

Hay una ley de vida, cruel y exacta, que afirma que uno debe crecer o, en caso contrario, pagar más por seguir siendo el mismo. |
El papel natural del hombre del siglo XX es la angustia. |
Desde el momento en que un periódico se ocupa de algo, los hechos se pierden para siempre, incluso para los protagonistas. |
Antes las críticas exaltaban mi ego. Ahora exaltan mi billetera. |
El éxito es sólo la mitad de bonito cuando no hay nadie que nos envidie. |