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Pepe Mujica: el presidente más pobre, pero rico en dignidad

Con profunda tristeza, el pueblo uruguayo y el mundo entero despiden a José “Pepe” Mujica, quien falleció ayer en Montevideo a los 89 años. Exguerrillero, senador, presidente y símbolo de la humildad en la política, Mujica deja un legado que trasciende fronteras y generaciones.

Nacido el 20 de mayo de 1935, Mujica fue una figura central en la historia reciente de Uruguay. En su juventud militó en el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, por lo que pasó más de una década preso durante la dictadura militar. Con la restauración de la democracia, se incorporó a la vida política formal, primero como diputado, luego como senador, y finalmente como presidente de la República Oriental del Uruguay entre 2010 y 2015.

Durante su mandato, José Mujica fue conocido mundialmente por su estilo austero: vivía en una modesta chacra, conducía su viejo Volkswagen Beetle y donaba gran parte de su sueldo presidencial. Bajo su liderazgo, Uruguay impulsó reformas progresistas como la legalización del matrimonio igualitario, la regulación del mercado del cannabis y la promoción de los derechos humanos.

Pero más allá de las leyes, Mujica será recordado por su forma de ver la vida. Su oratoria sencilla pero profunda, su sabiduría campesina y su incansable llamado a la sobriedad, la justicia y la solidaridad lo convirtieron en una figura admirada a nivel global.

Pobre no es el que tiene poco, sino el que necesita infinitamente más”, dijo alguna vez. Esa frase sintetiza su filosofía. José Mujica parte, pero deja sembradas sus ideas en quienes sueñan con una política más humana, más honesta y más comprometida con los valores esenciales de la vida. Le sobreviven su esposa, la exsenadora y ex primera dama Lucía Topolansky, sus compañeros de lucha, sus seguidores y millones de admiradores alrededor del mundo.

Las principales obras de José Mujica y algunas de sus citas más representativas, que capturan su pensamiento político, ético y humano: 

1º Legalización del matrimonio igualitario (2013): Uruguay se convirtió en uno de los primeros países de América Latina en reconocer el derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo.

2º Regulación del mercado del cannabis (2013): Promovió la legalización y regulación estatal del cannabis, como una estrategia innovadora de salud pública y lucha contra el narcotráfico.

3º Reforma educativa y políticas sociales: Impulsó programas de acceso a la educación, la inclusión social y el apoyo a sectores vulnerables, especialmente a través del Plan Ceibal (una computadora por niño).

4º Estilo de vida austero: Donaba hasta el 90% de su salario presidencial a organizaciones benéficas y vivía en su chacra, lo cual lo convirtió en un símbolo mundial de humildad y coherencia.

5º Defensa del medioambiente y la vida sencilla: Mujica defendió la “sobriedad voluntaria” y criticó el consumismo, lo cual expresó con fuerza en foros internacionales como la ONU y la Cumbre de Río+20.

Algunas de las citas célebres de José Mujica:


“Venimos al mundo para ser felices, no para ser perfectos.” Una reflexión sobre la condición humana y la búsqueda de una vida con sentido.
“Cuando compras algo, no lo pagas con dinero; lo pagas con el tiempo de tu vida que tuviste que gastar para conseguir ese dinero.” Frase dicha en Río+20, que se volvió viral y ampliamente citada por su poder filosófico.
“La política es la lucha por la felicidad de todos.” Mujica veía la política como un acto de servicio, no de poder. 
“Si tuviera que definir la libertad, diría que es tener tiempo para gastarlo en lo que a uno le gusta.” Una visión humanista de la libertad, ligada al tiempo y no al dinero.

José Mujica no escribió libros en el sentido tradicional durante su presidencia, pero muchos discursos, entrevistas y conversaciones han sido recopilados en textos como: “Una oveja negra al poder” (de Andrés Danza y Ernesto Tulbovitz) – Biografía autorizada con muchas anécdotas y reflexiones. “Mujica por Pepe” (de Darío Klein) – Entrevistas y reflexiones en primera persona. “El poder de la palabra” – Compilación de sus discursos y frases más destacadas.

“Sorry”: Egoísmo social en un ascensor sobrecargado

El cortometraje Sorry (ganador del Óscar al mejor cortometraje en 2020), es una producción británica de apenas 1' 58" de duración, dirigida por Robert O’Neil y escrita por James Hancock. Cuenta con las actuaciones de Lyna Dubarry, Freddie Bowerman y Wayne Forester

Sorry utiliza la palabra “Overload” (que significa “sobrecarga” o “sobrepeso”) en el contexto de un ascensor que no puede subir debido al exceso de peso. Esta situación simboliza cómo el egoísmo y la falta de acción colectiva pueden impedir el progreso de la sociedad. Cada persona en el ascensor representa a individuos que, al priorizar sus propios intereses, contribuyen a una carga que afecta a todos. El cortometraje resalta la importancia de la empatía y la acción conjunta para superar obstáculos comunes. 

La historia se desarrolla en un ascensor que no puede moverse debido a una sobrecarga de peso. Esta situación sirve como metáfora del egoísmo y la falta de empatía en la sociedad actual. Cada persona en el ascensor representa a individuos que, al priorizar sus propios intereses, contribuyen a una carga que afecta a todos. El cortometraje resalta la importancia de la empatía y la acción conjunta para superar obstáculos comunes.

A pesar de su corta duración, Sorry ha sido aclamado por su capacidad para transmitir un mensaje profundo y universal sobre la importancia de la solidaridad y la responsabilidad colectiva. Ha recibido elogios en festivales de cine independientes y ha sido compartido ampliamente en redes sociales, donde muchos espectadores han expresado cómo les ha llevado a reflexionar sobre sus propias actitudes y comportamientos. 

La atención es generosidad silenciosa en un mundo acelerado

Simone Weil, filósofa y mística, decía que “la atención es la forma más rara y pura de generosidad. Muy pocas mentes son capaces de descubrir que las cosas y los seres existen”. En un mundo saturado de estímulos en cada momento, detenerse a mirar, escuchar o sentir se ha convertido en un acto casi revolucionario. Prestar atención plena es regalar tiempo y cuidado sin esperar nada a cambio. Este simple acto es un modo de amar y de respetar profundamente al otro. Como apunta un análisis reciente, nuestra atención “da valor a las cosas; lo que atendemos se convierte en lo que importa” . Al dirigir nuestro foco con intención, otorgamos significado a lo cotidiano y hacemos sentir a los demás que existen en nuestra vida.

Atención en tiempos acelerados: La avalancha de mensajes y tareas diarias nos arrastra con facilidad. Simone Weil nos recuerda que al prestar atención elegimos qué lugar ocupan las personas y las cosas en nuestra existencia. En palabras de una experta, la atención es una energía sutil que da forma a nuestras vidas: “lo que miramos, lo que sentimos, lo que decidimos que importa… todo nace de nuestra capacidad de prestar atención” . En otras palabras, cada vez que atendemos a alguien o algo, lo validamos y lo hacemos crecer. Por eso la atención es un recurso tan valioso: convertir lo invisible en visible. En un mundo de prisas, la decisión de enfocarnos es un gesto de rebeldía contra la distracción generalizada. Es el hilo invisible que une lo que amamos y lo que soñamos, y lo transforma en algo real.

Atención: generosidad y amor. Prestar atención al otro es una forma de amor que humaniza la relación. No basta con dirigir la mirada; hay que detenerse, escuchar y hacer sentir al otro que tiene un lugar en nuestra vida . Cuando hablamos con alguien, renunciar al celular para mirarlo a los ojos es un regalo de respeto. Escuchar en silencio los miedos o alegrías de un amigo sin ofrecer consejos inmediatos es un acto de compasión. En ese gesto humilde reconocemos la dignidad ajena. 

Simone Weil sostenía que este tipo de atención desinteresada equivale a una oración laica, un modo de orientarnos hacia lo divino que todos llevamos dentro . Al eliminar el “yo” del centro, la atención pura crea espacio para la presencia del otro o incluso de algo superior. Tal como escribía Weil, cada ejercicio de concentración disciplinada –sea resolver un problema o leer un texto– “se convierte en oración” cuando lo practicamos con verdadero deseo de verdad . La atención así entendida es iluminación mutua: nos abre a la belleza del mundo y a la profundidad de las personas a nuestro alrededor.

La atención en la vida cotidiana tiene poder transformador en lo pequeño y lo rutinario. Ejemplos sencillos muestran su alcance:

  • Escuchar sin interrupciones a un familiar o colega cuando habla de su día. Un silencio atento puede ser la mejor medicina para quien necesita contarse.
  • Mirar a los ojos con interés durante una conversación. Con solo enfocar la mirada y asentar con la cabeza se puede entregar apoyo y cercanía.
  • Ayudar con plena presencia: acompañar a una persona enferma o compartir una comida sin apuros. Estar ahí, sin prisa, es a veces el mejor regalo.
  • Observar la naturaleza o el arte con calma. Ver el amanecer o leer un poema con atención nos reconecta con lo esencial y expande el corazón.
  • Cultivar la atención a uno mismo, descansando el cuerpo y la mente. Cerrar los ojos unos minutos, respirar conscientemente o meditar son prácticas de auto-regalo que luego multiplicamos hacia afuera.

Estos gestos cotidianos de atención son formas discretas de generosidad. No se trata de grandes sacrificios, sino de presencia: ofrecer un poco de nuestro tiempo y de nuestra escucha genuina. Así manifestamos amor, respeto y responsabilidad ética. En cada detalle la atención crea un puente entre las personas y revela que el otro importa.

Conclusión inspiradora: Entender la atención como un acto de amor y de autenticidad nos invita a un cambio profundo. Simone Weil nos desafía a ver la atención no como algo mundano, sino como un camino ético y espiritual. Cada instante que damos con plena conciencia es un regalo: a los demás, al mundo y a nosotros mismos. Cultivar la atención transforma nuestras relaciones y nutre el alma. Al final, lo que más regala la vida son momentos de verdadera conexión: un silencio compartido, una escucha atenta, una mirada compasiva. Practicar la atención nos recuerda que estamos juntos en este viaje y que amar, en definitiva, es prestar la mejor de nuestras presencias.

Síndrome de Doña Florinda: el precio del ascenso social

El “Síndrome de Doña Florinda” es un concepto sociológico y cultural que describe a personas de origen humilde que, al mejorar ligeramente su situación económica, adoptan actitudes de desprecio hacia sus pares de clase social similar. Estas personas buscan diferenciarse aparentando pertenecer a una clase superior, a menudo mediante el consumo ostentoso o el rechazo de sus raíces.

Origen del término: Fue acuñado por el escritor argentino Rafael Ton en su libro El síndrome de Doña Florinda. Se inspira en el personaje de Doña Florinda de la serie El Chavo del 8, quien, a pesar de vivir en la misma vecindad y compartir condiciones económicas similares con sus vecinos, mostraba una actitud altiva y despectiva hacia ellos. Este personaje se convirtió en símbolo de aquellos que niegan su origen y desprecian a quienes comparten su misma realidad social. 

Características del síndrome

Apariencia de superioridad: Las personas con este síndrome suelen adoptar comportamientos y estilos de vida que no corresponden a su realidad económica, buscando aparentar un estatus más alto. 

  • Desprecio por sus pares: Manifiestan actitudes de rechazo hacia individuos de su misma clase social, considerándolos inferiores o poco dignos. 
  • Negación de sus orígenes: Tienden a minimizar o negar su pasado humilde, buscando distanciarse de él.
  • Aporofobia: Este término, acuñado por la filósofa Adela Cortina, se refiere al rechazo o aversión hacia las personas pobres. El síndrome de Doña Florinda es una manifestación de esta actitud.  

Impacto social: Este síndrome refleja dinámicas de discriminación silenciosa dentro de las mismas clases sociales, perpetuando estigmas y barreras que dificultan la cohesión y el progreso colectivo. Al despreciar sus propios orígenes y a quienes comparten su realidad, estas personas contribuyen a la fragmentación social y a la reproducción de desigualdades.

En resumen, el “Síndrome de Doña Florinda”” es una metáfora que ilustra cómo, en ocasiones, el ascenso social puede ir acompañado de actitudes de rechazo hacia los propios orígenes, reflejando tensiones y contradicciones en las estructuras sociales. 

Tiken Jah Fakoly: Plus rien ne m'étonne, el reggae del momento

La canción tiene muchos años, pero describe a la perfección lo inexplicable que vivimos ahora. Además proviene de una visión desde Áfricacuando desde Europa parecemos acongojarnos con la incertidumbre que siempre ha devastado otros continentes, como las arbitrarias divisiones de las secuelas coloniales.  

La versión coral con 850 participantes del vídeo inicial es del año pasado, 2024. Tiken Jah Fakolyaunque su nombre verdadero es Doumbia Moussa Fakoly, es uno de los cantantes de reggae (ver otros posts) más emblemáticos de África, nacido en 1968 en Aboisso, Costa de Marfil. Su música se caracteriza por letras profundamente políticas y sociales, en las que denuncia la corrupción, la opresión y las injusticias que afectan tanto a su país como al mundo. Desde sus inicios en la década de 1990, Fakoly se ha destacado por utilizar su arte como herramienta de protesta y llamado a la transformación social, ganándose el respeto de seguidores y activistas en diversos continentes.

La canción "Plus rien ne m'étonne" (que se traduce como “Nada me sorprende ya”) es un claro reflejo de su visión crítica. En este tema, Fakoly expresa su desilusión ante un entorno en el que las injusticias y la corrupción se han vuelto la norma. Con un tono que mezcla resignación y denuncia, la canción se convierte en un himno para quienes sienten que la indiferencia y el abuso de poder han dejado de sorprender, marcando un punto de quiebre emocional ante la repetición de hechos lamentables en la sociedad.

La canción, interpretada en francés, encarna la visión crítica y comprometida del autor, quien ha usado el reggae como vehículo para denunciar abusos de poder y desigualdades tanto en África como a nivel global. En cuanto a su origen y fecha, la canción forma parte del vasto repertorio de Fakoly, cuya carrera se consolidó en la década de 1990 y se ha mantenido activa en los años posteriores. Aunque las fuentes varían en cuanto a la fecha exacta de lanzamiento, "Plus rien ne m'étonne" se enmarca en una etapa madura de su producción musical, cuando ya había afianzado su estilo y compromiso político. 

Grabada en el contexto de su trabajo habitual, influido tanto por su país natal, Costa de Marfil, como por las realidades políticas y sociales internacionales, la canción refleja el sentir de una generación cansada de las promesas incumplidas y la impunidad. En resumen, "Plus rien ne m'étonne" es una obra que no solo denuncia el estado actual del poder y la corrupción, sino que también se erige como un himno de resignación y protesta en una época en la que la injusticia ya no conmueve.

Con su inconfundible estilo que fusiona el reggae con ritmos y sensibilidades africanas, Tiken Jah Fakoly ha logrado inspirar a una generación que busca el cambio y la justicia, convirtiéndose en un referente mundial del compromiso político y social a través de la música.

Vídeo de hace años, subtitulado al español.

Jeffrey Sachs: La economía al servicio del desarrollo sostenible

En tiempos turbulentos, conviene repasar a economistas referenciales. Hoy recordaremos la obra de Jeffrey D. Sachs, nacido el 5 de noviembre de 1954 en Detroit, Míchigan (disfrutad aprendiendo con lección en Taiwán de agosto de 2023 en el recomendable canal Neutrality Studies)Jeffrey D. Sachs es un economista y profesor estadounidense reconocido por su trabajo en desarrollo sostenible, macroeconomía global y lucha contra la pobreza. Obtuvo su licenciatura, maestría y doctorado en la Universidad de Harvard, donde también fue profesor desde 1980 hasta 2002. 

En 2002, se incorporó a la Universidad de Columbia como director del Instituto de la Tierra, cargo que ocupó hasta 2016. Actualmente, es director del Centro para el Desarrollo Sostenible en la misma universidad y presidente de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de la ONU. Ha asesorado a tres secretarios generales de las Naciones Unidas en temas relacionados con los Objetivos de Desarrollo del Milenio y los Objetivos de Desarrollo Sostenible

Jeffrey D. Sachs ha sido reconocido por sus estrategias efectivas para abordar desafíos complejos como crisis de deuda, hiperinflaciones y transición de economías planificadas a economías de mercado. Además, ha trabajado en el control de enfermedades como el SIDA y la malaria, y en la lucha contra el cambio climático inducido por el ser humano. Ha sido incluido en la lista de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista Time en dos ocasiones y ha recibido 42 doctorados honoris causa. 

Entre sus publicaciones destacan los bestsellers del New York Times "The End of Poverty" (2005), "Common Wealth: Economics for a Crowded Planet" (2008) y "El precio de la covolización" (2011). Su trabajo ha influido significativamente en políticas económicas y sociales a nivel global. 

Por su relevante protagonismo, ha recibido tanto alabanzas como críticas.  Entre los elegios destacan:

  1. Experto en desarrollo y lucha contra la pobreza. Su libro The End of Poverty y su trabajo con la ONU han sido clave en la promoción de los Objetivos de Desarrollo del MilenioHa asesorado a países en crisis económica y ayudado a reducir la pobreza en África con iniciativas como los Millennium Villages.

  2. Defensor del desarrollo sostenible y el cambio climáticoHa sido un impulsor de estrategias para combatir el cambio climático y ha trabajado en la transición a economías más sostenibles. Lideró el Instituto de la Tierra en la Universidad de Columbia, promoviendo soluciones para el desarrollo global.

  3. Figura influyente en la política económica globalHa asesorado a organismos como el FMI, el Banco Mundial y gobiernos de países en crisis como Bolivia, Polonia y Rusia. Fue incluido en la lista de las 100 personas más influyentes del mundo de la revista Time.

Algunas de las Críticas:

  1. Fracaso en la "terapia de choque" en economías en transiciónSu recomendación de reformas rápidas de libre mercado en países exsoviéticos (como Rusia y Polonia) en los años 90 fue criticada por generar desempleo, desigualdad y corrupción.

  2. Millennium Villages: Resultados cuestionablesAunque sus programas en África buscaron erradicar la pobreza, algunos informes han señalado que los efectos a largo plazo fueron menores de lo esperado y que faltó transparencia en los datos.

  3. Enfoque tecnocrático y simplista. Algunos economistas lo acusan de tener una visión excesivamente optimista, confiando demasiado en soluciones tecnocráticas sin considerar las realidades políticas y culturales de cada país.

En síntesis, Jeffrey D. Sachs es un economista influyente con grandes contribuciones en desarrollo sostenible y lucha contra la pobreza, pero su enfoque ha generado tanto admiración como críticas, especialmente en la implementación de políticas económicas en países en crisis.

¿Cómo combatir el fascismo que aún fascina en el siglo XXI?

El extemporáneo y horrendo fascismo sigue fascinando (en su primera acepción) a determinadas personas en pleno siglo XXI en distintas partes del mundo. Es preciso determinar cuáles son esas razones, muchas de ellas relacionadas con factores psicológicos, sociales y políticos. Aquí hay algunos puntos clave que explican su extraña persistencia en formatos de fascismo originario, el neofascismo, el transfascismo o formas de populismo variopinto:

1. Crisis y miedo al cambio: El fascismo suele resurgir en momentos de crisis económica, social o política. La incertidumbre y el miedo llevan a muchas personas a buscar soluciones autoritarias y simplistas, que prometen orden y estabilidad a cambio de libertad.

2. Nacionalismo y sentido de pertenencia: En un mundo globalizado, donde muchas personas sienten que sus identidades nacionales, culturales o sociales están amenazadas, el fascismo ofrece una narrativa de orgullo nacionalista. Promueve la idea de una comunidad fuerte, unida y con un enemigo común.

3. Promesas de orden y autoridad: Muchas personas sienten que las democracias liberales son ineficientes y corruptas. El fascismo se presenta como una alternativa "eficaz", donde un líder fuerte toma decisiones sin las restricciones de la democracia.

4. Manipulación emocional y propaganda: El fascismo utiliza discursos que apelan a las emociones en lugar de la razón. La propaganda, especialmente en redes sociales, explota el miedo, la nostalgia y la ira para movilizar a las masas.

5. Búsqueda de héroes y líderes carismáticos: El fascismo tiende a ofrecer figuras mesiánicas que prometen "rescatar" a la nación. En tiempos de crisis, muchas personas prefieren creer en un líder fuerte en lugar de confiar en instituciones democráticas.

6. El enemigo como excusa: El fascismo crea enemigos ficticios o exagera amenazas para justificar su existencia. Puede ser una minoría étnica, inmigrantes, ideologías opuestas o "élites corruptas".

7. Uso de nuevas tecnologías: Aunque el fascismo del siglo XX dependía de la radio y la prensa, en el siglo XXI se ha adaptado a las redes sociales, los algoritmos y las campañas de desinformación para atraer seguidores.

8. Desconfianza en las élites políticas: Muchos ciudadanos sienten que los gobiernos democráticos han fallado en mejorar sus condiciones de vida. Esto genera terreno fértil para movimientos autoritarios que prometen barrer con la "vieja política".

9. Romanticismo del pasado: El fascismo suele idealizar un pasado mítico donde la nación era "grande y pura". Esto atrae a quienes sienten que han perdido su identidad en un mundo cambiante.

10. Radicalización y tribalismo: En la era digital, la radicalización ocurre más rápido. Las redes sociales crean burbujas ideológicas donde los discursos extremistas encuentran eco y refuerzo.

El fascismo fascina porque promete soluciones simples a problemas complejos, ofrece identidad y propósito en tiempos de incertidumbre, y explota las emociones humanas más primarias: miedo, orgullo y odio. Sin embargo, la historia ha demostrado que sus promesas conducen a la represión y el sufrimiento.

La cuestión clave es : ¿Cómo combatir esa fascinación por el fascismo?

Combatir la fascinación por el fascismo requiere una combinación de estrategias educativas, políticas, sociales y culturales. Aquí algunas formas efectivas de hacerlo:

1. Educación crítica y memoria histórica

  • Enseñar la historia del fascismo con ejemplos concretos de sus consecuencias devastadoras (Holocausto, dictaduras, guerras).
  • Promover el pensamiento crítico para que las personas puedan identificar discursos autoritarios y populistas.
  • Fomentar la educación cívica para fortalecer el compromiso con la democracia y los derechos humanos.

2. Fortalecimiento de la democracia

  • Gobiernos más transparentes y eficaces que respondan a las necesidades de la gente para evitar la desconfianza en la democracia.
  • Fomentar la participación ciudadana en movimientos sociales, organizaciones comunitarias y procesos electorales.
  • Luchar contra la corrupción para eliminar el argumento de que “la democracia no funciona”.

3. Combatir la desinformación

  • Regular la propaganda y las fake news en redes sociales sin caer en la censura.
  • Fomentar el periodismo independiente que exponga los peligros del autoritarismo.
  • Educar a las personas sobre manipulación mediática y cómo verificar fuentes de información.

4. Crear narrativas alternativas

  • No solo criticar el fascismo, sino ofrecer visiones positivas de la democracia, la diversidad y la justicia social.
  • Reforzar el sentido de comunidad con discursos que promuevan la cooperación en lugar del odio.
  • Incentivar el orgullo por los valores democráticos en lugar del nacionalismo excluyente.

5. Construcción de una economía justa

  • Reducir la desigualdad económica, ya que el fascismo se nutre del resentimiento de los más desfavorecidos.
  • Ofrecer seguridad y oportunidades a quienes se sienten abandonados por el sistema.
  • Garantizar derechos laborales y acceso a servicios básicos para evitar que el autoritarismo se aproveche del malestar social.

6. Fomentar la diversidad y el diálogo

  • Promover la integración de minorías en la sociedad para combatir el miedo a “lo diferente”.
  • Facilitar espacios de diálogo entre distintos sectores de la sociedad para reducir la polarización.
  • Combatir el discurso de odio con políticas claras y educación en empatía y tolerancia.

7. Responsabilidad de líderes y figuras públicas

  • Políticos, artistas e intelectuales deben tomar postura clara contra el fascismo.
  • No normalizar el discurso autoritario en los medios y la cultura.
  • Crear leyes que impidan la apología al fascismo, como sucede en países donde está penalizado negar el Holocausto.

8. Construcción de una identidad colectiva democrática

  • Reivindicar valores como la libertad, la justicia y la igualdad como parte de la identidad nacional.
  • Transformar el concepto de patriotismo para que no sea excluyente ni basado en el odio.
  • Incentivar modelos de liderazgo democráticos en lugar de figuras autoritarias.

Conclusión: 
La infame fascinación por el fascismo se combate con educación, participación democrática, justicia social y discursos alternativos basados en la cooperación y la diversidad. Es un trabajo constante, pero necesario para evitar que el autoritarismo vuelva a imponerse.

Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto


Viviendo en 2025 no dejaremos de recordar un 27 de enero el  Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto. El 27 de enero de 1945, el ejército de la URSS liberaba el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau, donde fueron asesinadas más de 1.100.000 personas, de los que un 90% fueron judíos.

Lo hemos conmemorado muchas veces (posts nuestros), pero con intención de no olvidar jamás cuán ruines pueden llegar a convertirse los seres humanos que sin educación, ética y solidaridad hoy es perentorio recordar cómo se pudo llegar a aquel genocidio.

Este riesgo sigue presente, más que en décadas, en este primer cuarto del siglo XXI. Recordemos cómo se llego a aquella obscena monstruosidad con las palabras de Primo Levi (1919-1987). Un escritor y químico italiano, conocido por sus testimonios sobre el Holocausto. Nació en Turín en una familia judía y se graduó como químico en 1941, enfrentándose a la creciente discriminación bajo las leyes raciales fascistas en Italia. En 1943, Levi se unió a la resistencia antifascista, pero fue capturado y deportado al campo de concentración de Auschwitz en 1944. Allí sobrevivió durante casi un año antes de ser liberado por el ejército soviético en 1945.:

"No empezó con las cámaras de gas, sino con discursos de odio, con la normalización de la intolerancia, con leyes que discriminaban a unos pocos mientras los demás miraban hacia otro lado. Empezó con la deshumanización sistemática de aquellos que eran diferentes, con la indiferencia de los testigos, con la aceptación gradual de que unos seres humanos valían menos que otros. Empezó cuando el lenguaje del desprecio se hizo cotidiano, cuando los prejuicios se transformaron en políticas de Estado, y cuando la sociedad dejó de cuestionar lo que era moralmente inaceptable. Antes de los campos de concentración, hubo palabras, leyes, propaganda y silencios. Todo esto allanó el camino al horror que vendría después."

Esta reflexión amplía la idea original de Primo Levi y destaca cómo el Holocausto fue el resultado de un proceso paulatino, alimentado por la indiferencia y la complicidad, tanto activa como pasiva, de la sociedad en su conjunto.

Un mensaje de 1943 contra el odio que siguen azuzando hoy

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La película "Don't Be a Sucker" (No seas tonto) es un cortometraje producido por el Departamento de Guerra de los Estados Unidos en 1943, durante la Segunda Guerra Mundial. Su objetivo principal era advertir a los ciudadanos estadounidenses sobre los peligros del fascismo, la intolerancia y la discriminación, utilizando un formato educativo y persuasivo. Entonces el presidente de los Estados Unidos era el demócrata Franklin D. Roosevelt. Estaba en su tercer mandato (1933-1945) y lideró al país durante la Gran Depresión y la mayor parte de la Segunda Guerra Mundial.

En el contexto de la Segunda Guerra Mundial, el gobierno de los Estados Unidos desarrolló varios cortometrajes como parte de sus esfuerzos de propaganda para educar y unir a la población. "Don't Be a Sucker" se enmarca en este esfuerzo, enfocado en combatir los prejuicios y advertir sobre los mecanismos que los regímenes totalitarios, como el nazismo, utilizaban para dividir y controlar a las sociedades.

El cortometraje presenta a un hombre estadounidense que escucha a un orador callejero enojado que predica odio contra diferentes grupos, incluidos inmigrantes, minorías étnicas y religiosas. El orador intenta culpar a estos grupos por los problemas sociales y económicos del país.

Un segundo hombre, un inmigrante europeo que se ha convertido en ciudadano estadounidense, interviene y le cuenta su propia experiencia de cómo, en su país de origen, las tácticas de odio y discriminación llevaron al surgimiento del fascismo y a la pérdida de la libertad. Explica que estas divisiones y prejuicios permitieron que los regímenes autoritarios consolidaran el poder.

La lección principal es clara: la intolerancia y el odio pueden destruir una sociedad democrática si las personas no están alertas y unidas en sus valores. El título, "No te dejes engañar", refleja este llamado a resistir las narrativas divisivas y a proteger la democracia.

Aunque fue creada hace más de 80 años, la película sigue siendo relevante en debates actuales sobre racismo, intolerancia y manipulación social. De hecho, en los últimos años, algunas escenas del cortometraje han resurgido en redes sociales como una advertencia contra el resurgimiento de ideologías de odio y extremismo.


Nos recuerda el poema escrito por el pastor luterano alemán Martin Niemöller (1892-1984). Véase en otros posts nuestros. Trata sobre la cobardía de los intelectuales alemanes tras el ascenso de los nazis al poder y la subsiguiente purga de sus objetivos escogidos, grupo tras grupo. Muchas variaciones y adaptaciones en el espíritu del original se han publicado en el idioma inglés. Trata de temas como la persecución, culpa y responsabilidad.

Más tecnología para el bien común y una mejor democracia

El artículo "Nausika: tecnología para el bien común", publicado el 22 de enero de 2025 en Cinco Días, presenta la iniciativa Nausika, que surge en un contexto de rápidos cambios sociales impulsados por las tecnologías digitales. Estas tecnologías están transformando la estructura social, concentrando el poder económico y aumentando la desigualdad, efectos que, aunque presentes en anteriores revoluciones tecnológicas, se manifiestan ahora con mayor rapidez y alcance. 

El grupo Nausika, compuesto por profesionales que han colaborado previamente con la patronal de la industria digital en España (Ametic), busca fomentar una reflexión independiente y continua sobre el impacto de la tecnología en la sociedad. Su objetivo es destacar las contribuciones positivas de la tecnología y alertar sobre sus riesgos, siempre desde una perspectiva de progreso para todos.

El artículo enfatiza que, aunque los grandes cambios tecnológicos han resultado en avances significativos para la sociedad, es crucial dirigir estos cambios hacia el bien común y acelerar su consolidación. Para que los beneficios económicos de la tecnología se distribuyan equitativamente, es esencial que los incrementos de productividad se repartan de manera justa, mejorando el bienestar económico y las expectativas de todos los territorios y grupos sociales. 

 Las herramientas clave para lograrlo son la innovación, como motor de mejora de la productividad, y la industria, como difusora y cohesionadora social. Ambas requieren una apuesta decidida por la educación y la formación, considerados los activos más importantes de una sociedad. El grupo Nausika destaca la necesidad de actuar con prontitud, ya que las decisiones tomadas hoy conformarán el mundo de mañana, que, debido a la velocidad del cambio, está muy cercano.

Además, el artículo señala la creciente influencia de grandes conglomerados tecnológicos en áreas tradicionalmente gestionadas por los Estados, como la investigación científica y los movimientos de capital. Esta tendencia subraya la importancia de una reflexión crítica y constructiva sobre el papel de la tecnología en la sociedad y la necesidad de garantizar que su desarrollo beneficie al conjunto de la población. 

En resumen, la iniciativa Nausika: tecnología para el bien común propone una reflexión profunda y crítica sobre el impacto de las tecnologías digitales, con el objetivo de orientar su desarrollo hacia el bien común y asegurar que sus beneficios se distribuyan de manera equitativa en la sociedad. El grupo está formado por por Xavier Castillo, Antón Costas, Sara de la Rica, Guillermo Dorronsoro, Emma Fernández, Xavier Ferràs, José María Lassalle, Paco Marín, Pedro Mier, Felipe Romera y Ana Ursúa.

Mariann Budde, una mujer que alzó la voz ante Trump


Creo que fue Víctor Hugo (posts) quien señaló que “En todas las crisis aparece un relámpago que nos ciega o nos ilumina”. Es el momento de la esperanza, de que nazca el héroe que todos llevamos dentro. La luz, en esta ocasión, nos la ha brindado la reverenda obispo episcopal Mariann Edgar Budde

Su homilía al presidente Donald Trump (posts) donde pidió piedad para los inmigrantes y comunidad (sermón íntegro), nos ha dejado un hilo de confianza en la solidaridad y en la humanidad. Recogemos el último párrafo que pasará a la historia

"Permítanme un último ruego. Señor Presidente, millones de personas han depositado su confianza en usted y, como dijo ayer a la nación, ha sentido la mano providencial de un Dios amoroso. En nombre de nuestro Dios, le pido que se apiade de las personas de nuestro país que ahora tienen miedo. Hay niños gays, lesbianas y transexuales en familias demócratas, republicanas e independientes, algunos de los cuales temen por sus vidas. Y las personas que recogen nuestras cosechas, limpian nuestros edificios de oficinas, trabajan en granjas avícolas y plantas de envasado de carne, lavan los platos después de comer en los restaurantes y trabajan en los turnos de noche en los hospitales: puede que no sean ciudadanos o no tengan la documentación adecuada, pero la gran mayoría de los inmigrantes no son delincuentes. Pagan impuestos y son buenos vecinos. Son fieles miembros de nuestras iglesias, mezquitas, sinagogas, viharas y templos

Le pido que tenga piedad, Señor Presidente, de aquellos en nuestras comunidades cuyos hijos temen que sus padres sean llevados, y que ayude a quienes huyen de zonas de guerra y persecución en sus propias tierras a encontrar compasión y acogida aquí. Nuestro Dios nos enseña que debemos ser misericordiosos con el extranjero, porque todos fuimos extranjeros en esta tierra. Que Dios nos conceda la fuerza y el valor para honrar la dignidad de todo ser humano, para decirnos la verdad unos a otros con amor, y para caminar humildemente unos con otros y con nuestro Dios por el bien de todas las personas de esta nación y del mundo".

Mariann Budde ya había criticado públicamente antes a Trump el 1 de junio de 2020, reprendiendo su "retórica racializada" y culpándole de incitar a la violencia el 6 de enero. Se mostró "indignada" después de que Trump realizara una controvertida visita a la iglesia de St. John, conocida como la iglesia de los presidentes por estar muy cerca de la Casa Blanca. Allí posó con una Biblia para una sesión de fotos (vídeo). 

Antes de esa visita, las autoridades habían despejado la zona de manifestantes pacíficos en Lafayette Square mediante el uso de gas lacrimógeno y fuerza policial, lo que generó una ola de indignación. Mariann Budde expresó su descontento afirmando que Trump usó la iglesia y la Biblia como herramientas de propaganda política, alejándose de los valores que representan. Su declaración enfatizó que la fe no debía ser instrumentalizada para dividir o manipular al público.