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¿Puede aún la educación salvarnos del fascismo?

Vivimos un momento histórico inquietante. Por todo el mundo surgen movimientos ultranacionalistas y autoritarios que, sin remedar del todo los uniformes del siglo XX, retoman su retórica: odio al diferente, desprecio por el pluralismo, culto al líder mesiánico y autócrata. A este resurgir del fascismo —llamémoslo “neofascismo o tecnofeudalismo” — se le suma hoy un aliado inesperado y poderoso, la tecnología.

Las redes sociales se han convertido en cámaras de eco que refuerzan prejuicios y polarizan a la sociedad. Algoritmos opacos privilegian el contenido más emocional y divisivo. Herramientas de microtargeting permiten manipular a votantes con una precisión nunca vista, como reveló el escándalo de Cambridge Analytica. Y la desinformación, desde memes hasta deepfakes, erosiona la confianza en la idea misma de verdad.

Frente a este panorama, la pregunta es tan urgente como incómoda: ¿Está la educación a tiempo de evitar que nuestra democracia se hunda en un futuro despótico? Creo que la respuesta es sí, pero con condiciones.

Porque la educación sigue siendo, pese a todo, la mejor herramienta para combatir el dogmatismo y la manipulación. Puede (y debe) cultivar el pensamiento crítico, la alfabetización mediática, la empatía y el compromiso cívico. Pero la escuela actual a menudo se muestra rezagada: curricula rígidos, falta de formación docente en competencias digitales, poca discusión sobre ética tecnológica o historia del fascismo.

El filósofo Jason Stanley advierte en How Fascism Works (2018) que las democracias no se destruyen de la noche a la mañana, sino mediante la normalización del odio y el desprecio por la verdad. La educación puede detener este proceso, pero solamente si se transforma para estar a la altura del reto.

Hoy necesitamos enseñar a detectar falacias y narrativas manipuladoras con el mismo empeño con que enseñamos álgebra o gramática. Debemos formar a los estudiantes para que cuestionen el poder y se enfrenten a la desinformación con criterio y evidencia. Necesitamos docentes preparados para discutir de forma abierta y honesta temas difíciles, desde la historia de los totalitarismos hasta la ética de los algoritmos.

Pero no basta con reformar los contenidos: hace falta también un cambio en la forma de enseñar. Promover el debate, el trabajo colaborativo, el respeto por la diversidad de opiniones. Crear espacios donde el error sea parte del aprendizaje y no un estigma. En definitiva, construir ciudadanía democrática desde la escuela.

No es una tarea sencilla ni rápida. Pero hay ejemplos esperanzadores: Finlandia ha incorporado la alfabetización mediática contra la desinformación en todas sus etapas educativas. Organismos como la UNESCO o el Consejo de Europa han propuesto marcos de competencias cívicas para reforzar la resiliencia democrática.

Claro está, no podemos cargar todo el peso de la solución únicamente en la escuela. El periodismo también necesita mucha innovación para cumplir su función. Hace falta también una regulación democrática de las plataformas tecnológicas, que hoy operan con una lógica puramente comercial, premiando el contenido polarizante porque genera más clics. Hace falta una alianza entre estados, educadores y sociedad civil para construir un ecosistema informativo más sano.

Porque la amenaza de un nuevo fascismo no se presenta con botas militares, sino con memes virales, discursos seductores y una retórica de odio cuidadosamente optimizada para captar nuestra atención. La educación está, todavía, a tiempo de evitarlo. Pero el reloj avanza. Y el tiempo, ahora, cuenta.

Ojalá, al menos, nos asegurásemos que nuestros jóvenes al leído 1984 de Orwell,...
Siguiente post con La era de del capitalismo de vigilancia.   

Desiderata, el poema de Max Ehrmann que busca la felicidad

En estos tiempos que corren, de líderes locos y de electorados, aparentemente ignorantes y estúpidos que votan contra la ética solidaria e incluso contra sus propios intereses, ¡ah dónde quedó la polírica!, es el momento de volver a las esencias del movimiento hippie y de todo lo denostado como woke (posts). Y aquí surge el recuerdo de Desiderata y de su autor. Max Ehrmann fue un poeta y abogado estadounidense nacido en 1872 en Indiana. 

Su obra más famosa, Desiderata, es un poema escrito en 1927 que ofrece consejos sobre cómo vivir una vida plena y en paz. Aunque no fue ampliamente reconocido en vida, su poema ganó popularidad décadas después, especialmente en los años 60, cuando se convirtió en un símbolo del movimiento hippie.

El poema Desiderata invita a la reflexión sobre la vida y la felicidad. Algunos de sus mensajes clave incluyen:

Buscar la paz interior en medio del ruido y la prisa.
- Ser amable y sincero en las relaciones con los demás.
- Evitar comparaciones que puedan generar vanidad o amargura.
- Aceptar el paso del tiempo con gratitud y serenidad.
- Confiar en el universo, recordando que cada persona tiene un propósito (ikigai).

El poema ha sido traducido a múltiples idiomas y sigue siendo una fuente de inspiración para quienes buscan equilibrio y bienestar. 

Un doble repaso crítico sobre Inteligencia Artificial

Primero, un vídeo con las reflexiones del Profesor Ricardo Baeza-Yates: Al final, esta IA que conocemos es software y aparentemente sólo "regurgita" información. 

Segundo, el libro "Una teoría crítica de la inteligencia artificial" de Daniel Innerarity. El autor apuesta por una visión crítica-filosófica de la IA, sin caer en alarmismos ni utopías.  En la era de la gobernanza algorítmica, la IA delega decisiones humanas cotidianas y políticas, lo que cuestiona la esencia de la democracia y el autogobierno. Una teoría crítica de la inteligencia artificial es un ensayo profundo que invita a repensar la democracia en la era algorítmica, optando por una crítica estructural en lugar de respuestas simplistas.

Según Daniel Innerarity caben tres posibles respuestas:
  • Moratoria: Frenar temporalmente el desarrollo para ajustar regulaciones, aunque no es viable ni suficiente.
  • Ética: Aplicar códigos éticos, pero corre el riesgo de convertirse en un acompañamiento superficial.
  • Crítica política: Indagación filosófica profunda de las estructuras y premisas que sustentan la IA, más allá de lo normativo. 
Estructura del libro: Parte I analiza la razón algorítmica, comparándola con la inteligencia humana. Parte II: evalúa límites de la IA y propone un nuevo contrato social tecnofilosófico. Parte III: desarrolla una filosofía política que ubica la IA dentro de un sistema democrático interactivo.

Conclusión: Aboga por no rendirse ante los automatismos tecnológicos, sino por construir una gobernanza equilibrada que combine control humano y automatización responsable. La IA puede fortalecer la democracia si se reflexiona adecuadamente sobre sus usos y límites.

Daniel Innerarity,   Bilbao, 1959 es catedrático y ensayista en filosofía política y social. e Investigador Ikerbasque en la Universidad del País Vasco. Director del Instituto de Gobernanza Democrática. Titular de la cátedra “Artificial Intelligence & Democracy” en el Instituto Universitario Europeo de Florencia.  Ha sido profesor invitado en Sorbona (París), LSE (Londres), Georgetown, Max Planck de Heidelberg, entre otros. En su obra destacan análisis sobre democracia, globalización, crisis modernas, hospitalidad y ahora IA . 

Gaza: Un genocidio flagrante ante la mirada cómplice del mundo

Este es un modesto blog personal, pero hemos de sumarnos a las denunciar por el genocidio de Gaza junto a organismos internacionales y expertos en derechos humanos sobre la situación de limpieza étnica sistemática en GazaDesde octubre de 2023, la Franja de Gaza ha sido escenario de una devastadora ofensiva militar por parte de Israel, resultando en la muerte de más de 53.000 personas, incluidos más de 16.000 niños. Esta tragedia ha llevado a expertos y organismos internacionales a calificar estos actos como genocidio.

Francesca Albanese, relatora especial de la ONU para los Territorios Palestinos Ocupados, ha presentado informes detallando que Israel ha cometido actos genocidas, como causar graves daños físicos y mentales a los palestinos, infligir condiciones de vida destinadas a su destrucción física y adoptar medidas para impedir nacimientos dentro del grupo. 

Organizaciones como Amnistía Internacional y Human Rights Watch han respaldado estas afirmaciones, documentando asesinatos masivos, destrucción de infraestructuras esenciales y bloqueos que impiden el acceso a ayuda humanitaria, exacerbando la crisis humanitaria en la región. 

La Corte Internacional de Justicia ha reconocido la plausibilidad de que se esté cometiendo un genocidio en Gaza, emitiendo medidas cautelares para prevenir actos genocidas y garantizar la entrega de ayuda humanitaria. 

A pesar de estas denuncias, la respuesta internacional ha sido insuficiente. Mientras algunos países han comenzado a reconsiderar sus relaciones con Israel, otros continúan proporcionando apoyo militar y político, perpetuando la impunidad. 

Es imperativo que la comunidad internacional actúe con decisión para detener este genocidio, garantizar la rendición de cuentas y proteger los derechos fundamentales del pueblo palestino, así como los del pueblo judío. El silencio y la inacción no son opciones ante esta tragedia humanitaria.

    Las pequeñas virtudes arruinan las grandes, de Natalia Ginzburg

    "Las pequeñas virtudes" (leer en PDF) es una obra escrita por la autora italiana Natalia Ginzburg, publicada por primera vez en 1962. Se trata de un conjunto de ensayos autobiográficos y reflexivos, escritos entre 1944 y 1960, en los que Ginzburg combina experiencias personales con observaciones sobre la vida, el amor, la educación y la sociedad.

    El libro está compuesto por once ensayos, cada uno independiente pero unidos por un tono íntimo, sobrio y a la vez profundamente humano. Ginzburg explora temas cotidianos, pero con una mirada que revela aspectos universales de la experiencia humana.

    Entre los ensayos más destacados están:

    - "El zapato roto": Reflexión sobre la pobreza y la dignidad, a través de imágenes de la posguerra.
    - "Retrato de un amigo": Homenaje al escritor Cesare Pavese, con quien tuvo una estrecha amistad. 
    "Las pequeñas virtudes" (último ensayo que da nombre al libro): Una crítica a la educación que enfatiza virtudes "menores" (como la prudencia, la obediencia, el ahorro), en lugar de fomentar las grandes virtudes como la generosidad, el coraje o la pasión por la verdad.

    En este ensayo central, Natalia Ginzburg sostiene que educar solo en "pequeñas virtudes" forma personas temerosas y conformistas, mientras que las "grandes virtudes" permiten vivir con más plenitud y sentido ético.

    Natalia Ginzburg (1916–1991) fue una escritora, ensayista y política italiana. Su obra abarca desde la novela hasta el ensayo, con un estilo sobrio, directo y lleno de humanidad. Fue miembro activa de la resistencia antifascista y vivió de cerca la persecución política (su esposo, Leone Ginzburg, fue asesinado por los nazis).

    Su literatura destaca por su mirada lúcida sobre las relaciones humanas, el dolor, la memoria y los vínculos familiares. "Las pequeñas virtudes" es una de sus obras más conocidas y representa bien su capacidad de abordar lo íntimo desde una perspectiva social y ética.

    Natalia Ginzburg (1916–1991) fue una escritora, ensayista y política italiana. Su obra abarca desde la novela hasta el ensayo, con un estilo sobrio, directo y lleno de humanidad. Fue miembro activa de la resistencia antifascista y vivió de cerca la persecución política (su esposo, Leone Ginzburg, fue asesinado por los nazis).

    Su literatura destaca por su mirada lúcida sobre las relaciones humanas, el dolor, la memoria y los vínculos familiares. "Las pequeñas virtudes" es una de sus obras más conocidas y representa bien su capacidad de abordar lo íntimo desde una perspectiva social y ética.

    Rogamos la lectura completa, pero destacamos algunas de sus mejores citas:

    -"Las pequeñas virtudes no deben enseñarse, sino que deben derivarse de las grandes. Enseñar las pequeñas virtudes significa hacer del cálculo la base de la vida. Debemos enseñarles el amor por la vida, no el temor al dolor."

    - "No debemos enseñar a nuestros hijos el ahorro, sino la generosidad. Debemos enseñarles el valor, no la prudencia. Es mejor enseñar a los hijos a no tener miedo del fracaso, a no avergonzarse del fracaso."  

    "Los padres no debemos mirar a nuestros hijos como algo que nos pertenece. Somos los padres quienes pertenecemos para siempre a los hijos."

    - "Los niños se educan observando, no oyendo nuestras palabras. La costumbre de la generosidad, del abandono, de no calcular, no se enseña, se vive. Queremos que nuestros hijos estén preparados para la vida, pero no hay preparación posible fuera del vivir mismo.

    Las Pequeñas Virtudes Natalia Ginzburg by Cristobal Florenzano

    La atención es generosidad silenciosa en un mundo acelerado

    Simone Weil, filósofa y mística, decía que “la atención es la forma más rara y pura de generosidad. Muy pocas mentes son capaces de descubrir que las cosas y los seres existen”. En un mundo saturado de estímulos en cada momento, detenerse a mirar, escuchar o sentir se ha convertido en un acto casi revolucionario. Prestar atención plena es regalar tiempo y cuidado sin esperar nada a cambio. Este simple acto es un modo de amar y de respetar profundamente al otro. Como apunta un análisis reciente, nuestra atención “da valor a las cosas; lo que atendemos se convierte en lo que importa” . Al dirigir nuestro foco con intención, otorgamos significado a lo cotidiano y hacemos sentir a los demás que existen en nuestra vida.

    Atención en tiempos acelerados: La avalancha de mensajes y tareas diarias nos arrastra con facilidad. Simone Weil nos recuerda que al prestar atención elegimos qué lugar ocupan las personas y las cosas en nuestra existencia. En palabras de una experta, la atención es una energía sutil que da forma a nuestras vidas: “lo que miramos, lo que sentimos, lo que decidimos que importa… todo nace de nuestra capacidad de prestar atención” . En otras palabras, cada vez que atendemos a alguien o algo, lo validamos y lo hacemos crecer. Por eso la atención es un recurso tan valioso: convertir lo invisible en visible. En un mundo de prisas, la decisión de enfocarnos es un gesto de rebeldía contra la distracción generalizada. Es el hilo invisible que une lo que amamos y lo que soñamos, y lo transforma en algo real.

    Atención: generosidad y amor. Prestar atención al otro es una forma de amor que humaniza la relación. No basta con dirigir la mirada; hay que detenerse, escuchar y hacer sentir al otro que tiene un lugar en nuestra vida . Cuando hablamos con alguien, renunciar al celular para mirarlo a los ojos es un regalo de respeto. Escuchar en silencio los miedos o alegrías de un amigo sin ofrecer consejos inmediatos es un acto de compasión. En ese gesto humilde reconocemos la dignidad ajena. 

    Simone Weil sostenía que este tipo de atención desinteresada equivale a una oración laica, un modo de orientarnos hacia lo divino que todos llevamos dentro . Al eliminar el “yo” del centro, la atención pura crea espacio para la presencia del otro o incluso de algo superior. Tal como escribía Weil, cada ejercicio de concentración disciplinada –sea resolver un problema o leer un texto– “se convierte en oración” cuando lo practicamos con verdadero deseo de verdad . La atención así entendida es iluminación mutua: nos abre a la belleza del mundo y a la profundidad de las personas a nuestro alrededor.

    La atención en la vida cotidiana tiene poder transformador en lo pequeño y lo rutinario. Ejemplos sencillos muestran su alcance:

    • Escuchar sin interrupciones a un familiar o colega cuando habla de su día. Un silencio atento puede ser la mejor medicina para quien necesita contarse.
    • Mirar a los ojos con interés durante una conversación. Con solo enfocar la mirada y asentar con la cabeza se puede entregar apoyo y cercanía.
    • Ayudar con plena presencia: acompañar a una persona enferma o compartir una comida sin apuros. Estar ahí, sin prisa, es a veces el mejor regalo.
    • Observar la naturaleza o el arte con calma. Ver el amanecer o leer un poema con atención nos reconecta con lo esencial y expande el corazón.
    • Cultivar la atención a uno mismo, descansando el cuerpo y la mente. Cerrar los ojos unos minutos, respirar conscientemente o meditar son prácticas de auto-regalo que luego multiplicamos hacia afuera.

    Estos gestos cotidianos de atención son formas discretas de generosidad. No se trata de grandes sacrificios, sino de presencia: ofrecer un poco de nuestro tiempo y de nuestra escucha genuina. Así manifestamos amor, respeto y responsabilidad ética. En cada detalle la atención crea un puente entre las personas y revela que el otro importa.

    Conclusión inspiradora: Entender la atención como un acto de amor y de autenticidad nos invita a un cambio profundo. Simone Weil nos desafía a ver la atención no como algo mundano, sino como un camino ético y espiritual. Cada instante que damos con plena conciencia es un regalo: a los demás, al mundo y a nosotros mismos. Cultivar la atención transforma nuestras relaciones y nutre el alma. Al final, lo que más regala la vida son momentos de verdadera conexión: un silencio compartido, una escucha atenta, una mirada compasiva. Practicar la atención nos recuerda que estamos juntos en este viaje y que amar, en definitiva, es prestar la mejor de nuestras presencias.

    ¿Y si Caín tuviera razón? Abel, una novela sobre la libertad

    Nos referimos al libro “Abel” del escritor italiano Alessandro Baricco (@bariccoale). Podría titularse  “El silencio de Dios y el grito del hermano: la tragedia de Caín contada desde la herida” Es una novela breve y poética en la que se reinventa el relato bíblico de Caín y Abel, pero se hace con un giro profundo y contemporáneo. 

    La historia es narrada por Caín, el hermano que, según la tradición, mató a Abel. Sin embargo, aquí no se presenta como un villano, sino como alguien que intenta comprender el misterio de su hermano y la razón por la que Dios lo prefería. Baricco nos ofrece un relato introspectivo, simbólico y filosófico, donde Abel no es simplemente una víctima inocente, sino una figura casi enigmática, casi divina, que desconcierta a todos a su alrededor, incluido su propio hermano. 

    La narración Abel cuestiona la lógica de Dios, el sentido del sacrificio, la naturaleza del amor fraternal, y el dolor de ser ignorado. El estilo de Baricco es sobrio, lírico y cargado de significado. Más que una historia lineal, es una meditación sobre el bien, el mal, el misterio de la elección divina y la soledad del ser humano frente al absoluto.

    En esta reinterpretación, Abel no es solo un hermano bueno e inocente, como en el relato bíblico tradicional. Baricco lo presenta como una figura casi mística, impenetrable y pura, pero también incomprensible y hasta perturbadora para quienes lo rodean. No habla mucho, pero su sola presencia descoloca. Parece tener una conexión directa con lo divino, lo que genera en Caín una mezcla de admiración, frustración y dolor. Abel representa la gracia inexplicable, la elección que no se justifica, el misterio del por qué algunos son “amados por Dios” sin que lo merezcan más que otros. En ese sentido, no es tanto una víctima, sino un símbolo de lo inalcanzable, lo que despierta preguntas más que respuestas. 

    Caín es quien narra la historia, y en esta versión, su figura está profundamente humanizada. No es simplemente un asesino envidioso, sino alguien que no logra entender por qué no es suficiente, por qué su esfuerzo no es reconocido, por qué su hermano es amado sin explicación. Vive en un estado de dolor, desconcierto y marginalidad, viendo cómo su hermano encarna algo que él jamás podrá alcanzar. La relación entre ambos es profundamente asimétrica: Caín necesita comprender a Abel, pero Abel nunca parece necesitar comprender a Caín. Eso crea una tensión casi existencial, que va creciendo hasta la tragedia final, que no es solo un acto de violencia, sino una reacción desesperada ante lo incomprensible. 

    En resumen, Baricco no narra un crimen pasional, sino un drama existencial, donde Abel simboliza lo divino y lo inexplicable, y Caín representa al ser humano común que, por no poder comprender el misterio, termina destruyéndolo. 

    Alessandro Baricco nació el 25 de enero de 1958, en Turín, Italia. Escritor, ensayista, dramaturgo, director de cine y músico Alessandro Baricco es uno de los escritores italianos más reconocidos de las últimas décadas. Se hizo famoso con su novela “Seda” (Seta, 1996), traducida a más de 30 idiomas y adaptada al cine. Sus obras combinan belleza literaria, reflexión filosófica y una sensibilidad muy particular. También ha trabajado como guionista, crítico musical y ha dirigido películas. 

    Alessandro Baricco es fundador de la Scuola Holden, una prestigiosa escuela de escritura en Turín. Sus novelas más conocidas incluyen Seda, Océano mar, City y Mr. Gwyn. Su estilo mezcla lo clásico con lo contemporáneo, siempre explorando las emociones humanas con un lenguaje elegante y accesible. 

    La teoría de la estupidez: Enemigo silencioso peor que la maldad

    El teólogo y filósofo alemán Dietrich Bonhoeffer desarrolló la "teoría de la estupidez", una reflexión sobre cómo la irracionalidad y la falta de pensamiento crítico pueden ser más peligrosas que la maldad misma. Según Bonhoeffer, la estupidez no es simplemente una falta de inteligencia, sino una condición social en la que las personas se vuelven incapaces de razonar y cuestionar la realidad, especialmente bajo regímenes autoritarios o en momentos de crisis.

    Dietrich Bonhoeffer argumentaba que:

    La estupidez es más dañina que la maldad, porque mientras la malicia puede ser combatida con la razón, la idiotez es inmune a los argumentos y la lógica.

    Las personas no son estúpidas por naturaleza, sino que se vuelven estúpidas en masa, cuando se someten a ideologías extremas o a líderes autoritarios.

    Los estúpidos actúan con convicción y sin cuestionar, lo que los hace aún más peligrosos, pues creen ciegamente en lo que hacen.

    Algunos casos de la teoría de la estupidez a lo largo de la historia y en la actualidad:

    Nazismo y totalitarismos: Bonhoeffer desarrolló su teoría observando el ascenso de Adolf Hitler y cómo personas educadas aceptaban sin cuestionar el régimen nazi.

    Desinformación y redes sociales: En la era digital, la difusión de noticias falsas y teorías conspirativas es un ejemplo de cómo la estupidez colectiva puede ser manipulada.

    Fenómenos de fanatismo político o religioso: Grupos que siguen ideologías sin cuestionarlas, rechazando cualquier evidencia contraria, son ejemplos de la teoría en acción.

    Dietrich Bonhoeffer (1906-1945) fue un pastor luterano y activista alemán que se opuso abiertamente al nazismo. Desde el inicio del Tercer Reich, criticó a Hitler y participó en la Resistencia Alemana, incluso en un complot para asesinar al dictador. Por sus actividades en contra del régimen, fue arrestado en 1943 y finalmente ejecutado en 1945 en un campo de concentración, pocos días antes de la caída del nazismo. 

    Su legado sigue vigente en la teología, la ética y el pensamiento filosófico sobre la moral y la resistencia al mal. Todo esto enlaza con "Las cinco leyes de la estupidez humana" formuladas por el historiador y economista italiano Carlo M. Cipolla en un ensayo satírico titulado Las leyes fundamentales de la estupidez humana. Estas leyes explican cómo la estupidez colectiva influye en la sociedad y por qué es tan peligrosa. Pero esto lo detallaremos en un próximo post.

    Tiken Jah Fakoly: Plus rien ne m'étonne, el reggae del momento

    La canción tiene muchos años, pero describe a la perfección lo inexplicable que vivimos ahora. Además proviene de una visión desde Áfricacuando desde Europa parecemos acongojarnos con la incertidumbre que siempre ha devastado otros continentes, como las arbitrarias divisiones de las secuelas coloniales.  

    La versión coral con 850 participantes del vídeo inicial es del año pasado, 2024. Tiken Jah Fakolyaunque su nombre verdadero es Doumbia Moussa Fakoly, es uno de los cantantes de reggae (ver otros posts) más emblemáticos de África, nacido en 1968 en Aboisso, Costa de Marfil. Su música se caracteriza por letras profundamente políticas y sociales, en las que denuncia la corrupción, la opresión y las injusticias que afectan tanto a su país como al mundo. Desde sus inicios en la década de 1990, Fakoly se ha destacado por utilizar su arte como herramienta de protesta y llamado a la transformación social, ganándose el respeto de seguidores y activistas en diversos continentes.

    La canción "Plus rien ne m'étonne" (que se traduce como “Nada me sorprende ya”) es un claro reflejo de su visión crítica. En este tema, Fakoly expresa su desilusión ante un entorno en el que las injusticias y la corrupción se han vuelto la norma. Con un tono que mezcla resignación y denuncia, la canción se convierte en un himno para quienes sienten que la indiferencia y el abuso de poder han dejado de sorprender, marcando un punto de quiebre emocional ante la repetición de hechos lamentables en la sociedad.

    La canción, interpretada en francés, encarna la visión crítica y comprometida del autor, quien ha usado el reggae como vehículo para denunciar abusos de poder y desigualdades tanto en África como a nivel global. En cuanto a su origen y fecha, la canción forma parte del vasto repertorio de Fakoly, cuya carrera se consolidó en la década de 1990 y se ha mantenido activa en los años posteriores. Aunque las fuentes varían en cuanto a la fecha exacta de lanzamiento, "Plus rien ne m'étonne" se enmarca en una etapa madura de su producción musical, cuando ya había afianzado su estilo y compromiso político. 

    Grabada en el contexto de su trabajo habitual, influido tanto por su país natal, Costa de Marfil, como por las realidades políticas y sociales internacionales, la canción refleja el sentir de una generación cansada de las promesas incumplidas y la impunidad. En resumen, "Plus rien ne m'étonne" es una obra que no solo denuncia el estado actual del poder y la corrupción, sino que también se erige como un himno de resignación y protesta en una época en la que la injusticia ya no conmueve.

    Con su inconfundible estilo que fusiona el reggae con ritmos y sensibilidades africanas, Tiken Jah Fakoly ha logrado inspirar a una generación que busca el cambio y la justicia, convirtiéndose en un referente mundial del compromiso político y social a través de la música.

    Vídeo de hace años, subtitulado al español.

    Careless People: Secretos escondidos dentro de Facebook

    "Careless People: A Cautionary Tale of Power, Greed, and Lost Idealism" es un libro de memorias escrito por Sarah Wynn-Williams, exdirectora de políticas globales de Facebook. En esta obra, cuyo título traducido sería "Personas descuidadas: Una historia con moraleja sobre el poder, la codicia y el idealismo perdido", Wynn-Williams relata sus experiencias durante sus seis años en la compañía, ofreciendo una visión crítica de la cultura corporativa y las prácticas internas de la empresa.

    El libro expone cómo Facebook, inicialmente percibido como una herramienta transformadora para el bien, evolucionó hacia una entidad enfocada en el poder y las ganancias, a menudo a expensas de la ética y la responsabilidad social. 

    Wynn-Williams describe un entorno laboral tóxico, caracterizado por liderazgo inmaduro, hipocresía y casos de acoso. Además, aborda la indiferencia de la compañía ante problemas globales, como la propagación del discurso de odio en países en desarrollo, destacando el caso de Myanmar, donde la plataforma facilitó la incitación a la violencia. La autora también critica la falta de atención de Facebook hacia la salud mental de los adolescentes y otros problemas sociales derivados de sus políticas. En síntesis, la autora denuncia:

    - Cultura corporativa tóxica: Wynn-Williams describe un ambiente laboral en Facebook donde los líderes, incluyendo a Mark Zuckerberg y Sheryl Sandberg, mostraban comportamientos egocéntricos y una falta de responsabilidad en la gestión de la empresa.

    - Manejo de crisis internacionales: El libro destaca cómo Facebook ignoró advertencias sobre el uso de la plataforma para propagar discursos de odio en países como Myanmar, lo que contribuyó a situaciones de violencia y genocidio. ​

    - Intervención en procesos electorales: Se revela la participación de empleados de Facebook en la campaña electoral de 2016 en Estados Unidos, ayudando a segmentar votantes con anuncios que contenían desinformación y contenido inflamatorio. ​

    - Comportamientos inapropiados de la alta dirección: La autora expone incidentes de mala conducta por parte de altos ejecutivos, incluyendo solicitudes inapropiadas y comportamientos que reflejan una cultura empresarial problemática.

    Sarah Wynn-Williams es una diplomática experimentada, experta en políticas y abogada internacional originaria de Nueva Zelanda. Antes de unirse a Facebook, gestionó asuntos políticos y relaciones gubernamentales en la embajada de Nueva Zelanda en Washington D.C. entre 2007 y 2011. También se desempeñó como asesora de políticas en el gobierno de Nueva Zelanda, enfocándose en temas de medio ambiente, sostenibilidad y seguridad, y trabajó en la ratificación de tratados internacionales complejos. Durante este período, fue nombrada negociadora principal de las Naciones Unidas en materia de responsabilidad sobre bioseguridad. 

    El libro Careless People ha generado controversia y atención mediática, especialmente después de que Meta (anteriormente Facebook) intentara prohibir su promoción, lo que paradójicamente aumentó su popularidad y lo llevó a encabezar las listas de bestsellers. 

    Lecciones de Esopo hace más de 2500 años

    Esopo (ver en otros varios postsfue un fabulista de la Antigua Grecia (siglo VI a.C.), aunque su existencia no está completamente confirmada. Se dice que nació como esclavo y, gracias a su inteligencia y habilidad para contar historias, obtuvo su libertad.

    Se le atribuyen cientos de fábulas con moralejas, aunque no dejó escritos propios; sus relatos fueron recopilados siglos después por autores como Fedro y Babrio.

    Según algunas leyendas, murió trágicamente en Delfos, acusado injustamente de un crimen y arrojado desde un acantilado. 

    Las Fábulas de Esopo son relatos cortos protagonizados por animales con características humanas, enseñando lecciones morales. Algunas de las más famosas incluyen:

    Su legado inspiró a escritores posteriores como Fedro, fabulista latino del siglo I, Babrio, fabulista romano de lengua griega de los siglos II y III, Avianus, poeta latino del siglo IV, Yalal ad-Din Rumi, místico y poeta persa del siglo XIII, María de Francia, poetisa del siglo XII o Jean de La Fontaine en el siglo XVII. Y sigue siendo una referencia en la literatura infantil y la enseñanza moral.

    Amor fosilizado, lo más humano desde la prehistoria

    Corren tiempos difíciles, cuando nos preguntamos cómo hay adultos que votan por líderes que no son solidarios, ni casi humanos, por su modo de gobernar contra sus semejantes,... Pero la grandeza del ser humano radica en actuar de modo diferente al resto de especias vivas, desde el presente y desde hace medio millón de años. 

    Así nos lo recuerda el paleontólogo Ignacio Martínez Mendizábal cuando le piden elegir entre los fósiles que ha descubierto su equipo en Atapuerca, algo que es como elegir entre los hijos. Sin embargo, recuerda a tres cráneos que supusieron un antes y un después en su carrera. Entre ellos, la pequeña "Benjamina", la más querida, la que demostró que la humanidad entendida como altruismo se remonta a la Prehistoria y es el primer ejemplo de "amor fosilizado".

    Licenciado en Biología Evolutiva y Antropología, con una incansable curiosidad por desentrañar los orígenes del ser humano, Ignacio Martínez Mendizábal ha sido pieza clave en el descubrimiento de fósiles que redefinieron nuestra comprensión de las primeras migraciones y del comportamiento del ‘Homo antecessor’. Catedrático de Antropología Física en la Universidad de Alcalá (Madrid), su nombre está estrechamente vinculado a los hallazgos en los yacimientos de Atapuerca (Burgos), desde 1984. 

    Entre sus descubrimientos destacan restos óseos que evidencian el desarrollo temprano del pensamiento simbólico, la colaboración y la vida prehistórica en comunidad, que le llevó a recibir junto a su equipo el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica en 1997. Los llamados "Cráneo 4" (Agamenón), "Cráneo 5" (Miguelón) y "Benjamina" fueron algunos de los grandes hitos de su trabajo, que contribuyeron a entender mejor a nuestros ancestros. "Nunca pensé, en mi carrera como paleontólogo, que me iba a encontrar el amor fosilizado, porque eso es lo que es Benjamina, el amor fosilizado, que habla de lo mejor de las personas. Algo que científicamente es muy interesante porque Darwin pensaba que el amor había sido uno de los motores de la evolución humana", describe.

    Ignacio Martínez Mendizábal es autor de obras como 'El primate que quería volar', una reflexión sobre la evolución humana narrada de manera accesible y cautivadora, y coautor de los libros 'La especie elegida' y 'Amalur: Del átomo a la mente', en colaboración con Juan Luis Arsuaga, que ofrecen una mirada divulgativa sobre la evolución y la relación del ser humano con la naturaleza. El compromiso con la vocación científica del paleontólogo ha contribuido no solo al avance del conocimiento antropológico, sino también a inspirar el interés por la ciencia en las nuevas generaciones, a quienes aspira a dejar su ejemplo como legado.

    Vídeo completo, a continuación