"Sólo hay dos clases de personas: Las que mantienen un blog y las que lo mantendrán". Creo, modestamente, quizá,... |
¿Todavía SIN blog?
Listado de 25 países SIN ejército
1 Andorra, su defensa es responsabilidad de Francia o España.
2 Costa Rica, su constitución prohíbe el ejército en tiempo de paz desde 1949.
3 República Dominicana sin ejército desde que en 1981 intentase un golpe de Estado.
4 Granada desde 1983, tras la invasión de los EE.UU.
5 Haiti, desmontado desde Junio de 1995.
6 Islandia, desde 1859.
7 Japan, sólo unas fuerzas de autodefensa.
8 Kiribati.
9 Liechtenstein, abolido desde 1868 porque era demasiado costoso.
10 Marshall Islands.
11 Mauritiana.
12 Micronesia.
13 Monaco, renunció desde el siglo XVII.
14 Nauru, su defensa es responsabilidad de Australia.
15 Palau, su defensa es responsabilidad de EE.UU.
16 Panama, abolido el ejército desde 1990.
17 San Marino.
18 Islas Solomon.
19 Saint Kitts and Nevis..
20 Saint Lucia.
21 Saint Vincent and the Grenadines.
22 Samoa, su defensa es responsabilidad de Nueva Zelanda.
23 Tuvalu.
24 Vanuatu.
25 Ciudad del Vaticano.
2 Costa Rica, su constitución prohíbe el ejército en tiempo de paz desde 1949.
3 República Dominicana sin ejército desde que en 1981 intentase un golpe de Estado.
4 Granada desde 1983, tras la invasión de los EE.UU.
5 Haiti, desmontado desde Junio de 1995.
6 Islandia, desde 1859.
7 Japan, sólo unas fuerzas de autodefensa.
8 Kiribati.
9 Liechtenstein, abolido desde 1868 porque era demasiado costoso.
10 Marshall Islands.
11 Mauritiana.
12 Micronesia.
13 Monaco, renunció desde el siglo XVII.
14 Nauru, su defensa es responsabilidad de Australia.
15 Palau, su defensa es responsabilidad de EE.UU.
16 Panama, abolido el ejército desde 1990.
17 San Marino.
18 Islas Solomon.
19 Saint Kitts and Nevis..
20 Saint Lucia.
21 Saint Vincent and the Grenadines.
22 Samoa, su defensa es responsabilidad de Nueva Zelanda.
23 Tuvalu.
24 Vanuatu.
25 Ciudad del Vaticano.
Bien a mi pesar, la idea del infinito me atormenta
"Solo hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana. Y no estoy tan seguro de la primera." |
Albert Einstein |
Las vueltas que da la vida
"El éxito es: A los 3 años, ….. no mearse. A los 6 años,….. recordar lo que hiciste en el día. A los 12 años,… tener muchos amigos. A los 18 años,… tener licencia de conductor. A los 20 años,… tener relaciones sexuales. A los 35 años,… tener mucho dinero. A los 50 años,… tener muchísimo dinero. A los 65 años,… mantener relaciones sexuales. A los 70 años,… mantener licencia de conductor. A los 75 años,… mantener muchos amigos. A los 80 años,… recordar lo que hiciste en el día. A los 85 años,… no mearse." |
Dicen... |
En defensa de los vascos y de… la humanidad
Leo con estupor, y rebotado a través de la web, un “artículo” bajo el título de “El silencio de los corderos”, de José Luis de Vilallonga, publicado en LA VANGUARDIA el pasado 10/06/2002.
No puedo reproducir todo el contenido del artículo, ni menos aún el rebosante odio que destila, no ya hacia determinados políticos democrática y legalmente elegidos (a quienes califica de esperpénticos, escurridizos, de llevar pintado en el rostro el parentesco genético con las ratas de alcantarilla, asesinos, instigadores de crímenes…), sino sobre todos y cada uno de los vascos, simple y llanamente por ser ciudadanos nacidos en una tierra de la Tierra.
Los epítetos, literalmente reproducidos, califican a todos los vascos, nacionalistas o no, de gente cobarde, sin ninguna hombría (ni en las palabras ni en los actos) e, incluso, de pelmazos. Añade, que no son ni noblotes, ni honrados ni buena gente. Y termina con una máxima xenófoba “El Rhesus negativo del que tanto presumen los vascos es verdaderamente negativo”.
Mi intención no es descalificar este inaceptable artículo, y menos a su autor, que únicamente me provoca lástima y a quien sinceramente le deseo una rápida recuperación de su estado mental, anímico y espiritual.
El objetivo es denunciar que opiniones de esta catadura puedan ser publicados sin rubor, incluso en un periódico que, hasta esa fecha, hubiera catalogado como riguroso. “Rebuznos” (como dice el enfermizo que escribió esa soflama) de esta calaña actúan como “Opinion Makers” para la propagación de ideas violentas, racistas, fascistas, muy poco acordes con los valores éticos exigibles en una democracia.
Exijo una rectificación de este periódico, por atentar contra los vascos, y no sólo contra los vascos, sino con ello contra los españoles, los franceses, los europeos y la humanidad. No es admisible la descalificación genérica por razón de “raza” (sesgo en el que debe creer mucho este personaje). Le recuerdo el artículo 2, punto 1º, de la Declaración Universal de Derechos Humanos: “Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.”
Si se me permite, relataré una experiencia personal que, en alguien poco viajado como yo, me abrió los ojos sobre esta temática de comprensión del fenómeno del “terrorismo vasco” en función de la distancia. Por mi condición de educador tuve oportunidad de viajar por toda Europa hace ya algunos años. Por tratarse de visitas comunitarias lo habitual era reunirse en Madrid, desde diversas comunidades autónomas, y viajar luego al país de destino. Lo frecuente era, en Madrid, recibir como vasco la pregunta de ¿qué hacéis los vascos para solventar el problema del “terrorismo vasco”? Tratábamos de explicar nuestros esfuerzos. Pero luego, en Alemania o Bélgica, la pregunta era a toda la comitiva “española” en los términos de ¿qué hacen ustedes para solventar el problema de la violencia en España? Porque allí, el problema era de los “españoles”, no de los vascos, no de los nacionalistas, no de los fanáticos,… Al menos, allí nadie nos insultaba llamándonos cobardes por la mera condición de provenir de un determinado Estado.
Yo creo que los problemas y su solución, en este mundo globalizado, interconectado, y en este siglo XXI depende de todos nosotros. Nunca he comprendido que “a juicio de algunos” sólo los problemas son vascos. La única vasquidad que algunos nos reconocen se circunscribe a lo negativo, a lo problemático. Este perverso juego -de lo que para algunos es la parte y el todo- se aplica sin excepción: el terrorista, o incluso el político u obispo si es “malo”, resulta ser vasco (nunca español). Pero el filósofo, deportista,.. o lo que sea, si es “bueno” resulta “español”. Esto es racismo de 24 quilates.
Por último, un comentario sobre otra opinión vertida por el político y ex ministro de Educación Mariano Rajoy diciendo que la “educación vasca es lETAl”. Hasta el adjetivo letal, intencionadamente o no, pretender vincular la educación vasca con una organización criminal. ¿Esto es tolerable?
¿Un vicepresidente español puede deshonrar y difamar a más de un millón de progenitores y familias vascas, que por lo visto acuden y envían a sus hijos e hijas a un servicio público letal?
¿Se puede ultrajar a más de 40.000 miembros del profesorado y a medio millón de alumnos vascos?
¿Somos los profesores y profesoras vascas letales, mortíferos, nocivos?
Pero, como dice el Lehendakari, nosotros a lo nuestro, a educar por la Paz, la Tolerancia y la Convivencia. ¡Que Dios nos ayude!
Los epítetos, literalmente reproducidos, califican a todos los vascos, nacionalistas o no, de gente cobarde, sin ninguna hombría (ni en las palabras ni en los actos) e, incluso, de pelmazos. Añade, que no son ni noblotes, ni honrados ni buena gente. Y termina con una máxima xenófoba “El Rhesus negativo del que tanto presumen los vascos es verdaderamente negativo”.
Mi intención no es descalificar este inaceptable artículo, y menos a su autor, que únicamente me provoca lástima y a quien sinceramente le deseo una rápida recuperación de su estado mental, anímico y espiritual.
El objetivo es denunciar que opiniones de esta catadura puedan ser publicados sin rubor, incluso en un periódico que, hasta esa fecha, hubiera catalogado como riguroso. “Rebuznos” (como dice el enfermizo que escribió esa soflama) de esta calaña actúan como “Opinion Makers” para la propagación de ideas violentas, racistas, fascistas, muy poco acordes con los valores éticos exigibles en una democracia.
Exijo una rectificación de este periódico, por atentar contra los vascos, y no sólo contra los vascos, sino con ello contra los españoles, los franceses, los europeos y la humanidad. No es admisible la descalificación genérica por razón de “raza” (sesgo en el que debe creer mucho este personaje). Le recuerdo el artículo 2, punto 1º, de la Declaración Universal de Derechos Humanos: “Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.”
Si se me permite, relataré una experiencia personal que, en alguien poco viajado como yo, me abrió los ojos sobre esta temática de comprensión del fenómeno del “terrorismo vasco” en función de la distancia. Por mi condición de educador tuve oportunidad de viajar por toda Europa hace ya algunos años. Por tratarse de visitas comunitarias lo habitual era reunirse en Madrid, desde diversas comunidades autónomas, y viajar luego al país de destino. Lo frecuente era, en Madrid, recibir como vasco la pregunta de ¿qué hacéis los vascos para solventar el problema del “terrorismo vasco”? Tratábamos de explicar nuestros esfuerzos. Pero luego, en Alemania o Bélgica, la pregunta era a toda la comitiva “española” en los términos de ¿qué hacen ustedes para solventar el problema de la violencia en España? Porque allí, el problema era de los “españoles”, no de los vascos, no de los nacionalistas, no de los fanáticos,… Al menos, allí nadie nos insultaba llamándonos cobardes por la mera condición de provenir de un determinado Estado.
Yo creo que los problemas y su solución, en este mundo globalizado, interconectado, y en este siglo XXI depende de todos nosotros. Nunca he comprendido que “a juicio de algunos” sólo los problemas son vascos. La única vasquidad que algunos nos reconocen se circunscribe a lo negativo, a lo problemático. Este perverso juego -de lo que para algunos es la parte y el todo- se aplica sin excepción: el terrorista, o incluso el político u obispo si es “malo”, resulta ser vasco (nunca español). Pero el filósofo, deportista,.. o lo que sea, si es “bueno” resulta “español”. Esto es racismo de 24 quilates.
Por último, un comentario sobre otra opinión vertida por el político y ex ministro de Educación Mariano Rajoy diciendo que la “educación vasca es lETAl”. Hasta el adjetivo letal, intencionadamente o no, pretender vincular la educación vasca con una organización criminal. ¿Esto es tolerable?
¿Un vicepresidente español puede deshonrar y difamar a más de un millón de progenitores y familias vascas, que por lo visto acuden y envían a sus hijos e hijas a un servicio público letal?
¿Se puede ultrajar a más de 40.000 miembros del profesorado y a medio millón de alumnos vascos?
¿Somos los profesores y profesoras vascas letales, mortíferos, nocivos?
Pero, como dice el Lehendakari, nosotros a lo nuestro, a educar por la Paz, la Tolerancia y la Convivencia. ¡Que Dios nos ayude!
El dinero es la lámpara de Aladino
"Mirad al dinero por encima del hombro, pero jamás lo perdáis de vista". |
Sacha Guitry, 1885-1957, escritor francés de origen ruso. |
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