Más fuerte que un terremoto es sentir la caricia trémula de un corazón palpitante en estos tiempos de tiemblos.
¡Quién ha visto sin temblar, las noticias que nos dan! El mundo está temblando y nadie duerme tranquilo. Tsunamis, seísmos y guerras. Quieren estremecernos; aspiran a un mundo trepidante de personas temblorosas. Pretenden hacer temblar los cimientos de la civilización. Manejan mejor una humanidad que tiembla de miedo, de rabia, de soledad, de dolor, de enfermedad, de hambre o de frío.
Pero también hay temblores de amor. Hay pasiones vibrantes que sacuden el alma y que hacen retemblar el suelo bajo nuestros pies. Temblamos de alegría al recordar el último encuentro de enamorados; temblamos de deseo de sólo saber el próximo reencuentro; temblamos de emoción al vernos reflejados en una pupila parpadeante; temblamos de éxtasis al sentirnos cerca; temblamos de arriba a abajo cuando el amor vence al odio y la justicia destrona la iniquidad.
¡Aprendamos a temblar! Temblemos de querernos tanto y de sentirnos vivos. Temblemos de presentir la solidaridad y la libertad. Temblemos de aspirar a la felicidad y a la eternidad. Temblemos al vislumbrar la dignidad y la grandeza de todos los trémulos seres humanos. Sintámonos astros celestiales. ¡Somos estrellas que tiritan, titilan y tiemblan en el firmamento!
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/temblores.htm
Una persona importante
¿Eres un VIP (Very Important Person)? Quizá no sea tan difícil pertenecer a tan selecto club.
La importancia de una persona es difícil de medir. Pensamos que los más poderosos, los más acaudalados, los más famosos, los más cultos,… son los más importantes. Si nos preguntasen los nombres de los personajes más importantes del mundo, de inmediato pensamos en los principales políticos, los grandes empresarios, los Premios Nobel, los artistas exitosos,… Casi seguro no sabríamos cómo se escriben exactamente algunos nombres y probablemente esas personas pierdan toda su influencia en apenas unos años, pasando luego al olvido colectivo.
A pesar del tiempo transcurrido, siempre nos resulta fácil recordar con cariño el nombre de algún profesor que nos influyó decisivamente, el de algún amigo que nos ayudó en un momento crítico, el de alguna persona que nos acompañó en tiempos duros, o el nombre de un amor de infancia, de juventud, alguien de quien nos enamoramos y ojalá de quien sigamos enamorados.
Esas personas son especiales, nos hicieron y nos hacen sentirnos especiales; comparten su tiempo con nosotros, se preocupan de nosotros y determinan nuestra felicidad. Ésas son las personas más importantes, las auténticas VIP. Repasemos en qué listas VIP estamos y subamos puntos en cada uno de esos listados que elabora la gente que vive a nuestro alrededor.
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/importantes.htm
La importancia de una persona es difícil de medir. Pensamos que los más poderosos, los más acaudalados, los más famosos, los más cultos,… son los más importantes. Si nos preguntasen los nombres de los personajes más importantes del mundo, de inmediato pensamos en los principales políticos, los grandes empresarios, los Premios Nobel, los artistas exitosos,… Casi seguro no sabríamos cómo se escriben exactamente algunos nombres y probablemente esas personas pierdan toda su influencia en apenas unos años, pasando luego al olvido colectivo.
A pesar del tiempo transcurrido, siempre nos resulta fácil recordar con cariño el nombre de algún profesor que nos influyó decisivamente, el de algún amigo que nos ayudó en un momento crítico, el de alguna persona que nos acompañó en tiempos duros, o el nombre de un amor de infancia, de juventud, alguien de quien nos enamoramos y ojalá de quien sigamos enamorados.
Esas personas son especiales, nos hicieron y nos hacen sentirnos especiales; comparten su tiempo con nosotros, se preocupan de nosotros y determinan nuestra felicidad. Ésas son las personas más importantes, las auténticas VIP. Repasemos en qué listas VIP estamos y subamos puntos en cada uno de esos listados que elabora la gente que vive a nuestro alrededor.
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/importantes.htm
Sensaciones laborales
“Dejemos las prisas a los esclavos”, dijeron. “Ahora lo entiendo”, susurró uno de aquellos.
El trabajo, al igual que el ocio, ofrece diversidad de emociones. Frecuentemente, evocamos una imagen que representa nuestra tarea a la perfección: La del mago de los platillos rotatorios. Es un espectáculo que siempre nos fascinó a algunos, de pequeños y de mayores. El artista comienza pausadamente poniendo un primer plato sobre la varilla, y le imprime un giro que lo mantiene en el aire. Sigue añadiendo platos, con pausas para rotar a aquéllos que –al frenarse- parece que van a caer. Y continúa, con veinte o treinta discos en equilibrio precario, hasta que superado por la situación se le cae alguno. Entonces, confiando en que la primera rotura marque su récord, va recogiendo los restantes con la esperanza de minimizar los fallos y optimizar la función.
Habitualmente así empieza una jornada laboral. Al inicio, parece que será tranquila. Uno, dos o cinco temas (o platillos) bien vigilados y bajo control. Entonces, comienzan las llamadas, las urgencias y las sorpresas sobrevenidas. Manteniendo todo en vilo, evitamos las caídas estrepitosas. Casi siempre se consigue. A veces, no. Claro que las sensaciones extremas, cuando se prolongan, acaban por no sentirse. Ésa es nuestra esperanza. Al final, casi se le coge gusto a la celeridad, a la aceleración. Así aprendemos a diferenciar el vicio de la prisa respecto de la virtud de la actividad.
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/sensaciones.htm
El trabajo, al igual que el ocio, ofrece diversidad de emociones. Frecuentemente, evocamos una imagen que representa nuestra tarea a la perfección: La del mago de los platillos rotatorios. Es un espectáculo que siempre nos fascinó a algunos, de pequeños y de mayores. El artista comienza pausadamente poniendo un primer plato sobre la varilla, y le imprime un giro que lo mantiene en el aire. Sigue añadiendo platos, con pausas para rotar a aquéllos que –al frenarse- parece que van a caer. Y continúa, con veinte o treinta discos en equilibrio precario, hasta que superado por la situación se le cae alguno. Entonces, confiando en que la primera rotura marque su récord, va recogiendo los restantes con la esperanza de minimizar los fallos y optimizar la función.
Habitualmente así empieza una jornada laboral. Al inicio, parece que será tranquila. Uno, dos o cinco temas (o platillos) bien vigilados y bajo control. Entonces, comienzan las llamadas, las urgencias y las sorpresas sobrevenidas. Manteniendo todo en vilo, evitamos las caídas estrepitosas. Casi siempre se consigue. A veces, no. Claro que las sensaciones extremas, cuando se prolongan, acaban por no sentirse. Ésa es nuestra esperanza. Al final, casi se le coge gusto a la celeridad, a la aceleración. Así aprendemos a diferenciar el vicio de la prisa respecto de la virtud de la actividad.
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/sensaciones.htm
Temas electorales... para los franceses
La educación nos hace ser como somos y como seremos. Por ello es el factor decisivo para fabricar futuro.
Ante las próximas elecciones presidenciales en Francia, según las encuestas las cuestiones decisivas serán: Primer tema para el 66% de los votantes, la educación; para el 64%, el paro; para el 58%, la sanidad y el poder adquisitivo; para el 57%, las jubilaciones; para el 55%, la seguridad; para el 52%, el medio ambiente y para el 48%, los impuestos.
Con razón era francés el gran historiador Jules Michelet, quien señaló: “¿Cuál es la primera parte de la política? La educación. ¿Cuál la segunda? La educación. ¿Y la tercera? La educación”. ¡Ah, la France, qué cerca y qué lejos estás de nosotros!
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/franceses.htm
PRÉOCCUPATION PRINCIPALE, L'ÉDUCATION
L'éducation arrive en tête des sujets qui compteront lors de l'élection présidentielle pour les personnes interrogées : 66 % d'entre elles pensent que ce thème comptera beaucoup dans leur vote, juste avant le chômage (64 %). Suivent le financement du système de santé et le pouvoir d'achat (58 %), les retraites (57 %), la sécurité (55 %), la protection de l'environnement (52 %) et les impôts (48 %).
Ante las próximas elecciones presidenciales en Francia, según las encuestas las cuestiones decisivas serán: Primer tema para el 66% de los votantes, la educación; para el 64%, el paro; para el 58%, la sanidad y el poder adquisitivo; para el 57%, las jubilaciones; para el 55%, la seguridad; para el 52%, el medio ambiente y para el 48%, los impuestos.
Con razón era francés el gran historiador Jules Michelet, quien señaló: “¿Cuál es la primera parte de la política? La educación. ¿Cuál la segunda? La educación. ¿Y la tercera? La educación”. ¡Ah, la France, qué cerca y qué lejos estás de nosotros!
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/franceses.htm
PRÉOCCUPATION PRINCIPALE, L'ÉDUCATION
L'éducation arrive en tête des sujets qui compteront lors de l'élection présidentielle pour les personnes interrogées : 66 % d'entre elles pensent que ce thème comptera beaucoup dans leur vote, juste avant le chômage (64 %). Suivent le financement du système de santé et le pouvoir d'achat (58 %), les retraites (57 %), la sécurité (55 %), la protection de l'environnement (52 %) et les impôts (48 %).
¡Qué bello es vivir!
Aprendiendo de nuestros mayores que vivir es algo mágico e irrepetible. Gabriel Celaya lo resumió: “Vivir es fácil y, a veces, casi alegre”.
A veces, los educadores escuchamos de algún joven que no merece la pena vivir. Siempre nos sorprende y nos conmueve. En dos días seguidos, he oído dos declaraciones muy sentidas. Una, de desesperanza, de abandono, de renuncia, de deserción, por parte de una persona adolescente, en plenitud de salud, inteligente, capaz y con todo el futuro abierto. Simplemente se encontraba ante una situación que no controlaba, un pequeño contratiempo intrascendente, que pronto superará si no cae en la desesperación y no consuma algún error irreversible.
Pocas horas después, un viejo amigo me comentaba cómo su nonagenario padre se debate entre la vida y la muerte en un hospital. Sufre todo tipo de dolencias y achaques desde hace años, que han limitado toda su movilidad y le mantienen semiinconsciente. Pero cuando despierta y reconoce a su hijo, muy cabal, sólo le susurra: “Txetxu, qué bonita es la vida”.
No es el primer anciano que lo pregona. Son muchos los que proclaman: “Cada día creo que vivir me gusta más”. Quizás haga falta toda una vida de experiencia para comprenderlo. Con razón dicen que vivir es sentir, sin amarguras, todas las edades, hasta que llega la muerte. Sólo con la edad entendemos que vivir es recordarse, que vivir es decidir constantemente qué vamos a ser, ya sea en la siguiente década, en el próximo año o en el minuto postrero.
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/vivir.htm
A veces, los educadores escuchamos de algún joven que no merece la pena vivir. Siempre nos sorprende y nos conmueve. En dos días seguidos, he oído dos declaraciones muy sentidas. Una, de desesperanza, de abandono, de renuncia, de deserción, por parte de una persona adolescente, en plenitud de salud, inteligente, capaz y con todo el futuro abierto. Simplemente se encontraba ante una situación que no controlaba, un pequeño contratiempo intrascendente, que pronto superará si no cae en la desesperación y no consuma algún error irreversible.
Pocas horas después, un viejo amigo me comentaba cómo su nonagenario padre se debate entre la vida y la muerte en un hospital. Sufre todo tipo de dolencias y achaques desde hace años, que han limitado toda su movilidad y le mantienen semiinconsciente. Pero cuando despierta y reconoce a su hijo, muy cabal, sólo le susurra: “Txetxu, qué bonita es la vida”.
No es el primer anciano que lo pregona. Son muchos los que proclaman: “Cada día creo que vivir me gusta más”. Quizás haga falta toda una vida de experiencia para comprenderlo. Con razón dicen que vivir es sentir, sin amarguras, todas las edades, hasta que llega la muerte. Sólo con la edad entendemos que vivir es recordarse, que vivir es decidir constantemente qué vamos a ser, ya sea en la siguiente década, en el próximo año o en el minuto postrero.
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/vivir.htm
Guerras perdidas
"No se puede ganar una guerra, como tampoco se puede ganar un terremoto".
Jeannette Rankin (1880 – 1973). Fue la primera mujer elegida para el Congreso de los EE.UU. Decidida pacifista, fue la única persona que votó contra la entrada de su país en la I y II Guerras Mundiales. También lideró la resistencia contra la guerra de Vietnam.
Pretender ganar una guerra es ilusorio. Que no nos engañen,...
Jeannette Rankin (1880 – 1973). Fue la primera mujer elegida para el Congreso de los EE.UU. Decidida pacifista, fue la única persona que votó contra la entrada de su país en la I y II Guerras Mundiales. También lideró la resistencia contra la guerra de Vietnam.
Pretender ganar una guerra es ilusorio. Que no nos engañen,...
El mundo en miniatura
En www.miniature-earth.com puede verse una imagen exacta de la humanidad.
Vivimos en medio de una injusticia gigantesca, del tamaño del planeta Tierra. Si todo el mundo se concentrase en una aldea de apenas 100 habitantes, apreciaríamos mejor la distribución global de habitantes y recursos, manteniéndose las proporciones actuales según los datos oficiales.
En este poblado 61 son asiáticos, 13 africanos, 12 europeos, 8 norteamericanos, 5 centro o sudamericanos y 1 de Oceanía. Son 50 mujeres y 50 hombres. Viven en el pueblo 53 y 47 en zonas rurales. Son cristianos 33 (entre católicos, protestantes, ortodoxos, anglicanos,…), 18 musulmanes, 16 ateos, 14 hinduistas, 6 budistas y los restantes 13 son de otras religiones.
Nunca aprenderán a leer 14, y sólo 7 cursarán enseñanza secundaria. Sólo 1 es universitario. Sólo 12 tienen ordenador y, de ellos, 3 acceden a Internet. Pasan hambre 13 personas. No tienen ni una sanidad básica, 43 personas; y 18 ni agua potable. Uno tiene el SIDA. Son minusválidos 9. Luchan por vivir con menos de un dólar diario, 18 personas; y 53, con menos de dos dólares diarios. Sólo 25 tienen alguna comida, ropa, cama y casa. No tienen cuenta en ningún banco 70. El 59% de la riqueza de toda la aldea la poseen 6 personas.
Este pueblo parece un polvorín a punto de estallar,… Pero no lo solucionan compartiendo más y ayudando a los más necesitados, sino que la comunidad rica gasta en defenderse o atacar 11.200 veces más que ayudar (es la proporción entre los gastos militares mundiales y la ayuda al desarrollo).
Al analizar la humanidad desde esta perspectiva es cuando se hace patente la necesidad de justicia, solidaridad, tolerancia, educación y sanidad para todos. Y por caminos de paz y colaboración, de respeto intercultural y no de imposición. Consideremos lo afortunados que somos, aunque sólo sea por el hecho de poder leer esto. Y a continuación exijamos y construyamos un mundo donde la pobreza, la desigualdad y la sinrazón sean historia antes del 2015.
Vivimos en medio de una injusticia gigantesca, del tamaño del planeta Tierra. Si todo el mundo se concentrase en una aldea de apenas 100 habitantes, apreciaríamos mejor la distribución global de habitantes y recursos, manteniéndose las proporciones actuales según los datos oficiales.
En este poblado 61 son asiáticos, 13 africanos, 12 europeos, 8 norteamericanos, 5 centro o sudamericanos y 1 de Oceanía. Son 50 mujeres y 50 hombres. Viven en el pueblo 53 y 47 en zonas rurales. Son cristianos 33 (entre católicos, protestantes, ortodoxos, anglicanos,…), 18 musulmanes, 16 ateos, 14 hinduistas, 6 budistas y los restantes 13 son de otras religiones.
Nunca aprenderán a leer 14, y sólo 7 cursarán enseñanza secundaria. Sólo 1 es universitario. Sólo 12 tienen ordenador y, de ellos, 3 acceden a Internet. Pasan hambre 13 personas. No tienen ni una sanidad básica, 43 personas; y 18 ni agua potable. Uno tiene el SIDA. Son minusválidos 9. Luchan por vivir con menos de un dólar diario, 18 personas; y 53, con menos de dos dólares diarios. Sólo 25 tienen alguna comida, ropa, cama y casa. No tienen cuenta en ningún banco 70. El 59% de la riqueza de toda la aldea la poseen 6 personas.
Este pueblo parece un polvorín a punto de estallar,… Pero no lo solucionan compartiendo más y ayudando a los más necesitados, sino que la comunidad rica gasta en defenderse o atacar 11.200 veces más que ayudar (es la proporción entre los gastos militares mundiales y la ayuda al desarrollo).
Al analizar la humanidad desde esta perspectiva es cuando se hace patente la necesidad de justicia, solidaridad, tolerancia, educación y sanidad para todos. Y por caminos de paz y colaboración, de respeto intercultural y no de imposición. Consideremos lo afortunados que somos, aunque sólo sea por el hecho de poder leer esto. Y a continuación exijamos y construyamos un mundo donde la pobreza, la desigualdad y la sinrazón sean historia antes del 2015.
Versión final: mikel.agirregabiria.net/2006/miniatura.htm
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