La elección de estudios de los hijos es tema de conversación entre amigos, y más en los reencuentros del verano.
Los padres de hoy día solemos dejar elegir libremente, como no puede ser de otra manera, a nuestros hijos su opción académica. La pregunta usual suele ser: Hijo, ¿qué quieres estudiar ahora, tras concluir tus estudios (de ESO, de Bachillerato, u otros)?
Del autoritarismo de antaño (¡tú estudiarás Derecho, como tu abuelo y como yo!), se ha pasado al desentendido lema de que “ellos elijan que saben más que nosotros y así, en todo caso, ellos asumen su decisión”. Quizá una fórmula más equilibrada, que ayude a nuestros hijos e hijas a elegir por sí mismos pero mejor orientados, sea enunciar el dilema mediante dos preguntas:
1ª ¿Quieres trabajar en lo que decidas estudiar?
2ª De acuerdo con tu respuesta anterior, ¿qué prefieres estudiar?
O sintetizado en una sola pregunta: ¿De qué quieres trabajar?
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/preguntas.htm
Leído en DEIA el 20 de julio.
ResponderEliminarAunque, a pesar de todo, a veces se cree querer trabajar en lo que estudiaste, y una vez tanteado el mercado laboral, se queda uno tan asqueado que se cambia totalmente de actividad...
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