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William James Sidis según James Thurber en The New Yorker

¿Dónde están ahora? ¡Día de los inocentes! por James Thurber. The New Yorker, sábado 14 de agosto de 1937, 22-26.

Una tarde nevada de enero de 1910, alrededor de cien profesores y estudiantes avanzados de matemáticas de la Universidad de Harvard se reunieron en una sala de conferencias en Cambridge, Massachusetts, para escuchar a un orador llamado William James Sidis. Nunca antes se había dirigido a una audiencia y al principio se sintió avergonzado y un poco incómodo. Sus oyentes tenían que prestarle mucha atención, porque hablaba con una vocecita que no se escuchaba bien y puntuaba su charla con risas nerviosas y estridentes. Un mechón de cabello rubio le caía sobre la frente y unos penetrantes ojos azules se asomaban desde lo que uno de los presentes describió más tarde como un rostro "parecido a un duendecillo". El orador vestía medias de terciopelo negro. Tenía once años.

A medida que el niño se familiarizó con el tema, su timidez se derritió y llegaron a los oídos de sus oyentes las palabras más notables que jamás habían escuchado de labios de un niño. William James Sidis había elegido como tema de su conferencia "Cuerpos de cuatro dimensiones". Incluso en este selecto grupo de caballeros eruditos, hubo quienes fueron incapaces de seguir todos los procesos del pensamiento del niño. Para los legos que estaban presentes, la cuarta dimensión, como se demostró esa noche, debía de haber encajado perfectamente en su definición coloquial: "un reino especulativo de relaciones incomprensiblemente involucradas". Cuando todo terminó, el distinguido profesor Daniel F. Comstock del Instituto Tecnológico de Massachusetts se sintió impulsado a predecir a los periodistas, que habían escuchado con profundo desconcierto, que el joven Sidis crecería hasta convertirse en un gran matemático, un líder famoso en el mundo. de Ciencia.

William James Sidis, que a la edad de once años apareció en las portadas de los periódicos de todo el país, era un estudiante de Harvard en ese momento. Para explicar cómo llegó allí, debemos mirar a su padre, el fallecido Boris Sidis. Nacido en Kiev en 1868, el padre Sidis llegó a este país, aprendió inglés y fue a Harvard, donde se graduó en 1894. Su especialidad era la rama de la psicoterapia que se ocupa de aliviar las enfermedades nerviosas y los desajustes mediante sugestión mental. Escribió un libro titulado "La psicología de la sugestión" y estaba muy interesado en los experimentos para transmitir la sugestión mediante el estado hipnótico. Creía que en los primeros años el cerebro es mucho más susceptible a las impresiones que en la vejez. Cuando nació su hijo en 1898, nació, por así decirlo, en un laboratorio. Boris Sidis dirigía entonces un instituto psicoterapéutico en Brookline, Massachusetts. Era un admirador y amigo del fallecido William James, y le puso a su hijo el nombre de ese gran psicólogo.

Boris Sidis comenzó sus experimentos con su hijo cuando el pequeño William tenía dos años. Parece que indujo una especie de estado hipnoidal mediante el uso de bloques alfabéticos. Los rápidos resultados que obtuvo deleitaron su mente científica. El niño aprendió a deletrear y leer en unos meses. Al cabo de un año podía escribir tanto en inglés como en francés en la máquina de escribir. A los cinco años había compuesto un tratado de anatomía y había ideado un método para calcular la fecha en que había caído cualquier día de la semana durante los últimos diez mil años. Boris Sidis publicó varios artículos en revistas científicas describiendo los logros de su bebé. A los seis años, el niño fue enviado a una escuela pública de Brookline, donde sorprendió a sus maestros y alarmó a los demás niños al superar siete años de escolarización en seis meses. Cuando tenía ocho años, William propuso una nueva tabla de logaritmos, empleando 12 en lugar del habitual 10 como base. Boris Sidis publicó un libro sobre su increíble hijo, llamado "Filisteo y genio", y entró en Quién es quién en Estados Unidos .

El niño maravilloso tenía nueve años cuando su padre intentó matricularlo en Harvard. Podría haber aprobado los exámenes de ingreso con facilidad, pero las autoridades universitarias, sorprendidas y avergonzadas, no le permitieron realizarlos. Continuó realizando sus maravillas en casa y comenzó a estudiar latín y griego. No le interesaban los juguetes ni ninguno de los placeres normales de los niños pequeños. Los perros le aterrorizaban. "Si veo un perro", le dijo William a alguien en ese momento, "debo huir. Debo esconderme. Me gusta el gato. No puedo jugar, porque mi madre tendría que estar allí todo el tiempo, porque de la posibilidad de que pueda ver un perro." Su principal recreación parece haber sido viajar en tranvía con sus padres. El mayor Sidis le explicó los traslados y le interesó por los nombres de calles y lugares. Incluso antes de cumplir cinco años, William había aprendido a recitar todas las horas y estaciones de un complejo horario ferroviario. De vez en cuando recitaba horarios para los invitados mientras otros niños recitaban rimas de Mamá Ganso o cantaban pequeñas canciones. Quienes lo recuerdan en aquellos años dicen que tenía algo de la intensidad de un adulto neurótico.

En 1908, a la edad de diez años, a William James Sidis se le permitió matricularse en Tufts College, en Medford. Viajaba diariamente desde Brookline con su madre, quien estaba tan interesada en su fenomenal desarrollo mental como su padre. Siempre iban y venían de la universidad en tranvía. El joven asistió a Tufts durante un año y finalmente, en 1909, cuando tenía once años, Harvard le permitió matricularse allí como estudiante especial. Se matriculó como estudiante de primer año al año siguiente, y así se convirtió en miembro de la promoción de 1914. Cotton Mather, en 1674, se había convertido en estudiante de primer año de Harvard a la edad de doce años, y probablemente debido a este distinguido precedente, William Sidis se le permitió matricularse a esa misma edad. Era una fuente de asombro para sus compañeros de estudios y para el profesorado; algunos de los periódicos asignaron periodistas para cubrir "el caso Sidis".

Se pierde en el registro cómo se convenció a William para hablar ante los eruditos eruditos en enero de su primer año en Harvard, pero se sabe que mostró un gran interés en escuchar las conferencias de otros y se unió fácilmente a las discusiones grupales sobre metafísica. En su tiempo libre empezó a componer dos gramáticas, una latina y otra griega. Sin embargo, la presión de sus estudios y su repentina fama comenzaron a hacerle efecto, y no pasó mucho tiempo después de su notable discurso cuando sufrió un colapso general. 

Su padre dirigía un sanatorio en Portsmouth, New Hampshire, en ese momento, y William fue trasladado allí de urgencia. Cuando finalmente regresó a Harvard, estaba retraído y tímido; no se le pudo persuadir para que volviera a dar una conferencia; Comenzó a mostrar una marcada desconfianza hacia la gente, miedo a la responsabilidad y una inadaptación general a su vida anormal. No se relacionaba mucho con los estudiantes y huía de los periodistas, pero estos lo arrinconaron, por supuesto, el día de su graduación como Licenciado en Artes en 1914. Tenía dieciséis años. Entonces vestía pantalones largos y se enfrentaba a los periodistas que bajaban al Yard con menos sensación de vergüenza que cuando era un niño con bragas. Pero en él se habían desarrollado claras fobias. "Quiero vivir la vida perfecta", dijo William a los periodistas. "La única manera de vivir la vida perfecta es vivirla en reclusión. Siempre he odiado las multitudes". Por "multitudes" no fue difícil leer "gente". Entre los que se graduaron con William James Sidis ese día se encontraban Julius Spencer Morgan; Gilbert Seldes; y Vinton Freedley y Laurence Schwab, los productores de la comedia musical. Los periodistas no les prestaron atención.

A los dieciséis años, William James Sidis era un chico grande y, cuando ingresó en la Facultad de Derecho de Harvard, ya no era la figura incongruente que había sido. Los periódicos tenían poco interés en sus idas y venidas. Asistió discretamente a la facultad de derecho durante tres años y aparentemente fue un estudiante brillante, pero su principal interés eran las matemáticas, y en 1918 aceptó un puesto de profesor en una universidad de Texas. Su fama le precedió, pero incluso si no lo hubiera sido, la extrema juventud de este profesor de matemáticas habría sido suficiente para convertirlo en una curiosidad. Se encontró en el centro de un interés que le molestaba y le consternaba. De repente renunció a su puesto y regresó amarga y silenciosamente a Boston, donde vivió en la oscuridad durante algunos meses.

Fue el 1 de mayo de 1919 cuando el nombre del joven Sidis volvió a ocupar las primeras planas de los periódicos. Con una veintena de jóvenes más, participó en una manifestación comunista en Roxbury y fue llevado ante el tribunal municipal como uno de los cabecillas del grupo y, de hecho, el mismo individuo que había portado la horrible bandera roja en su desfile. En el estrado de los testigos, Sidis demostró ser más franco y sincero que discreto. Anunció ante un tribunal estupefacto que para él no había más dios que la evolución; Cuando se le preguntó si creía en lo que representa la bandera estadounidense, dijo que sólo hasta cierto punto. En un momento dado, para instrucciones del magistrado, se lanzó a explicar la forma de gobierno soviética. Su inclinación marxista se había desarrollado durante un período de varios años. Cuando los Estados Unidos entraron en la guerra, se declaró objetor de conciencia y en varias ocasiones expresó la opinión de que los problemas del mundo eran causados ​​por el capitalismo. Un policía que había ayudado a disolver el desfile de los radicales identificó a Sidis como el hombre que llevaba la bandera roja. El oficial dijo que le había preguntado a Sidis por qué no llevaba la bandera estadounidense, y que Sidis respondió: "¡Al diablo con la bandera estadounidense!". Al regresar al estrado, el famoso prodigio negó vehementemente haber hablado alguna vez con el testigo y haber dicho alguna vez a nadie: "¡Al diablo con la bandera estadounidense!" Repitió que se oponía a la guerra y que creía en una forma de gobierno socializada. Después de una pausa, anunció que, en realidad, había llevado una bandera estadounidense, tras lo cual, ante el asombro de la sala del tribunal, sacó una bandera estadounidense en miniatura de su bolsillo. Fue condenado a dieciocho meses de cárcel por incitación a disturbios y agresión. Apeló y, mientras estaba en libertad bajo fianza de 5.000 dólares, desapareció del estado en el que había sorprendido a profesores eruditos y a policías patrióticos. Marcó el comienzo de un nuevo y curioso modo de vida para el joven.

Durante los cinco años siguientes, William James Sidis parece haber logrado la "vida perfecta" de la que había hablado el día de su graduación: la vida de reclusión. Aparentemente vagaba de ciudad en ciudad, trabajando como empleado, o en alguna otra función menor, por un salario que sólo le permitía subsistir. En 1924 volvió a aparecer en las noticias cuando un periodista lo encontró trabajando en una oficina en Wall Street, por veintitrés dólares a la semana. Estaba consternado al ser descubierto. Dijo que todo lo que quería era ganar lo suficiente para vivir y trabajar en algo que requiriera un mínimo de esfuerzo mental. Los últimos periodistas que bajaron a su oficina para entrevistarlo no lograron verlo. Había dejado su trabajo y había vuelto a desaparecer.

Dos años más tarde, en 1926, Dorrance & Company, una editorial de Filadelfia que imprime libros "vanidosos", es decir, libros publicados a expensas de los autores, publicó un volumen llamado " Notas sobre la colección de transferencias". Fue escrito por un tal Frank Folupa. Frank Folupa, según descubrió un periodista despiadadamente ingenioso, no era otro que William James Sidis. Nuevamente lo atropellaron y lo entrevistaron. Anunció que durante mucho tiempo había sido un "peridromófilo", es decir, un coleccionista de transferencias de tranvía. Él mismo había acuñado la palabra. Su libro (ahora agotado) tenía trescientas páginas y era un tratado erudito y laborioso sobre el origen, la naturaleza y la clasificación de nada más y nada menos que los trozos de papel que los conductores de tranvía entregan a los pasajeros cuando solicitan transbordos. Muchos psicólogos y analistas deben haber estado interesados ​​al leer en los artículos que el genio del niño precoz que había asombrado al mundo académico dieciséis años antes había florecido de esta manera extraña. El libro es digno de examen. Sidis escribió un prefacio al volumen, que comenzaba así: "Este libro es una descripción de lo que es, hasta donde sabe el autor, un nuevo tipo de pasatiempo, pero que a primera vista parece tan razonable como , tan interesante y tan instructivo como cualquier otro tipo de colección de moda. Esta es la colección de transferencias de tranvías y formas afines. El propio autor ya ha recopilado más de 1600 formas de este tipo." El prefacio revela, en otro lugar, que el autor no carecía de cierto humor. "Podemos mencionar", decía, "el interés geográfico y topográfico, tanto en la exploración como en el análisis de las transferencias mismas. También están las interesantes luces que una colección de este tipo arroja sobre la política en la que necesariamente están involucradas las empresas de tránsito". ; aunque difícilmente recomendamos que este interés político se lleve lo suficientemente lejos como para inducir al coleccionista a tomar partido en tales disputas. Y nuevamente: "Uno puede encontrar mucha diversión con las transferencias: se dice que un estudiante de la Universidad de Harvard se encontró en una calle coche y, deseando un viaje extra, le pidió al revisor un transbordo. Cuando se le preguntó "¿A dónde?" "En cualquier lugar", dijo. El conductor le guiñó un ojo y dijo: "Está bien". Te transferiré a Waverly. Posteriormente se rieron del estudiante cuando contó la historia y se le informó que el asilo para débiles mentales estaba ubicado en Waverly ". Sidis también incluyó en su prefacio algunos versos que había escrito cuando tenía catorce años. Comienzan:

Desde los trenes subterráneos en Central, se toma un transbordo y se va a Allston o Brighton o a Somerville, ya sabes; En los automóviles desde Brighton, haga transbordo al metro de Cambridge este y tome un tren hasta Park Street o Kendall Square, al menos.

"Conocemos", concluye el autor, "a alguien a quien realmente le ayudó a tomar el camino correcto al recordar un fragmento de uno de estos versos". El libro analiza todo tipo de transferencias: tipos estándar, tipo Ham, tipo Pope, tipo Smith, tipo Moran, transferencias Franklin Rapid, transferencias Stedman. De este último (para darle una idea), el Sr. Sidis escribió: "Transferencias Stedman: esta clasificación se refiere a un tipo peculiar elaborado por cierta imprenta de transferencias en Rochester, Nueva York. Las peculiaridades de la transferencia Stedman típica son el límite de tiempo tabular. ocupando todo el extremo derecho de la transferencia (ver Diagrama en la Sección 47) y la combinación de fila y columna de ruta de recepción (u otras condiciones de recepción) con el medio día que ya hemos discutido en detalle".

Un año después de la publicación de su libro (al parecer sólo se vendió a unos pocos peridromófilos más), Sidis regresó a la ciudad de Nueva York y volvió a conseguir un trabajo como empleado en una empresa comercial. A su habilidad y experiencia en el trabajo de oficina en general, el genio matemático había añadido ahora, irónicamente, la capacidad de operar una máquina sumadora con gran velocidad y precisión, y le gustaba alardear de este logro. Vivía en 112 West 119th Street, donde se hizo amigo de Harry Freedman, el propietario, y su hermana, la señora Schlectien. Sidis ya no está con ellos y no te dirán adónde ha ido, pero te reenviarán cualquier correo que llegue por él. Aprecian al joven y aprecian su deseo de evitar la publicidad. "Tenía una especie de amargura crónica, como mucha gente que ves viviendo en habitaciones amuebladas", dijo recientemente Freedman a un investigador de la curiosa historia de William James Sidis. Sidis solía sentarse en un viejo sofá en la sala de estar de Freedman y hablar con él y su hermana. Sidis les dijo que odiaba Harvard y que cualquiera que enviara a su hijo a la universidad es un tonto: un niño puede aprender más en una biblioteca pública. Con frecuencia hablaba de su pasión por coleccionar transfers. "Él puede decirle cómo llegar a cualquier calle de cualquier ciudad de los Estados Unidos con un solo billete de tranvía", dijo el Sr. Freedman con asombro y admiración. Parece que Sidis mantiene correspondencia con peridromófilos en varias otras ciudades y de esta manera se mantiene al día con la situación del tranvía y los transbordos. Una vez, el joven bajó de su habitación un manuscrito en el que estaba trabajando y le pidió a la señora Schlectien si podía leerle "algunos capítulos". Dijo que resultó ser un libro del tipo "Buck Rogers", sobre aventuras en un mundo futuro de maravillosos inventos. Ella dijo que estaba genial.

William James Sidis vive hoy, a la edad de treinta y nueve años, en un dormitorio del destartalado extremo sur de Boston. Por una fotografía de él y de sus actividades, este disco está en deuda con una joven que recientemente logró entrevistarlo allí. Lo encontró en una pequeña habitación empapelada con el diseño de enormes flores rosadas, considerablemente descoloridas. Había una cama grande y desordenada y un enorme baúl medio abierto. En una pared colgaba un mapa de Estados Unidos. Sobre una mesa junto a la puerta había un paquete de transferencias de tranvía cuidadosamente unidas con un elástico. Sobre una cómoda había dos fotografías, una (sorprendentemente) de Sidis como el niño genio, la otra una chica de rostro dulce con gafas con montura de concha y un elaborado saludo de Marcel. También había un escritorio con una pequeña y antigua máquina de escribir, un Almanaque Mundial , un diccionario, algunos libros de referencia y un libro de la biblioteca que el visitante del joven recogió en un momento dado. "Oh, vaya", dijo Sidis, "esa es sólo una de esas historias de delincuentes". Dirigió su atención hacia la pequeña máquina de escribir. "Puedes cogerlo con un dedo", dijo, y así lo hizo.

William Sidis, de treinta y nueve años, es un hombre corpulento y corpulento, con una mandíbula prominente, un cuello grueso y un bigote rojizo. Su cabello claro cae sobre su frente como lo hizo la noche que dio una conferencia a los profesores en Cambridge. Sus ojos tienen una expresión que varía desde la ingeniosa hasta la cautelosa. Cuando es cauteloso, tiene una especie de dignidad incongruente que de repente se rompe en el alegre abandono de un niño de vacaciones. Parece tener dificultades para encontrar las palabras adecuadas para expresarse, pero cuando lo hace, habla rápidamente, asiente bruscamente con la cabeza para enfatizar sus puntos, hace gestos con la mano izquierda y, de vez en cuando, emite una risa curiosa y jadeante. Parece disfrutar mucho e irónicamente de llevar una vida de irresponsabilidad errante después de una infancia de escrupulosa reglamentación. Su visitante encontró en él cierto encanto infantil.

Sidis trabaja ahora, como de costumbre, como empleado en una casa comercial. Dijo que nunca permanece mucho tiempo en una oficina porque sus empleadores y compañeros de trabajo pronto descubren que él es el famoso niño prodigio y que no puede tolerar un puesto después de eso. "La sola visión de una fórmula matemática me enferma físicamente", dijo. "Todo lo que quiero hacer es ejecutar una máquina sumadora, pero no me dejan en paz". Resultó que una vez le ofrecieron un trabajo en la Eastern Massachusetts Street Railway Company. Parece que los funcionarios creían con cariño que el joven mago de alguna manera sería capaz de resolver todos sus problemas técnicos. Cuando se presentó a trabajar, le presentaron un montón de planos, gráficos y documentos llenos de estadísticas. Uno de los funcionarios lo encontró una hora después llorando en medio de todo. Sidis le dijo al hombre que no podía soportar responsabilidades, ni pensamientos complejos, ni cálculos, excepto en una máquina de sumar. Tomó su sombrero y se fue.

Sidis tiene un nuevo interés que le absorbe actualmente más que los traslados en tranvía. Se trata del estudio de ciertos aspectos de la historia de los indios americanos. Da clases a media docena de estudiantes interesados ​​una vez cada dos semanas. Se reúnen en su dormitorio y se acomodan en la cama y en el suelo para escuchar el intenso pero vacilante discurso del otrora prodigio. A Sidis le preocupa principalmente la tribu Okamakammessett, a la que describe como una especie de federación proletaria. Ha escrito algunos folletos sobre la tradición y la historia de Okamakammessett y, si se le solicita adecuadamente, recitará poesía de Okamakammessett e incluso cantará canciones de Okamakammessett. Admitió que su estudio de los Okamakammessetts fue una consecuencia de su interés por el socialismo. Cuando la joven mencionó la manifestación del Primero de Mayo de 1919, miró el retrato de la niña en su cómoda y dijo: "Ella estaba en ella. Era una de las fuerzas rebeldes". Él asintió vigorosamente con la cabeza, como complacido con esa frase: "Yo era el abanderado", prosiguió. "¿Y sabes qué era la bandera? Sólo un trozo de seda roja". Él soltó su risa curiosa. "Seda roja", repitió. No hizo ninguna referencia a la imagen que tenía de sí mismo en los días de su gran fama, pero su entrevistador supo más tarde que en una ocasión, cuando un alumno suyo le preguntó a quemarropa sobre su precocidad infantil e insistió en una demostración de sus habilidades matemáticas. Sidis logró con dificultad expulsarlo de la habitación.

Sidis reveló a su entrevistador que tiene otro trabajo en marcha: un tratado sobre las inundaciones. Le mostró la primera frase: "California ha adquirido considerable fama gracias a su supuesto clima". Parece que estuvo en California hace unos diez años durante sus andanzas. Su visitante se animó, por fin, a mencionar la predicción, hecha por el profesor Comstock del Instituto Tecnológico de Massachusetts allá por 1910, de que el niño que ese año daba una conferencia sobre la cuarta dimensión a una reunión de eruditos crecería hasta Sé un gran matemático, un líder famoso en el mundo de la ciencia. "Es extraño", dijo William James Sidis, con una sonrisa, "pero, ya sabes, nací el Día de los Inocentes".

―Jared L. Manley (James Thurber) 1

1 En Los años con Ross Thurber escribió: "Era uno de los '¿Dónde están ahora?' serie, para la cual hice la reescritura (Grossett & Dunlap, 1957, p. 210)". Pero Jared Manley era el seudónimo de Thurber. "Bernstein escribe: 'A principios de 1936, Thurber comenzó a escribir (en realidad a reescribir, ya que algunos de los mejores reporteros de The New Yorker, como Eugene Kinkead, estaban haciendo la investigación) una serie de perfiles breves y retrospectivos. Bernstein también revela que Jared L. Manley fue un nombre que Thurber improvisó cuando escribió su primer artículo sobre un viejo boxeador basado en las iniciales del boxeador John L. Sullivan y Manley basado en "el arte varonil de la autodefensa".'" — Privacidad, Información y Tecnología.

2 Norbert Weiner, que estaba en la reunión del club de matemáticas, escribió: "El joven Sidis, que entonces tenía once años, era obviamente un niño brillante e interesante. Su interés estaba principalmente en las matemáticas. Recuerdo bien el día en el Club de Matemáticas de Harvard en el que GC Evans, ahora jefe retirado del departamento de matemáticas de la Universidad de California y amigo de toda la vida de Sidis, patrocinó al niño en una charla sobre las figuras regulares de cuatro dimensiones. La charla habría dado crédito a un alumno de primera o segunda dimensión. estudiante de posgrado de cualquier edad, aunque todo el material que contenía era conocido en otros lugares y estaba disponible en la literatura. El tema me lo había hecho familiar EQ Adams, un compañero de mis días en Tufts. Estoy convencido de que Sidis no tenía acceso según las fuentes existentes, y que la charla representó el triunfo de los esfuerzos sin ayuda de un niño muy brillante ( Ex-Prodigy , Simon & Schuster, p. 131 - 132)".


4 Cfr. Siete mitos del fracaso por Dan Mahony: "Las investigaciones muestran que la mayoría de los niños prodigio llevan vidas productivas. Al igual que Sidis".

PDF  Mecanografiando por Bill Paton.

Medio millón de Puntos De Recarga (PDR) públicos en Europa

Finalmente, la Comisión Europea ha elaborado un mapa interactivo en su sitio web que facilita la ubicación de Puntos De Recarga (PDR) para vehículos eléctricos en toda la Unión Europea, incluyendo su capacidad de carga en kWh y el tipo de potencia disponible. La Unión Europea posee más de 500.000 puntos de recarga de acceso público en todo el territorio, según los datos proporcionados por el Observatorio Europeo de Combustibles Alternativos (EAFO, por sus siglas en inglés), de los que algo más de 22.000 se encuentran en España. Los países donde se han instalado la mayor cantidad de cargadores son los Países Bajos (113.000), Francia y Alemania (ambos con con 83.000), tal como ha señalado la Asociación Europea de Electromovilidad (Avere) en un comunicado.

La UE divide la información de los Puntos De Recarga (PDR) públicos en dos categorías: corriente alterna (AC) y corriente continua (DC). Hasta la fecha, la mayoría de los puntos instalados pertenecen al tipo AC, con un total de 455.902, en comparación con los 56.437 de tipo DC. Estos últimos se utilizan para cargas rápidas, lo que justifica su ubicación frecuente en carreteras, ya que permiten a los conductores reanudar su viaje de manera rápida. No obstante, es importante tener en cuenta que los puntos de recarga DC suelen tener costos iniciales más elevados. 

Por otro lado, los puntos de recarga AC son los destinados habitualmente a las recargas diarias , lo que explica su mayor presencia en general. Según estos datos, tan solo el 10% de los puntos contabilizados son puntos de carga rápida, o sea, los que alcanzan potencias de 50 kW. A partir de esta potencia, se consideran puntos de recarga ultrarrápida de Nivel 1 los que están en los 150 y los 320 kW y de Nivel 2 los que superan esta última.

El síndrome del usuario de vehículos eléctricos 

Antes de nada, hemos de confesar que somos adictos al vehículo eléctrico. Incluso formamos parte de una conocida asociación de usuarios convictos de la movilidad sostenible, que se autodenomina como AUVE. Son muchos años de uso constante de estos motores a batería, y bastan pocos días para caer en ese conjunto de síntomas que hemos de reconocer como "el síndrome del usuario de vehículos eléctricos".

Al principio, todo parecía anecdótico. Se había descrito previamente y difundido profusamente que pasarse a la movilidad eléctrica produciría una "ansiedad de autonomía". Pero eso fue lo de menos y la experiencia de conducción rápidamente difuminó ese miedo, porque bastaron unos pocos viajes largos para que esa preocupación desapareciera sin dejar rastro. 

Pero entonces, cuando nos sentíamos felices, vino lo peor,... Todo provino de que nos acostumbramos a esas ilusiones, irrealizables en la actualidad, de que era posible viajar sin ruidos, sin contaminar, sin vibraciones,... y en un mundo imaginario donde nadie ensucia la atmósfera, ni ensordece, ni arruina el futuro y el presente de sus vecinos y de su ciudad.

Ahí comenzaron nuestras pesadillas. Resulta inenarrable, pero estos fueron los primeros indicios de que algo estaba mal. Todo aquello que nos parecía normal, aceptable, cotidiano,... dejó de serlo. Veamos algunas señales de que algo grave nos había pasado, porque comenzamos a creer que vivíamos en una realidad distópica:
  • Nos vimos rodeados de ruidos, de motoristas que podían despertar a toda una ciudad o de conductores agresivos que bramaban chulescos con sus obsoletos cacharros, reliquias históricas por muy reciente que fuera su compra, pero que ni la policía los oía. 
  • Comenzamos a sentirnos ahogados cuando esas traqueteadas furgonetas esparcían humos negros de olor insufrible, pero que a nadie más molestaban.
  • Tampoco el resto de los mortales parecía sufrir con los traqueteos de los motores diésel de los autobuses, o cuando se quedaban hablando en su garaje subterráneo durante mucho tiempo en medio de la humareda de sus motores de combustión encendidos.
  • Aparecieron como si nunca hubieran existido esas horrendas manchones negros de grasa en todo tipo de aparcamientos y calzadas, así como esas bocanadas de aromáticos olores (VOC) derivados del petróleo refinado al repostar, tan consustanciales con la civilización (o apocalipsis) del consumo irrefrenable.
  • La desconexión fue creciente: Dejamos de acudir a las gasolineras para repostar, nos desinteresamos de aceites y aditivos, y olvidamos aquellas inolvidables visitas a talleres para las periódicas revisiones de mantenimiento,... Ya no frecuentábamos aquellos alegres lugares donde se socializa, mientras nosotros recargábamos aislados en la soledad del hogar, del trabajo o en lugares de paso.
  • Lo peor fue la pérdida de la belleza de la complejidad de los motores de combustión interna, con sus miles de piezas en movimiento, lanzando calor, humos irrespirables e ineficiencia por doquier,... Nos habían convencido esos simplones y pequeños motores irrompibles y sin rozamiento. No advertíamos que se infiltraban en los últimos rincones del universo, después de haberse adueñado de casi todo en ascensores, electrodomésticos, bicicletas y patinetes o transporte limpio como Metros o AVEs,... y comenzando a entrar en autobuses, camiones, barcos y aviones.
Las alucinaciones fueron creciendo. La siguiente fase fue la incapacidad de comprender todas aquellas maravillas que admiraban nuestros conciudadanos y que no lográbamos apreciar:
  • Llamaban libertad a los atascos inmensos de coches humeando en medio de un embotellamiento, que aprovechaban para bajar las ventanillas a fin de escuchar esos rugidos y respirar aire filtrado por tan complejos como engañosos sistemas de catalizadores e inyectores de urea.
  • Idolatraban esa aceleración que no acaba de llegar, esa potencia teórica que se alcanza finalmente cuando suben las revoluciones del cigüeñal,.. Esa lentitud que otros habíamos sustituido por la inmediatez y par motor máximo propios de cualquier motor eléctrico.
  • Consideraban el número de tubos de escape como una cualidad de un coche, de modo que cuanta más contaminación vertían a su alrededor mejor era el producto (a pesar de que quienes primero lo aspiraban eran su familia y ellos mismos). 
  • Incumplían sistemáticamente las normas de tráfico, especialmente las limitaciones de velocidad, alardeando de ello, algo por lo que habíamos perdido el gusto nosotros al habernos habituado a esas capas de software de seguridad y ayudas a la conducción automatizada. 
Continuará el relato, porque no cesan ni menguan las manifestaciones o la gravedad de nuestro reciente síndrome del usuario de vehículos eléctricos. Ayúdennos a superar esta grave afección y no caigan en la tentación de probar, ni una sola vez, estos peligrosos productos aparentemente inocuos, pero de pérfidas intenciones. Hay incluso quienes les atribuyen conspiratorios intereses de desequilibrar ese armónico entramado de geopolítica del petrodólar, y todo para animar a la subversión del autoconsumo sostenible.
El síndrome del usuario de vehículos eléctricos

Movilidad eléctrica: ¿Problema o solución?

Movilidad eléctrica: ¿Problema o solución?
Tribuna de hoy en El Correo y en el Diario Vasco

Movilidad eléctrica: ¿Problema o solución?

La ciudadanía sabe que los precios de los coches han subido, e incluso que existen demoras prolongadas en las entregas por crisis de suministros como los microchips. La incertidumbre se agudiza por las subidas de los carburantes y se suma la polémica de las recientes prohibiciones del Objetivo 55 del Parlamento Europeo, que pone fin a la fabricación de turismos y furgonetas nuevos que emitan CO2 a partir de 2035.

Además, desde este año 2023 entran en funcionamiento las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), que restringirán la circulación a vehículos sin una etiqueta medioambiental de la DGT por el centro de las 149 ciudades en España con más de 50.000 habitantes, donde reside el 53% de toda la población.

La evidencia científica es irrefutable y avala estas restricciones ante la emergencia climática. Los trágicos efectos del calentamiento global, a escala planetaria por el efecto invernadero, son producto, en dos tercios, de la quema de combustibles fósiles según el Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático (IPCC).

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que aproximadamente el 90% de las personas de todo el mundo respiramos aire contaminado. El impacto de las emisiones del transporte como el ozono o partículas finas PM2.5 provoca varias categorías de enfermedades y millones de muertes prematuras.

"No hay plan B, ni planeta B". Si existe una disrupción tan anunciada como ineludible y conveniente, esa es la movilidad eléctrica. De hecho, el transporte más seguro y utilizado del mundo, el ascensor, siempre fue eléctrico. O el ferrocarril, en metro o en AVE. Vivamos esta transición energética como un hito histórico, no como una obligatoriedad. Sin prisas, por convencimiento personal, conociendo la realidad y la evolución de los vehículos eléctricos.

En 2015 creamos la Asociación de Usuarios de VehículosEléctricos (AUVE). Somos casi 6.000 miembros. Pertenecemos a GEVA (Global Alliance of EV Drivers' Associations), siendo la nuestra una de las organizaciones más activas y con más afiliación.

AUVE es una comunidad de voluntariado, sin cuotas, que organiza eventos para compartir nuestra experiencia, con neutralidad y realismo. Para nosotros esto no es el futuro, sino el presente y el pasado de quienes usamos diariamente vehículos sin motores térmicos.

Habiendo pasado la ITV (una o varias veces,…) sabemos que un vehículo eléctrico (VE) es una maravilla, eficiente, silencioso, con potencia instantánea,... que convence de modo inmediato e irreversible. Sus ventajas son innumerables, pero destacan el mínimo impacto ambiental, la máxima eficiencia energética, el inapreciable mantenimiento, la mayor durabilidad por su simplicidad y contar con la centésima parte de elementos móviles en sus motores,...

La infraestructura de recarga ya es suficiente y crece más rápidamente que el parque de VE. Finalmente, el precio de la electricidad por kilómetro, a pesar de las subidas recientes, es sensiblemente menor que el repostaje de combustible, habiendo la posibilidad de recargar en el hogar o en el trabajo, incluso gratuitamente con soluciones de autoconsumo. Asimismo, son muy prometedoras las expectativas de abaratamiento que ofrece la rápida expansión de energías renovables en nuestro país, que puede ser líder en eólica y solar.

Recomendamos asociarse en AUVE a quienes ya disponen de VE o lo están pensando. Ofrecemos información continua de novedades, asesoremos en la elección de marca y modelo desde la experiencia de quienes disponen del mismo VE, ayudamos con la gestión de las sustanciosas subvenciones, así como en la selección de puntos de recarga domésticos, seguros específicos o contratos energéticos óptimos para la amplia casuística de casos.

Exhortamos encarecidamente a probar un VE, como conductores o, al menos, como pasajeros. Comprobarán en persona lo que ya saben la bolsa (donde el valor bursátil de las empresas de VE supera al resto de marcas convencionales), usuarios muy viajeros como los taxistas, noruegos y centro-europeos, o los portugueses que casi triplican nuestro porcentaje de VE,…

En resumen: El VE no es una maldición, ni la panacea, sino una oportunidad, sin alternativa alguna. Los híbridos son algo coyuntural que suma desventajas, y los de pila de hidrógeno, sólo para el transporte pesado. Sentid nuestros vehículos eléctricos, conectados, autónomos, actualizables por software,... Son pura magia, como toda tecnología suficientemente avanzada.

Les invitamos a una próxima cita tendrá lugar en Bilbao y Vitoria-Gasteiz entre los días 24 y 27 de marzo de 2023, abierta a todo el público. Podrán debatir con voces autorizadas, del ámbito académico y de usuarios de tres países (Francia, Portugal y España). Será el I Congreso AUVE de Encuentro de AUVE con la Ingeniería, mostrada en congreso.auve.org.

Mikel Agirregabiria, Presidente de AUVE

Movilidad eléctrica: ¿Problema o solución?

AUVE firma un convenio con Zeemcoin App para impulsar la movilidad eléctrica

¿En qué consiste el acuerdo? Ambas entidades, AUVE (Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos) y ZEEMCOIN, persiguen acelerar la adopción del vehículo eléctrico en España aportando un mayor conocimiento a sus usuarios. Esta adopción pasa por mejorar la experiencia de recarga pública para los vehículos eléctricos.

Para ello, ZEEMCOIN ha desarrollado una App en la que los usuarios de vehículos eléctricos pueden evaluar los cargadores públicos en España. A su vez, por cargador evaluado, ZEEMCOIN recompensará a los usuarios con el token propio de la empresa, el Zeemcoin token. Este token tiene distinta usabilidad para el usuario y tiene como objetivo llegar a convertirse en el estándar de pago de la recarga pública en Europa.

Debido a que las dos entidades siguen los mismos principios, se establece un acuerdo entre ambas en el que ZEEMCOIN asume el compromiso de garantizar la privacidad de los datos personales recopilados de los asociados de AUVE y proporcionarles 100 Zeemcoin tokens (25$ en total de precio de salida al mercado) a los primeros 300 asociados de AUVE que se descarguen la App y hagan una evaluación completa de un cargador.

Por su parte, AUVE se compromete a difundir y comunicar el acuerdo para que sea conocido por todos sus asociados.

“AUVE ha llegado a un acuerdo con Zeemcoin porque compartimos nuestra doble apuesta de promover la movilidad sostenible y empoderar a los usuarios de vehículos eléctricos. La estrategia de gamificación consideramos que puede ser eficaz para animar a compartir toda la experiencia y trayectoria de años que acumulan nuestras personas asociadas con su inigualable conocimiento de los Puntos de Recarga.”

“Es una gran noticia que AUVE y Zeemcoin se unan en este acuerdo demostrando su clara apuesta por impulsar la movilidad eléctrica en España. A más usuarios evalúen cargadores en Zeemcoin App mejor será la experiencia de usuarios ya que se nutrirán de esos datos generados por la comunidad, y es aquí donde entra en juego AUVE con la mayor comunidad de conductores de coches eléctricos de España.”

Borja Moreno y Mikel Agirregabiria, tras la firma del convenio entre ZeemCoin y AUVE

Sobre Zeemcoin

ZeemCoin es la primera plataforma tokenizada del sector del e-Mobility, recolecta datos de calidad y experiencia de recarga de la red de cargadores rápidos públicos de Europa a través de su app móvil y su comunidad de conductores de coches eléctricos. Esta información ayuda a mejorar la experiencia de usuario a la hora de recargar su coche en la vía pública y en consecuencia impulsa la adopción del vehículo eléctrico acercándonos poco a poco a un futuro con un transporte libre de emisiones.

La localización de estaciones de recarga rápida de calidad y con las prestaciones adecuadas es un problema al que se enfrentan los usuarios de vehículos eléctricos, gracias a Zeemcoin esto nunca más volverá a ser un inconveniente. Zeemcoin aspira a ser la plataforma más completa gracias a la información que genera a través de la Gamificación, el Blockchain y el Big Data.

Los usuarios de Zeemcoin aportarán información valiosa sobre los puntos de recarga; Evaluar el correcto funcionamiento y la calidad del cargador, indicar los posibles aspectos a mejorar, reportar incidencias a solucionar (un cable en mal estado, pantalla deteriorada…) o indicar servicios cercanos (hoteles, restaurantes, parques, jardines…) son algunas de las acciones que pueden realizar los usuarios de Zeemcoin para aportar información. Esta información será recompensada mediante Zeemcoin tokens al usuario que la aporte.  La información recopilada será en tiempo real, actualizada y pública. Además, gracias al Zeemcoin token los conductores podrán formar parte del proyecto que revolucionará la industria de la movilidad eléctrica.

Además, puedes darle usabilidad al ZeemCoin token utilizándolo para:

  • Comprar una moto 100% eléctrica VELCA obteniendo 300 € de descuento
  • Alquilar un Tesla 100% eléctrico con FutureDrive
  • Instalar un cargador de coche eléctrico con la empresa IonClick
  • Hacer un curso sobre blockchain en Tutellus

A parte se pueden generar ingresos pasivos mediante staking/farming en la App de ZeemCoin, la cual estará disponible a partir del 18 de enero de 2023.

Sobre AUVE

La Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos o AUVE, es una asociación sin ánimo de lucro de ámbito nacional y compuesta por usuarios e interesados en los vehículos eléctricos. Esta asociación nace por la necesidad de impulsar la movilidad eléctrica a través de la infraestructura de recarga pública y de los incentivos de las administraciones.

Promueve, sin ánimo de lucro, el desarrollo del vehículo eléctrico, así como el equipamiento, aplicaciones, servicios e infraestructuras necesarias para ello así como protege y defiende los derechos e intereses de los usuarios de vehículos eléctricos.

Podrán formar parte de la Asociación todas las personas físicas que posean un vehículo 100% eléctrico o híbrido enchufable, ya sea automóvil, cuatriciclo, motocicleta, ciclomotor o bicicleta y todas aquellas personas interesadas en lo relacionado con la movilidad eléctrica, albergando interés en el desarrollo de los citados fines.

Modo de obtener la recompensa para usuarios de AUVE:

https://bit.ly/airdropAUVE.

Acuerdo de colaboración entre AUVE y EVowy

Acuerdo de colaboración entre AUVE y EVowy
Videoconferencia con David Elguezabal de EVowy,  y por parte de AUVE Miguel Zarzuela y Mikel Agirregabiria

¡Averigua la salud real de la batería de tu vehículo eléctrico!

La Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos (AUVE) ha suscrito un acuerdo de colaboración con EVowy, proyecto de investigación que persigue generar un proceso de certificación del estado de una batería en base al uso del vehículo sin instalación de ningún tipo de hardware.

El valor de segunda mano de un vehículo de combustión está determinado, en mayor medida, por su año de fabricación y los kilómetros recorridos que indica el odómetro. Sin embargo, el valor de un vehículo eléctrico está singularmente influenciado por el estado de su batería.

De esta manera, AUVE y EVowy pretenden aportar una mayor transparencia al mercado de compra-venta de vehículos eléctricos, facilitando que tanto comprador como vendedor conozcan el estado real de las baterías de los mismos.

Mikel Agirregabiria, presidente de AUVE, declara que “es una iniciativa de gran valor para los usuarios presentes y futuros de la asociación, facilitando información y consejos de recarga para la conservación de baterías a propietarios y conductores, además colaborando con una entidad cuyos objetivos de movilidad eléctrica son idénticos a los de AUVE”.

Por su parte, David Eguizábal, uno de los promotores de EVowy afirma que “esta colaboración con la AUVE supone un apoyo enorme al proyecto porque valida la utilidad del mismo para los conductores de vehículos eléctricos y nos aporta más fuerza si cabe para seguir empujándolo”.

Mediante el presente acuerdo, EVowy ofrecerá de manera gratuita a los asociados de AUVE que participen en el proyecto un informe mensual basado en la información recopilada en el mes anterior así como una certificación del estado de la batería una vez sea completada esta primera fase de investigación y lanzamiento al mercado.
Los asociados que deseen incluir su vehículo en la comunidad de EVowiers pueden hacerlo desde el siguiente enlace: https://evowy.es/auve

Para presentar este acuerdo y resolver todas las dudas que puedan surgir a los asociados y otros conductores de vehículos eléctricos, AUVE EVowy organizan un webinar el próximo 7-9-22 a las 19:00 a través del siguiente enlace: https://evowy.es/auve/webinar/

Esquema del Plan de Acción de AUVE para el 2022


Avance sumario del PLAN DE ACCIÓN DE AUVE PARA 2022 , para la grabación de un microvídeo, exponiendo los siguientes objetivos:

- Esfuerzo grupal para crear UNA ÚNICA CANDIDATURA CONJUNTA para la nueva Junta de AUVE (Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos).
- Campaña de Relanzamiento de AUVE.ORG para incrementar el reconocimiento de marca 
- Consolidar una estructura sólida de Junta Central y de las Delegaciones Autonómicas, Provinciales y Locales de AUVE.
- Duplicar el número de asociados en 2022, hasta llegar a 10.000 asociados, que seremos el 1% PIONERO del primer millón de conductores de VE que se alcanzará bastante antes de 2030. En ese año, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) aspira a alcanzar un parque de 5 millones de vehículos electrificados (eléctricos puros o híbridos recargables). Esa cifra se desglosa en 3 millones de turismos eléctricos y más de dos millones de motocicletas, camiones ligeros y autobuses.

HOJA DE RUTA

1 REDEFINICIÓN DE LA MARCA AUVE y de su ESTRATEGIA DE COMUNICACIÓN
- Creación y presentación de la “nueva” AUVE a partir de un cuidado análisis estratégico.
- Reformulación del propósito de AUVE (misión, visión y valores),  Enunciación de un Lema con una  Propuesta de valor y asentando los Pilares de la comunicación interna y externa.
- Revisión de Estatutos y Reglamento de Régimen Interno,… 

2 REESTRUCTURACIÓN DE GESTIÓN Y DE LOS SERVICIOS DE AUVE
- A nivel de Junta Directiva, en sus niveles central, autonómico, provincial y local.
- A nivel de socios con la creación del Club AUVE, que incremente beneficios y ventajas para asociados. 
- Búsqueda de sinergias con asociaciones de colaboración o cooperación como AEDIVE,… 
- Ideación de proyectos financiados por EUROPEAN CLIMATE FOUNDATION,… 

3 RELANZAMIENTO EN SOCIEDAD de AUVE con ENCUENTROS Y RUTAS ANUALES
- Organización anual de convocatorias noticiables de AUVE a escala estatal. 
- Creación de los Premios AUVE, definición del Sello AUVE de “calidad”, convocatoria, niveles, requisitos y creación del premio físico. 
- Redacción de convocatoria, notas de prensa,  entrega de premios AUVE en eventos tipo VEM (16 al 18 de septiembre de 2022).
- Convocatoria de ruta y concentración en colaboración con los ganadores de los premios AUVE. 

4 PROFUNDA DIGITALIZACIÓN DE PROCESOS EN AUVE
- Remodelación de la página web, adecuación de la imagen corporativa, incorporación de un sistema inteligente de mailing y valoración de nuevos canales de comunicación en mass media y social media.
Formulario de ALTA en AUVE.
Muchos más posts sobre AUVE.

Cruise de GM, primeros taxis autónomos en USA

Cruise de GM, primeros taxis autónomos en USA
Cruise, la empresa de conducción autónoma propiedad mayoritaria de General Motors pero con un fuerte apoyo de sus inversores, entre ellos Honda y Microsoft, ha comenzado en noviembre de 2021 a operar un servicio de coche compartido sin conductor en la ciudad de San Francisco. Los vehículos son Chevrolet Bolt 100% eléctricos. Cada taxi tiene un nombre único, como Poppy (con su propio Twitter)Tostada, Disco y Sourdough.

Fundada en San Francisco en 2013, Cruise fue adquirida por General Motors en el año 2016 por mil millones de dólares. La empresa, que es una filial independiente dentro de GM, cuenta ahora con más de 2.000 empleados, incluido un equipo de ingeniería de unos 900. Cruise señala en su web que ha realizado más de 4,8 millones de kilómetros de pruebas de conducción autónoma y su flota se expone a más de 20.500 cruces, 3.000 cortes y 3.000 coches aparcados en doble fila.
Lo noticiable es que Cruise se haya adelantado a la todopoderosa Alphabet (matriz de Google), y a su filial Waymo ya está realizando viajes no pilotados por humanos también en California. También Uber realiza ensayos con vehículos de VolvoHyundai ha prometido un robotaxi en 2024 y Argo, empresa conjunta de Ford y Grupo Volkswagen, realiza pruebas en ciudades de USA. Pronto, o no tanto, muchas ciudades se verán inundadas de robotaxis

Uber ha manifestado en varias ocasiones que, más allá de eliminar los accidentes, el coche autónomo supone un abaratamiento de costes fijos al eliminar la figura del conductor humano. La compañía Aurora Innovation prueba su sistema de conducción autónoma para camiones con la supervisión de un conductor; también realizan estas pruebas Daimler o Volvo Trucks. Según Aurora Innovation, su sistema aliviaría el estrés de los conductores y la escasez de chóferes (en España se cifra en 15.000 conductores profesionales). Pero no significaría una pérdida «masiva» de empleos en el sector, a corto o medio plazo.
Los taxis autónomos de Waymotras tres años previos de pruebas, fueron una realidad desde octubre de 2020 para todo el público general en el Área Metropolitana de Phoenix (Arizona, EEUU). Los coches autónomos de Waymo, Chrysler Pacifica, completan trayectos en una área que abarca un radio de 80 km en el Área Metropolitana de Phoenix y que, se sobreentiende, tiene perfectamente mapeada y trazada para facilitar la labor de los LIDAR, cámaras y sensores con los que cuenta. 

Los Waymo gozan de un nivel 4 de conducción autónoma (de momento los coches que se comercializan ofrecen como máximo un nivel 2 de autonomía), es decir, cuentan con un sistema de respaldo para actuar en caso de fallo del sistema principal y poder conducir hasta una situación de riesgo mínimo.
Conferencia de Mikel Agirregabiria, AUVE,  sobre Tendencias de futuro en movilidad en Nidec ARISA (Navarrete)
Post relacionado con Tendencias de futuro en movilidad.

InTertulia 8ª sobre guerra y paz según las diferentes generaciones


Como de costumbre, el último lunes de cada mes, en marzo de 2022 mantendremos una tertulia intergeneracional o InTertulia entre seis generaciones con personas nacidas entre los años '40 hasta en la primera década de este siglo XXI. 

En esta ocasión seremos los seis componentes actuales del Equipo de Titulares. Por orden de veteranía, Jesús Orbe Bidaurrazaga, nacido en 1947Mikel Agirregabiria Agirre, nacido en 1953Belén Varela, nacida en 1965Mentxu Ramilo Araujo, nacida en 1978; Maialen Olabe Aguirre,  nacida en 1993 Mikel Llona Allende, nacido en 2003
InTertulia 8ª sobre guerra y paz según las diferentes generaciones
- PRIMER EJE de conversación: Perspectivas, reflexiones, emociones, miedos, que ha despertado una guerra cruel en Europa, según las diversas generaciones,... 
- SEGUNDO EJE de debate: Acciones de solidaridad, cómo colaborar, cómo comprometernos, cómo hemos visto movilizarse a nuestro alrededor.... 

La RONDA FINAL será sobre qué nos ha sorprendido de otros puntos de vista, en la propia InTertulia. Visión fractal del resto de generaciones,... En las intervenciones, cabe incorporar lo que hemos visto a nuestro alrededor suscitado por este conflicto que sentimos más cercano por tener lugar en Europa.

Conductores de este programa: Maialen Olabe Mikel Llona. Al inicio comentarán que la desvirtualización de nuestra InTertulia  se ha pospuesto hasta el 31 de octubre de 2022 y que se celebrará en Aiala Valley, con una séptima generación añadida (la de los '80, la generación aparentemente más ocupada). 

Os esperamos en la VIII InTertulia:
Lunes, 28 de marzo de 2022 a las 19:00 en este YouTube.