"Al profeta podemos llamarle revelador de lo que hemos de hacer; al poeta, revelador de lo que hemos de amar", decía Thomas Carlyle. No cabe hacer nada... sin amar mucho. Por ello, necesitamos más poetas que profetas, aunque sean malos rapsodas. Porque cuando se ama, siempre se construye algo bello para compartir. El amor siempre haya un camino.
Con la poesía dejamos de hacer de profetas del porvenir y comenzamos a ser los autores del futuro. Porque si se riman poemas a los veinte años, es porque se tienen veinte años; sólo si se sigue pensando en lírica muchos años después surge el poeta. Lo más importante es escribir poesía... toda la vida. "A fin de cuentas, la historia es la poesía verdadera", citando nuevamente a Carlyle.
Con la poesía dejamos de hacer de profetas del porvenir y comenzamos a ser los autores del futuro. Porque si se riman poemas a los veinte años, es porque se tienen veinte años; sólo si se sigue pensando en lírica muchos años después surge el poeta. Lo más importante es escribir poesía... toda la vida. "A fin de cuentas, la historia es la poesía verdadera", citando nuevamente a Carlyle.
Comparto el deseo, los poetas exteriorizan sus sentidos, tal vez equivocados, pero cargados de auténticos sentimientos...
ResponderEliminarAbrazzzusss
Está visto que estos argentinos, además de ligar con chicas, saben hacer muy buenos anuncios
ResponderEliminarfantástico.... se necesitan más!!!
ResponderEliminarQué razón tienes, si no amas, nada sale bien, ni profeta ni poeta.
ResponderEliminarGracias por visitar mi blog.