. Con ello, todo el entramado social queda en entredicho: Las normas parecen arbitrarias, sin sentido, el principio de autoridad se resiente, se contradice entre lo establecido y lo exigido; en definitiva, ser un buen ciudadano es propio de pusilánimes. Y así nos va,…

Versión para imprimir mikel.agirregabiria.net/2006/alvolante.doc

Pequeñas alegrías

“Las pequeñas alegrías” es un ensayo de Herman Hesse, en el que nos alerta contra la hiperactividad y el frenesí de la prisa, como peligrosos enemigos de la felicidad. Se lamenta, además, de que frecuentemente nuestra forma de gozar se acompaña de cierta ansiedad, sobreestimando el placer y minusvalorando la alegría. El Premio Nobel de Literatura nos recuerda que el disfrute moderado duplica la felicidad. El arte de vivir consiste en saber distinguir los innumerables deleites de las que el mundo está repleto, y que muchos ignoran mientras aguardan la gran felicidad.

Cada día está preñado de pequeñas alegrías, que hacen muy grande a la vida. Te levantas de madrugada, bebes un vaso de agua y piensas: ¡Ésta sería la mejor bebida si nos faltasen todas! Lo mismo sucede con los alimentos: ¿Cuál añoraríamos más si todos desapareciesen? ¿El pan, el tomate, cualquier fruta por modesta y común que sea como la manzana o la naranja? ¿Y el contacto diario con la naturaleza o la observación del firmamento? Y los olores… ¿El aroma de la medianoche, la fragancia del amanecer, el bálsamo del anochecer, o el aliento de un ser querido?

Porque lo más importante son las personas. Sí, ésas con las que convivimos, que tantas veces nos desquician: los hijos, los suegros, la pareja, los cuñados, las sobrinas, los vecinos, los conductores, los peatones, los gamberros, los cretinos,… Todos somos necesarios e imprescindibles. ¿Cómo podríamos apreciar la quietud pacífica de la noche si un desvergonzado no nos desvelase con un berrido intempestivo, que nos obliga o a acurrucarnos nuevamente o, a los insomnes, a escribir estas líneas? ¿O esos hijos adolescentes que te atruenan continuamente la casa con músicas estrepitosas, y que cuando se van al extranjero no te dejan concentrarte por el clamoroso silencio de su ausencia y el inquietante orden de sus cuartos? Y ¿qué me dicen de las reiteradas “batallitas” de los suegros, que el día menos hablador te preocupan y comentas con tu cónyuge: “Me parece que el abuelo está un poco mayor…”? ¿Acaso podríamos vivir sin ese beso descuidado que te da tu hija cuando sale cualquier tarde, tras pedirte una extensión de la paga? Y la “parienta” que te ha aguantado treinta años y que todavía cree que eres especial y único: ¡Ella sí que es excepcional!

Hay tesoros muy valiosos, pero ninguno tan preciado como la familia, que lo es todo. Y todos disponemos de una familia de la que preocuparnos y que se ocupa también de nosotros: se llama Humanidad. A menudo, no apreciamos lo obvio, lo gratis, lo cercano, lo nuestro,… ¡Qué ciegos podemos llegar a ser! ¡Levanta la mirada de este periódico, mira a tu alrededor y sonríe! Comprobarás que la vida es un espejo que siempre devuelva la sonrisa a los más risueños…

El día sin…

Debemos felicitar a la Comisión Europea y congratularnos todos por el éxito creciente del Día sin coches que se ha celebrado en más de mil ciudades europeas. Este tipo de iniciativas consigue concienciar a la ciudadanía sobre problemas derivados del uso innecesario de automóviles privados en las ciudades, tales como la contaminación química y sonora, los colapsos circulatorios, los accidentes y las molestias para viandantes, residentes e incluso los propios conductores. Además se demuestra de modo práctico que existen alternativas más eficaces y satisfactorias como el transporte público colectivo, la bicicleta o simplemente caminar.

El objetivo de estas campañas institucionales podría ampliarse gradualmente, proponiendo mejoras alcanzables con un oportuno esfuerzo institucional y la decidida participación masiva de toda la sociedad, que mayoritariamente aplaudiría “Días sin… alcohol, tabaco, telebasura, ruidos, gamberrismo, accidentes,…”. De este modo nos acercaríamos a pedir en un futuro cercano metas más anheladas como “Días sin… soledad, pobreza, discriminación, violencia, guerra,…”.

“Haceros" con las aceras

Con el ánimo de informar y formar debidamente a la ciudadanía en general, y a la Policía Municipal en particular, iniciamos una serie de artículos sobre normas ciudadanas para favorecer una mejor convivencia cívica y vial en nuestras ciudades y pueblos. En los municipios conviven, básicamente, dos tipos de seres: humanos y mecánicos, aparte de otras faunas y floras menores. Mientras no se diga lo contrario, tienen prioridad las personas de carne y hueso frente a los vehículos de chatarra más o menos brillante. Para evitar que los segundos atropellen a los primeros, porque a la inversa no sucede nunca, se han establecido unas normas básicas que merecen ser recordadas para conocimiento de todos y todas.

Aceras con calzadas. Las urbes están divididas en dos modalidades de zonas: las aceras para las personas y las calzadas para los coches, con franjas mixtas como semáforos, pasos de cebra o accesos a garajes. Las aceras, protegidas por un bordillo, son espacios peatonales. Insistimos, para peatones exclusivamente, sin que los “listillos” y las “listillas” puedan subir y aparcar sus automóviles en este tipo de pavimento. No existen excepciones, ni para repartidores, ni caraduras habituales, ni para unos minutos.

Las calzadas o carreteras son preferentemente para los vehículos, por lo que tampoco deben ser invadidas ni cruzadas por viandantes, excepto por las zonas previstas para ello, como semáforos y pasos de cebra. En los pasos de cebra, siempre tienen preferencia los transeúntes frente a los conductores, sin importar la prisa que éstos lleven. Se comunica también a los taxistas que no supongan que todos los peatones son acróbatas saltimbanquis expertos en esquivar coches a alta velocidad, sobre todo si en días de lluvia aparentan ser ancianos o ancianas con muletas y paraguas.

Haceros con calzados. Parece recomendable que todos aquellos que deban moverse con rapidez por las localidades urbanas recurran a un buen calzado para andar todo lo deprisa que puedan, sin arrastrar coches que por ocupar más espacio serán difíciles de estacionar. Urge comprar más zapatos y menos automóviles. Esta sugerencia resulta valiosa para repartidores, papás, mamás (con sus famosos Mamamóviles) y… guardias municipales. Con trasporte público y a pie se circula mejor, y se patrulla óptimamente.

Si la policía municipal no sabe cómo rellenar ese bloc de multas para sancionar a quienes suben motos o furgonetas sobre las aceras, preferentemente en las esquinas rebajadas, puede solicitar bolígrafo y ayuda a cualquier sufrido peatón que gustosamente les ayudará a cumplimentar el papeleo. Por último, el área municipal de urbanismo podría sembrar más jardinería, papeleras o pivotes para impedir la invasión de las áreas peatonales por automóviles, pero no justamente como en mi extensa avenida donde el único tramo protegido de acera es frente al escaparate del concesionario de una marca lujosa para despejar la vista a potenciales compradores, mientras sus empleados utilizan constantemente la acera de la urbanización de enfrente como taller propio para estacionar y reparar vehículos, circunstancia llamativa desde hace muchos años que toda la vecindad padece y advierte, excepto la policía municipal que pasa por delante sólo treinta veces al día, conduciendo sus coches de un lado a otro, sin detenerse nunca, no se sabe si porque lo ven todo bien o porque ven demasiadas cosas mal.

Concluyendo: Aceras para peatones. Calzadas para coches. En los pasos de cebra, preferencia al transeúnte. Peatones: Defended vuestro territorio, ¡haceros con las aceras! Sólo pedimos la ciudad sin coches… en las aceras. Seguiremos informando.

Anónimos acólitos

El anonimato nos convierte a todos en afónicos, atónitos y agónicos seres que sólo recuperamos la humanidad con nuestro nombre propio.

El anonimato es una prueba determinante que mide el carácter verdadero de las personas. Cuando nos sentimos seres sin rostro ni nombre, resulta más fácil comportarnos como nunca lo haríamos entre nuestros conocidos. Ocultos al volante de un coche podemos actuar como salvajes o podemos contestar intempestivamente tras un teléfono cuando recibimos una llamada equivocada. La grandeza de un corazón se aprecia realmente cuando siempre, aún desde el completo anonimato, actúa educada y generosamente.

A casi todos nosotros, el sentirnos reconocidos y perfectamente identificables, nos aporta altas dosis de juicio y responsabilidad. No se trata únicamente de poder rehuir la culpa o el castigo, sino que el mantenimiento de nuestro buen nombre personal y familiar nos impone unos patrones de conducta irreprochablemente éticos e intachablemente ejemplares.

Los uniformes, por el contrario, pueden coadyuvar a sepultar o diluir la individualidad y la consiguiente responsabilidad personal. Una guerrera, una placa o una bata, si no se acompañan de una identificación fácilmente recordable pueden ser el preludio de un trato impersonal, ejercido desde la supuesta superioridad de quien autoritariamente no se identifica ante aquel a quien debe servir.

Las instituciones y los poderes públicos harían bien en identificar nominalmente a todas las autoridades y agentes que tratan con la ciudadanía, desde los funcionarios civiles hasta los policías, desde cada educador hasta cada sanitario, desde cada barrendero hasta cada concejal. Las empresas igualmente se asegurarían una mejor relación con los clientes y proveedores, si cada empleado portase una identificación, desde los camareros hasta los jefes de ventas.

Toda la convivencia experimentaría una profunda mejoría si llevásemos prendida a nuestra chaqueta una etiqueta con nuestro nombre y apellido. Incluso los hábitos de conducción mejorarían sustancialmente si los conductores llevasen su nombre impreso en las matrículas de los vehículos. Llevar el apellido expuesto a la vista de los demás contribuye a un reconocimiento más directo y eficaz de nuestras acciones, promoviendo actuaciones sensatas, voluntariosas y amables de esas buenas personas que somos cuando actuamos a cara descubierta y en nombre propio.

Benditos puntos

El permiso por puntos se demuestra misteriosamente eficaz.

Tras el habitual largo viaje vacacional de norte a sur en una fecha punta, se constata la simultánea fluidez del tráfico junto a un respeto mayor de las velocidades máximas. Todo ello aporta una inmediata sensación de mejora de la seguridad en la carretera. Era esperable y así lo demuestran las primeras estadísticas, además de coincidir con los resultados en otros países donde se aplicó la misma medida.

Llama la atención que lo que los conductores no supimos hacer como colectivo, por razones tan trascendentales como salvar vidas y evitar desdichas, ahora lo hagamos de golpe y sin rechistar para conservar unos abstractos “puntos” cuya pérdida sólo supone, a lo sumo, quedarse sin conducir durante una temporada. Merece un Premio Nobel el genial psicólogo social que inventó esta fórmula.
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Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/puntos.htm

Activista derechista


Como Napoleón, la China y dos tercios del mundo, siempre he sido partidista y proselitista de guiarnos por la derecha.

La lista derechista es mayoritaria en el mundo actual. Según datos oficiales 3.824.562.670 de personas se conducen por la derecha (el 66,35%) y 1.939.854.524 prefieren la izquierda (el 33,65%). De los diez países más poblados del planeta, 5 son derechistas y 5 izquierdistas, si bien disponen de mayor censo los primeros: China, 1.210.004.956; Estados Unidos, 265.562.845; Brasil 162.661.214; Rusia, 148.178.487 y Nigeria 103.912.489; frente a los izquierdistas India 952.107.694; Indonesia, 206.611.600; Pakistán, 129.275.660; Japón 125.449.703 y Bangla Desh, 123.062.800.

Sólo al principio de los tiempos hubo centrismo en la conducción. La ancestral burocracia china reguló hacia el año 1100 AC el lado del camino para circular, fijando que los hombres debían marchar por la derecha, las mujeres por la izquierda y los carruajes por el centro. Desde el Imperio Romano, con una red de calzadas de más de 150.000 Km. y durante toda la Edad Media se circuló por la izquierda, probablemente para poder defenderse con la espada en la mano derecha y repeler a posibles asaltantes que se cruzasen en el camino.

La primera norma de “tráfico” la dictó en el Papa Bonifacio VIII en el año 1.300 con motivo de una multitudinaria peregrinación a Roma, reglamentando que los carros circularan por su izquierda. Cinco siglos después, la Revolución Francesa obligó a la aristocracia (que viajaba veloz por la izquierda mientras los campesinos debían caminar por la derecha), a juntarse con el pueblo llano y conducir por la derecha. Así pues, fue un ejercicio de democratización y fin de privilegios, la unificación mediante la regla universal de “guardar la derecha” que se introdujo en París en 1794.

Napoleón la aplicó en todos los países europeos ocupados por sus ejércitos, y la costumbre resistió tras el fin de sus conquistas. Los Estados que resistieron a Napoleón mantuvieron la conducción por la izquierda: Reino Unido, Portugal, Imperio Austro-Húngaro y Rusia. Al final del zarismo, Rusia cambió; Portugal en 1928 y Gibraltar en 1929. Tras la I Guerra Mundial, toda Europa continental unificó la circulación por la derecha, excepto Suecia, Austria, Checoslovaquia y Hungría. Fue Hitler, con su anexión de Austria en 1938 y de Checoslovaquia en 1939 y la invasión de Hungría en 1941, quien acabó con los ‘izquierdistas’ centroeuropeos. Suecia, en 1967, e Islandia en 1968, dejaron a Reino Unido e Irlanda como únicos países que “conducen bien”, dado que ellos dicen que los demás vamos por el lado incorrecto (“by the wrong way”).

En el continente americano sólo las antiguas Guayanas Británica y Holandesa (Guyana y Surinam), junto con algunas pequeñas islas del Caribe (Bermudas,…) prefieren viajar por la izquierda. Varias extensas regiones canadienses cambiaron entre la I y II Guerra Mundial, al igual que Panamá en 1943, mientras que Argentina y Uruguay normalizaron su tráfico en 1945.

En Asia, en 1946 China y las dos Coreas se pasaron a la conducción contraria a la japonesa, y en 1970 Birmania también se sumó al sistema derechista, al igual que siempre habían mantenido los países árabes y las ex–colonias francesas de Vietnam y Camboya. El resto del sudeste asiático, junto a Japón, Pakistán, India y Bangladesh, así como la mayoría de Oceanía (Australia, Nueva Zelanda,…) transitan por la izquierda. Hacia 1960 Pakistán desestimó el cambio por la dificultad de enseñar a los viejos… camellos, que de noche circulan en caravanas mientras sus conductores dormitan.

En África sólo resta con la conducción a la izquierda el Sudeste, desde Kenia hasta Sudáfrica, tras numerosos procesos de normalización que afectaron entre los años 60 y 70, a los países del centro como Nigeria, Ghana, Sudán, Etiopía, Somalia, Angola,…por el aumento del turismo y del comercio globales.

En las últimas décadas parecen haberse paralizado los costosos cambios en el sentido de conducción. Siempre fueron para pasarse a la conducción más extendida, por la derecha, excepto en la isla de Okinawa en 1978, para adecuarla al resto de Japón y borrar el recuerdo de 27 años de ocupación estadounidense, con un coste de más de 200 millones de euros. En 1982, los argentinos impusieron en las islas Malvinas la conducción por la derecha, hasta que los británicos volvieron a dirigir el tráfico. Como última reliquia del Imperio Británico queda Hong Kong, devuelto a China en julio de 1997 y donde se circula por la izquierda.

Sería aconsejable por razones de seguridad y estandarización que como automovilistas, motoristas o transportistas,… todos fuésemos siempre derechistas en las autopistas. A propósito, ello también significa circular por el carril más a la derecha que esté libre, dejando los restantes para quienes circulan más rápidos. Recuerden la norma: “Por la izquierda, sólo para adelantar”.