Trabajando en la administración, se escuchan muchas alegorías mordaces de su estructura y funcionamiento. Servicios o departamentos han sido descritos como el camarote de los Hermanos Marx (ver
entradas al respecto), el ejército de
Pancho Villa, o aquello de "
peor imposible... hasta que lleguen los siguientes",... sin considerar el inmenso repertorio de
chistes sobre funcionarios. Casi siempre se refieren a la parte política, pero sin excluir al amplio y variopinto mundo funcionarial.
Más constructiva y, seguramente, exacta fue una
metáfora escuchada a
José Ángel Rey, un amigo y experimentado inspector de educación. Decía que su labor de inspección educativa, y en nuestra opinión otras como la misma innovación educativa, se movía entre los grandes contingentes de equipos humanos como bordeando por las negras líneas de una pintura de
Mondrian. Así entre los relativamente homogéneos núcleos de servidores públicos hay que incrementar las relaciones y dar coherencia y continuidad a una inmensa labor conjunta.
El cuadro elegido para ilustrar el post ha sido una composición al óleo con rojo azul y amarillo, obra de
Piet Mondrian.