Ambiciones

Lo peor de la ambición es que no sabe lo quiere.

Todos ambicionamos muchas cosas: la primera tener casa propia donde vivir; la segunda tener un automóvil para alejarnos de esa casa; la tercera, una segunda casa adonde llegar,... Con esfuerzo y años, quizá consigamos todo ello.

Lamentablemente pronto comprendemos que ese mismo coche, pronto o tarde, nos traerá de vuelta a la primera casa (lo que no es malo), pero también a trabajar de nuevo... para mantener dos casas y un coche.


Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/ambiciones.htm

Final vacacional

Indicios de que hay que volver a esperar once meses para las siguientes vacaciones.

El fin del veraneo se advierte por múltiples razones, descontando la mirada al inoportuno calendario. La temperatura de la piscina desciende de un modo paulatino, pero inexorable. Parece decirte… “se te acaba el verano”. Luego está esa gente insolidaria que regresa antes que tú… en lugar de quedarnos todos veraneando y ver qué pasaría. Las casas veraniegas colindantes van quedándose vacías y apagadas, recordándote que la tuya también quiere tranquilidad y que va siendo hora de abandonarla. Hasta los mosquitos se han ido extinguiendo y su marcha es otro síntoma inconfundible.

Los días se acortan y hasta las salidas de aviones comerciales en lontananza se espacian. Los chiringuitos comienzan a plegar sus instalaciones, cierran antes y te sirven a tiempo (¡mala señal!). En la playa escasean los extranjeros y predominan los autóctonos domingueros. Incluso van apareciendo algunos jubilados foráneos que se habían escabullido de los atiborrados meses de julio y agosto.

Hasta el seto podado al llegar ha vuelto a crecer como desafiándote al decir “¡qué poco te queda! Las últimas y dramáticas pistas son el vaciamiento del frigorífico y de las reservas de refrescos, a cuenta de mi planificada consorte que no respeta mi derecho a ignorar el fatídico día de retorno.

Lo peor de todo son esos pesados, amigos y periodistas, que comienzan a hablar del síndrome postvacacional. O que te empiezan a llamar algunos desconsiderados de tu tierra, preguntándote dónde estás (que lean mi actualizado blog.agirregabiria.net). Ya voy, tranquilos, ya me sumo a la legión de los que hemos agotado el veraneo. Lo cierto es que reincorporarse a la rutina anual tiene sus ventajas, pero francamente ahora mismo no se me ocurre ninguna.
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/vacacional.htm

Atención, todos necesitamos más...

Basta observar algo o a alguien con atención para que se vuelva interesante.

El verano es tiempo de descubrimiento. Las amistades reencontradas, desde pequeños de unos meses hasta nonagenarios, son fuente preciosa de redescubrimiento. Los niños pequeños responden inmediatamente a quien les dedica toda su atención,... y lo mismo nos sucede a todos a cualquier edad. Queremos, necesitamos captar la atención de los demás. Con frecuencia, más que la aprobación lo que ansiamos es la atención.

La atención es la piedad natural del espíritu, una cortesía que todos merecen y que además resulta ser nuestra mejor inversión. No atender siempre a quien nos habla, no sólo es falta de amabilidad y aún menosprecio, sino la grave pérdida de una inmensa oportunidad de aprender. Nada hay tan productivo como la atención, para la relación social y para mejorar nuestra propia educación.

La verdadera fuerza de una idea está, no en lo que vale, sino en la atención que se le presta. La atención es la aplicación de la mente a una persona, objeto o concepto. El primer medio para pensar bien es atender bien. Incluso el verdadero arte de la memoria no es otro que la disciplina de la atención.

Recordemos que el derecho a la atención es algo que se puede conquistar. El premio del que dice y actúa bien, es la atención que presta y que se le presta. La atención hacia los demás y la de los demás nos da el límite que hemos de poner a nuestras palabras. Aprendamos en dos etapas: Primero a prestar más atención. Segundo, a despertar, captar y retener la atención; más aún, sepamos satisfacer la atención de los demás.
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/atencion.htm

La vida es...una maravilla

La vida es lo que hemos dado (Georges Seferis, Premio Nobel de Literatura de 1963).

Vivir cada vida es algo tan difícil que nadie antes lo ha intentado. Pero la vida es lo mejor que conocemos. La vida es lo que hacemos y lo que nos pasa. La vida es un diez por ciento como la construimos y un noventa por ciento como la aceptamos. La vida es anticipación y porvenir.

La vida es sueño, la vida es juego. La vida es un frenesí, una ilusión, una sombra, una ficción,… La vida es como un eco; nos devuelve engrandecido lo que le damos. La vida es como un espejo: Sonriámosla y nos sonreirá. El procedimiento más seguro de hacernos más agradable la vida es hacerla agradable a los demás.

La vida es una atrevida aventura o no es nada. La vida es un montón de pequeñas cosas. La vida es nueva cada día. La vida es más como pintar un cuadro, que como hacer una suma. La vida es como bracear con la realidad. La vida es un arco iris que incluye el color negro. Quizá nosotros lo somos, pero la vida no es triste. La vida es fascinante: sólo ha de mirarse con la correcta perspectiva.

La vida es hermosa por sí misma. La vida es un paraíso, pero algunos no lo saben ni se cuidan de saberlo. La vida es una serie de sorpresas. La vida es el constante prodigio de ver que existimos. Sólo a quien un día le parece demasiado largo, opina que la vida es breve. Pero la vida es demasiado efímera, para no ser también inmortal. La vida, si no se le tiene miedo, es una maravilla .
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/vida.htm

Apreciemos a los demás

Para nuestros propios defectos somos topos; para los ajenos, linces.

Más se sabe de una persona por lo que dice de los demás, que por lo que los otros opinan de ella. Antes de contar un solo defecto de los demás, comencemos a repasar y enumerar mentalmente los nuestros. Así, seguramente, nos faltará tiempo, no ya para anunciar, sino incluso para advertir los fallos ajenos. A fin de cuentas, ¿quién puede vanagloriarse de no tener defectos? Examinando los nuestros, aprendemos todos a excusar los de los demás.

Entretenerse en buscar defectos al prójimo es prueba suficiente de no ocuparnos apenas de los nuestros propios. Dado que no somos perfectos nosotros, descubramos en los demás preferentemente bondades y virtudes. De este modo, comprobamos que todos poseemos grandes cualidades que nos hacen merecedores de aprecio y estima.

Versión para imprimir en: mikel.agirregabiria.net/2006/defectos.htm

Caricias

El elefante se deja acariciar. El piojo, no.
Conde de Lautreamont
Las personas son como los animales. También necesitan ser acariciadas.
En el amor, el débil es quien pega, y el fuerte el que acaricia.
Puedes acariciar a la gente con palabras.

Prefiero vecinos extranjeros

En las urbanizaciones de verano de la costa del mediterráneo, prefiero de largo que mis vecinos sean extranjeros lejanos.

Mis buenos amigos de Murcia, Valencia, Castilla-La Mancha y Madrid conocen mi opinión y la respetan, aunque no la comparten. En mi residencia de verano, disfruto cada año reencontrándome con ellos y con mis otros vecinos alemanes, noruegos, belgas,… Pero lamento que en el conjunto de la comunidad se estén yendo algunos extranjeros, siendo sustituidos mayoritariamente por los cercanos murcianos.

La razón de preferencia se basa en dos elementos esenciales: las visitas y el ruido generado. Una casita de verano ocupada por autóctonos significa el triple o cuádruple de personas que en el caso de que sean foráneos. En un simple apartamento recién adquirido, o simplemente alquilado, por murcianos cabe esperar la visita de toda la parentela de la región todos y cada uno de los días de veraneo. Los extranjeros, en cambio, aparecen poco en verano y siempre formando un grupo que ni crece, ni varía día a día en su composición.

La técnica de los nativos, debidamente analizada en mis largas estancias, se puede resumir bajo el nombre de “los invasores”. Con la autorización de los titulares del hogar, o sin ella, es previsible y predecible que en un piso de veraneo ocupado por mis queridos murcianos aparezcan poco antes del mediodía un gentío de remotos parientes o amistades de la infancia que, siempre sin avisar, se queden a comer y a cenar hasta la siguiente madrugada, amén de ocupar todas las áreas e instalaciones de la comunidad.

Estos visitantes, extrañamente planificados pues nunca coinciden dos muchedumbres pero no hay día donde falte una caterva de auto-invitados, acostumbran a acudir sin más obsequios que su pertinaz presencia, mucha hambre y mucha sed, pero con alegría a espuertas (será por lo barato que les sale su veraneo) y sin prisa por irse. Ya que no aportan nada para las varias comidas que piensan gorronear, tampoco traen toallas, sombrillas ni elementos de playa que, ya puestos, también corresponde ceder a sus sufridos y hospitalarias visitados.

Entre los pegadizos aprovechados, la peor especie son algunos familiares que, por hacer aprecio de las casas ajenas, se convierten en parásitos permanentes y regulares. Algunos de estos especimenes disfrutan de cualidades inverosímiles como poder establecerse de forma vitalicia en sofás (a ser posible en medio de la sala), o en tumbonas de jardines y terrazas (donde sólo molestan al conjunto del vecindario). Ya que supuestamente sólo se quedarán “unos días” (expresión que significa como mínimo una quincena), hacen un uso intensivo de todo lo comunitario, como piscinas, duchas, bancos,… dejándose notar por el conjunto de la colectividad que acaba aprendiéndose sus nombres e invocando con frecuencia el de sus antecesores.

En definitiva, en la misma casa-tipo de dos habitaciones donde sólo cabe una nuclear familia de extranjeros con el matrimonio y dos hijos, que hablan bajito, es posible “acomodar” a tres o cuatro familias autóctonas, compuestas por la siguiente relación de titulares e invitados: Tres, o cuatro, generaciones de abuelos, padres e hijos de todas las edades, con amigos y primos anexos, que disponiendo de un sofá libre en el trastero y bastante espacio en la piscina de la comunidad invitan a otros familiares y conocidos varios del pueblo a “visitarles cuando quieran” para que vean lo bien instalados (y espaciosos) que están en la “casa de la playa”.

Para compensar que son muchos ocupantes en un espacio pensado para muchos menos, la solución más frecuente es comunicarse… a gritos. Por si quedaba alguien en la zona que no se había enterado de que habían vuelto los inolvidables vividores que dieron la murga hace dos semanas… Estos gorrones profesionales han mejorado el dicho de que donde comen cuatro comen… cincuenta. Ahora, después de haber sobrevivido al último fin de semana con nuevo récord batido en el pleno de visitantes recalcitrantes, entiendo el porqué de que los pueblos del interior se queden vacíos… Luego dicen que extranjero es quien no tiene amigos. ¡Benditos vecinos extranjeros!
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/extranjeros.htm

El inmediato deber

El único procedimiento (conocido y comprobado) para regenerar el mundo (en toda su inmensa complejidad) ... consiste en cumplir (cada uno de nosotros) con el deber más (nimio e)inmediato.

Charles Kingsley,
novelista inglés
del siglo XIX.

(Mentalizándonos para el final de las vacaciones)

Abuelos explotados

Una dramática historia real, que no es tan infrecuente como creíamos.

Al reencontrar parecidas situaciones, hemos recordado un caso que nos impresionó hace dos décadas. Cuando les conocimos, ellos ya eran unos abuelos jubilados. Él había sido un relojero con negocio propio, y le había ido razonablemente bien. Tanto que pudo comprar una casa a cada uno de sus hijos e hijas en una gran capital. También contaba con una casita de verano, al lado de la nuestra.

Cada veraneo comenzaba igual. Primero venía el matrimonio de octogenarios, para limpiar la casa y llenar la despensa. Dos días después, con precisión insuperable, la vivienda se abarrotaba de hijos y nietos. Al amanecer, ya se podía ver a la abuela limpiando el porche, y su jornada laboral de ama de casa se prolongaba hasta el anochecer. Diariamente los dos abuelos hacían las compras, pero nadie de sus cinco hijos e hijas, ni nueras ni yernos, ni nietos o nietas, salía a su encuentro para descargarles de alguna de las bolsas, que en varios viajes transportaban a casa.

Preparando comidas, meriendas y cenas los ancianos, jamás iban a la playa, pero sí toda aquella tropa de descendientes que los explotaba sin piedad. A lo sumo, el abuelo bajaba a la orilla para cuidar a sus nietos más pequeños. También sacar la basura era función exclusiva suya. Era un escándalo de abuso familiar para quienes conocíamos la situación, pero no se lo parecía así a aquellos desalmados hijos y nietos que lo veían como algo que los abuelos hacían por obligación y con gusto.

Un año ya no vimos a los ancianos. Nos comunicaron que habían muerto en el otoño, con apenas unos días de diferencia entre ambos fallecimientos. Nos apenó sobremanera no poder hablar con aquellos bondadosos patriarcas que habían dedicado más de sesenta años a tan ingratos descendientes. Entonces, aquella panda de inútiles perezosos pareció que podía organizarse. Dejaron de venir tan sincronizadamente; compraron otras viviendas próximas y cada pareja se ocupó de su prole. Se había acabado el chollo de los abuelos: simplemente los habían exprimido hasta la muerte.

Siempre nos ha quedado el recuerdo amable de aquellos maravillosos abuelos, que siempre estuvieron unidos y felices en medio de tan fatigoso trabajo doméstico. No volvimos a tratar con sus desconsiderados herederos, aunque les seguimos viendo. Pronto varios de ellos se divorciaron, y tampoco se hablaban entre ellos. Había desaparecido lo que ellos nunca apreciaron y lo que jamás serán: Una pareja que se ama, y que al tener hijos propios reconoce aún más a sus progenitores y que se ocupan de ellos en su ancianidad.
Versión .DOC para imprimir
Mikel Agirregabiria Agirre. Educador
blog.agirregabiria.net

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/explotados.htm

Educación como solución

La vida es tan corta y el oficio de vivir tan difícil que cuando uno empieza a aprenderlo ya hay que morirse, dijo Ernesto Sabato. La única solución es la transmisión del conocimiento a través de la educación, siendo para los seres humanos el primer oficio aprender y el último enseñar, concluyo por mi parte.

Gente con clase

Las urbanizaciones playeras son verdaderas arcas de Noé; se encuentran en ellas toda clase de bípedos sin plumas.

La “clase” no significa pertenencia a una determinada “clase social”. De hecho, hay demasiada gente sin clase entre las clases alta y media, y mucha gente con clase en la clase baja. La “clase” se adquiere en clase, en la enseñanza obligatoria y común para todos. Lamentablemente y a pesar de haberse incrementado el número y las horas de clase, no parece que el porcentaje de “gente con clase” haya aumentado tanto como sería de desear.

La “clase” no necesita definirse: se reconoce y basta. Pero hay síntomas que apuntan incluso a distancia, sin hablar, sin conocer el idioma,… La gente “con clase(s)” lee prensa y literatura, debate, conversa y escucha, en grupo pequeño, en pareja, en familia, sabe estar sola,… Otra gente fuma, bebe alcohol, come demasiado, va tatuada, compra compulsivamente, ve la TV, habla de programas de la tele, pone la música alta y con altavoces, da voces, no respeta horarios, se aburre si no son multitud,…

Un posible indicador de la “clase” es la elección del tipo de placeres que elegimos, según llevan a destruirnos o a hacernos crecer. No elijamos ser de esa clase de gente que pasea el cuerpo en avión y el espíritu en carreta. El verano es un buen momento para viajar, leer, charlar, reposar, reflexionar, cultivarse, cambiar,…
Versión .DOC para imprimir
Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/clase.htm

25 lemas universitarios

1. Sapere aude - Atrévete a pensar, a saber. Frase usada por Kant, invitando a emprender la aventura del conocimiento. Universidad Europea Miguel de Cervantes.
2. Lux et Veritas - Luz y verdad. Universidad de Yale.
3. Veritas – Verdad. Universidad de Harvard.
4. Sapientia melior auro - La sabiduría es mejor que el oro. Universidad de Deusto.
5. In Libertatem Vocati - A la libertad fuisteis llamados. Universidad Católica San Antonio de Murcia.

6. Sapere Avde - Atrévete a saber. Universidad de Huelva.
7. Alere Flammam Veritatis - Alentando la llama de la verdad. Universidad Autónoma de Nuevo León.
8. Ciencia et Cultura pro omine - La ciencia cultiva al hombre. Universidad Regiomontana, Monterrey.
9. Educare et Ministrare - Educar para Servir. Universidad Cristóbal Colón en Veracruz.
10. Homo Hominis in Servitio Perficitur - El hombre sólo se realiza al servicio del hombre. Universidad de Monterrey.
11. Indivisa Manent - Unidos Permanecen. Universidad La Salle.
12. Laetitia labor nostr
a - Nuestra alegría es nuestro trabajo. Universidad de Santiago, Chile.
13. Libertas capitur - La libertad se conquista. Universidad Austral de Chile - Valdivia.
14. Lucem adspicio - Miro la luz. Universidad de Costa Rica.
15. Omnium Potientor Est Sapientia - El poder total está en el conocimiento. Universidad Central del Ecuador.
16. Pedes in terra, ad sidera visus - Con los pies en la tierra y la mirada en las estrellas. Universidad Nacional de Tucumán.
17. Ad verum ducit - Conduce a la verdad. Universidad Católica de Río Grande de Sul de Brazil.
18. Scire ad trascendere - Saber para trascender. Universidad de Zalapa, Veracruz.
19. Spiritus Ubi Vult Spirat - El espíritu donde quiere sopla. Universidad Peruana Cayetano Heredia.
20. Veritas in caritates - Verdad en caridades. Universidad Católica Boliviana.
21. Viam Sapientiae Monstrabo -
La sabiduría os mostrará el camino. Universidad Abat Oliba de Barcelona.
22. Vince in bono malum - Vence el mal con el bien. Universidad Anáhuac.
23. Futurum Edificamus - Edificamos Futuro. Universidad de Colombia.
24. Homo homini sacra res - El hombre es algo sagrado para el hombre. Universidad Carlos III.
25. Eman ta zabal zazu - Da y extiéndelo.
Universidad del País Vasco.

Actualización, 23-7-2007. Otro lema con foto de la Universidad brasileña de Caxías do Sul: “Los pies en la región, los ojos en el mundo”.

¡Apaga la televisión!

El televisor fue el invitado de todas las casas, el que más hablaba y el que nunca escuchaba. Poco a poco, sin darse cuenta, la gente acabó pensando y actuando como él.
¡No seas el último en prescindir de la TV!

Oído al pasar

Son muchas veces las que todos lo hemos escuchado; a veces de refilón, demasiadas directamente.

En conversación con otros adultos, unos padres comparaban a un hijo con otro. Sin importar qué rol correspondía al niño o a la niña, al mayor o al menor, aunque lo más frecuente es que sea chica primogénita la “torpe estudiosa” y chico benjamín el “vago inteligente”, el diálogo era más o menos así.

- “Éste es mucho más capaz que el otro, pero no quiere. Al otro le costaba más aprobar, estaba todo el tiempo repasando y empollando. Pero éste nunca ha necesitado estudiar nada; ahora parece que no quiere. Pero si quisiera…”.

Estimados padres y madres:

1º Querer es poder: si se quiere, se puede y si no se quiere,… no se puede. Es la voluntad, y no la capacidad, el elemento decisivo del éxito académico y profesional.
2º En Primaria, estudiando poco o mucho, se aprueba fácilmente. Pero sólo los que estudian (ésos a quienes aparentemente “les cuesta”), son quienes logran hábitos y base para proseguir estudiando.
3º Destierren la idea de que un alumno sea “holgazán y listo”… si despreciando sus estudios demuestra que ni siquiera entiende cómo determinarán todo su futuro.
4º No comparen nunca y sí estimulen desde la más tierna edad en todos sus hijos e hijas el esfuerzo y la aplicación en su primera obligación que es… ESTUDIAR.
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/alpasar.htm

Mesas en el cementerio

El camino de la paz encuentra dificultades. Aquí se aporta una modesta sugerencia para componer las mesas de negociación.

A algunos nos gusta pasear por los cementerios. Para recordar a nuestros seres queridos y para reconocer la que será nuestra morada, más pronto o más tarde, pero con certeza inexorable. El cementerio de Derio, cerca de Bilbao, es un hermoso camposanto, que aporta serenidad y trascendencia a quien lo visita. Allí hemos visto duelos y otras reuniones familiares, como unos recién casados en una visita rápida en el mismo día de su boda.

En una ocasión, nos impresionó una conversación que pudimos entreoír al pasar camino de nuestro panteón. Se trataba de un grupo de 6 ó 7 adultos, hombres y mujeres que parecían hermanos. Estaban resolviendo alguna herencia. Obviamente era una cita posterior al entierro de algún antepasado, y se habían reunido ante su nicho para hablar con calma y sinceridad entre ellos, gracias al respeto compartido hacia la persona enterrada.

Seguramente se trataba de alguna cuestión espinosa, conflictiva pero terrenal. Y habían convenido que ante su padre o madre muertos nadie trataría ni de aprovecharse, ni de mentir, ni de dejar de pensar con altura de miras. Nunca supimos si llegaron a un acuerdo, porque una hora después seguían susurrando entre ellos, pero no había resentimiento en sus rostros.

Ahora en vacaciones hemos ido a visitar otros cementerios. Verificamos que en ningún otro lugar se manifiestan mejores sentimientos (y peor gusto). Después, Carmen y yo hemos comentado que quienes negocian temas políticos graves y que han causado tantas y tantas víctimas, obtendrían mejores resultados si eligiesen un lugar de encuentro como Derio. Para no olvidar el sufrimiento ajeno y, en lo propio, recordar que todos los cementerios del mundo están llenos de gente que se consideraba imprescindible.
Versión .DOC para imprimir

Versión final: mikel.agirregabiria.net/2006/cementerio.htm

Objetivos vitales


Si no puedes ser pino de la colina,
sé hierba en el valle,
pero sé la hierba mejor junto al torrente.
Sé arbusto si no puedes ser árbol.
Si no puedes ser camino real, sé atajo.
Si no puedes ser el sol, sé estrella.

Douglas Mallock

¡Agua va!

Urge una nueva cultura ciudadana del agua, solidaria y sostenible, que evite el drama de una desertificación inminente.

Éste es nuestro 19º verano en el municipio más meridional de Alicante junto a la provincia de Murcia, en el centro de la costa de la cuenca del río Segura. Mil Palmeras es una zona de playa que nos encantó a toda la familia, a nuestros hijos desde que tienen uso de razón, y aquí encontramos amigos de todo el mundo.

El paisaje y el paisanaje son excelentes y la única preocupación puede ser la falta de agua, que tanto se pregona por aquí. “Agua para todos” es un lema omnipresente, pero… ello contrasta con el uso cívico que vemos hacer a muchos de nuestros convecinos. Aquí se despilfarra el agua por parte de turistas y, lo que es más lamentable, de muchísimo paisanos.

Aparece como noticia destacada que los embalses del trasvase Tajo-Segura rozan el nivel de emergencia, y que más de dos millones de personas en 71 municipios de Alicante y Murcia verán comprometido el suministro de agua para beber en el próximo octubre. Mientras esto leemos, a nuestro alrededor se emplea profusamente el chorro de la manguera como escoba en patios y terrazas, y el agua que lleva sin presión a nuestros grifos se desperdicia irreflexivamente. Igualmente se prodigan prácticas despilfarradoras como regar a mediodía, con temperaturas de 35º.

A quienes venimos de climas húmedos siempre nos sorprendió esta contradicción, y frecuentemente lo comentan amigos del Cantábrico que visitan esta zona mediterránea por primera vez. Somos más los del norte que los del sur quienes barremos con escoba y pasamos la fregona con un solo cubo de agua (y un poco de vinagre) para dejar los pavimentos limpios y brillantes, y regamos por goteo de quince minutos en la madrugada.

Basta de política barata de atribuir a terceros lo que puede ser corregido o paliado desde nuestros hábitos más elementales. Urge una mejor y más universal educación ambiental en el uso público y privado del agua. Antes de que sea demasiado tarde. La situación es muy grave y puede empeorar.

Versión .DOC para imprimir
Mikel Agirregabiria Agirre
Pilar de la Horadada (Alicante)
blog.agirregabiria.net

Agosto angosto

En este condensado mes en el que todos estamos de vacaciones, nos preguntamos: ¿esto es descansar?

Durante un año hemos estado apretados en las ciudades esperando que llegue el mes vacacional. Se acerca el 1 de agosto y salimos en estampida. Seguimos estando todos en las caravanas de la “operación salida” y nos reunimos en las escasas zonas costeras que se abarrotan de gente,… que quiere escapar de la gente.

Ayer intentamos bañarnos en la piscina comunitaria. Desistimos ante el riesgo de adulterio. Fuimos a la playa, y creo que llegamos a pisar algo que parecía arena (una mezcla de bronceador y toalla). Incluso dimos unas brazadas sin llegar a la jurisdicción de aguas internacionales. Mañana acudiremos a la madrugadora hora de los abuelos, quienes -ante la petición de nueras y nietas- toman posesión de la primera línea de playa con todo tipo de pertrechos, aunque predominan las sombrillas viejas.

Tras la experiencia de pedir en un chiringuito una paella al mediodía, que nos sirvió de merienda, bajo un sol de justicia retornamos al apartamento. No se le ha dado nombre aún a este “estrés veraniego”, pero a las siete de la tarde sufrimos una sensación de cansancio más propia de un invernal viernes laboral que de un primer día de vacaciones estivales. Y ahora hay que ducharse para ver si sobrevivimos a la degustación de alguna variedad de sangría que acompañará a cualquier clase de extrañas viandas mal aderezadas que por aquí llaman cena “Typical Spanish”.
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/angosto.htm

Bibliotecas escolares

"Un centro educativo es un conjunto organizado de aulas en torno a una biblioteca escolar".

Lourense H. Das, directora general de Europa de la
IASL.

Imprescindible: menéame.net

Desde diciembre de 2005 funciona menéame.net, un sitio web similar al digg norteamericano, pero específicamente orientado a blogs. Tiene todo el aspecto de convertirse en el digg del mundo castellano parlante.

Desde abril de 2006 lo he seguido como una interesante fuente de noticias adelantadas, que días después aparecen en la prensa escrita. Participo activamente remitiendo ‘mis Menéame’, algunas de las cuales han sido promocionadas por los lectores hasta la página principal.

Resulta recomendable, porque mantiene RSS para casi todos los gustos, incluso de búsquedas personalizadas. Los motivos de su éxito radican en la idea del criterio de comunidad, así como la pluralidad, flexibilidad y velocidad de respuesta. No dejar de leer el FAQ de menéame.

El blog de Ana Frank

Ana Frank vive hoy en el Líbano, escribe su diario en un blog y parece que todavía nadie quiere escucharla.

Parece imposible que hayan sido niñas y niños quienes hayan escrito los mejores alegatos contra la guerra. Antes con sólo un lápiz y unas cuartillas, ahora quizá con un blog. Probablemente, el más representativo de estos fascinantes testimonios históricos basados en relatos cotidianos de seres maravillosos que vivieron épocas que nunca deberían ser olvidadas sea el “Diario de Ana Frank”.

No fue el único de la II Guerra Mundial. Se ha publicado otro de Helga Deen, una holandesa adolescente judía también exterminada en el Holocausto. Otro original relato es “Un saco de canicas” de Joseph Joffo, sobre las aventuras de dos hermanos, de 10 y 12 años para escapar de los nazis en Paris.

En septiembre de 1991, poco antes de cumplir 11 años en la martirizada Sarajevo, Zlata Filipovic, una niña croata que había leído a Ana y que se encontraba prisionera en su propia casa, sin agua, gas ni electricidad, escribe un libro estremecedor: “El diario de Zlata”.

Ahora son estudiantes libaneses, palestinos y judíos, que se llaman Mohammad Soubra, Galya Daube, Bash o Lilu. Escriben blogs y cuelgan vídeos caseros en youtube.com, con secuencias tomadas desde balcones de Beirut o Haifa. A través de Internet y en inglés recibimos sus noticias inmediatamente. Ellos, vecinos de “pueblos enemigos” se comunican con facilidad. Comparten la triste sensación de rabia e impotencia, que también nos abruma a quienes de lejos les sentimos cerca.

Estos bloggers representan la élite formada y pacifista de sus países. Sus blogs establecen un diálogo inteligente y constructivo entre nacionalidades y opiniones diversas. Mientras los cañones y los misiles rugen ruidosa, obtusa y destructivamente. ¿Por qué no detenemos estas matanzas?
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/blogana.htm

El canal mejor y más visto del mundo...


... es www.youtube.com, ¿cuál si no?. En este caso, tomamos dos vídeos del progarama "Plató abierto" (el 2º está aquí) sobre Internet, con uno de los responsables de www.microsiervos.com que explica el milagro de www.youtube.com. Vea mis vídeos favoritos.

Puente Colgante

El pasado 30 de junio la UNESCO declaró Patrimonio de la Humanidad al Puente Bizkaia que une Portugalete con Getxo.

Elegimos vivir junto al Puente Colgante. Lo vemos desde la terraza. En casa se presiente su masa férrica, igual que se siente la ría, que fluye con sus gigantescos barcos avistados desde las ventanas. Casi todos los días paseamos por debajo de su torre derecha, entre turistas que crecen y crecerán aún más, al igual que los idiomas que se escuchan admirando la estructura de nuestro Puente Colgante de Bizkaia.

Además de un peculiar arco iris permanente, grisáceo y rectilíneo, este puente es una metáfora. Un símil del presente como un puente tendido entre dos abismos de tiempo y eternidad: el futuro que no existe y el pasado que se ha ido. Recuerda y refrenda aforismos, como el proverbio inglés que dice “Dios nos da las manos pero no construye los puentes”, o el galés que señala “Quien quiera ser líder debe ser puente”. Con su flujo y reflujo de las mareas supera el proverbio toscazo que advierte que “aguas calmadas estropean los puentes”.

El Puente Colgante nos recuerda que vivir no es sino echar puentes sobre los ríos que pasan. No siempre acertaremos a hacerlo tan grácil y felizmente como nuestro puente, pero podemos intentarlo. Lo más difícil de aprender en la vida es qué puente hay que cruzar y de cuál hay que guardarse. Sólo los ingenieros saben diseñar puentes, pero más sabio es quien acierta sobre dónde y cuándo hay que hacerlo (no como algunos políticos que prometen construir un puente incluso donde no hay río). Una máxima infalible para la vida: Si no queremos sentirnos solos, construyamos puentes y no muros.
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/puente.htm

Aritmética elemental

Parece que hemos olvidado algunas operaciones matemáticas básicas, por lo que un repaso aplicado será muy provechoso.

Se supone que al acabar la enseñanza primaria todos sabemos las cuatro reglas. Pero nuestro comportamiento cotidiano demuestra que no las comprendimos bien. Veamos algunos casos prácticos, especialmente dirigidos a los jóvenes, que se supone han cursado toda la enseñanza secundaria obligatoria (ESO). Ejemplos de operaciones vitales:

Sumas. Si vamos adicionando tiempo o dinero con pequeños ingresos, esta inversión o ahorro puede acumular una cantidad importante si se persevera en la dedicación de los minutos aprovechados y si no se malgastan inmediata e infructuosamente los euros conseguidos.

Restas. Si nos despertamos muchos días con sueño, será necesario aumentar el número de horas que dormimos. Si la hora de levantarse está fijada, habremos de acostarnos antes, para que la diferencia entre ambos momentos nos permita descansar el tiempo necesario.

Multiplicaciones. Repitiendo pequeñas acciones o adquiriendo buenos hábitos (lectura diaria, trabajo constante, ahorro cotidiano,…) se logra multiplicar por un alto factor las capacidades propias y que sea notablemente mayor el producto final de nuestros esfuerzos.

Divisiones. Si partimos un objetivo grande en pequeñas porciones, como dividir un buen libro entre los días de una semana o estudiar una carrera en unos años, podremos alcanzar aquello que antes nos parecía inabordable.

Operaciones mixtas (dedicadas a adultos). Si no llega el dinero a fin de mes, y dado que el número de días está fijado por el calendario, sólo quedan como opciones factibles: sumar más ingresos, restar algunos gastos, multiplicar el trabajo o repartir mejor el sueldo a lo largo del mes. Lo mismo con el escurridizo tiempo: Si la vida se nos escapa sin gran provecho, dividamos preocupaciones, multipliquemos empeños, restemos distracciones y sumemos afectos. Confiemos que esto demuestre que las matemáticas son de aplicación en todo tiempo, para todo y para todos.
Versión .DOC para imprimir
Versión final: mikel.agirregabiria.net/2006/aritmetica.htm

Internet vacacional

A pocos kilómetros del Campus Party resulta casi imposible disponer de Internet en el país de Telefónica.

Escribo gracias a algún vecino, despistado o piadoso, que comparte su Wi-Fi. Como todos los veranos me encuentro librando la misma batalla anual: Que Telefónica reconozca que existen miles de usuarios, con una segunda residencia, que necesitan una conexión a Internet durante unas semanas en verano y quizá otras dos en navidad o semana santa,… y que para ello no sea preciso pagar 12 meses completos con dos cuotas (20 + 40 euros/mes).

Algunos nos negamos a pagar durante 365 días un servicio telefónico y telemático que utilizamos apenas 50 días. Durante años sufrimos un calvario que comienza en mayo-junio y no acaba hasta diciembre. Comienza cuando se pide una nueva línea telefónica, cuyas rosetas interiores son cobradas innumerables veces. Dado que es preciso estar en la casa de verano para que conecten el teléfono, sólo unos días antes se sabe el nuevo número. Ello impide recurrir a proveedores de Internet ajenos a Telefónica, dado que el protocolo del monopolio (nadie diría que no lo es) o la misma lentitud de estos operadores (Wanadoo, Ya,…) determina un retraso superior… al mes vacacional. Tras el verano vienen los meses de lucha para evitar a ‘faxazos’ que sigan facturando Internet hasta noviembre o diciembre, además de amenazarnos con la lista de morosos (a propósito, ¿dónde está la lista de cínicos?).

¿Es posible que, en el país más atrasado de Europa en materia de telecomunicaciones, se establezca un contrato telefónico y de Internet que facture por semanas o meses, aunque sea a un precio proporcionalmente superior al habitual? ¿Es posible mantener proveedores distintos en la residencia habitual y en la veraniega, por aquello de la competencia, recuerdan? ¿A qué partido político, o a qué santo, hemos de encomendarnos los internautas para entrar en el siglo XXI?
Versión .DOC para imprimir

Versión final en: mikel.agirregabiria.net/2006/internet.htm

El Beirut de Picasso


Picasso expresó en negros entintados sobre un sepulcral blanco el horror de la guerra, como la que hoy desgarra Beirut.

Picasso convirtió cada trazo del Gernika en un símbolo antibelicista. Su lienzo cubista proyecta una tragedia violenta y devastadora. El empedrado de una calle desolada, y a la luz de un bombilla que las bombas han respetado, una escena terrible propia de cualquier guerra. Un ser humano troceado, con los ojos abiertos y la mano crispada de indignación, que coge con el puño del otro brazo seccionado una espada rota, de donde nace una flor. Un caballo con el vientre atravesado por una lanza. Un toro observa, removiendo la cola, a una mujer que llora la muerte de su hijo. Otra mujer desesperada sale por la ventana iluminada por un quinqué; una tercera mujer se arrastra, y huye mirando los aviones asesinos. La cuarta mujer clama al cielo con los brazos levantados ante su casa en llamas. Todos gritan de sufrimiento, incluso los animales.

No desaparece la fórmula bélica de hacer política con el masivo exterminio de civiles. Así lo atestiguan Gernika, Londres, Varsovia, Dresden, Hiroshima, Nagasaki, Hanoi, Bagdad,... Quienes han sufrido un genocidio de la magnitud del “holocausto judío”, un “Coventry” o el “ataque a New York", debieran ser los primeros en comprenderlo. Israel, Reino Unido y Estados Unidos deben unirse al resto de la ONU para aplicar un inmediato alto el fuego en el Líbano.
Versión .DOC para imprimir

Para imprimir: mikel.agirregabiria.net/2006/beirut.htm