"UN COLEGIO CON MEMORIA"
— Escolapios Bilbao (@EscolapiosBi) January 11, 2024
Acto en memoria de personas en prisión 1937-1940 en el aniversario de la 40ª Semana y Marcha por la paz@itakabilbao @AD_EscolapiosBi @DiocesisBilbao #escolapiosbilbao37_40 #escolapiosbilbao #heziago #milugar #40semanaporlapazhttps://t.co/Mm1yrIDOIc pic.twitter.com/EHW7VJgovz
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Escolapios de Bilbao: Un colegio con memoria
Con motivo del 40ª Aniversario de la Semana y Marcha por la Paz, en el Colegio Escolapios de Bilbao (Calasancio), junto con la Fundación Itaka-Escolapios, vamos a hacer algunas actividades significativas que pongan en valor nuestro trabajo educativo por la paz, la no violencia y la defensa de los derechos humanos todos estos años. Se trata de “UN COLEGIO CON MEMORIA”, un acto en memoria de personas en prisión entre los años 1937-1940.
Queremos reafirmar nuestro compromiso en este campo y hacer algunas actividades especiales al cumplirse los 40 años (charlas contra la guerra y comercio armamentístico, talleres previos a la Marcha por la Paz durante la mañana del sábado…). Lo central de la Semana seguirá siendo la actividad educativa en las aulas, en los grupos del Movimiento Calasanz y la Marcha por las calles de Bilbao.
En este contexto, planteamos la acción “Un colegio con memoria” con la que queremos hacer un reconocimiento de las personas que sufrieron prisión en las instalaciones del colegio cuando fueron utilizadas como cárcel entre los años 1937 y 1940.
Los objetivos específicos de esta actividad son:
▪ Permitir a las víctimas y sus familiares cerrar el círculo de su sufrimiento con un acto simbólico y público de reconocimiento.
▪ Poner en valor el gran esfuerzo realizado por los religiosos escolapios de entonces para continuar con la labor educativa en otras instalaciones durante la ocupación.
▪ Dar un nuevo paso significativo que se sume a los que nuestros colegios y presencias escolapias han ido dando a lo largo de su historia en los diferentes ámbitos y lugares de misión.
▪ Dejar una huella y memoria que permita educar a las nuevas generaciones en el compromiso por la paz, los derechos humanos y valores cívicos, el rechazo a la violencia y el reconocimiento del sufrimiento ajeno.
▪ Aumentar el posicionamiento del colegio como centro educativo, en la defensa de los derechos humanos y el sustrato ético a la que toda la sociedad debe aspirar y las futuras generaciones fomentar.
“Un colegio con Memoria” girará en torno a varias acciones y momentos muy relacionadas entre sí:
✓ Exposición/Ambientación: “Un colegio con memoria. 1937-1940, años de cárcel.” (40º aniversario de la Semana y Marcha por la paz). A partir del viernes 26 de enero ambientaremos la recepción del colegio con imágenes y otros documentos de aquella época.
✓ Viernes 26 de enero a las 18:30 Charla-coloquio “Colegio Escolapios en la guerra y la postguerra, 1936-1940”. Los ponentes serán:
Jon Penche, Doctor en Historia de la UPV e investigador contratado de la UPV/EHU en la Cátedra de Derechos Humanos y Poderes Públicos.
Aitor Miñambres: Director del Museo Memorial del Cinturón de Hierro de Berango.
Hashtag: #EscolapiosBilbao37_40
El Colegio Escolapios Bilbao cumple 125 años
"Gesto por la Paz", tres años del cierre de algo que marcó nuestra vida
El pasado 1 de junio de 2016 se cumplieron tres años desde que "Gesto por la Paz" decidió su disolución (ver en el vídeo inferior). Se habían cumplido 28 años desde la primera concentración el 26 de noviembre de 1985 en la Plaza Circular convocada por el Colegio Calasancio de los Padres Escolapios de Bilbao (ver vídeo).
La Fundación Itaka, iniciativa social de la Orden de las Escuelas Pías, u escolapios, para llevar a cabo labores sociales había nacido en Bilbao en 1985 como labor complementaria al colegio de los escolapios en la ciudad. Desde sus inicios se centraron especialmente en trabajar por la paz. Desde ese nuevo espacio, ligado al colegio, se convocarían los primeros gestos: «Hasta que, el 25 de noviembre de 1985, un grupo de personas del entorno del Colegio de Escolapios de Bilbao no convocara el gesto, todas las manifestaciones de respuesta a la violencia que se habían producido durante años, habían sido puntuales e inconexas».
El 14 de noviembre, el Presidente y el Vocal de la Junta Directiva del Colegio Calasancio, Javier Aguirregabiria y Tomás Urquide respectivamente, se reunieron con el gobernador en Bilbao y finalmente consiguieron el permiso permanente para convocar concentraciones. No habían transcurrido ni 10 días cuando ETA cometió tres nuevos asesinatos el 25 de noviembre de 1985. Dos soldados de la Armada fueron tiroteados en el barrio donostiarra de Bidebieta, José Manuel Ibarzábal y Rafael Melchor. Esa misma tarde ETA cometió un nuevo atentado en la localidad de Pasajes, asesinando al Guardia Civil Isidoro Díez. Como respuesta a estos asesinatos, se realizó la convocatoria del primer gesto, que se celebró en Bilbao el 26 de noviembre de 1985, como acto de repulsa al asesinato por parte de ETA de estas personas. Las primeras víctimas por las que se movilizó Gesto por la Paz.
Según el padre escolapio Javier Aguirregabiria: «El primer nombre que se nos ocurrió fue «signo por la paz». La semana que hicimos en marzo de 1984 se llamó «Signos de esperanza en nuestro mundo», y nos parecía que eso era lo que queríamos hacer: un signo. Más adelante pensamos que no era un nombre adecuado y buscamos sinónimos hasta llegar a «Gesto por la Paz». También dudamos de él, pues pensamos que era un término podría prestarse a burla, pero no se nos ocurrió otro mejor. En los primeros meses y hacia fuera hablábamos siempre de concentraciones silenciosas». Ese mismo 26 de noviembre de 1985, el colegio mandó un aviso de concentración a otros colegios, parroquias y grupos de tiempo libre de Bilbao, informando del proyecto de los gestos. Se animaba a participar en esta iniciativa cuando se produjera de nuevo un atentado con víctimas mortales, con lo que a través de grupos, asociaciones y entidades ligadas a la escuela se fue extendiendo la idea. Paralelamente, según las memorias de la escuela, se convocó a la prensa para que acudiera a ese primer gesto, aunque TVE pareceno se hizo eco de la movilización hasta el día 27 de noviembre, con el segundo gesto porel asesinato de José Herrero Quiles en Lasarte (vídeo). En cambio el día 27, con el segundo gesto acudieron algunos periodistas a hacerse eco de la iniciativa, y los manifestantes consiguieron unos minutos de atención apareciendo en el informativo de TVE.
Los siguientes meses, entre finales de 1986 y principios de1987 la iniciativa de un gesto en la Plaza Circular de Bilbao se siguió practicando después de cada atentado y empezó cada vez a acudir más gente. Se consiguió generar una acción simbólica a la que cada vez más gente estaba dispuesta a asistir, a pesar de la exposición pública ante la izquierda abertzale que ello suponía. A través de los propios gestos en la Plaza Circular de Bilbao, y de la publicidad y puesta en conocimiento de la iniciativa en otros colegios y parroquias, se pretendía fomentar una movilización del mismo tipo en otros barrios, para que se llevara a cabo en distintos lugares de Bilbao a la vez, con lo que resultara más efectiva y visible. En Diciembre el gesto se extendió a Algorta (Getxo), con lo que la iniciativa de hacer un Gesto por la paz tuvo por primera vez salida de la Plaza Circular de Bilbao,... (Sigue el relato completo en este enlace)
Si algún objeto guardamos con cariño, ese el lazo azul que durante años llevamos en la solapa, en cada una de aquellas muertes que avergonzaron nuestra historia y que nuestros hijos sufrieron. Confiemos que nuestros nietos puedan verlo como algo pasado.
Nuestros posts históricos sobre "Gesto por la Paz".
La Fundación Itaka, iniciativa social de la Orden de las Escuelas Pías, u escolapios, para llevar a cabo labores sociales había nacido en Bilbao en 1985 como labor complementaria al colegio de los escolapios en la ciudad. Desde sus inicios se centraron especialmente en trabajar por la paz. Desde ese nuevo espacio, ligado al colegio, se convocarían los primeros gestos: «Hasta que, el 25 de noviembre de 1985, un grupo de personas del entorno del Colegio de Escolapios de Bilbao no convocara el gesto, todas las manifestaciones de respuesta a la violencia que se habían producido durante años, habían sido puntuales e inconexas».
El 14 de noviembre, el Presidente y el Vocal de la Junta Directiva del Colegio Calasancio, Javier Aguirregabiria y Tomás Urquide respectivamente, se reunieron con el gobernador en Bilbao y finalmente consiguieron el permiso permanente para convocar concentraciones. No habían transcurrido ni 10 días cuando ETA cometió tres nuevos asesinatos el 25 de noviembre de 1985. Dos soldados de la Armada fueron tiroteados en el barrio donostiarra de Bidebieta, José Manuel Ibarzábal y Rafael Melchor. Esa misma tarde ETA cometió un nuevo atentado en la localidad de Pasajes, asesinando al Guardia Civil Isidoro Díez. Como respuesta a estos asesinatos, se realizó la convocatoria del primer gesto, que se celebró en Bilbao el 26 de noviembre de 1985, como acto de repulsa al asesinato por parte de ETA de estas personas. Las primeras víctimas por las que se movilizó Gesto por la Paz.
Según el padre escolapio Javier Aguirregabiria: «El primer nombre que se nos ocurrió fue «signo por la paz». La semana que hicimos en marzo de 1984 se llamó «Signos de esperanza en nuestro mundo», y nos parecía que eso era lo que queríamos hacer: un signo. Más adelante pensamos que no era un nombre adecuado y buscamos sinónimos hasta llegar a «Gesto por la Paz». También dudamos de él, pues pensamos que era un término podría prestarse a burla, pero no se nos ocurrió otro mejor. En los primeros meses y hacia fuera hablábamos siempre de concentraciones silenciosas». Ese mismo 26 de noviembre de 1985, el colegio mandó un aviso de concentración a otros colegios, parroquias y grupos de tiempo libre de Bilbao, informando del proyecto de los gestos. Se animaba a participar en esta iniciativa cuando se produjera de nuevo un atentado con víctimas mortales, con lo que a través de grupos, asociaciones y entidades ligadas a la escuela se fue extendiendo la idea. Paralelamente, según las memorias de la escuela, se convocó a la prensa para que acudiera a ese primer gesto, aunque TVE pareceno se hizo eco de la movilización hasta el día 27 de noviembre, con el segundo gesto porel asesinato de José Herrero Quiles en Lasarte (vídeo). En cambio el día 27, con el segundo gesto acudieron algunos periodistas a hacerse eco de la iniciativa, y los manifestantes consiguieron unos minutos de atención apareciendo en el informativo de TVE.
Los siguientes meses, entre finales de 1986 y principios de1987 la iniciativa de un gesto en la Plaza Circular de Bilbao se siguió practicando después de cada atentado y empezó cada vez a acudir más gente. Se consiguió generar una acción simbólica a la que cada vez más gente estaba dispuesta a asistir, a pesar de la exposición pública ante la izquierda abertzale que ello suponía. A través de los propios gestos en la Plaza Circular de Bilbao, y de la publicidad y puesta en conocimiento de la iniciativa en otros colegios y parroquias, se pretendía fomentar una movilización del mismo tipo en otros barrios, para que se llevara a cabo en distintos lugares de Bilbao a la vez, con lo que resultara más efectiva y visible. En Diciembre el gesto se extendió a Algorta (Getxo), con lo que la iniciativa de hacer un Gesto por la paz tuvo por primera vez salida de la Plaza Circular de Bilbao,... (Sigue el relato completo en este enlace)
Si algún objeto guardamos con cariño, ese el lazo azul que durante años llevamos en la solapa, en cada una de aquellas muertes que avergonzaron nuestra historia y que nuestros hijos sufrieron. Confiemos que nuestros nietos puedan verlo como algo pasado.
Historia del Colegio Calasancio, Escolapios de Bilbao
El Colegio Calasancio, Escolapios de Bilbao, ha iniciado en Facebook, Bilboko Eskolapioak, una recopilación de sus 120 años de historia (ver sus alumnos del Colegio San José de Calasanz al acabar el curso 1893-1894), siendo coetáneo con el Puente Bizkaia (inaugurado en 1893) que también celebra esta conmemoración.
Están, con Javier Aguirregabiria Aguirre a la cabeza, recuperando y publicando fotos de los diferentes cursos, que algunos vivimos desde Párvulos A hasta Preuniversitario (en 1970).
Resulta entrañable ver tantos nombres, mejor apellidos porque así nos conocíamos, de condiscípulos y amigos desde los primeros años y hasta finalizar el Preu (con la grafía de la época): Achalandabaso, Amatriaín, Arsuaga, Azcuénaga, Benayas, Moratalla, Negrete, Sáenz,...
Las fotografías están tomadas de la Memoria Escolar del curso 59-60. El autor está sentado en primera fila, en el extremo de la derecha, con los brazos cruzados (que sólo se ponían así para las fotografías).
Otros muchos posts sobre el Colegio Calasancio, Escolapios de Bilbao. Es indicativo de que guardamos buenos recuerdos de aquella época, cuando el Colegio era un escenario de lunes a domingo, porque se iba a clase incluso el sábado y los días festivos acudíamos al cine.
Sigue un look más contemporáneo, con un reciente y solidario LipDub Camerun- Itaka-Escolapios que recorre las actuales instalaciones del Colegio.
Mesa Redonda TIC Escolapios Bilbao
Animamos a acudir, hasta llenar el aforo, a la #MesaRedondaTIC de la que hemos tenido noticia vía Iñigo López de Munain, @inigoldem, Maestro de Educación Especial y Licenciado en Psicopedagogía, y Coordinador del Equipo TIC de Escolapios de Bilbao, que moderará la Mesa. Se celebrará el miércoles 17 de ABRIL de 2013 a las 18:00 en el Auditorium del colegio Calasancio de Bilbao. Reserva de invitaciones en la siguiente web.
La mesa estará compuesta por dos exalumnos, dos profesores y dos padres-madres del colegio:
- Begoña Arístegui: Licenciada en Bellas Artes y Diseñadora de interiores. Madre de 4 alumnos del colegio, de 16, 13, 12 y 5 años.
- Eva Corcuera: Licenciada en Ciencias de la Información y Comunicación, especializada en periodismo digital. Técnico especialista en e-learning, servicios streaming y generación de materiales didácticos para la formación online.
- José Gaviria: Doctorando en Ingeniería Informática y Telecomunicaciones en la Universidad de Deusto. Máster Universitario en Seguridad de la Información de Universidad de Deusto. Investigador en la línea DeustoTech Computing donde está desarrollando sus investigaciones en áreas de detección de malware. A su vez su trabajo le lleva a dar charlas sobre seguridad online en diferentes colegios.
- Pedro Marañón: Licenciado en Ciencias de la Información y Comunicación. Master en Cooperación Internacional (Experto en cooperación internacional para el Desarrollo) y Educación para El Desarrollo.
- Javier Nieves: Doctor en Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial por la Universidad de Deusto. Máster Universitario en Seguridad de la Información de la Universidad de Deusto. Investigador en la línea DeustoTech Computing, donde, principalmente, se encarga de la gestión y desarrollo de proyectos de I+D+i en las áreas de seguridad de la información, optimización de procesos de producción e inteligencia artificial.
- Alex Pombo: Maestro y Licenciado en Psicopedagogía. Coordinador de Primaria del colegio Escolapios y miembro del Equipo TIC. (@alexpombo1).
El aforo está limitado a 50 plazas. Para reservar plaza (máximo dos por persona), existen dos opciones: 1º Escribir un email a la dirección equipoticbilbao@bilbokoeskolapioak.org, indicando nombre y apellidos y número de entradas que se solicitan; 2º Rellenar el formulario de la siguiente dirección web.
Desearíamos acudir para aprender del debate, pero no es seguro por dificultades de agenda. Al menos indicaremos los enlaces a las crónicas del encuentro.
Vuelta al Cole... 38 años después
En plenas vacaciones navideñas hemos vuelto Carmen y yo a visitar el Colegio Calasancio de Bilbao, donde estudiamos los tres hermanos Agirregabiria y los dos hermanos de Carmen. Nos ha recibido mi hermano Javier, sacerdote escolapio, que nos ha invitado a admirar el profundo cambio físico de expansión que ha experimentado este Centro centenario, ubicado en el centro de Bilbao, con entradas por Alda. de Recalde 19 (la entrada principal de siempre), Ajuriaguerra (antes Espartero, que era el acceso estudiantil) y una nueva puerta desde Henao. Excepto la capilla y las puertas citadas, el escenario se ha transformado. "El Cole" ha crecido hacia abajo, cuatro plantas subterráneas (las tres últimas dedicadas a parking), y con nuevos edificios anexados a los anteriores lo que casi duplica la superficie construida. Se ha conservado un gran frontón, antes disponíamos de varios pequeños cuando en los '60 se jugaba más a pelota mano.
La imagen central corresponde a entrañables fotos antiguas, con uno de los dos patios (el pequeño, cuadrado, y el grande), salas de ciencias naturales, escalera de honor y comedor de internos. Ahora los patios son elevados, hay un polideportivo en un semisótano y existen hasta cinco ascensores, que antes ni imaginábamos. De los Padres Escolapios recibimos una excelente educación, desde Párvulos donde comenzamos con la Señorita Tere hasta concluir el Preuniversitario con los Padres Mokoroa, Bermejo, Goñi, Iraola, Ortigosa o Santos (que nos animó a muchos a estudiar Ciencias Físicas) y con profesores laicos de la talla de Javier Izagirre o Fermín Juarrero. Sus clases nos legaron una sólida formación y un imperecedero recuerdo. Algo ya contamos de los primeros años, pero restan miles de recuerdos que iremos desgranando en este blog.
Las fotos actuales (véanse 38 de hoy) poco servirán por los notables cambios producidos, pero incluso las inmensas puertas no nos parecen ahora tan grandes como cuando las cruzamos por primera vez con cinco años. Sirva esta nota de agradecimiento a quienes nos ayudaron tanto en este Colegio Calasancio, incluidos los condiscípulos que aún son nuestros mejores amigos. La antigua "provincia eclesiástica" de Vasconia se ha refundado como Escolapios Emaús reuniendo las congregaciones del norte con las andaluzas. Y la fundación Itaka-Escolapios expande su acción educativa y evangelizadora a varios continentes. Ha sido una mañana de profundo agradecimiento y emocionado homenaje. Como dato final, para conectar con ex-discípulos de Escolapios de Bilbao, yo empecé en octubre de 1958 en Párvulos A con cinco años y terminé con 17 años 'Preu' en Junio de 1970.
La imagen central corresponde a entrañables fotos antiguas, con uno de los dos patios (el pequeño, cuadrado, y el grande), salas de ciencias naturales, escalera de honor y comedor de internos. Ahora los patios son elevados, hay un polideportivo en un semisótano y existen hasta cinco ascensores, que antes ni imaginábamos. De los Padres Escolapios recibimos una excelente educación, desde Párvulos donde comenzamos con la Señorita Tere hasta concluir el Preuniversitario con los Padres Mokoroa, Bermejo, Goñi, Iraola, Ortigosa o Santos (que nos animó a muchos a estudiar Ciencias Físicas) y con profesores laicos de la talla de Javier Izagirre o Fermín Juarrero. Sus clases nos legaron una sólida formación y un imperecedero recuerdo. Algo ya contamos de los primeros años, pero restan miles de recuerdos que iremos desgranando en este blog.
Las fotos actuales (véanse 38 de hoy) poco servirán por los notables cambios producidos, pero incluso las inmensas puertas no nos parecen ahora tan grandes como cuando las cruzamos por primera vez con cinco años. Sirva esta nota de agradecimiento a quienes nos ayudaron tanto en este Colegio Calasancio, incluidos los condiscípulos que aún son nuestros mejores amigos. La antigua "provincia eclesiástica" de Vasconia se ha refundado como Escolapios Emaús reuniendo las congregaciones del norte con las andaluzas. Y la fundación Itaka-Escolapios expande su acción educativa y evangelizadora a varios continentes. Ha sido una mañana de profundo agradecimiento y emocionado homenaje. Como dato final, para conectar con ex-discípulos de Escolapios de Bilbao, yo empecé en octubre de 1958 en Párvulos A con cinco años y terminé con 17 años 'Preu' en Junio de 1970.
Encuentro en Colegio Calasancio, Escolapios de Bilbao
Un honor, un placer y un cúmulo de recuerdos al volver a nuestro Colegio, el Colegio Calasancio de los Escolapios de Bilbao, a colaborar modestamente con una charla inmersa en su proceso de elaboración de un Plan Estratégico 2015-2019, que presentaron al inicio de la reunión Pablo y Amaya (codirectores del centro). Fue un encuentro de dos horas intensas, tras la jornada laboral del claustro, con el casi centenar de miembros de su profesorado, intercambiando ideas, convicciones y esperanzas.
Una de las imágenes específicas utilizadas en la presentación fue la adjuntada arriba. Una foto coloreada (¡y se nota!) tomada hace 55 años allí mismo, en el patio del Colegio (aunque quiera parecer un despacho interior), donde a los dos hermanos mayores se nos retrata con 7 y 6 años (JuanMa a la izquierda y quien suscribe a la derecha). Los símbolos elegidos por el fotógrafo (¡de Valencia!) son expresivos: Un (falso) teléfono de mesa, una pluma estilográfica, una bola del mundo, un pequeño avión junto al tintero, el secante tras la esfera terráquea,...
Una de las imágenes específicas utilizadas en la presentación fue la adjuntada arriba. Una foto coloreada (¡y se nota!) tomada hace 55 años allí mismo, en el patio del Colegio (aunque quiera parecer un despacho interior), donde a los dos hermanos mayores se nos retrata con 7 y 6 años (JuanMa a la izquierda y quien suscribe a la derecha). Los símbolos elegidos por el fotógrafo (¡de Valencia!) son expresivos: Un (falso) teléfono de mesa, una pluma estilográfica, una bola del mundo, un pequeño avión junto al tintero, el secante tras la esfera terráquea,...
Repasando nuestro Flickr, aún descubrimos otra imagen mejor (con los tres hermanos, Javi en el centro). Plagado de pistas sobre el futuro que se querría proyectar, como un mapa de Sudamérica. Aquí la plumilla es de tinta y el secador aparece. El reloj en mi muñeca, un Hoba, indicaba que ya habíamos cumplido la comunión.
Confirmamos que Colegio Calasancio (Escolapios de Bilbao), cuenta con un gran equipo pedagógico, bien cohesionado, con proyección en las redes, donde se puede seguir su labor a través de @EscolapiosBi (de quien recogemos la imagen siguiente), de su coordinador pedagógico @inigoldem, de su equipo TIC @JonBo70, del Facebook de Javier Aguirregabiria,...
Lo mejor fue el debate, las cuestiones y reflexiones, sobre el esfuerzo, y la cultura del esfuerzo, sobre la educación comparada,...
Lo mejor fue el debate, las cuestiones y reflexiones, sobre el esfuerzo, y la cultura del esfuerzo, sobre la educación comparada,...
Cortometraje sobre Gesto por la Paz
Recogemos en este modesto blog, ahora que se puede difundir, el cortometraje ‘GESTO’, dirigido por Xuban Intxausti y cuenta con música original del compositor Fernando Velázquez. El documental ha sido promovido por la Asociación Gogoan - Por una Memoria Digna. Es un buen resumen de todo lo que significó "Gesto por la Paz", para tantas personas, en tantos lugares, durante tanto tiempo y para la historia de la paz.
Quizá, en una obra humana tan grupal, falta citar cuál fue el origen de todo ello. Aquel "primer Gesto" del martes 26 de noviembre de 1985 (minuto 3:40 del vídeo). Fue Colegio de Escolapios de Bilbao, tras un ciclo de conferencias sobre los distintos caminos para la paz. Inspirado en las concentraciones silenciosas de Artesanos de la Paz, aunque con un enfoque diferente: la duración sería de 15 minutos y el motivo por el que se convocaría sería la violencia específica que se generaba en Euskal Herria.
Allí surgió la semilla que luego dio tanto fruto. Personas con Javier Aguirregabiria Aguire y la Fundación Itaka Escolapios que allí y entonces nació, fueron los primeros en lanzar el llamamiento. Y no fue fácil. Mantenemos en la memoria aquellas amenazantes pintadas en la puerta de acceso del Colegio de Escolapios de Bilbao que, escritas por quienes temían el efecto, decían: "Javi, deja de hacer gestos".
Después del primer gesto del 26 de noviembre de 1985, comenzaron a proliferar este tipo de concentraciones en Bilbao y pueblos de alrededor. También desde el Colegio de Escolapios de Tolosa, se empezó a realizar en la Plaza de Euskal Herria media hora de oración por la paz en Euskadi. Luego fueron casi 30 años, unos 300 días en que se produjeron esas concentraciones en alrededor de 200 lugares, muchas manifestaciones, protestas, marchas, cartas, acciones de solidaridad con las víctimas.
Recomendamos ver GESTO. Es un viaje por la memoria del pacifismo vasco que durante 30 años trabajó por la paz y en contra de la violencia en Euskal Herria. Este viaje que emprenden las personas protagonistas de Gesto por la Paz a través de la visualización de imágenes del pasado, invita al espectador a descubrir que los fundamentos, las acciones y los principios éticos de la organización pacifista continúan vigentes hoy en día. La película quiere, ante todo, homenajear a toda la ciudadanía que se manifestó de forma pacífica en contra de la violencia y que defendió el respeto de los Derechos Humanos de todas las personas.
Mi primer año de colegio. Testigo de la Educación Vasca (II)
La antigua educación infantil, los párvulos en 1958.
Hace casi cincuenta años, en agosto de 1958 me matricularon en el colegio de los Padres Escolapios de Bilbao, así lo acredita mi primera ficha escolar. A primeros de octubre de aquel año fui a la clase de Párvulos A, con una ‘señorita’ que se llamaba Mari Tere. Recuerdo, nítidamente, que parecía la más guapa y joven de las tres únicas profesoras del centro. Ciertamente era cariñosa y amable. Todos sus alumnos, en aquella época no había chicas en clase, creo que siempre la llevaremos en nuestra memoria, como nuestra segunda mamá. Todavía rememoro que, años después, cuando supe que se había casado con un profesor del colegio, me llevé una decepción (infantil), porque de algún modo la consideraba una vestal consagrada exclusivamente a nuestra educación.
El colegio había distribuido, con buen criterio, los tres grupos de párvulos A, B y C en orden de cercanía a la puerta de entrada, en la planta baja de un ala del bloque junto al patio pequeño con un cuadrado de soportales cubiertos. Ingresábamos con cinco años y en tres niveles aprendíamos a socializarnos, básicamente a saber estar en grupo, y luego a leer (Párvulos B) y a escribir (Párvulos C). Por supuesto, en una sola lengua, el castellano. Sabíamos que luego nos quedarían tres cursos fuertes con más asignaturas: Elemental, Medio e Ingreso, antes de pasar a Bachillerato con diez años, pero sólo los más aplicados.
El primer día de clase fui con ilusión, porque ya había estado de visita con mi madre cuando llevábamos a mi hermano, un año mayor. Con todo, fue una gran sorpresa. Me impresionó comprobar cuántos niños había en el mundo, no sólo en aquella inmensa clase con cuarenta y siete compañeros, sino en todo el colegio, aunque los horarios de los recreos de los ‘mayores’ estaban separados de los nuestros. En el patio, todos admirábamos al más atrevido, Ricardo Ignacio Negrete, que no sólo buscaba y encontraba hormigas, sino que –aparentemente- se las comía.
Me queda una remembranza muy feliz de mi primera aula, con sus mesitas de madera recubiertas de mármol verde y blanco, donde mi compañero Javier Arana tamborileaba con sus dedos el redoblar de la marcha de los capuchones (cofrades) propios de la Semana Santa. Se lo pedíamos una y otra vez, y apoyando nuestras sienes sobre el mármol jaspeado nos evadíamos de la clase en momentos de asueto.
Alguna conclusión podemos extraer de tiempos tan lejanos. Quizá la ventaja de mantener grupos cohesionados de alumnos, al escoger un mismo centro escolar para tantos años, primero de escolarización y luego de aprecio. Muchos de aquellos primeros condiscípulos estudiamos juntos, durante doce años. Con varios mantuvimos el contacto, bastantes años después de salir del colegio. Algunos, todavía hoy, somos amigos.
(Testigo de la Educación Vasca II)
Hace casi cincuenta años, en agosto de 1958 me matricularon en el colegio de los Padres Escolapios de Bilbao, así lo acredita mi primera ficha escolar. A primeros de octubre de aquel año fui a la clase de Párvulos A, con una ‘señorita’ que se llamaba Mari Tere. Recuerdo, nítidamente, que parecía la más guapa y joven de las tres únicas profesoras del centro. Ciertamente era cariñosa y amable. Todos sus alumnos, en aquella época no había chicas en clase, creo que siempre la llevaremos en nuestra memoria, como nuestra segunda mamá. Todavía rememoro que, años después, cuando supe que se había casado con un profesor del colegio, me llevé una decepción (infantil), porque de algún modo la consideraba una vestal consagrada exclusivamente a nuestra educación.
El colegio había distribuido, con buen criterio, los tres grupos de párvulos A, B y C en orden de cercanía a la puerta de entrada, en la planta baja de un ala del bloque junto al patio pequeño con un cuadrado de soportales cubiertos. Ingresábamos con cinco años y en tres niveles aprendíamos a socializarnos, básicamente a saber estar en grupo, y luego a leer (Párvulos B) y a escribir (Párvulos C). Por supuesto, en una sola lengua, el castellano. Sabíamos que luego nos quedarían tres cursos fuertes con más asignaturas: Elemental, Medio e Ingreso, antes de pasar a Bachillerato con diez años, pero sólo los más aplicados.
El primer día de clase fui con ilusión, porque ya había estado de visita con mi madre cuando llevábamos a mi hermano, un año mayor. Con todo, fue una gran sorpresa. Me impresionó comprobar cuántos niños había en el mundo, no sólo en aquella inmensa clase con cuarenta y siete compañeros, sino en todo el colegio, aunque los horarios de los recreos de los ‘mayores’ estaban separados de los nuestros. En el patio, todos admirábamos al más atrevido, Ricardo Ignacio Negrete, que no sólo buscaba y encontraba hormigas, sino que –aparentemente- se las comía.
Me queda una remembranza muy feliz de mi primera aula, con sus mesitas de madera recubiertas de mármol verde y blanco, donde mi compañero Javier Arana tamborileaba con sus dedos el redoblar de la marcha de los capuchones (cofrades) propios de la Semana Santa. Se lo pedíamos una y otra vez, y apoyando nuestras sienes sobre el mármol jaspeado nos evadíamos de la clase en momentos de asueto.
Alguna conclusión podemos extraer de tiempos tan lejanos. Quizá la ventaja de mantener grupos cohesionados de alumnos, al escoger un mismo centro escolar para tantos años, primero de escolarización y luego de aprecio. Muchos de aquellos primeros condiscípulos estudiamos juntos, durante doce años. Con varios mantuvimos el contacto, bastantes años después de salir del colegio. Algunos, todavía hoy, somos amigos.
(Testigo de la Educación Vasca II)
Concurso Escolar de Fotografía: PSICOLOGÍA ES...
Nos remite Iñigo L. de Munain
@inigoldem, Maestro de Educación Especial y Coordinador TIC en el Colegio Escolapios de Bilbao, la noticia de un Concurso de fotografía: PSICOLOGÍA ES... Es una ingeniosa y singular actividad didáctica donde algunos alumnos y alumnas han elegido una imagen y un lema para definir la Psicología (según la wikipedia).
Es una propuesta de la clase de Psicología y Sociología de 2º de Bachillerato del Colegio Calasancio de Bilbao, con una web conjunta del docente Iñigo L. de Munain y su alumnado, donde van publicando reflexiones, noticias y demás artículos relacionados con el mundo de la Psicología y la Sociología.
Es una propuesta de la clase de Psicología y Sociología de 2º de Bachillerato del Colegio Calasancio de Bilbao, con una web conjunta del docente Iñigo L. de Munain y su alumnado, donde van publicando reflexiones, noticias y demás artículos relacionados con el mundo de la Psicología y la Sociología.
Sólo hay de plazo hasta el 30 de noviembre para votar: Para ello, basta con:
- escribir un tweet con el hashtag #psicofoto?? de la foto elegida, o
- enviar un correo a inigolopezdemunain@escolapiosemaus.org.
Psicología es otra forma de ver los problemas. #psicofoto1
Psicología es dar un giro a nuestra vida pasada. #psicofoto7
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Psicología es la luz cuando todo está oscuro. #psicofoto2
Psicología es encontrar la calma en nuestro ser. #psicofoto8
Psicología es reflexión. #psicofoto11
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Teléfonos de ayer y de hoy....
Entre ambas fotos hay 51 años de distancia, desde una primavera de 1960 a un verano del 2011. A la derecha de ambas imágenes aparece quien suscribe con 7 y 58 años, junto a nuestro hermano mayor en el primer caso y nuestro nieto en la segunda foto.
El primer retrato es del Colegio Escolapios de Bilbao y la que segunda imagen es de Aitor Agirregabiria.
Cuarta reunión de Asociación Aprendizaje Abierto #7alde #Escolapios
4ª Convocatoria 7alde: JUEVES, 23 de abril de 2015, de 17:30 - 19:30.
Sede: Auditorium Planta Baja, Colegio Calasancio de Escolapios, Bilbao.
Entrada a Escolapios por la puerta de c/ Ajuriaguerra, 15 (habrá carteles).
Emitiremos por streaming en este canal YouTube.
Orden del día, según lo acordado en la Tercera Reunión de 7alde:
- Revisar y establecer el Orden del Día Definitivo, y elegir quién dinamiza, levanta acta,...
- Módulo de formación, a cargo de Marian Calvo, @Hautatzen (45', incluido debate): 'Gestión de las emociones en los nuevos entornos educativos'.
- Módulo de comando de actuación, "Identificando deficiencias formativas: #7alde entra en acción” (2ª parte), a cargo de Javier Merino. Ver su interesante resumen en este PDF.
- Micro-módulo de reflexión, a sugerencia de Maribel Navascues y a cargo de Mikel Agirregabiria, sobre el origen y nombre de #7alde (7 A's, 7alde= Talde,..).
- Panel DEFCON, Deep Euskadi, Fast CONnection, junto a otros colectivos en ICOT 2015.
- Puesta en común de novedades en el sector del aprendizaje (La Akademia en Bilbao con Verónica Juez (quien acudirá personalmente), nueva etapa de Itziar Kerexeta, proyecto de Susana Zaballa y EmakumeEkin,...).
- Propuesta de nuevos temas, coordinadores, fechas y sede de la siguiente reunión.
Inscripciones en este enlace: Necesarias a fin de no superar el aforo del local. Asistentes confirmados: Marian Calvo, Iñigo López de Munain, Verónica Juez, Javier Merino, Juan de la Herrán, Mikel Agirregabiria Agirre, Josean Prado, Raimundo Rubio, María Robledo Gandarias, Garbiñe Larralde, Aitor Arrizabalaga, Teresa Aranguren, Olga Fernández,...
Otros posts sobre #7alde (imagen de la reunión anterior). Hashtag en Twitter: #7alde.
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Álbum de fotos, y nuestra grabación (seguido del streaming gracias a Juan de la Herrán).
Gestión de la emociones en el aula en los nuevos entornos educativos from Hautatzen (Marian). Espectacular presentación de Marian Calvo, @Hautatzen.
Primer día de escuela (Escrito en 1986).
El primer gran acontecimiento vital de cada persona es el día en que inicia su escolarización.
Hoy he llevado a mi hija mayor, Leire, al colegio por primera vez. Ha ido muy emocionada, después de haber esperado impacientemente este día desde hace meses. Iba rodeada de dos amiguitos suyos, que también comenzaban hoy. Ya conoce a su maestra, porque vive en el barrio y desde hace algún tiempo sabían que se encontrarían en septiembre. Leire ha entrado con decisión en el "cole" y ha subido las escaleras alegremente, cogida de la mano a mi esposa y a mí.
Al llegar al aula, donde estaban algunos de sus compañeros -pocos, apenas una docena- la joven profesora la ha acompañado a una mesa circular junto con sus dos amigos. Entonces la maestra ha despedido a los padres que estábamos todavía allí y hemos sido los últimos en salir. Su madre le ha dicho adiós a Leire y yo también le he dirigido un gesto de despedida. He visto cómo nos miraba fijamente. Tras salir de la estancia, he vuelto a asomar la cabeza y todavía sus ojitos miraban a la puerta por la que habíamos desaparecido y al repetir la acción después de unos minutos, Leire todavía estaba mirando la puerta. Había algo patente en su mirada. Estaba embargada por la misma angustia que nosotros mismos sentíamos al dejarla. Era el pánico de comprender, de golpe, sin ningún proceso de acomodación, que "había sido escolarizada", lo que significaba en primer lugar que había abandonado el entorno familiar, el único escenario que conocía hasta ese momento, y que pasaba a otra etapa de su vida en la cual no contaría con la permanente presencia y ayuda de sus progenitores.
En pocos días, la maestra se había convertido en la figura más destacada de la vida de Leire. En la lista de los personajes más queridos de mi hija, nosotros -sus padres- habíamos perdido el primer puesto que quedaba asignado (esperamos que temporalmente) a su maestra Loli.
Por mi parte, no me acuerdo de mi primer día escolar. Recuerdo los primeros días de algunas cursos siguientes, cuando tras las vacaciones de verano había que retornar al colegio. Mantengo algunas difusas reminiscencias del primer curso, con cuatro años, en lo que se llamaba Elemental A. Al rememorar aquellas resonancias del pasado, he de reconocer que despiertan una sensación placentera. He intentando exhumar de la memoria algunos recuerdos y puedo mencionar que estábamos sentados en pequeñas mesas de cuatro, con minúsculos taburetes individuales y que pasábamos muchas horas con las manos sobre el mármol de la mesita, sin hacer aparentemente nada, excepto escuchar, recitar o cantar. Nos gustaba oír con la oreja pegada sobre el frío mármol, el tamborilear de los dedos de un condiscípulo que retumbaba como los tambres de Semana Santa.
La maestra de los pequeños era la más dulce y en los cursos siguientes Elemental B y Elemental C, las profesoras eran cada vez más exigentes, hasta el punto de que la de Elemental C tenía fama de ‘ogro’. No he grabado los nombres de mis tres maestras, -lo siento-. Ahora podría llegar a saber cómo se llamaban, pero así no serviría para nada. Para mí, las tres fueron excelentes y creo que en nuestro colegio de Escolapios de Bilbao, donde no había, en aquel momento, más profesorado femenino, casi todos los alumnos guardarán buen recuerdo de ellas. De la maestra de Elemental B, recuerdo las interminables construcciones silábicas - la b con la a, ba, que era condición necesaria superar para poder salir al recreo. Esta maestra, que nos enseñó a leer, quería tanto a todos sus alumnos que fuimos rotando todos los niños de la clase en la revista colegial que destacaba mensualmente a los tres "mejores" alumnos de cada clase, con nuestra foto rodeada de aureolas. Tal vez para algunos escolares, hombres maduros hoy, aquella fuera nuestra única oportunidad de destacar que tuvimos en esta competitiva sociedad.
Con la vocacional maestra de Elemental C aprendimos a escribir y poner la fecha. Todavía hoy al poner el año me surge el inolvidable 1959, que aprendí a poner con letra legible al comienzo de las cuartillas. Tengo mala memoria de mi etapa infantil anterior a los cinco años. Poco recuerdo de lo vivido, a pesar de que me han narrado muchas anécdotas familiares que luego creo rememorar por mí mismo. Sin embargo, las primeras remembranzas propias provienen de aquellos episodios escolares, que nadie ha podido relatarme posteriormente. Fue una época muy feliz. Tuve la gran suerte de disponer de una infancia que siempre aporta un gran sosiego al evocarse. Ojalá que como padres, educadores y como ciudadanos pudiésemos asegurar que todos nuestros hijos y nuestros escolares disfrutan de una niñez feliz. Ése es el primer deber de una sociedad humana, solidaria y justa.
Hoy he llevado a mi hija mayor, Leire, al colegio por primera vez. Ha ido muy emocionada, después de haber esperado impacientemente este día desde hace meses. Iba rodeada de dos amiguitos suyos, que también comenzaban hoy. Ya conoce a su maestra, porque vive en el barrio y desde hace algún tiempo sabían que se encontrarían en septiembre. Leire ha entrado con decisión en el "cole" y ha subido las escaleras alegremente, cogida de la mano a mi esposa y a mí.
Al llegar al aula, donde estaban algunos de sus compañeros -pocos, apenas una docena- la joven profesora la ha acompañado a una mesa circular junto con sus dos amigos. Entonces la maestra ha despedido a los padres que estábamos todavía allí y hemos sido los últimos en salir. Su madre le ha dicho adiós a Leire y yo también le he dirigido un gesto de despedida. He visto cómo nos miraba fijamente. Tras salir de la estancia, he vuelto a asomar la cabeza y todavía sus ojitos miraban a la puerta por la que habíamos desaparecido y al repetir la acción después de unos minutos, Leire todavía estaba mirando la puerta. Había algo patente en su mirada. Estaba embargada por la misma angustia que nosotros mismos sentíamos al dejarla. Era el pánico de comprender, de golpe, sin ningún proceso de acomodación, que "había sido escolarizada", lo que significaba en primer lugar que había abandonado el entorno familiar, el único escenario que conocía hasta ese momento, y que pasaba a otra etapa de su vida en la cual no contaría con la permanente presencia y ayuda de sus progenitores.
En pocos días, la maestra se había convertido en la figura más destacada de la vida de Leire. En la lista de los personajes más queridos de mi hija, nosotros -sus padres- habíamos perdido el primer puesto que quedaba asignado (esperamos que temporalmente) a su maestra Loli.
Por mi parte, no me acuerdo de mi primer día escolar. Recuerdo los primeros días de algunas cursos siguientes, cuando tras las vacaciones de verano había que retornar al colegio. Mantengo algunas difusas reminiscencias del primer curso, con cuatro años, en lo que se llamaba Elemental A. Al rememorar aquellas resonancias del pasado, he de reconocer que despiertan una sensación placentera. He intentando exhumar de la memoria algunos recuerdos y puedo mencionar que estábamos sentados en pequeñas mesas de cuatro, con minúsculos taburetes individuales y que pasábamos muchas horas con las manos sobre el mármol de la mesita, sin hacer aparentemente nada, excepto escuchar, recitar o cantar. Nos gustaba oír con la oreja pegada sobre el frío mármol, el tamborilear de los dedos de un condiscípulo que retumbaba como los tambres de Semana Santa.
La maestra de los pequeños era la más dulce y en los cursos siguientes Elemental B y Elemental C, las profesoras eran cada vez más exigentes, hasta el punto de que la de Elemental C tenía fama de ‘ogro’. No he grabado los nombres de mis tres maestras, -lo siento-. Ahora podría llegar a saber cómo se llamaban, pero así no serviría para nada. Para mí, las tres fueron excelentes y creo que en nuestro colegio de Escolapios de Bilbao, donde no había, en aquel momento, más profesorado femenino, casi todos los alumnos guardarán buen recuerdo de ellas. De la maestra de Elemental B, recuerdo las interminables construcciones silábicas - la b con la a, ba, que era condición necesaria superar para poder salir al recreo. Esta maestra, que nos enseñó a leer, quería tanto a todos sus alumnos que fuimos rotando todos los niños de la clase en la revista colegial que destacaba mensualmente a los tres "mejores" alumnos de cada clase, con nuestra foto rodeada de aureolas. Tal vez para algunos escolares, hombres maduros hoy, aquella fuera nuestra única oportunidad de destacar que tuvimos en esta competitiva sociedad.
Con la vocacional maestra de Elemental C aprendimos a escribir y poner la fecha. Todavía hoy al poner el año me surge el inolvidable 1959, que aprendí a poner con letra legible al comienzo de las cuartillas. Tengo mala memoria de mi etapa infantil anterior a los cinco años. Poco recuerdo de lo vivido, a pesar de que me han narrado muchas anécdotas familiares que luego creo rememorar por mí mismo. Sin embargo, las primeras remembranzas propias provienen de aquellos episodios escolares, que nadie ha podido relatarme posteriormente. Fue una época muy feliz. Tuve la gran suerte de disponer de una infancia que siempre aporta un gran sosiego al evocarse. Ojalá que como padres, educadores y como ciudadanos pudiésemos asegurar que todos nuestros hijos y nuestros escolares disfrutan de una niñez feliz. Ése es el primer deber de una sociedad humana, solidaria y justa.
@agirregabiria #MikelSeJubila
Hoy, tras una sencilla despedida en la
Delegación de Educación de Bizkaia, de 13:00 a 15:00, pasamos al modo
#JubiLatas. Estáis invitados a acercaros para darnos un abrazo o un apretón de manos,
ante la etapa cumbre que se avecina.
No
hablaremos de despedidas, ni de
nostalgia, ni de
historia, sólo recordaremos tareas en las que nos afanamos juntos (y en las que
seguiremos colaborando), con tantas y tantas personas que han aportado su
granito de arena en esta insigne misión de la
educación.
Estas líneas serán
un testimonio
lo que no diremos, pero lo que se merecen tantas y tantas
grandes educadoras y educadores que hoy no pueden acompañarnos.
Personajes conocidos muchos, imposible enunciarnos porque sería interminable
el listado pero pronto reseñaremos los de máximo reconomiento, pero quizá
los más gigantes quienes ya no están entre nosotros:
José Mari Mauleón,
Alfredo García Cobos, mi coetáneo Diego Vega, Carlos Ruiz, ...
Un modo cronológico de realizar el recorrido educativo (sobre todo para
que no se me olvide, porque ya tengo lagunas de memoria) sería por etapas,
nunca superiores a los 8 años en el tiempo laboral, desde el nacimiento el
viernes santo de 1953:
- 1958-1970 Colegio Calasancio de los Padres Escolapios de Bilbao, de inmejorables recuerdos.
- 1970-1975 Licenciatura en Ciencias Físicas por la Universidad de Bilbao (ahora, UPV-EHU). Una foto con viejos colegas, como Josu Aramberri,...
- 1975-1976 Docencia de Matemáticas en Magisterio de Bilbao y de Ciencias en Preuniversitario de la Academia Izaro. Algunos colegas que dejaron secuela fueron Fermín Delmás, María Ángeles Etxebarria,...
- 1976-1977 Servicio Militar de milicias entre Madrid y Araca-Gamarra (Gasteiz), donde tampoco jamás repetí ninguna clase exactamente igual que la anterior.
- 1977-1985 Docencia en Magisterio de Bilbao (de Matemáticas, Física, Química, Didáctica de las Ciencias, Laboratorio, Informática). Entre 1987 y 1991 también en el Colegio Azkorri (Ciencias, EATP -Mecánica del automóvil, Informática,...), y tutor de un mismo grupo de EGB de 6º a 8º. De 1983-1985 dirigiendo el Proyecto Bizkaia con los primeros microordenadores BBC Acorn cedidos por el Programa IMI.
- 1985-1989 Responsable del Servicio de Tecnología y Educación en la genuina y primigenia Lakua 1 (y en CERED-HEGAKA, Erandio). Quizá los años más dedicados, con 12 - 14 horas diarias con el Plan Vasco de Informática Educativa,... Grandes colegas en CERED fueron Sebas Álvarez, Luis Maria Guinea, Txus Ganzabal, Joseba Lauzirika, Mikel Urkijo, José Mari Macías,...
- 1989-1990 Asesor de Ciencia, Tecnología e Informática en el Departamento de Cultura y Turismo dirigido por Joseba Arregi, con tareas en el Museo de la Técnica de Euskadi (en Lutxana, Barakaldo) junto a José Julio Carreras,...
- 1990-1991 Tres meses Responsable de Documentación en Prevención de Drogodependencias en el Departamento de Presidencia (Lehendakaritza). Incluye algunos días en Fujitsu Bilbao.
- 1991-1999 Director de Formación en EITB (Iurreta). De 1995 a 2000 compatibilizando con nuestra aventura de kIDEAk. Apoyando a Iñaki Zarraoa en su aportación al Pacto Escolar de 1992 y las leyes de Escuela Vasca y Profesorado Vasco de 1993,...
- 1999-2001 Responsable del Servicio de Innovación Educativa de Bizkaia.
- 2002-2005 Responsable del Servicio de Euskadi en la Sociedad de la Información en el Departamento de Industria, Comercio y Consumo (Lakua) dirigido por Josu Jon Imaz. Trabajando físicamente en la SPRI y redactando el Liburu Zuria bajo la dirección de Josune Ariztondo (y Markel Olano).
- 2005-2013 Vuelta como Responsable del Servicio de Innovación Educativa de Bizkaia.
- 2013-2017 Responsable del Servicio de Innovación Pedagógica (en Lakua), bajo la dirección de Begoña Garamendi. Por primera vez siendo Delegado de ELA Sindikatua, a propuesta de JonJo Agirre, aunque siempre fui afiliado,...
- 2017-2018 Segundo retorno a la Delegación de Bizkaia como Responsable del Servicio de Innovación Educativa de Bizkaia.
- 2018-... Etapa de JubiLata. Pero seguimos aprendiendo junto con tanta buenas gentes,... Bukatzeko: Ancora imparo: Para concluir.
Miles de fotos de lo que fuimos testigos en educación.
Hashtags: @agirregabiria #MikelSeJubila #JubiLatas
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