Calidad Educativa Vasca
La Ley apela a un bello, y reiterado, concepto de calidad y a una “cultura del esfuerzo”, ideas generales con las que todos podemos estar de acuerdo. Lo cierto es que sus promotores poca ejemplificación de “esfuerzo” han demostrado en democratizar su gestación. Se ha aprobado el Proyecto en plenas vacaciones escolares, y fuera del periodo de presidencia europea, lo que proclama el poco entusiasmo que provoca, la contestación social que espera y su difícil “venta” ante la opinión pública. Entre las numerosas protestas, en Euskadi cabe recordar la multitudinaria manifestación del 4 de mayo a favor de un Sistema Educativo Propio, bajo el doble lema de “STOP a la Ley de Calidad del PP” y “Por una Educación Nuestra y Solidaria”.
Con un espíritu de evaluación constructiva, que los educadores debemos cultivar ahora más que la crítica pura que estimulamos hace dos o tres décadas por demandas del momento, expondremos los aspectos válidos, y otros no tanto, que hay como en cualquier propuesta. Como cuando se juzga el comportamiento del alumnado, conviene reseñar primero los aspectos negativos (conductas a corregir) y, luego destacar los elementos más positivos (salvando a las personas).
Las objeciones son, a nuestro entender, múltiples. La primera y sustancial para la realidad educativa vasca es que se trata de una Ley uniformadora, que además de invadir competencias asumidas (ya se ha anunciado la interposición de recursos de inconstitucionalidad) y de ignorar incluso la realidad bilingüe de casi la mitad del alumnado español, se dirige principalmente a corregir situaciones educativas superadas en Euskadi, como se describe a continuación.
La educación vasca, por los factores básicos como financiación, equilibrio de redes, grado de concertación o ratio profesorado/alumnado, se puede equiparar con los sistemas europeos más avanzados, que poco tienen que ver con los de algunas autonomías del Estado, con trasferencias tardías, y cuyos indicadores históricos de calidad están desgraciadamente postergados. La justificación misma de la Ley partió del “fracaso escolar”, aunque en la redacción final se ha obviado el término, que se cifra en más de un 25 % en el promedio del Estado Español, y que es muy inferior en Euskal Herria: Un 19 % en la CAPV (con un sistema plenamente bilingüe) y menos aún en Navarra.
Asimismo la Ley propone, como una de sus medidas más relevantes, que la gratuidad de la nueva etapa de Educación Infantil, ahora sólo en el tramo 3-6 años. Esta meritoria iniciativa puede mejorar la baja escolarización española, pero nada dice en Euskadi donde la escolarización es universal no sólo en esta etapa, sino incluso desde los 2 años. Algo similar sucedió con la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE) al escolarizar hasta los 16 años: esto ya había acontecido hacía años en Euskadi.
Debe saber la ciudadanía vasca, que la extensión de la escolarización en Euskadi en ambos extremos de edad discente, en 0-2 años y en porcentaje de universitarios es comparable y favorablemente con las sociedades europeas y norteamericanas más avanzadas, encabezando todas las series del Estado. Nuestro debate no es la concertación del 3-6 años, ni el 2-6 siquiera, sino cómo asegurar las plazas de 0-2 años para aquellas familias que lo desean y que optan por ello más que en ninguna otra sociedad del mundo.
Así mismo, en los aspectos curriculares las indicaciones de la Ley para adelantar el estudio de una lengua extranjera y de las nuevas tecnologías en Educación Infantil, o la potenciación en Primaria de las áreas instrumentales (Lengua y Matemáticas), las Lenguas Extranjeras son ya realidades en Euskal Herria. En este sentido, la consideración de asignatura troncal de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) es otra ocasión frustrada, que sí ha otorgado Blair en el Reino Unido. Esta administración ha declarado a la enseñanza como 'el desafío fundamental' de los próximos diez años, y destinado hasta el 5,6% del PIB (superando a la media europea), con un incremento del 50% de la inversión por alumno en ocho años. Cuando en la actualidad sólo el 4,4% del PIB se dedica a la educación en el promedio español, se haría realidad el binomio de “reforma y dinero”, evitando el mismo error que cometió la LOGSE en 1990.
En Euskadi, la financiación educativa global, comparable a la media europea, no es lo más perentorio, aunque sí su reordenamiento presupuestario junto a innovaciones organizativas y un nuevo “acuerdo educativo”, previsto en el Programa de Gobierno de Ibarretxe, tras el “pacto escolar” suscrito en 1992.
La visión centralista que inspira toda la Ley, provoca su pésima hechura. Trata de homogeneizar a un modelo único unos sistemas escolares tan heterogéneos en las distintas comunidades autónomas que justamente comete el error que pretende combatir: aplicar una política de igualación a la baja. Como sucedió con la Ley de FP, evoca el mito del posadero Procusto, que ajustaba el huésped a la cama con el expeditivo procedimiento de estirarle o cortarle miembros y cabeza.
La limitación que impone un artículo de divulgación no exime de enunciar otros errores organizativos: la supresión de la promoción automática en ESO, de forma que se repetirá el curso con más de dos asignaturas suspensas, no compensada con criterios para el profesorado a fin de comprender la gravedad y el coste familiar y social que significa cada repetición, de escasa eficacia en muchos casos; la imposibilidad de aceleración que permita aventajar al grupo de coetáneos; los posibles efectos de discriminación, clasificación y segregación social del alumnado; la especialización de algunos centros públicos en los itinerarios menos prestigiosos que podría provocar su segmentación, lo que se agudizaría si se yugulase la financiación pública; la división del profesorado por no favorecer la carrera docente y por “resucitar” el cuerpo de catedráticos; el freno a la participación de las familias; la devaluación adicional de la Formación profesional, a la que retrotrae a tiempos pasados;…
Finalmente la lista de “oportunidades perdidas”, puede constituir, por sí misma, la mayor objeción a la Ley: El nulo avance hacia un verdadero Espacio Europeo de la Educación; la falta de un moderno tratamiento para una “educación en valores”; el “cierre en falso” entre la asignatura de religión y su alternativa; la no provisión adicional de recursos para la enseñanza de idiomas y de las TIC; el escaso avance en el tratamiento de las necesidades educativas especiales; la conculcación de los derechos lingüísticos del alumnado extranjero en las comunidades bilingües con programas de aprendizaje sólo de la lengua española; …
Y después de toda esta lluvia de reprobaciones, ¿cuáles son los aspectos favorables que se prometían? Abreviadamente y sin exponer todos los matices que merecería cada caso: La Prueba General de Bachillerato o reválida, con una 'parte oral' de la lengua extranjera, mejorando una Selectividad con tribunales mixtos (Profesorado Público de Secundaria-Universidad), que ni aseguraba la coordinación entre la universidad y la secundaria, ni constituía una evaluación propia del sistema preuniversitario para homologar conocimientos y contrarrestar tendencias indeseadas en las calificaciones; los itinerarios formativos que regularicen el abanico de fórmulas de refuerzo -que de hecho ya se han desplegado en Euskadi- para la atención a la diversidad de la ESO; la reducción a tres modalidades en los dos cursos de Bachillerato; el fomento de la lectura;…
Otras posibilidades podrían vislumbrarse con una aplicación inteligente de la Ley. Como se señala en su preámbulo, “las reformas educativas han dejado de ser acontecimientos excepcionales, y se han convertido en procesos relativamente continuados de revisión, ajuste y mejora”. En este sentido, confiamos que la crisis, entendida como oportunidad, servirá para perfeccionar el Sistema Educativo Vasco, no tanto por las virtualidades de la Ley como por nuestro esfuerzo propio.
Valoración final. Como el ingeniero del chiste, que ni veía la botella medio llena como el optimista, ni medio vacía como el pesimista. Simplemente creía que estaba mal diseñada (a doble tamaño del necesario). Tag Technorati: euskara.
LOE: La Olvidada Educación
La educación es una tarea generacional, prolongada a lo largo de la vida, que afecta intensivamente a los más jóvenes, en un inigualable esfuerzo colectivo donde participan familias, profesorado, alumnado y el conjunto de la sociedad. Todo ello requiere un marco político y administrativo consensuado, con vocación de larga permanencia en el tiempo para garantizar el máximo aprovechamiento de tan ingentes recursos humanos y materiales.
La educación es responsabilidad de la familia, que delega en la enseñanza parte de sus funciones. La formación se estratifica en etapas, desde la educación infantil hasta la formación profesional o la universidad, y en planos de actuación abarcando desde el autoaprendizaje, el aula, el centro, la red o el sistema global. En el Estado español, con las competencias educativas transferidas a las Comunidades Autónomas, una nueva Ley Orgánica de Educación (LOE) ha despertado un doble debate, interno entre docentes y público donde se enfrentan algunas visiones opuestas (asignatura de religión, concertación de centros privados,…).
El proyecto de LOE presentado por el Ministerio de Educación y Ciencia para su tramitación en el Congreso ha sido calificado de muchas formas, según la perspectiva de los analistas. Puede definirse como un texto reducido, no excesivamente pormenorizado ni intervencionista, que busca soslayar los mayores escollos con los sectores más influyentes sin negar su inspiración “socialista”. Quizá la LOE sea una concreción del “talante Zapatero”, que -con paradojas y contradicciones- busca la máxima mayoría parlamentaria.
Repasemos algunas inconsistencias. En la exposición de motivos, declara que las evaluaciones internacionales recientes, como PISA (trianual) y TIMMS (cuatrianual), ponen de manifiesto que es posible combinar calidad educativa con equidad en su acceso, pero la LOE ni propone mecanismos urgentes de mejora (que obligarían a una mayor inversión), ni menciona las “devastadoras conclusiones del Informe Pisa” que denuncia el Consejo de Estado de Educación, máximo órgano consultivo que en su preceptivo dictamen proclama: “Parece como si el anteproyecto tratara sólo de modernizar el sistema educativo y no de corregir tendencias a la baja calidad que son de dominio público y preocupan a la sociedad…”.
Entre las incoherencias, sobresalen algunas. Propone el carácter “complementario” de las redes escolares pública y concertada, porque reconocer la “subsidiariedad” sería impresentable en nuestra realidad educativa continental, aunque luego en el articulado separe tajantemente entre centros públicos y centros sostenidos con “fondos públicos” (que incluiría a los privados concertados). Igualmente se pregona la autonomía de los centros docentes, pero no se facilitan instrumentos para ello en la escuela pública. Presume como gran novedad un área de “educación para la ciudadanía”, sin que se sepa quién impartirá tan difuso y discutible contenido.
En su última redacción ha incorporado el “esfuerzo individual de los alumnos”, como uno de los principios de la educación y como uno de sus fines “el mérito y el esfuerzo personal”. Este eslogan de la LOCE (Ley Orgánica de Calidad de la Educación) era uno de los aspectos más rescatables de la ley del PP, y aunque el PSOE se negaba a destacar su presencia, al final la obviedad se ha impuesto. Afortunadamente en la disposición final primera se pregona que el primer deber básico de los alumnos es… estudiar (lo que lamentablemente parece pertinente por un inexplicable olvido muy extendido).
El porcentaje de contenidos básicos de las enseñanzas básicas, 55% en las Comunidades Autónomas con lengua cooficial y 65% para las restantes, ha sido otro punto de polémica política artificial en prensa. Los educadores sabemos que la realidad escolar del siglo XXI exige un núcleo planetario absolutamente común (no en el Estado, ni en Europa siquiera), que es lo que se mide en las evaluaciones internacionales (matemáticas, ciencias, primera lengua,…). Igualmente sólo alguien ajeno a la práctica docente puede negar la indispensable adecuación curricular que desde la escala no sólo autonómica, sino de centro, de profesorado, de aula y de cada miembro del alumnado ha de programarse.
Otra espinosa controversia se centra en la enseñanza de la religión. La disposición adicional segunda comienza desacertadamente: “La enseñanza de la religión se ajustará a lo establecido en el Acuerdo sobre Enseñanza y Asuntos Culturales suscrito entre el Estado español y la Santa Sede,…”. Pareciera que la enseñanza religiosa no fuese una frecuente demanda familiar, de un alto porcentaje de madres y padres que la consideran esencial. Su deseo legítimo, al igual que el de quienes prefieren que sus hijos e hijas no reciban enseñanza confesional alguna, debe ser garantizado, al igual que los derechos de los docentes de estas materias. La opción más aceptable sería una materia de oferta obligatoria en todos los centros en sus versiones confesional (de todas las iglesias con representación significativa) y no confesional, para la aceptación voluntaria por parte de las familias. Debiera ser evaluada didácticamente para su notificación familiar, aunque no computable a ningún efecto académico (becas, promoción,…). El apartado 3º, que otorga a la entidad religiosa la condición de empleador y establece el pago delegado, no parece satisfacer ni al profesorado implicado, ni a las jerarquías eclesiásticas, por lo que parece inviable semejante variación unilateral de empleador cuando ni el receptor ni los trasferidos lo asumen. También sería de justicia la equiparación académica y salarial de este colectivo que reúne a más de 17.000 docentes en el Estado.
Entre sus cualidades, la LOE se destaca porque simplifica la proliferación de leyes educativas y de sus correspondientes reglamentos emitidos desde 1990, derogando -además de otras leyes menores- la LOGSE (Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo de 1990), la LOPEG (Ley Orgánica de Participación, Evaluación y Gobierno de los Centros Docentes de 1995), y la LOCE (Ley Orgánica de Calidad de la Educación de 2002). La litigada LODE (Ley Orgánica del Derecho a la Educación de 1985), corrigiendo algunos de sus excesos, queda drásticamente reducida a una cincuentena de artículos (de sus 63 artículos iniciales), e incluso también son abolidos o reformulados muchos apartados de los artículos vigentes por la disposición final primera del anteproyecto. Desafortunadamente, el anteproyecto delira cuando, en su apartado 5º de la citada disposición, introduce un disparatado y encubierto derecho a la huelga del alumnado menor de edad, que ni respeta las responsabilidades, derechos y deberes de los padres, ni mejora la participación discente en la organización escolar. Debería suprimirse este enunciado, sin perjuicio de recoger adecuadamente el derecho de reunión en el centro escolar, respetando los horarios de actividad y los derechos de cuantos constituyen la comunidad educativa, previa comunicación a la dirección o de acuerdo con ella.
Las preconizadas “evaluaciones de diagnóstico”, al finalizar el segundo ciclo de Primaria (10 años) y al concluir el segundo curso de la Secundaria obligatoria (14 años), pueden ser reconocidas como puntos positivos por su carácter formativo y orientador, sin la estricta connotación de reválida (que la LOCE promulgaba) y que al medir currículos (y no competencias) podría condicionar y uniformar excesivamente la necesaria autonomía docente para atender a la diversidad discente. De este modo, queda una medición objetiva de la Primaria, antes de su tercer ciclo, y otra graduación en la crítica edad intermedia de la ESO, cuando en 3º parece que muchos de nuestros estudiantes encuentran súbitamente todos los obstáculos en lo que parecía un generalizado progreso modélico. Más dudosa es la supresión de la PGB (Prueba General de Bachillerato), prevista en la LOCE y común en toda la Unión Europea (salvo en Grecia y Portugal).
El retardo de los itinerarios hasta 4º de la ESO es oportuno y paneuropeo, cuando aparecen tres materias de modalidad y algunas optativas, retrasando el prematuro adelanto de la LOCE. Igualmente resulta conveniente la suavización en el número de asignaturas no superadas para promocionar de curso, porque nuestro retardo medio no mejora ni la calidad ni la equidad, y porque son más efectivas las medidas de refuerzo dirigidas hacia la superación final. El clamor contra la “promoción automática” ni es exacta, ni se corresponde con la reglamentación de los países de referencia educativa.
El reagrupamiento en tres bachilleratos de Ciencias y Tecnología, Humanidades y Ciencias Sociales, y Artes es acertado. La fusión en el primero de ellos de los antiguos Bachilleratos de Ciencias de la Naturaleza y de la Salud junto al de Tecnología era necesaria, y debería servir para incrementar el flujo hacia esta modalidad. Únicamente entre las materias comunes del Bachillerato, previstas en el artículo 34, debería incorporarse el metalenguaje omnipresente de una “Matemática Aplicada”.
Las insuficiencias de la LOE son variadas. El avance que supone la declaración de carácter educativo de los dos ciclos de Educación Infantil (superando el anacrónico nombre de Preescolar que reitera el PP), queda desdibujado por no abordar este período en tres ciclos bianuales (como todo el resto de la educación hasta el diseñado en el Espacio Europeo de Educación Superior). La espuria razón para este lastre es la inercia anterior y la insuficiente financiación dedicada a esta etapa, que da lugar a discrepancias totales entre Administraciones Educativas donde se retarda Andalucía (única con tasas de escolarización menor del 90% de la población de 3 años), mientras el País Vasco supera el 90% incluso de la infancia de 2 años. La gratuidad promulgada por la LOE del segundo ciclo de Infantil (3-6 años) es una mejora sólo para las Comunidades más retrasadas, mientras que las demandas sociales en edades más precoces ya se desbordan en las Comunidades mejor financiadas. En esta etapa, la subsidiariedad de la concertada se manifiesta en el artículo 15, en donde se garantizan una oferta suficiente en los centros públicos (además sólo con un incremento progresivo desde la situación actual), mientras que apenas se esboza que “podrán establecerse conciertos con centros privados”.
Son meramente declarativas y sin previsiones las apuestas por la mejora de los idiomas (foráneos y oficiales), que la LOE sigue sin apoyar más decididamente, o el aprovechamiento de las tecnologías de la información y la comunicación, donde nuestro retraso pedagógico comparado es deprimente. Igualmente las bibliotecas escolares quedan simplemente citadas y no incentivadas.
La participación de las familias podría acrecentarse asegurando, en función de la edad del alumnado, porcentajes no inferiores a un tercio de padres adicionalmente a un sexto de alumnos, en el artículo 126 sobre la composición del Consejo Escolar, para mostrar quiénes son los destinatarios que justifican todo el servicio educativo.
Respecto a la equidad escolar, el creciente alumnado (propio y extranjero) con necesidad específica de apoyo educativo por origen o minusvalía (sensorial, síquica o motora), e incluso el de altas capacidades intelectuales, sigue en la ambigüedad o en la inseguridad al asegurarse que las dotaciones para centros públicos y concertados serán las mismas (artículo 72), mientras que simultánea y posteriormente en el artículo 112, de medios materiales y humanos, se distinga sutilmente entre sus apartados primero y siguientes. Inicialmente se menciona expresamente a los “centros públicos” como aquéllos que deben ser dotados por las Administraciones Educativas, mientras en los restantes párrafos sean los “centros” genéricos los que atiendan a alumnado de educación especial,… Este artículo debiera incorporar el detalle de referirse en todo momento a los “centros sostenidos con fondos públicos”.
Preocupante resulta el matiz establecido en el artículo 84, relativo a la admisión de alumnos, donde se cita que “las Administraciones educativas realizarán una programación adecuada de los puestos escolares gratuitos que garantice el derecho a la educación”, pero sin mencionar la libertad de elección que corresponde a las familias. En ese mismo artículo, falta la inclusión de un criterio que facilite la continuidad pedagógica en un mismo centro, tanto en el caso de titularidad pública como no pública. En el artículo 88, sobre garantías de gratuidad, sigue sin aparecer el coste de los servicios complementarios de transporte y comedor, que debieran recibir un tratamiento similar en todos los centros sostenidos con fondos públicos.
Tampoco se acomete en esta oportunidad un refuerzo de la formación inicial del profesorado de enseñanza infantil, primaria y secundaria. La convergencia de las condiciones laborales, profesionales y económicas del profesorado y del personal no docente, tanto de centros públicos como concertados, queda en el limbo de los deseos, con una confusa cita en el apartado 117.4 donde turbiamente se sugiere “posibilitar la equiparación gradual de la remuneración (del profesorado concertado) con la del profesorado estatal (sic)”. Como si no existiesen diferencias salariales, incluso entre funcionarios docentes (respecto al “profesorado estatal”, sólo el redactor sabrá a qué se refiere en niveles no universitarios). Por último, en el capítulo del profesorado, la disposición transitoria segunda podría extenderse más allá del 4-10-2010 el régimen de jubilación voluntaria de los mayores de 60 años, a fin de rejuvenecer las plantillas docentes.
Lo peor es el mantenimiento de un sistema educativo basado en la oferta, y no en la demanda familiar (artículo 109. 2). La misma consideración de la educación como “servicio público”, quedaría mejor expresada como “servicio esencial” o de “interés general”, con independencia de la titularidad pública o concertada del centro elegido por los progenitores (situación a la que más se acerca en el Estado la Comunidad Autónoma Vasca, por tradición y financiación). El progreso hacia un sistema cooperativo, prestado por centros públicos y otros de iniciativa social, se entorpece cuando se desiguala por titularidad, como en el artículo 122.3 donde se concede que sólo los centros públicos podrán obtener recursos complementarios. Esto es apropiado y novedoso, pero debiera abrirse en las mismas condiciones a todos los centros “sostenidos con fondos públicos”.
Resulta aberrante el apartado 3 del artículo 109: “En la programación de la oferta de plazas, las Administraciones educativas armonizarán (sic) las exigencias derivadas de la consideración de la educación como servicio público, con los derechos individuales de alumnos, padres y tutores. Asimismo, conciliarán (sic) la libertad de elección de centro con el principio de equidad, atendiendo a las limitaciones materiales derivadas de la capacidad de los centros y de las consignaciones presupuestarias existentes y al principio de economía y eficiencia en el uso de los recursos públicos (sic)”. Discrepamos profundamente de que la economía impida derechos fundamentales, o que éstos queden restringidos por inciertas razones de supuesta eficiencia. Nefastamente, en la redacción actual el Estado parece erigirse como único titular originario del derecho a la educación, quedando las familias y los centros educativos reducidos a concesionarios de tal derecho. A todos nos conviene que los padres defendamos nuestro derecho a escoger el tipo de educación que preferimos, incluida la formación moral y religiosa que responda a nuestras convicciones.
Nadie discute la necesidad de una reforma educativa, cuando los datos negativos se acumulan en informes internacionales o en comparativas de fracaso escolar. El optimismo para que podamos competir con los mejores debe partir del máximo realismo sobre nuestra posición de partida, así como de un amplio y comprometido enfoque comunitario. Una Pedagogía del Éxito entraña que las familias y los educadores mantengan expectativas positivas sobre las capacidades de sus hijos y alumnos, para afrontan motivada y conjuntamente tan decisiva tarea, solventando los problemas crónicos con ilusión y apoyo social.
Concluyendo: Conviven en el Estado sistemas educativos muy diferenciados que la LOE debiera impulsar y desarrollar mirando hacia lo mejor de Europa, nunca uniformar por abajo. En general, nuestras posiciones educativas son mediocres o insuficientes respecto a la Unión Europea, y entre los países de la OCDE. No es algo de extrañar, dado que socio-culturalmente, económicamente y en esfuerzo educativo (interés familiar y porcentaje del PIB) no destacamos especialmente hasta la fecha.
Sólo cuando la ciudadanía presiona electoralmente, los poderes públicos y los dirigentes políticos otorgan la merecida atención, prioridad y recursos a la educación, a la universidad y a la investigación. Es el tiempo de los hechos. Rige un lema magistral: 'Si alguien cree que la educación es cara, que pruebe con la ignorancia'. Nuestro futuro individual y colectivo, a corto, medio y largo plazo, depende básicamente de nuestra apuesta educativa. Ojalá el debate sobre la LOE nos permitiese advertir la trascendencia de lo que está en juego.
Versión final en: http://mikel.agirregabiria.net/2005/loe.htm
Nuccio Ordine, pasión por la educación, la literatura,...
Las reglas de la vida
La jovencita dijo a su madre: “No quiero volver a clase; esos estudios ya no me interesan”. A continuación, le contó con detalle sus… vagos proyectos. Prefería abandonar el ciclo de grado medio, a mediados de curso, para ‘descansar’ seis meses y después abordar un bachillerato y un ciclo de grado superior. En sus fantasiosos sueños, se iba a preparar para un gran esfuerzo… relajándose durante medio año sin más dedicación que haraganear de lunes a domingo.
No es un caso aislado entre nosotros. La familia no logra disuadirla, porque ella sabe combinar muy favorablemente su doble vertiente de niña y mujer. Al borde de la mayoría de edad, su mentalidad infantil le permite suponer que la vida es un juego, donde las decisiones no provocan consecuencias, y su soberbia actitud de casi adulta la lleva a reivindicar su libre capacidad de decisión.
La realidad es muy diferente a lo que ella supone. Unos meses sin obligación alguna marca negativamente su porvenir. Nadie que se acostumbra a la molicie recobra la actividad, simplemente porque llegue una fecha en el calendario. Aquel abandono prematuro, sin más argumentos que la simple y común pereza, en muchas ocasiones no puede ser corregida por progenitores y tutores, y significa el fin de los estudios en la etapa más propicia.
Hemos de saber explicar al sector menos estudioso de nuestra juventud que no merece paga ni vacaciones quien no trabaja, y estudiar es el trabajo de niños y jóvenes, quienes han de cumplir con su derecho y su deber de educarse. Si alguien no hace nada por los demás, ni siquiera por sí mismo (porque estudiar a quien más beneficia es a uno mismo), no puede esperar nada de la vida. Existe una regla básica en la naturaleza: todo cuesta un esfuerzo y quien no está dispuesto a aportar su contribución, a corto, medio o largo plazo cuenta con un negro futuro.
Versión para imprimir en: mikel.agirregabiria.net/2007/reglas.DOC
Breaking2, buscando el maratón en dos horas
Eliud Kipchoge - 2:00:25— Nike (@Nike) 6 de mayo de 2017
The barrier just got that much closer. #Breaking2 #JustDoIt pic.twitter.com/uw9Dz1zknE
¡Con UDS la GRANDIOSA llegada de #kipchoge!⚡️🏃🏽— Atletas.info (@atletas) 6 de mayo de 2017
¡Gracias por enseñarnos que el potencial humano da para más, para mucho más! ⚡️👏🏼#breaking2 pic.twitter.com/XcJGhdlibO
No estamos en crisis: Esto es lo normal...
Fueron demasiados errores en los que incurrimos como sociedad. Y el batacazo de volver a donde estábamos nos ha sorprendido. Desvariamos colectivamente sin invertir en investigación y educación, sin perseverar en el estudio y en el esfuerzo. Lo peor es que nos quieren mantener confundidos con “la salida de la crisis”, porque es una artimaña para confundirnos y ganar tiempo para los intereses de muy pocos.
Conclusión: No vamos a salir de esta “crisis”, porque de la normalidad sólo se sale con mucho esfuerzo de todos. La verdad es cruda y amarga, y sólo podemos descubrirla nosotros mismos: Hay que estudiar y trabajar mucho más, sin delegar tanto y sin quejarse, porque estos son buenos tiempos,… comparados con los que llegarían si no nos enteramos de una vez.
WOP Basado en historias reales #BiziEreduak
Una gran experiencia ver a estos cinco grandes (incluido Mikel Rentería, fundador de WOP), así como coincidir con Arantza Arruti, Leire Salterain (de WOP), Ana Alonso, Ana Balenciaga, Ana Madariaga,... Álbum de imágenes.
La vagancia visible (El trabajo oculto)
El trabajo permanece vergonzantemente oculto en ámbitos cerrados y privados, mientras la vagancia se exhibe descaradamente en espacios públicos y abiertos. Mientras muchos sudan la gota gorda en la profundidad de una mina picando carbón, otros muchos airean su holganza por los parques de las ciudades.
La imagen global que se proyecta ante los más jóvenes es falsa, privilegiándose el alarde de la vida regalada de algunos privilegiados que inducen a su imitación, mientras que quienes denodadamente se afanan preparando oposiciones, despiezando reses en un matadero o fabricando piezas en un recóndito taller son personajes desconocidos, de cuya existencia no se conoce detalle alguno.
Este desnivelado fenómeno no es sólo perceptible en la vida real, sino que los medios de comunicación de masas lo amplifican con insólito y perverso efecto. En horario de máxima audiencia sólo se programan y visualizan la existencia de indolentes vagos profesionales, famosillos cuya único mérito es el desparpajo de vivir a costa de otros.
Una perspectiva integral y completa de la realidad demostraría que suelen y deben ser consecutivas ambas etapas, la del esfuerzo y la del descanso. Sólo tras una fase invisible de estudio, de prácticas, de voluntad, de energía aplicada y de años de oficio se merece y se consigue un justo período de pausa, de descanso o de jubilación.
La próxima que circulemos por las calles en horario laboral y veamos a viandantes de paseo o de turismo, imaginemos cuánto empeño pusieron ellos anteriormente para alcanzar ese rato de asueto. Nada se logra sin desvelo y merecimiento; incluso no se disfrutaría lo mismo si algo sólo se lograse por casualidad o mediante atajos no basados en el mérito propio. Sería recomendable destacar todo el trajín social necesario de tantos trabajadores para que las cosas parezcan funcionar por sí solas. Sólo para cuando desayunamos, ya ha intervenido (en la leche, cacao, azúcar,…) más de medio mundo, entre agricultores de varios continentes, transportistas, comerciantes,...
Todos, y especialmente los niños y jóvenes en formación, debiéramos ser más conscientes de cómo el vivir en comunidad nos permite vivir tan gratamente, gracias al esfuerzo coordinado de tantas personas, profesiones y oficios, que armónicamente se organizan en lo que constituye el nunca suficientemente valorado “milagro social”.
Versión para imprimir en: mikel.agirregabiria.net/2007/vagancia.DOC
Entrevista de EuskoFederpen al representante de EAJ-PNV
- Señaló lo importante del carácter de este foro. La esperanza de vida y la vida saludable son grandes éxitos, pero también un desafío que nos ofrece una oportunidad singular.
- Para nosotros, nuestro sistema Socio-Sanitario tiene capilaridad, es decir, llega a todos los lugares. Puede que haya momentos donde puede haber disfunción, pero normalmente es un Sistema que funciona bien. Entendemos, que hay una financiación equilibrada. Que prime, la atención centrada en la persona, así como el confort y también el ocio.
- Defendemos los entornos amigables, para que todos nos sintamos seguros. Ponemos un impulso esencial en estos entornos amigables con autonomía e integración social. Estamos con Euskadi Lagunkoia, con Red de ciudades amigables con las personas mayores.
- Son importantes los entornos, la vecindad y eso nos permite construir una Comunidad juntos, eso también es seguridad. Con respecto a la Salud, es una cuestión de gran importancia, que requiere ajustes y medidas de mejora en Servicios de Atención Secundaria, respiro a los cuidadores/ras, la atención primaria que es esencial.
- Es necesario un acuerdo unánime en el que todas las formaciones políticas hagamos una estrategia de Atención primaria, con un desarrollo de forma amplísima en la atención primaria en el mundo de las personas mayores. El sistema ha funcionado esencialmente bien, yo creo que detrás del Sistema está el esfuerzo de todos, hasta cuando se habla de financiación.
- En nuestra comunidad, podemos decir que la inversión es de: 1.817 € de inversión por persona y año. Y somos los primeros en ese ranking seguidos de Navarra con 1.772 € por persona y año. Eso es un esfuerzo de todos nosotros con una decisión compartida, y lo podemos garantizar cuando vemos la brecha de otras comunidades que es de: 600 € por persona y año.
- Estamos ante un Desafío, es un hecho social sin precedentes. Personas Mayores autónomas entre 65 y 80 años, con un recorrido laboral completísimo y diverso, con una visión crítica y positiva y con ganas de participación social, es un hecho sin precedentes.
- Eso es gobernanza y esto es una revolución. Porque hemos reconocido que vosotros de alguna forma, con las movilizaciones, y con vuestra participación lo habéis puesto en la Agenda política. Con capacidades y luchando por unas necesidades que también la sociedad precisa, y en este tema, tenemos que tener una nueva forma de mirar.
- Promover el cuidado formal, con el cuidado comunitario y el cuidado familiar. Reforzar el cuidado formal institucional con el cuidado que se tiene primordialmente en: - Domicilios - Atención primaria - Servicios de día. - Productos y servicios de apoyo - Programas de respiro para las personas cuidadoras (evitando que se nos quemen), hay que cuidar al cuidador. - Modelo residencial integral.
- Poner en marcha un Sistema integral de larga duración, reforzando la atención sociosanitaria en la prevención, apoyo en la atención secundaria, la seguridad en la mejora del hogar. También es esencial, promover el Estatuto Vasco de las Personas Cuidadoras, cuáles son sus funciones y cuáles son sus derechos. Poner negro sobre blanco. Estamos reconociendo y dignificando estas funciones. Vamos a crear la primera estrategia vasca de las personas cuidadores.
- En colaboración con el sistema vasco del Sistema de Servicios Sociales, con la colaboración de Emakunde, estamos realizando un proyecto de corresponsabilidad de los hombres en el mundo de los cuidados, porque también el mundo avanza en esa vertiente.
- No seriamos inteligentes si desaprovecháramos el talento de las Personas Mayores. Para nuestra formación política es fundamental innovar en el aprendizaje a lo largo de la vida, transformando métodos en el proceso de enseñanza con personas formadoras. Conectar el aprendizaje con el conocimiento, para responder a las propias necesidades de las personas mayores, junto con otras necesidades de las personas jóvenes.
- Con carácter general, la intergeneracionalidad, es uno de los grandes retos del país y también a nivel universal, con el reto demográfico. Por ello, se necesita una estrategia integral con iniciativas concretas, tanto institucionales como familiares y sociales. Dentro de la iniciativa concreta a nivel institucional, sería como una respuesta coherente entre jóvenes y personas mayores, por ejemplo: Apoyar iniciativas de las personas mayores promoviendo el empleo juvenil. Y lo enlazo con la cuestión de la poca atracción de los centros de personas mayores.
- En relación a la desescalada, ha sido y es un elemento muy complicado. Ha sido algo inédito y contando con vosotros, con vuestra expectativa y conocimiento desde la toma de decisiones se ha ido corrigiendo. La experiencia que hemos vivido, nos ha ayudado a aprender y a coordinarnos.
- Cuando hablamos de voluntariado, es parecido a la unión de: - Conexión y Talento. Existe un compromiso de Regulación. La mejor experiencia que he tenido, ha sido cuando intervine en la Regulación, como ponente, de la Ley del 3º Sector Social. Nuestra fuerza política PNV, lo llevaba en el programa legislativo. La regulación de la Ley, no era el ámbito que más conocía, acababa de entrar en el parlamento y tenía poca experiencia política. Fue un proyecto que trajo el Gobierno, y en aquella época estaba Juan Mª Aburto como Consejero de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco.
- Le tengo mucho cariño a la Ley del Tercer Sector Social de Euskadi, por la actividad parlamentaria que generó. Se elaboró con amplísimo acuerdo de todas las fuerzas políticas y ese soporte normativo lo tenemos y lo podemos canalizar hacía todos los sectores de la Sociedad y también dentro del sector de las personas mayores.
- En este tema del voluntariado y la voluntariedad, tenemos que hacer un ejercicio y un impulso especial al talento y a la integeneracionalidad.
- Tuve la suerte de dirigir en Madrid un sistema público de pensiones. Es un tema que me gusta por lo que me siento a gusto con esta cuestión. La primera cuestión es la competencial, algunas veces hay o ha habido un intento por parte de algunos de crear una confusión. Las pensiones, junto con su régimen público es competencia estatal. El Gobierno Vasco no tiene campo. Dentro del Estatuto de Autonomía nos ampara el artículo Primero de la Constitución, porque recoge esa gestión económica de la Seguridad Social, pero las líneas básicas son de competencia estatal artículo 18.2 de la constitución. Se creó la Disposición Transitoria Quinta para unos meses, pero lleva 40 años.
- El hecho de la competencia no quiere decir, que nosotros no queramos participar en esas cuestiones. En el Pacto de Toledo, también como formación política hemos participado. Nuestra obsesión ha sido y serán las pensiones, dando curso y planteamientos de conocimiento de Sistema en todos los niveles.
- Dentro del blindaje, podemos decir que es un tema constitucional. Existen plataformas que defienden esta cuestión, y podemos entenderles que el blindaje constitucional ya está. Nosotros siempre hemos entendido eso. La Ley 23/2013, fue una farsa del Partido Popular. Planteamos que, con esa Ley, lo que recoge la constitución se va por el sumidero. Hemos sido tremendamente beligerantes con esa Ley tanto desde el Gobierno Vasco, como en el Parlamento.
- Desde el Parlamento Vasco también se han debatido acuerdos, en concreto, y siendo yo uno de los firmantes, el acuerdo de 1 de Marzo del 2.108. Fue un acuerdo de Régimen Público, donde se obliga a aquellas fuerzas políticas firmantes estar en consenso. Los partidos políticos firmantes fueron Elkarrekin Podemos, PSOE y PNV. No firmó el acuerdo EHBildu, pero sí el texto pactado.
- Nosotros después del acuerdo parlamentario, la hicimos propia porque tenía la virtualidad y la realidad de todos. Como elemento clave de los presupuestos del año 2107 que es de Montoro, aprobaron en el 2018, con la gestión de Aitor Esteban. Los compromisos que se adoptaron fueron: 1º El ámbito 2º Subida de 1,6% (Elemento del IPC) 3º Dejar sin efecto el Factor de sostenibilidad. 4º Dejar sin efecto la Ley 23.2013 durante 2 años.
- Desconozco cuál sería el esquema para la creación de un Consejo de Personas Mayores de Euskadi. Pero todo lo que sea transferencia del conocimiento, será mirado con buenos ojos. En las listas del PNV, llevamos tanto a personas jóvenes como personas mayores. Desde el nivel municipal de participación hasta los órganos de función de gobierno, hay personas de HELDUAK, que es una organización interna donde obligan a plantearse siempre estas cuestiones, y nos obligan a cuestiones formativas de Protección Social, Fiscalidad y Pensiones, y aportan mucho, no como meros destinatarios, sino como verdaderos emisarios y críticos.
Silver Innovation: Cisne negro, Rinoceronte gris, Dragón plateado
Comenzamos con un agradecimiento por la entrevista y por el esfuerzo durante esta inacabada crisis (Lehen bait lehen, eskerrik asko krisi larri honetan egindako lanagatik, bihotz bihotzez). Siguió con esa serie de lo que entendemos son sinónimos,... VIVIR es APRENDER, y eso es HACER, que implica INNOVAR porque hemos de CONTRIBUIR y COMUNICAR para LEGAR. Todos VERBOS DE ACCIÓN, que ejercitamos durante toda la vida consciente.
La jubilación es una última oportunidad, a veces la primera, para muchas de las personas mayores, quizá de sentir que pueden colaborar, aportar su experiencia,.... un paraíso anticipado (ese Tercer Acto del que habla Jane Fonda en el vídeo final). Ese aprendizaje activo puede seguir modelos de formación clásica, cursos de extensión universitaria o grados específicos, incluso con EPAs Educación de Personas Adultas,… Pero también otra fórmulas con sistemas autogestionados y aplicados por los colectivos de Mayores.
También trasladamos una PROPOSICIÓN que confía más en una real y justa Silver Innovation, que supere la mera Silver Economy que se limita a considerarnos como mera clientela. Somos prescriptores y revisores, incluso promotores, de estas crecientes ofertas que deben regirse por el valor social, y no sólo el económico en un mercado creciente donde Euskadi podría ser un referente. Citamos como otra perspectiva, el requerimiento de apoyo legislativo y financiero a nuevas fórmulas alternativas a los
Hemos vivido CISNES NEGROS de Nassim Nicholas Taleb, profesor de Ciencias de la Incertidumbre, incluso el COVID-19 es interpretado mejor como uno de los RINOCERONTES GRISES de la periodista de crisis financieras Michele Wucker. Los MAYORES somos uno de los DRAGONES PLATEADOS que ya se desperezan.
Creemos y crearemos fórmulas nuevas de becarios seniors, para MOVILIZAR TODA LA CAPACIDAD DE VOLUNTARIADO que ya suponemos y que puede crecer y sinergizarse aún mucho más. Confiamos en ser una sociedad piloto en vanguardia del bienestar y del ENVEJECIMIENTO ACTIVO (PROACTIVO Y ACTIVADO), logrando altas rentabilidades sociales e, incluso, económicas .
De nuestros mayores cuando éramos niños muchas veces escuchamos aquello de ¿Qué prefieres AYUDAR O SER AYUDADO? Ahora lo sabemos, toda la vida es una mezcla cambiante de ambas funciones. Pasaremos por ambas etapas, pero LO MÁXIMO es solaparlo en todas las etapas vitales. El APRENDIZAJE MÁS SIGNIFICATIVO se realiza con personas con quienes existe un vínculo emocional, y añadimos con personas en las situaciones o etapas en las que son más vulnerables (bebés, ancianos, enfermos), despojados de artificio, donde solamente quedan las verdades trascendentes.
Autoridades, conciudadanos: Cuenten con nosotras y nosotros. Les necesitamos (a ustedes, y a toda la sociedad), pero humildemente consideramos que también NOS NECESITAN (ustedes y toda la sociedad). Para que no se olvide,... Oparitxo bat zuretzat: Lehendakari Txit Agurgarria, Magister et Minister: Un pequeño letrero ANCORA IMPARO con una cita de Miguel Ángel a sus 87 años: "Todavía aprendo, hago, conquisto,...".
Félix Goñi con el Grupo Vasco del Club de Roma
Rara vez se escucha a alguien tan cualificado hablar con conocimiento, sinceridad, crítica y humor, todo al mismo tiempo. Desde el minuto 12:20 del vídeo (arriba incluido que encarecidamente se recomienda visionar), y tras la presentación de José Luis Jiménez Brea y Jon Arrieta, se despliega con un guión detallado (foto) que fue distribuido entre los asistentes a su charla.
Acompañado de su esposa, y colega, Alicia Alonso, Félix Goñi expone sus tesis desde la declaración preliminar de que universidad implica investigación, citando a Juan Urrutia. Proclama el propio CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) como universidad. Comparó los rankings de las universidades con el que resultaría de medir la temperatura corporal de los asistentes. En el caso de la universidad española la semejanza relativa deriva que ninguna puede "ni elegir profesorado, ni elegir alumnado". Con metáforas físicas, de dinámica o termodinámica (quien no se entere,... que estudie Física), resalta el corsé común del sistema universitario de todo el Estado español.
Entre las lacras de la universidad pública española menciona el asamblearismo, la funcionarización (de docentes y no docentes), la financiación insuficiente y la pobre valoración de la investigación. Asamblearismo derivado de la LRU (Ley de Reforma Universitaria) de 1983 que ningún partido quiere cambiar, porque anula la capacidad crítica de la universidad (por anulación vectorial del sistema de fuerzas). Funcionarización que puede desalentar el esfuerzo permanente por seguir investigando con la misma energía que antes de lograr un puesto vitalicio. Compara la respuesta pública española respecto a la investigación como la resistencia del aire. No sólo no apoya, sino que frena,... y especialmente cuando se quiere avanzar a cierta velocidad.
Responsabiliza a quienes gobiernan la ciencia en los recientes tiempos de crisis y que, a su juicio, han provocado la destrucción del sistema científico español en el período 2009-2011, y todo para apenas conseguir un mínimo ahorro (apenas calderilla), en cifras absolutas (a pesar del 20% de reducción significativa para la inversión e inapreciable para la macroeconomía). En este caso, el símil de la irreversibilidad del daño es como poner biberones al alcance de un bebé ya muerto por inanición.
Denuncia los créditos de la ministra Cristina Garmendia no accesibles para los principales centros de investigación que son las universidades públicas y el CSIC. También ridiculiza la inmediatez de los políticos que no saben observar el ciclo largo de la educación o la ciencia, como cuando Margaret Thatcher no apreciaba descenso en publicaciones tras recortes... en el mismo año, desinteresándose del futuro inducido. Nos reímos, en una presentación muy severa, con las encuestas del CIS donde como las profesiones más valoradas aparecen científicos, médicos y profesores, dedicaciones del ponente.
Aún es más contundente su despiadada crítica en la conclusión final de perspectivas. Félix Goñi teme un negro porvenir de España con única salida turística como parque temático (toros sin lidia, reservas de fumadores de Ducados,...), y donde acaso Euskadi y Cataluña podrían ser islas donde refugiarse. Indica que las administraciones vascas y catalanas están actuando en sentido contrario respecto al esfuerzo en investigaciones básicas. Los últimos minutos, a partir del 53:00, los dedica a las diferentes respuestas en Europa respecto a estos temas y a las novedades de Bolonia. Apunta el caso de Finlandia con aporte a la investigación en los '90 con el gran fruto que ahora podemos apreciar en todos sus efectos.
Listado de asociados e invitados del Grupo Vasco del Club de Roma que hemos disfrutado con este encuentro: Jon Arrieta Mardaras; José Angel Icaza Arregui; José Luis Jiménez Brea; Paul Ortega Etxheverry; Mari Feli Ruiz de Gordejuela; Peio Salaburu; Jose Mari Ziarrusta; Arturo Rodríguez; Pedro Ruiz Aldasoro; Josetxu Villacorta; Ane Agirre; Gregorio Uribechebarria, Jesús Bezos; José Mari Goñi; Javier de la Rica y Mikel Agirregabiria Agirre.
Álbum con las fotos del evento y el vídeo íntegro de la exposición inicial previa a la comida. Web oficial: www.clubderomagv.org. Otros posts sobre el Grupo Vasco del Club de Roma.
Una triste realidad que sucede en demasía
Sentados en la mesa de la sala de una casa sencilla y simple, donde vivo ahora solo, empezamos a hablar. El tema es sobre mi futuro. Un frío me recorre la espalda. Pronto ellos tratan de convencerme de que lo mejor para mí sería vivir en una residencia para ancianos.
Reacciono,... Argumento que la sombra de la soledad no me asusta y la vejez, mucho menos. Pero mis hijos insisten "preocupados". Lamentan, mientras tanto, que las dependencias de sus amplios apartamentos junto al mar estén ocupadas y por lo tanto yo no pueda estar ni con uno, ni con otro,... Así dicen ellos. Además, ellos y mis nueras viven muy atareados. Así que no podrían verme. Tampoco mis nietos, dado que estudian casi todo el día,...
En mi favor, argumento ya sin mucha convicción que, en ese caso, ellos bien podrían ayudarme a pagar una cuidadora. Frente a mí, el médico y el ingeniero dicen que serían necesarias, en realidad, "tres cuidadoras en tres turnos y todas con papeles". Lo que sería, en tiempos de crisis, una pequeña fortuna al final de cada mes.
Me niego aceptar la propuesta de vivir en un refugio. Entonces viene otra puñalada: Me piden que venda mi casa. El dinero servirá para pagar los gastos del hogar adonde iré por un buen tiempo, para que nadie se preocupe. Ni ellos, ni yo. "Es la mejor solución para todos",...
Me rindo a los argumentos, sin fuerzas para enfrentar tanta ingratitud y desafecto. Cierro mis labios y no hablo del sacrificio que he hice durante toda mi vida para financiar los estudios de ambos. No digo que dejé de viajar con la familia, de frecuentar restaurantes, de ir a un teatro o cambiar de coche para que nada les faltara a ellos. No valdría la pena alegar tales hechos a esa altura de la conversación.
De ahí, sin decir una sola palabra, decido juntar mis pertenencias. En poco tiempo, veo toda una vida resumida en dos maletas. Con ellas, me embarco hacia otra realidad, mucho más dura. Un hogar para ancianos, lejos de los hijos y los nietos.
La juventud actual te busca cuando quiere algo, cuando te necesita, pero cómo es lógico existen sus excepciones. La gratitud hay que forjarla, no viene incluida en el corazón de los humanos.
Pido disculpas por manifestar lo que pienso, pero deben saber que cuando lleguen a ser "viejos" querrán ser bien tratados por sus hijos y nietos. Eso no se consigue con dinero, sino con la bondad sembrada en sus corazones. Habrá padres y madres que están a tiempo de forjar esos sentimientos. Si no, Dios tenga misericordia de las nuevas generaciones.
Un relato anónimo que circula en Facebook. Algo que quizá sucede en demasía, ,...
Diez tendencias, previsiones y propuestas educativas
Con ánimo de aportar algunas ideas sobre la materia, en época de inicio de año, en plena madrugada, pensando quizá más como abuelo que como educador, con el máximo de honestidad, sin buscar ningún provecho personal, y sin temer nada por la franqueza, enumeraremos los que creemos son vectores de innovación educativa, enunciando la proyección, la predicción y la proposición en cada apartado.
- Primacía del aprendizaje sobre la enseñanza. Si el siglo XX algún día será reconocido por ser la centuria de la educación, sin duda el siglo XXI lo será del aprendizaje (incluido el aprendizaje invisible) o de la "educación expandida". Esta querencia es tan perceptible como imparable, pero se enfrenta a toda una era de escolarización con currículos y estructuras diseñadas en el XIX y un profesorado del XX. La trayectoria a seguir es la apuesta decidida desde las familias y la sociedad por la conjunción del aprendizaje formal (en un sistema educativo renovado) con el creciente aprendizaje informal y no formal. Este complemento educacional (el calendario escolar apenas cubre a lo sumo entre 950 ó 1.050 horas anuales de las 8.760 posibles), creciente por la implicación de otras instituciones y la digitalización que lo favorece, habrá de contar con mejor reconocimiento, validación y acreditación (como ya sugieren algunas Directrices de la UNESCO). En este concepto cabe la irrupción de emprendizajes que potencien los aprendizajes en horarios y calendarios suplementarios, bajo pautas lúdicas canalizadas por redes sociales en las distintas competencias a desarrollar.
- Creciente trascendencia (y debate) social de la educación. A pesar de que sus efectos siguen el lento ritmo de la naturaleza que exige paciencia y perseverancia, la educación y el aprendizaje son tan importantes que no pueden quedar sólo en manos de la política, o de la administración, o de patronales y sindicatos, o del profesorado, o del alumnado, o de las familias,... Es un tema clave de la totalidad de la ciudadanía, que debe ser vigilante con cuánto requiere y cómo ser gestiona, como la mejor inversión social. Por desgracia, la educación raramente es una prioridad cuando se analiza a corto plazo (la tragedia de la política), pero debe ser una constante sometida a la crítica y a la mejora continua. Hay demasiado desconocimiento, simplificación y condescendencia con nuestra eficacia escolar, con el logro de la equidad y la calidad académica que se alcanza. Convendría más examen sosegado, autocrítico, constructivo, ilusionante,... sobre el rendimiento del esfuerzo que la sociedad dedica a su educación.
- Todo el sistema educativo debe primar y centrarse en el alumnado (y sus familias mientras el alumnado sea menor de edad). Porque el alumnado es el núcleo de atención sobre el que articular las propuestas de aprendizaje. Toda la acción de la docencia y de la administración ha de estar al servicio del alumnado. Los derechos profesionales o laborales de los agentes escolares han de estar subordinados a su razón de ser: el alumnado (y sus familias). Esto ha de traducirse en un seguimiento docente más continuado, de forma que se fije el profesorado a etapas discentes (bianuales, como mínimo), involucrándose y responsabilizándose de modo más estrecho con el éxito escolar de cada alumno o alumna.
- Una educación del siglo XXI debiera avalar como un nuevo derecho humano el éxito escolar universal (en las enseñanzas básicas y obligatorias) de todas las alumnas y alumnos. Ya no basta que una sociedad se contente con ofrecer un pupitre a cada escolar, sino que ha de asegurar que - a lo largo de su trayectoria de escolarización- cada miembro del alumnado descubrirá su talento personal y elegirá su opción vital para convertirse en una persona integralmente formada (y ello también significa, con un destino profesional factible). Para todo lo cual deben generarse centros educativos diversificados con modelos variados que sean del agrado y permitan elegir a las familias (incluso, y especialmente, en un sistema público no homogéneo). También es preciso vincular más al profesorado con el éxito académico del alumnado a su cargo, secuenciando las metas competenciales a alcanzar en cada etapa. Al igual que un padre o una madre no acepta que alguno de sus hijos e hijas quede atrás, el profesorado comprenderá las circunstancias particulares del alumnado y buscará un camino que le lleve al máximo de sus potencialidades.
- Una cultura de evaluación constante se abrirá paso en todo el sistema educativo. Porque sólo una evaluación combinada (externa e interna) y contextualizada, general de todos los protagonistas (alumnado) y agentes, podrá garantizar la equidad y la calidad de todo el alumnado, de todas las aulas, de todos los centros, de todas las redes, así como de la administración, inspección, servicios de apoyo,... Siempre se consideró, pero luego no se aplicó, la diferenciación entre quien instruye (ahora diríamos mejor conduce el aprendizaje) y quien evalúa el proceso. Las evaluaciones diagnósticas, las evaluaciones externas, basadas en competencias y en contenidos, y desde la Educación Primaria, pueden ser un instrumento válido y esencial de mejora que establezca los refuerzos necesarios para que todo el alumnado progrese en conjunto, porque los desniveles se corrigen cuando son pequeños. Así se eliminarían, y a ultranza, las repeticiones de curso que se han demostrado inútiles.
- El currículum formal ha de concentrarse en los lenguajes y metalenguajes, para el limitado calendario de la educación formal. Las competencias (como la de aprender a aprender), los lenguajes naturales (euskera, castellano, inglés,...) y los metalenguajes matemático, científico, tecnológico y digital son la columna vertebral del currículo de las primeras etapas educativas. Para su debida consecución deben establecerse niveles y objetivos perfectamente definidos antes de finalizar las sucesivas etapas escolares. Los Boletines Oficiales, o las Leyes Orgánicas como la LOMCE, deben establecer niveles mínimos finales de las distintas etapas educativas, tales como el nivel de conocimiento de los idiomas oficiales o extranjeros, y según un baremo objetivo y mensurable. Y pueden hacerlo a escala de Estado, o mejor a nivel incluso continental, como el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCER). Pero no han de entrometerse en las metodologías pedagógicas para alcanzar dichos niveles, por razones tan obvias como la singularidad del alumnado, que hace difícil recomendar estrategias de aplicación general.
- La educación digital (reducación o sarezkuntza) debe transformar y mutar la escuela actual, potenciando nuevas realidades de aprendizaje transmedia con una comunidad abierta por el cauce de un Internet omnipresente y accesible a través de dispositivos móviles (smatphones, tablets,...), que debiera estar a nuestro alcance en todo momento y lugar. Su generalización abrirá el entorno escolar a las familias y al conjunto de la sociedad, que podrá participar por nuevas vías. Estas tecnologías han producido efectos inimaginables hace pocos años en las poderosas "industrias de la información", y muestran la misma oportunidad (y potencialidad de crisis) en las "instituciones de la formación". Su vertiginosa evolución (o red-volución) determina que lo que pudo ser una medida positiva como la distribución masiva de netbooks en Primaria y Secundaria ya no sea posible. Simple y llanamente, porque el mercado ha dejado de fabricarlos en favor de las tabletas digitales, lo que supone una vuelta a un super-pizarrín que pone en entredicho toda la historia de libros de texto, pesadas mochilas, diccionarios,... Y ya no caben excusas de costes, porque su abaratamiento (en continente y contenido) hace inexorable una inmediata tabletización con textos multilingües (tan beneficiosos para alumnado y familias), acceso inmediato y duradero, movilidad, inclusión digital universal,...
- Atención a la pluralidad de ofertas escolares (con diversidad de titularidades, modelos pedagógicos,...). El derecho a la educación, y al éxito educativo, reside en el alumnado, y en sus familias en tanto aquel es menor de edad. Debe ser objeto de atención y extremo cuidado el favorecer la multiplicidad de elección escolar, siempre que encuentre refrendo por parte de quienes se matriculan. Es una peculiaridad que puede dinamizar la innovación, mejorar la gestión y permitir la cooperación. Esa pluralidad debe protegerse con medidas que apoyen la adecuación a las demandas del alumnado (y de sus familias), que son quienes deben regir la planificación educativa. Para que la red de titularidad pública, la mayor de las actuales, actúe como una red educativa (como otras concertadas como Kristau Eskola, Partaide,...) debiera quedar organizada como una “Hezikidetza”, poniendo en juego la totalidad de sus recursos humanos. Así, la administración educativa general (con alguna semejanza con la sanitaria) velaría por el conjunto de la educación vasca mediante programas y conciertos a través de sus diferentes redes escolares, cuidando que la red de titularidad pública sea garante de la escolarización universal.
- Reordenación y aprendizaje permanente del profesorado, de las direcciones escolares, y del conjunto de los servicios de apoyo e inspección, así como de la administración educativa. El profesorado y las direcciones escolares, en pro de una máxima responsabilidad y autonomía de centros, son las piezas esenciales para que una sociedad se dote de una correcta y eficiente educación, con una amplia capacidad de autonomía a nivel de centro, departamento, etapa,... y de colaboración intrared o interredes escolares. La formación inicial y continuada, así como la carrera profesional, son aspectos a cuidar en la organización de la enseñanza, a fin de reconvertir a docentes en knowmads (nómadas del conocimiento). La administración debe simplificarse al tiempo que se hace más abierta y transparente para familias y agentes educativos. Los recursos humanos destinados a la educación han de reagruparse en torno a las aulas y los centros, actuando en proximidad máxima con el alumnado a fin de promover su éxito, en formatos presenciales o virtuales para compensar desigualdades socio-culturales de las familias a las que pertenezcan. Pervive demasiada estructura y jerarquía cuando nos encaminamos hacia un escenario de "Educación 3.0", basado en un aprendizaje más horizontal (entre iguales), un conocimiento aplicado contextualmente, unas relaciones menos jerarquizadas (en redarquías),...
- Urge un amplio "Acuerdo Escolar". En el caso de la Comunidad Autónoma del País Vasco que abarque a todo el sistema educativo vasco, algo no alcanzado tras 30 años de autogobierno, y que complete el "pacto escolar" de 1993 (que sólo cubría la mitad del sistema con una "Ley de la Escuela Pública Vasca" y que estaba programado para durar, a lo sumo, siete años). La génesis de este Acuerdo, extensible también a nivel de Estado y de Europa, debe propiciar una mínima regulación de modo que se confíe en las comunidades escolares que alientan cada centro, pero fijando metas medibles de resultados discentes. Ya han pasado 20 años desde el "pacto escolar" y han cambiado, afortunadamente mejorado, las condiciones. Ahora no basta una negociación sólo entre dos partidos, ni siquiera a escala exclusivamente política. Un nuevo acuerdo debe dimensionarse socialmente, escuchando especialmente a los agentes escolares -y en primer lugar a los prescriptores como lo son las familias-.