Las finanzas conductuales (Behavioral Finances) estudian cómo los factores psicológicos y emocionales influyen en las decisiones financieras de las personas, y cómo estas decisiones pueden desviarse de lo que predice la teoría financiera tradicional.
Daniel Kahneman (ver en otros posts) fue uno de los pioneros de las finanzas conductuales. Junto con Amos Tversky, desarrolló la Teoría de la Prospectiva (1979), que explica cómo las personas toman decisiones financieras bajo incertidumbre. Kahneman demostró que los inversionistas no actúan siempre de manera racional, como postula la teoría económica clásica, sino que sus decisiones están influenciadas por sesgos cognitivos y emocionales, como la aversión a la pérdida, el exceso de confianza y el efecto de anclaje. Su trabajo le valió el Premio Nobel de Economía en 2002.
A diferencia de las finanzas convencionales, que suponen que los individuos son racionales y maximizan su bienestar económico, las finanzas conductuales reconocen que las personas a menudo actúan de manera irracional debido a sesgos cognitivos, emociones y limitaciones cognitivas.
Algunos ejemplos de finanzas conductuales:
Efecto de anclaje: Los inversores basan sus decisiones en un valor inicial, como el precio de compra de una acción, lo que influye en su evaluación posterior, incluso si las circunstancias han cambiado.
Exceso de confianza: Los inversionistas sobrestiman sus habilidades para predecir el mercado, lo que puede llevarlos a tomar decisiones arriesgadas.
Aversión a la pérdida: Las personas tienden a sentir más dolor por una pérdida que satisfacción por una ganancia, lo que puede hacer que mantengan inversiones no rentables para evitar pérdidas.
Segregación de cuentas mentales: Las personas asignan diferentes valores emocionales al dinero según su origen o destino. Por ejemplo, pueden ser más cautelosas al gastar su salario que al usar un bono o premio.
Efecto de dotación: Los individuos valoran más lo que poseen simplemente porque es suyo, lo que puede llevarlos a mantener activos por encima de su valor de mercado.
Comportamiento de rebaño (herding): Los inversores siguen las decisiones de la mayoría sin hacer un análisis independiente, lo que puede llevar a burbujas financieras.
Ilusión del control: Las personas creen tener más control sobre eventos inciertos de lo que realmente es posible, lo que puede llevar a una sobreestimación del rendimiento de las inversiones.
Reglas empíricas o heurísticas (rules of thumb): Principios simples y prácticos que las personas usan para tomar decisiones rápidas o resolver problemas sin un análisis detallado. Se basan en experiencias pasadas y conocimiento general, pero no son precisas o científicas. Por ejemplo, un podría ser "diversifica tu cartera" o "gasta solo el 30% de tus ingresos en vivienda. Aunque no garantizan resultados perfectos, son útiles para tomar decisiones cotidianas de manera eficiente.
Estos ejemplos reflejan cómo las emociones y los sesgos influyen en la toma de decisiones económicas.
“Ahorramos muy poco en nuestra etapa activa laboral porque ejercemos muy poco auto-control... en la jubilación, gastamos muy poco porque ejercemos demasiado auto-control” Meir Statman, hoy en el Global Pension Programme, hablando sobre Behavioral Finance. pic.twitter.com/6TRsP4M3Tw
My new book “Advanced Introduction to Behavioral Finance” with co-authors Kent Baker and John Nofsinger is now available. The book provides a solid overview of behavioral finance plus special topics on behavioral corporate finance, the human biology of investing and the… pic.twitter.com/tMhkV10dJg
Aunque es una visión pesimista (e incluso cínica y amoral) de la vida, conviene leer y releer el libro “Las 48 Leyes del Poder” de Robert Greene. Aunque sólo sea para protegernos de quienes, y son muchos, usan estos mecanismos psicológicos y sociales. La obra ofrece una guía práctica sobre cómo obtener y mantener el poder y la influencia en diversas situaciones sociales y profesionales.
El libro valora la importancia de la astucia, la paciencia y la capacidad de entender y manipular las emociones y percepciones de los demás para alcanzar el poder. Estas leyes, al igual que las otras, subrayan la importancia de la estrategia, la manipulación y la percepción en la búsqueda del poder.
Robert Greene se basa en más de 3.000 años de historia y en las enseñanzas de figuras como Maquiavelo (otros posts) y Sun Tzu (más posts)para enumerar 48 principios que describen las dinámicas del poder. Aquí tienes la lista completa de las 48 Leyes:
Nunca le hagas sombra a tu jefe: Haz que tus superiores se sientan siempre superiores.
Nunca confíes demasiado en tus amigos y aprende a usar a tus enemigos: Los amigos pueden traicionarte, mientras que los enemigos pueden ser más leales.
Disimula tus intenciones: Mantén a los demás en la oscuridad sobre tus verdaderos objetivos.
Di siempre menos de lo necesario: Hablar demasiado puede exponerte y debilitar tu posición.
Casi todo depende de tu prestigio; defiéndelo a muerte: Tu reputación es crucial para mantener el poder. Protege y mejora tu prestigio constantemente.
Busca llamar la atención a cualquier precio: La visibilidad es clave. Atrae la atención hacia ti y mantén a la gente interesada.
Logra que otros trabajen por ti, pero siempre lleva tú el crédito: Utiliza las habilidades y el trabajo de otros para tu beneficio, pero asegúrate de que el mérito sea tuyo.
Haz que la gente dependa de ti: Cuanto más dependan de ti, más control tendrás sobre ellos.
Gana a través de tus acciones, nunca por medio de argumentos: Las acciones son más efectivas que las palabras para demostrar tu poder y lograr tus objetivos.
Evita a los perdedores o te convertirás en uno: Rodéate de personas exitosas.
Haz que la gente dependa de ti: Cuanto más dependan de ti, más control tendrás sobre ellos.
Sé franco y generoso de forma esporádica: La generosidad ocasional puede desarmar a tus enemigos.
Sé egoísta para pedir ayuda, sin apelar a la compasión o la gratitud: Apela al interés propio de los demás.
Muéstrate como un amigo, pero actúa como un espía: Recoge información valiosa.
Aplasta a tu enemigo por completo: No dejes espacio para la venganza.
Usa la ausencia para incrementar el respeto y honor: La ausencia puede aumentar tu valor.
Mantén el suspense y lo impredecible: La sorpresa y la imprevisibilidad pueden ser poderosas.
No te protejas mediante fortalezas: el aislamiento es nocivo: Mantente en contacto con tus aliados.
No ofendas a la persona equivocada: Elige tus enemigos con cuidado.
No te comprometas nunca con nadie: Mantén tu independencia.
Finge candidez y muéstrate más tonto ante tu víctima: Desarma a tus enemigos con tu aparente ingenuidad.
Transforma tu debilidad en poder: Utiliza tus debilidades a tu favor.
Concentra tus fuerzas: Enfoca tus recursos en un solo objetivo.
Haz el papel de cortesano perfecto: Aprende a navegar en las cortes del poder.
Procura divertirte permanentemente: La diversión puede ser una herramienta poderosa.
Mantén tus manos limpias: No te ensucies con los trabajos sucios.
Usa la necesidad de las personas de creer en algo: Manipula las creencias de los demás.
Sé audaz: La audacia puede ser recompensada.
Planifica tus actos de inicio a final: La planificación es clave para el éxito.
Haz que tus logros parezcan no necesitar esfuerzo: La facilidad aparente puede aumentar tu prestigio.
Controla las opciones: Da a los demás la ilusión de elección.
Juega con las ilusiones de la gente: Manipula las percepciones de los demás.
Descubre la debilidad de los demás: Conoce los puntos débiles de tus enemigos.
S
Si quieres ser tratado como un rey, actúa como tal: La autoconfianza puede ser poderosa.
Domina el arte de la oportunidad: Elige el momento adecuado para actuar.
Menosprecia lo que no puedes obtener: Desprecia lo que no puedes tener.
Arma espectáculos impresionantes: Los espectáculos pueden ser una herramienta poderosa.
Piensa lo que quieras, pero compórtate como los demás: La conformidad puede ser una herramienta poderosa.
Revuelve las aguas: La confusión puede ser una herramienta poderosa.
Desdeña aquello que es gratuito: Lo regalado puede ser peligroso.
No imites a los grandes hombres: Sé original.
Muerto el perro, se acabó la rabia: Elimina la fuente del problema.
Trabaja sobre el corazón y la mente de los demás: Manipula las emociones de los demás.
Desarma y enfurece con el efecto espejo: Refleja las acciones de tus enemigos.
Introduce cambios, pero no demasiados: El cambio puede ser peligroso.
Nunca te muestres demasiado perfecto: La perfección puede ser peligrosa.
No vayas más allá de tu objetivo original: La ambición desmedida puede ser peligrosa.
Sé cambiante en tu forma: La adaptabilidad puede ser poderosa.
Existe un mecanismo de la mente que nos conduce a buscar la…infelicidad. Demuestra que, a medida que experimentamos menos problemas, no estamos más satisfechos. Simplemente bajamos nuestro umbral para lo que consideramos un problema. Terminamos con la misma cantidad de problemas. Excepto que nuestros nuevos nimios problemas son cada vez más vacíos.
El cerebro humano busca problemas incluso cuando no existen. Incluso está acuñado un término para ello... "Problem Creep". Explica que, a medida que experimentas menos problemas, no te sientes más satisfecho. Simplemente reduces tu umbral de lo que consideras un problema. Acabas teniendo el mismo número de problemas, salvo que tus nuevos problemas son progresivamente más triviales.
El “Problem Creep” (Problema Creciente) o el “prevalence-induced concept change” (cambio de concepto inducido por la prevalencia) es un fenómeno psicológico en el que la definición de un concepto cambia a medida que cambia la prevalencia de los ejemplos de ese concepto. Este fenómeno fue estudiado por investigadores de Harvard (publicación), quienes encontraron que cuando la prevalencia de un problema disminuye, las personas tienden a redefinir el problema para incluir más cosas como problemáticas.
Por ejemplo, en un experimento, cuando se redujo la cantidad de puntos azules que los participantes veían en una pantalla, comenzaron a clasificar puntos que antes consideraban morados como azules. Este fenómeno también se observó en juicios éticos: cuando se redujo la cantidad de estudios claramente poco éticos, los participantes comenzaron a clasificar estudios inocuos como poco éticos.
En resumen, a medida que resolvemos problemas y estos se vuelven menos frecuentes, tendemos a expandir nuestras definiciones de esos problemas, lo que puede llevarnos a pensar que el problema no ha mejorado tanto como realmente lo ha hecho.
Conciencia y Educación: Ser consciente de este fenómeno es el primer paso. Educar a las personas sobre cómo y por qué ocurre puede ayudar a mitigar su impacto.
Establecer Criterios Claros: Definir claramente los criterios para identificar problemas o conceptos desde el principio y adherirse a ellos, incluso cuando la prevalencia de los problemas disminuya.
Reevaluación Periódica: Revisar periódicamente los criterios y definiciones para asegurarse de que no se están expandiendo innecesariamente.
Feedback Externo: Buscar opiniones y feedback de personas externas al grupo o proyecto puede proporcionar una perspectiva fresca y ayudar a identificar si se está cayendo en este fenómeno.
Datos y Evidencia: Basar las decisiones en datos y evidencia objetiva en lugar de percepciones subjetivas puede ayudar a mantener una perspectiva clara y evitar la expansión de conceptos.
Implementar estas estrategias puede ayudar a mantener la claridad y precisión en la identificación y gestión de problemas... y de la felicidad.
El término “Problem Creep” no es tan común como otros términos relacionados con la gestión de proyectos, pero se puede entender como una situación en la que los problemas o desafíos de un proyecto aumentan gradualmente más allá de lo que se había anticipado inicialmente. Esto puede ocurrir debido a varios factores, como cambios en los requisitos, falta de comunicación, o la aparición de problemas imprevistos. Otro concepto más conocido y relacionado es “scope creep”, que se refiere a la expansión gradual del alcance de un proyecto sin una evaluación adecuada o aprobación formal. Esto puede llevar a retrasos, aumento de costos y comprometer los objetivos del proyecto.
La relación entre la felicidad y el “prevalence-induced concept change” es muy interesante. Este fenómeno puede influir en cómo percibimos nuestra propia felicidad y la de los demás. Aquí hay algunas formas en las que se pueden relacionar:
Percepción de Problemas: Si una persona experimenta menos problemas graves en su vida, puede comenzar a percibir problemas menores como más significativos. Esto puede hacer que sienta que su nivel de felicidad no ha mejorado tanto como realmente lo ha hecho, ya que redefine lo que considera un problema.
Expectativas de Felicidad: A medida que las personas logran más objetivos y resuelven problemas, sus expectativas de lo que se necesita para ser feliz pueden aumentar. Esto puede llevar a una redefinición de lo que significa ser feliz, haciendo que las personas sientan que necesitan más para alcanzar la felicidad.
Comparación Social: En un entorno donde la mayoría de las personas parecen felices, alguien puede redefinir su propio concepto de felicidad para incluir más aspectos negativos, sintiendo que su felicidad es menor en comparación con los demás.
Adaptación hedónica: Las personas tienden a adaptarse a nuevas circunstancias y, con el tiempo, lo que antes les hacía felices puede volverse normal. Esto puede llevar a una redefinición de la felicidad, donde se necesita más para sentirse igual de feliz que antes.
Estrategias para mitigar el impacto:
Gratitud: Practicar la gratitud puede ayudar a mantener una perspectiva positiva y a valorar las pequeñas cosas que contribuyen a nuestra felicidad. Cada día, escribe tres cosas por las que estás agradecido. Esto puede ayudarte a enfocarte en los aspectos positivos de tu vida y a valorar las pequeñas cosas.
Reflexión: Ser consciente de este fenómeno y reflexionar sobre cómo nuestras percepciones pueden cambiar con el tiempo.
Metas Realistas: Mantener expectativas realistas y metas alcanzables puede ayudar a evitar la redefinición constante de lo que se necesita para ser feliz.
He aquí por qué la gente feliz buscan ser infeliz:
El "Síndrome de Solomon" se define como el miedo patológico a ser diferente al grupo. Las personas que experimentan este síndrome tienden a opinar igual que los demás, incluso si creen que la opinión del grupo es incorrecta. El temor a destacar o a ser el centro de atención les lleva a adoptar comportamientos que evitan sobresalir.
Este síndrome se basa en el experimento de conformidad realizado por el psicólogo Solomon Asch en el año 1951. En dicho experimento, se mostraban a un grupo de estudiantes cuatro líneas y se les pedía que indicaran cuál de las tres primeras líneas (A, B o C. era igual a la cuarta. A pesar de que la respuesta correcta era obvia (B), en cada grupo todos eran cómplices del investigador y tras acertar en las primeras pruebas, luego daban al unísono una respuesta claramente errónea (como la A). El único que no estaba compinchado se sumaba generalmente a quienes respondían incorrectamente, para no diferir de la clase. Cuando se les preguntaba en privado, admitían conocer la respuesta correcta, pero temían destacarse o equivocarse.
En resumen, el Síndrome de Solomon puede hacer que se pierda la identidad por el miedo a destacar sobre el resto. Es importante reconocerlo y buscar estrategias para no infravalorarse y expresar nuestras opiniones genuinas sin temor a ser diferentes.
Superar el Síndrome de Solomon puede ser un proceso gradual, pero aquí hay algunas estrategias que pueden ayudar. 1º Autoconciencia: Reconoce que estás experimentando este síndrome. Aprende a identificar cuándo estás cediendo a la presión del grupo y evitando expresar tus propias opiniones.
2º Educación y comprensión: Investiga más sobre el síndrome y comprende que es común sentir miedo de destacar. Saber que no estás solo en esto puede ser reconfortante.
3º Confianza en ti mismo: Trabaja en fortalecer tu autoestima y confianza. Reconoce tus habilidades y méritos. Recuerda que tus opiniones son valiosas y merecen ser escuchadas.
4º Practica la asertividad: Aprende a expresar tus pensamientos y opiniones de manera respetuosa pero firme. No temas diferir del grupo si realmente crees en algo.
5º Busca apoyo: Habla con amigos cercanos o un terapeuta sobre tus sentimientos. A veces, compartir tus preocupaciones puede aliviar la carga emocional.
6º Desarrolla habilidades sociales: Practica interactuar con personas fuera de tu círculo habitual. Cuanto más te expongas a diferentes perspectivas, más cómodo te sentirás siendo tú mismo.
7º Celebra la diversidad: Aprende a apreciar las diferencias en opiniones y personalidades. No todos deben pensar igual, y eso es lo que hace que el mundo sea interesante.
It's the Asch syndrome, conservative people willing to ignore reality and give any agreeable response in order to conform to the rest of the group. That's why they love the uneducated. Fact. Dems dont need that. pic.twitter.com/rY0LVndTLT
Reconociendo el gran valor de la teoría del Desarrollo Psicosocial de Erikson (de 1950), discrepamos en la actualidad del planteamiento de la etapa de la vejez a partir de los 65 años, dado el aumento significativo de la esperanza de vida en los países desarrollados.
Erik Erikson anticipa el concepto de generatividad, como "la preocupación por establecer y guiar a la siguiente generación", o la "capacidad de trascender los intereses personales para cuidar y preocuparse por las generaciones más jóvenes y mayores" o un "deseo interior de inmortalidad". Algo que se aplica incluso, yo allí lo escuché por primera vez, a ecosistemas tecnológicos como Android o IOS, desde que Jonathan Zittrain adoptó ese neologismo en 2006 .
Ello da lugar al retraso, afortunado, de la crisis existencial entre "Generatividad frente a Estancamiento" durante la nueva jubilación de quienes mantienen salud durante décadas una vez cumplidos los 60 años. El dilema esencial de "Integridad frente a desesperación", queda pospuesto hasta la 4ª edad, al menos. Pero con más detalle hablaremos en un próximo post. Por el momento, presentemos a Erik Eriksony sus ocho estadios de la vida.
Erik Erikson (interesante biografía) descubrió las ocho edades quetodo ser humano atraviesa con sus correspondientes crisis y duelos importantes que marcan su carácter durante toda su vida. Gracias a ello, se conduce la evolución y el progreso personal. En cada fase se alcanza una serie de competencias.
Si en cada una de las etapas de la vida la persona ha logrado la competencia correspondiente, se experimentará una sensación de dominio que Erikson conceptualiza como fuerza del ego.
Haber adquirido la competencia ayuda a resolver las metas que se presentarán durante la siguiente etapa vital.
Cada etapa implica un conflicto cuya resolución ayuda al desarrollo individual y crecimiento psicológico. También podemos encontrar un gran potencial para el fracaso, si no se supera el desafío de esa etapa vital.
Sorprende cómo se van logrando las fuerzas básicas de la personalidad de cada individuo, en un cierto grado, al tiempo que se instauran así mismo las antipatías o patologías en un cierto grado: Esperanza / Retraimiento, Voluntad / Compulsión, Finalidad / Inhibición, Competencia / Inercia, Fidelidad / Repudio, Amor / Exclusividad, Cuidado / Rechazo y Sabiduría / Desdén.
Estos son los 8 estadios psicosociales, con sus relaciones, capacidades y carencias acumuladas:
1. Confianza vs Desconfianza. Este estadio transcurre desde el nacimiento hasta los dieciocho meses de vida, y depende de la relación o vínculo que se haya creado con la madre.
La relación con la madre determinará los futuros vínculos que se establecerán con las personas a lo largo de su vida. Es la sensación de confianza, vulnerabilidad, frustración, satisfacción, seguridad… la que puede determinar la calidad de las relaciones.
2. Autonomía vs Vergüenza y duda. Este estadio empieza desde los 18 meses hasta los 3 años de vida del niño.
Durante este estadio el niño emprende su desarrollo cognitivo y muscular, cuando comienza a controlar y ejercitar los músculos que se relacionan con las excreciones corporales. Este proceso de aprendizaje puede conducir a momentos de dudas y de vergüenza. Asimismo, los logros en esta etapa desencadenan sensación de autonomía y de sentirse como un cuerpo independiente.
3. Iniciativa vs Culpa. Este estadio viaja desde los 3 hasta los 5 años de edad.
El niño empieza a desarrollarse muy rápido, tanto física como intelectualmente. Crece su interés por relacionarse con otros niños, poniendo a prueba sus habilidades y capacidades. Los niños sienten curiosidad y es positivo motivarles para desarrollarse creativamente.
En caso de que los padres reaccionen de negativamente a las preguntas de los niños o a la iniciativa de éstos, es probable que les genere sensación de culpabilidad.
4. Laboriosidad vs Inferioridad. Este estadio se produce entre los 6-7 años hasta los 12 años.
Los niños muestran un interés genuino por el funcionamiento de las cosas e intentan llevar a cabo muchas actividades por sí mismos, con su propio esfuerzo y poniendo en uso sus conocimientos y habilidades. Por esa razón es tan importante la estimulación positiva que pueda ofrecerle la escuela, en casa o por el grupo de iguales. Éste último comienza a adquirir una relevancia trascendental para ellos.
En el caso de que esto no sea bien acogido o sus fracasos motiven las comparaciones con otros, el niño puede desarrollar cierta sensación de inferioridad que le hará sentirse inseguro frente a los demás.
5. Exploración de la Identidad vs Difusión de Identidad. Este estadio tiene lugar durante la adolescencia. En esta etapa, una pregunta se formula de forma insistente: ¿Quién soy?
Los adolescentes empiezan a mostrarse más independientes y a tomar distancia de los padres. Prefieren pasar más tiempo con sus amigos y comienzan a pensar en el futuro y a decidir qué quieren estudiar, en qué trabajar, dónde vivir,...
La exploración de sus propias posibilidades se produce en esta etapa. Comienzan a apuntalar su propia identidad basándose en el las experiencias vividas. Esta búsqueda va a causar que en múltiples ocasiones se sientan confusos acerca de su propia identidad.
6. Intimidad frente al Aislamiento. Este estadio comprende desde los 20 años hasta los 40, aproximadamente.
La forma de relacionarse con otras personas se modifica, el individuo empieza a priorizar relaciones más íntimas que ofrezcan y requieran de un compromiso recíproco, una intimidad que genere una sensación de seguridad, de compañía, de confianza.
Si se evade este tipo de intimidad, uno puede estar rozando la soledad o el aislamiento, situación que puede acabar en depresión.
7. Generatividad frente al Estancamiento. Este estadio transcurre entre los 40 hasta los 60 años.
Es un lapso de la vida en el que la persona dedica su tiempo a su familia. Se prioriza la búsqueda de equilibrio entre la productividad y el estancamiento; una productividad que está vinculada al futuro, al porvenir de los suyos y de las próximas generaciones, es la búsqueda de sentirse necesitado por los demás, ser y sentirse útil.
El estancamiento es esa pregunta que se hace el individuo: ¿Qué es lo que hago aquí si no sirve para nada?; se siente estancado y no logra canalizar su esfuerzo para poder ofrecer algo a los suyos o al mundo.
8. Integridad del yo frente a la Desesperación. Este estadio se produce desde los 60 años hasta la muerte.
Es un momento en el que el individuo deja de ser productivo, o al menos no produce tanto como era capaz anteriormente. Una etapa en la que la vida y la forma de vivir se ven alteradas totalmente, los amigos y familiares fallecen, uno tiene que afrontar los duelos que causa la vejez, tanto en el propio cuerpo como en el de los demás.
Pocas fórmulas de la psicología son tan eficaces como ésta de Erikson para entender cuánto hemos desarrollado en cada persona la esperanza y confianza en la primera infancia hasta los 18 meses (hope), el deseo y la autonomía (will) en la infancia hasta los 3 años, la iniciativa y el propósito (purpose) hasta los 5 años, la laboriosidad y la competencia (competency) hasta los 13 años, la identidad y la fidelidad (fidelity) en la adolescencia hasta los 21 años, las relaciones personales íntimas y el amor (love) hasta los 39 años, la generatividad y el legado (care) hasta los 65 años o más y, finalmente, la sabiduría y la integridad del yo o plenitud (wisdom).
Las ocho preguntas clave en el desarrollo psicosocial de Erik Erkson:
Can I trust others? / ¿Puedo confiar en los demás?
Am I independent? / ¿Soy independiente?
Can I do what I want? / ¿Puedo hacer lo que quiero?
Am I capable o competent? / ¿Soy capaz o competente?
Do I know who I am? / ¿Sé quién soy?
Do I have close relationships? / ¿Mantengo relaciones cercanas?
Have I made a difference to others? / ¿He cambiado algo el mundo para los demás?
Has my life been meaningful? / ¿Ha tenido sentido mi vida?
El Efecto Forer (también llamado falacia de validación personal o Efecto Barnum, por P. T. Barnum) en psicología se refiere al fenómeno o evento que ocurre cuando los individuos dan altos índices de acierto a descripciones de su personalidad que supuestamente se adaptan específicamente para ellos, pero en realidad son vagas y lo suficientemente genéricas como para aplicarse a una amplia gama de personas.
Este Efecto Forerpuede proporcionar una explicación parcial de la aceptación generalizada de algunas falsas creencias y prácticas, tales como la astrología, la adivinación, la lectura del aura y algunos tipos de tests de personalidad. Todos esos horóscopos que "parecen" conocerte tan bien, recurren a este truco de baja estofa para engañarte por tu credulidad.
Ejemplo en español de una descripciones que define a cualquier persona.
En 1948, el psicólogo Bertram R. Forer hizo una prueba de personalidad a sus alumnos y seguidamente les dio un análisis de personalidad, supuestamente basado en los resultados de la prueba. Invitó a cada uno de ellos a calificar el análisis en una escala de 0 (muy deficiente) a 5 (excelente), según se aplicara personalmente a cada uno de ellos: el promedio fue 4.26. Luego les reveló que a todos les había dado el mismo análisis que sigue, tan genérico que la mayoría pensó que les describía exactamente a cada individuo:
"Necesitas que otras personas te agraden y te admiren y, sin embargo, tiendes a ser crítico contigo mismo. Si bien tienes algunas debilidades de personalidad, generalmente eres capaz de compensarlas. Tienes una considerable capacidad no utilizada a la que no has recurrido su ventaja. Disciplinado y autocontrolado por fuera, tiende a ser preocupante e inseguro por dentro. A veces tienes serias dudas sobre si has tomado la decisión correcta o hecho lo correcto. Prefieres una cierta cantidad de cambios y varías y te sientes insatisfecho cuando te ves rodeado por restricciones y limitaciones. También te enorgulleces de ser un pensador independiente y no aceptas las declaraciones de los demás sin una prueba satisfactoria. Pero has encontrado imprudente ser demasiado franco al revelarte a los demás. A veces eres extrovertido, afable y sociable, mientras que otras veces eres introvertido, cauteloso y reservado. Algunas de tus aspiraciones tienden a ser poco realistas".