Amor correspondido
Amor se escribe siempre con mayúscula
Amor se escribe con mayúsculas porque no hay amores pequeños; toda clase de amor verdadero es grandioso e imperecedero. La vida mancha, pero el Amor salva. El Amor es una caja de herramientas que puede transformar el universo. El Amor es un caballo de Troya que desde dentro abrirá las puertas de la ciudadela y nos salvará del odio.
Amor se escribe con A de almas anidadas, de aventura y de altruismo, de audacia y de aceptación, de arrebato y de alegría, de amistad y de ayuda, de afirmación y de agradecimiento, de atención y de apoyo, de ánimo y de acompañamiento. Amor se escribe con M de mocedad y de madurez, de mesura y de modales, de maestría y de modestia, de melancolía y de magia de misterio musical. Amor se escribe con O de optimismo y de oportunidad, de originalidad y de observación, de obstinación y orgullo. Amor se escribe con R de rebeldía y rigor, de recato y reflexión, de respeto y de rectitud. Amor se escribe sin E de egoísmo, sin I de ingratitud y sin U de urgente. Amor, a veces, se escribe con H de humor, con una H superflua, porque lo nimio y el detalle son importantes en el Amor.
Hay muchas clases de Amor: a la pareja, a los padres, a los hijos, a Dios, a los hermanos, a la familia, a los amigos, a los necesitados, a la Humanidad, a un oficio, a una dedicación,… Pero todo Amor se escribe con letras de oro, porque el Amor es lo mejor de la vida. Todo lo que vale la pena es, al fin y al cabo, Amor. Al final, sólo perduran los frutos del Amor. El recuerdo y las obras de quienes amamos o nos han amado.
La vocación de vivir no es sino la profesión de amar. Los niños, y en toda casa debiera haber un niño, nos enseñan que vivir es tan sencillo como amar y ser amado. En la sociedad de adultos adustos, donde sólo la maldad es noticia y donde la ternura viaja en trenes rigurosamente vigilados, el puzzle de almas difícilmente encaja. Convirtámonos en ciudadanos del Amor proclamando: "Mi patria es el Amor". El Amor es contagioso, al igual que la falta de Amor. ¡Amémonos! ¡Sólo por hoy! ¡Sólo por ti, Amor! ¡Cuánto te quiero, Amor!
Amor y tiempo dedicado: Una relación proporcional y recíproca
El amor y el tiempo están intrínsecamente relacionados, ya que el #tiempo que dedicamos a alguien o algo es una de las manifestaciones más poderosas del #amor. https://t.co/4DQDdt6lhM pic.twitter.com/4QxicFcW8W
— Mikel Agirregabiria (@agirregabiria) October 22, 2024
Cuando el amor os llame, seguidle
Sobre el amor. EL PROFETA. Kahlil Gibran
"When love beckons to you, follow him, Though his ways are hard and steep,... |
Entonces dijo Almitra: Háblanos del Amor,
Y él alzó la cabeza y miró a la multitud, y un silenció cayó sobre todos, y con fuerte voz dijo él:
Cuando el amor os llame, seguidle,
aunque sus caminos sean duros y escarpados.
Y cuando sus alas os envuelvan, ceded a él,
aunque la espada oculta en su plumaje pueda heridos.
Y cuando os hable, creed en él,
aunque su voz pueda desbaratar vuestros sueños como
el viento del norte asola vuestros jardines.
Porque así como el amor os corona, debe crucificaros.
Así como os agranda, también os poda.
Así como se eleva hasta vuestras copas y acaricia
vuestras más frágiles ramas que tiemblan al sol, también
penetrará hasta vuestras raíces y las sacudirá de su arraigo a la tierra.
Como gavillas de trigo, se os lleva.
Os apalea para desnudaros.
Os trilla para libraros de vuestra paja.
Os muele hasta dejaros blancos.
Os amasa hasta que seáis ágiles,
y luego os entrega a su fuego sagrado, y os transforma
en pan sagrado para el festín de Dios.
Todas estas cosas hará el amor por vosotros para que
podáis conocer los secretos de vuestro corazón, y con
este conocimiento os convirtáis en un fragmento del corazón de la Vida.
Pero si en vuestro temor sólo buscáis la paz del amor
y el placer del amor,
Entonces más vale que cubráis vuestra desnudez y
salgáis de la la era del amor,
Para que entréis en el mundo sin estaciones, donde
reiréis, pero no todas vuestras risas, y lloraréis, pero no
todas vuestras lágrimas.
El amor sólo da de sí y nada recibe sino de sí mismo.
El amor no posee, y no quiere ser poseído.
sino más bien "estoy en el corazón de Dios".
Y no penséis que podéis dirigir el curso del amor,
porque el amor, si os halla dignos, dirigirá él vuestros corazones.
El amor no tiene más deseo que el de alcanzar su plenitud.
Pero si amáis y habéis de tener deseos, que sean estos:
- De diluiros en el amor y ser como un arroyo que
canta su melodía a la noche.
- De conocer el dolor de sentir demasiada ternura.
- De ser herido por la comprensión que se tiene del amor.
- De sangrar de buena gana y alegremente.
- De despertarse al alba con un corazón alado y dar
gracias por otra jornada de amor;
- De descansar al mediodía y meditar sobre el éxtasis del amor;
- De volver a casa al crepúsculo con gratitud,
Y luego dormirse con una plegaria en el corazón para
el bien amado, y con un canto de alabanza en los labios.
|

Salud, dinero y amor
Tras la lotería de navidad que nunca toca, se declara el día de la salud: “Mientras haya salud…”. Y ello recuerda la terna clásica de la felicidad: Salud, dinero y amor. Dos de estos elementos también aparecen entre las tres vivencias que nunca se olvidan: el primer amor, el primer dinero ganado y el pueblo donde se nació. E igualmente, amor y dinero se repiten entre las tres cosas que no pueden ocultarse: el humo, el amor y el dinero.
Muchos consideramos que el orden convencional de estos tres pilares del bienestar no es el correcto: Mejor sería primero el amor, luego la salud y finalmente el dinero. Paul Giraldy señalaba una diferencia: “El joven desea: amor, dinero y salud. Cuando llega a viejo desea: salud, dinero y amor”. Probablemente la salud no preocupa en la juventud y sí en la madurez, pero la primacía del amor y la relatividad del dinero debieran ser constantes en todas las etapas vitales.
El amor es la materia básica de la que está hecha la vida, porque la ciencia de vivir es el arte de amar. El vals de Rodolfo Sciammarella, que se remonta a 1939, insistía: “El que tenga un amor, que lo cuide, que lo cuide”. El amor además da trascendencia a la vida, con sus múltiples formas y dimensiones: amor de pareja, familiar, amistad, solidaridad,… Maurice Blondel señaló “El amor es, ante todo, lo que hace ser”.
La salud ha demostrado ser la mayor preocupación de la población según todas las encuestas, donde entre las circunstancias que más nos inquietan aparecen en los primeros puestos el fallecimiento, una larga o grave enfermedad o la invalidez, mucho antes que el desempleo o el divorcio. Con razón Emerson apuntaba que “la primera riqueza es la salud”.
El dinero es un buen sirviente, pero un mal amo; por ello, hemos de convertir al dinero en el más poderoso de nuestros esclavos. De ese modo, el dinero es algo maravilloso. Puede ser descrito como la energía de la Humanidad en forma portátil. Dispone de poderes que su amo no posee: puede acudir donde su propietario no llega, hablar idiomas que su poseedor desconoce y salvar vidas de quienes su dueño no sabe el nombre. Así mientras trabajamos en nuestra oficina, con un poco de fraternidad podemos estar colaborando mediante ONGs en escuelas, hospitales o asilos de lejanos países.
Lo cierto es que amor, salud y dinero son esenciales porque cuando nos falta alguno de estos factores no podemos pensar en otros objetivos; sólo si los hemos conseguido –en algún grado- podremos plantearnos nuevas metas. ¡Que el año 2005 nos traiga mucho amor, salud y dinero! Por si acaso no vienen por sí mismos, sería aconsejable ponerse a trabajar duramente para descubrirlos allá donde se encuentren.
Ella debió elegir
Ella apareció. Cuando nosotros pensábamos que el amor era una entelequia romántica, ella surgió en medio del grupo. Todos entendimos que ella era la mejor demostración de que el amor existe, porque toda ella era amor.
Ella nos enamoró a todos, hasta el delirio. Perdida, irremediable, absolutamente. Poco a poco comprendimos que el hechizo era fatídico, porque sólo uno podía ser el elegido. Y cada uno sabía que, seguramente, otro la haría más feliz. Así que tan pronto como la conocimos, la desesperación acompañó a la pasión. Supimos que nuestro gran amor jamás sería nuestro.
Ella se quiso ir, sin elegir. Porque también ella vio nuestro amor y nuestro dolor. Prefirió no acrecentar aquella insoportable desazón, prefiriendo a uno sobre los demás. Pero no lo aceptamos, tal era nuestro amor. Sólo escogiendo a uno de nosotros, los restantes podríamos superar la pérdida.
Ella aceptó que había de elegir. Y quería escoger, mas sin ofender a los no elegidos. Ella nos amaba a todos,… como amigos. Pero su corazón ya había decidido. Nosotros no lo entendíamos, y aún hoy seguimos sin comprender cómo elige una mujer.
Ella eligió por nosotros. No cabía otra fórmula. La disputa entre nosotros sería baldía, si ella no lo resolvía. Sólo ella podía resolver aquel enigma, aquella intriga que el alma nos deshacía.
Ella eligió. Por descarte, nos pareció, erróneamente. Ella habló, por separado, con cada uno de nosotros. Cuando llamaba y pedía conversar a solas, sabíamos que habíamos sido desechados. Sólo nos quedaba estar con ella, aquellos minutos finales, mientras se desvanecía para siempre la esperanza de ser el elegido y caíamos al abismo.
Ella no eligió a quien más admiraba. Porque la admiración está reñida con el amor, porque es amor congelado. El carisma es un sentimiento que abruma, pero no enternece. La admiración alaba, pero el amor es mudo. Así se lo comunicó ella al más venerado. Él lo aceptó.
Ella no eligió por su bien. Porque el interés sólo degrada el amor. El amor nace de dentro, nunca del cálculo o de la conveniencia. Así se lo declaró ella al más poderoso. Él lo aceptó.
Ella no eligió por vocación, como se elige la profesión, pero no el amor de nuestra vida. Así se lo declaró ella al más amigo, al más semejante, al que parecía su hermano. Él lo aceptó.
Ella no eligió por compasión. Porque por piedad se miente, pero no se quiere con la efusión de un gran amor. Así se lo declaró ella al más necesitado. Él lo aceptó.
Ella descartó igualmente al más fuerte, y al más alto, y al más popular, y al más guapo, y al más joven, y al más experto, y al más alegre, y al más simpático, y al más ocurrente, y al más preparado. Los grandes candidatos, los perfectos, sorprendentemente quedaron apartados.
Ella eligió al fin. Ella eligió vivir. Ella eligió así. Ella eligió al más enamorado, al más entregado, al más fiel, al más atento, porque era el más indicado. Elegir es imaginar. El gran amor de ella proyectó cómo sería la convivencia, fraguó cómo sería el futuro conjunto, y cómo sería nuestra descendencia.
Versión final en: http://mikel.agirregabiria.net/2006/ella.htm
Beldad, verdad, bondad
#AcciónPoética, pintando amor, futuro y esperanza
- Seré breve: Ven.
- ¿Y si fuera amor?
- El cielo a tus pies.
- Vos sos mi utopía.
- Mírame. Alcanzará.
- Suéltame el corazón.
- Faltas y todo me sobra.
- Te vi y dije: De aquí soy.
- Lo que sea, pero contigo.
- Bésame, luego te explico.
- Sin poesía no hay ciudad.
- Existo cuando pienso en ti.
- Mi color preferido es verte.
- La piel es de quien la eriza.
- Hasta olvidarte sería injusto.
- Eres tú: ¿Cómo no quererte?
- Ámame porque sí y sin peros.
- A besos entiendo, a veces no.
- Y soñar, verte los ojos y volar.
- Todo contigo o nada con nadie.
- Hazme el amor, pero de tu vida.
- Contigo hasta el último suspiro.
- No respires amor sin respirarme.
- Porque el beso define la historia.
- Háblame, solo para hacerme real.
- Yo me fui, pero mi amor insiste,...
- Eres un lento asesinato de ternura.
- Nunca se llega tarde al gran amor.
- Antes de rendirnos fuimos eternos.
- Dime dónde y nos perdemos juntos.
- La sonrisa es mía, el motivo eres tú.
- Yo sí creo en el amor a primera risa.
- El mundo se detiene cuando te beso.
- Sí puedo vivir sin ti, pero no quiero.
- Guardo en mis ojos tu última mirada.
- Es tan lindo saber que usted existe,...
- Piérdete en mí, y quizá te encuentres.
- Un amor conocerte, placer de mi vida.
- Todo lo que quiero en una palabra: Tú.
- No me desees buenas noches, dámelas.
- Decir tu nombre es deletrear mi destino.
- ¡Qué bonito detalle tuyo, ese de existir!
- Eres la casualidad más linda de mi vida.
- Díganle que me enamora cuando sonríe.
- No estamos distantes, estamos distintos.
- Que el amor valga la alegría, no la pena.
- Ojalá que tu adiós esté lleno de regresos.
- ¿Habrá algo más lindo que verte sonreír?
- Si no tardas mucho te espero toda la vida.
- Tu recuerdo es el pasaporte de mis viajes.
- No te quedes con ganas, quédate conmigo.
- Lo bonito no son los ojos, son las miradas.
- Acepta el milagro de habernos encontrado.
- Vámonos lejos, perdamos nuestros miedos.
- A pesar de los pronósticos de olvido,... estás.
- Mi fantasía textual es que me comas y punto.
- Nunca fuimos nada, pero siempre hubo algo.
- Adoro todo lo que no es mío: tú por ejemplo.
- Ten un buen día, tú, que leíste esto sin querer.
- Se acercan tiempos difíciles: Amar es urgente.
- Pudo haber sido lindo, pero lo hiciste perfecto.
- Quiero ser en tu vida algo más que un instante.
- Me senté a esperar por ti, pero llegaron por mí.
- Es en tus labios donde desembocan mis sueños.
- Te amo, pero no es para tanto,... Es para siempre.
- Habernos encontrado,... Ahora a corregir el destino.
- Fuiste, eres y siempre serás mi más bonita casualidad.
- Tal vez sólo fue un capítulo del libro que pudimos ser.
- Toda gran historia de amor comienza con una sonrisa.
- Iba a decir que me gustas,... y se me adelantó una sonrisa.
- Me dijiste "haz lo que quieras". Y aquí estoy, queriéndote.
- Si para el mundo no eres nadie, para mí eres todo el mundo.
- Si te volviera a conocer, volverías a gustarme indudablemente.
- Nunca fui tan millonario como cuando te tuve entre mis brazos.
- Sigues siendo lo primero que pienso cuando me piden un deseo.
- Mientras podamos ver la misma luna, nunca vamos a estar separados.
- Hay muchas formas de ser feliz. A mí la que más me gusta es estar contigo.
- Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos.
- Nadie es tan rico que no necesita una sonrisa, ni nadie es tan pobre para no darla.
- No sé ni cómo, ni cuándo, pero si va ser será... en su momento. Y será.
- Si piensas que la aventura es peligrosa, prueba con la rutina: Es mortal.
- Gracias por los amores vividos, perdidos, soñados, amados,...
- No se puede ser fuerte con alguien que es tu debilidad.
- Yo hago lo imposible,... Lo posible lo hace cualquiera.
- Hay una cosa tan inevitable como la muerte: la vida.
- Yo tampoco sé como vivir,... Estoy improvisando.
- Si no te gusta el mundo al derecho, ponte ɐl ɹәʌәs.
- Cuidado con los miedos, les encanta robar sueños.
- A puntadas de dolor cosí la pena de estos versos.
- Ya comprendo la verdad, ahora a buscar la vida.
- Si me emociona pensarlo, imagínate hacerlo,...
- No cuentes tus días. Haz que tus días cuenten.
- Con los ojos cerrados y los sueños despiertos.
- Te amaré hasta que π se quede sin decimales.
- Fuimos un cuento breve que leeré mil veces.
- La poesía no necesita adeptos, sino amantes.
- Cuántas cosas perdemos por miedo a perder.
- Condenados a amar lo que otros ojos aman.
- Dormir temprano para soñarte más tiempo.
- Escribo esta pared. Es mi forma de tocarte.
- No mires hacia atrás. Suele bastar con eso.
- No sabía qué ponerme,... Y me puse feliz.
- Es la hora perfecta para comenzar a soñar.
- Equivoquémonos,... el desamor no existe.
- Somos una casualidad llena de intención.
- Solo está derrotado quien deja de soñar.
- Me encontré con tu recuerdo. No dolió.
- Naciste para ser real, no perfecta.
- Que el amor nos salve de la vida.
- ¿Por qué callar si nací gritando?
- No vales la pena. Lo vales todo.
- ¡Solos,... al fin! Al fin, somos.
- Estamos a nada de serlo todo.
- ¿Qué eramos antes del amor?
- Te invito a sonreír. Yo pago.
- Ten el valor de equivocarte.
- El arte nace con tu mirada.
- Ayúdame a no pedir ayuda.
- Queda mucho por sentir.
- Dios está en los detalles.
- Tú existes, pero ¿vives?
- Salir ilesos del amor.
- Duerme, sueña, haz.
- Hoy llueve poesía.
- Sucederás, lo sé.
Siempre con amor

"Ama y haz lo que quieras, pero siempre con amor: Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor. Si tienes el amor arraigado en ti, ninguna otra cosa sino amor serán tus frutos." |
Dicen, por ahí, no sé quién, pero CON AMOR... |
Enamorados: En amor a dos
El día de los enamorados conmemora a San Valentín, obispo que defendió el matrimonio cuando Claudio II lo prohibió a los soldados profesionales al peligrar el Imperio Romano. San Valentín siguió bendiciendo las uniones en secreto, hasta ser encarcelado. Uno de sus carceleros, reconociendo su bondad, le pidió que educara a su hija ciega. Ella recobró la vista y se enamoró del Santo, quien envió una nota de adiós a su discípula antes de ser ejecutado el 14 de Febrero de 269.
Las actuales tarjetas también expresan un amor incondicional. Amor, amor con mayúscula, esa clase de pasión que ningún otro afecto puede superar. Por ello, se habla de estar enamorado como un loco, y se quiere decir como un… tonto. Así el primer deber de los enamorados es ponerse en ridículo, al pretender ser más amables de lo que es posible. Pero los enamorados se olvidan de que el mundo los observa (con envidia), dado que ambos enamorados no ven -de todo el entorno- sino a sí mismos.
El genial Shakespeare supuso que “el amor es ciego y los enamorados no pueden ver las graciosas locuras que cometen”. Por eso, se dice que los enamorados no ven, que la pasión les ofusca; pero muchos creemos que son los demás quienes no comprenden nada porque les apaga la indiferencia. Los seres humanos, cuando amamos, ponemos en el amor algo divino. Y ese amor se reduplica, se propaga y alcanza a quienes están cerca de cualquier enamorado, que son la más sólida alegría.
Para escribir una tarjeta de San Valentín no es suficiente, ni necesario, ser poeta: Es mucho más exigente, hay que estar enamorado. Y enamorarse es, por lo pronto, sentirse encantado por alguien, y alguien sólo puede hechizar si es o parece ser la perfección. Pero una persona enamorada no necesita ser rapsoda, ni perfecta: Logra ambas cualidades, a un tiempo, y sin perseguirlo.
Cuidado con lo que escribes. Nunca hables de ti, ni siquiera de ella. Habla de nosotros, y de un futuro con estrellas. En un amor vivo, todo es signo; el más nimio detalle anuncia difusas dichas o desdichas. Un amor a toda prueba se demuestra, cuando cada amante se enamora de la otra persona en cada aliento, percibiendo que su amada es única. Para un enamorado amar demasiado,… es no amar lo suficiente. Pero no desesperes; día a día aprende, hora a hora… ¡enamórate y enamora!
Versión final en: http://mikel.agirregabiria.net/2006/enamorados.htm
Proyecto Amor
PROYECTO: ¿Por qué en una tan corta vida gestamos tantos proyectos? Por la noche y al amanecer, creamos proyectos; luego, a lo largo de la jornada, no realizamos sino rutina y tontería. Los proyectos que necesitan de mucho tiempo o muchos recursos para ser ejecutados no tienen éxito casi nunca. La vida en sí debe ser un proyecto factible, lo que ocurre es que no somos sus únicos arquitectos,... pero sí sus principales artífices.
Los perezosos, especialmente, solemos ser grandes proyectistas. Algunos vamos camino de la jubilación y, todavía, forjamos grandes proyectos. Nos decimos: “Voy a hacer esto, lo otro y lo de más allá. Y, en efecto, muy pronto iremos a parar al ‘Más allá’”. Pero antes de que eso ocurra, aún estamos a tiempo de programarnos un proyecto alcanzable, grandioso y gratificante.
AMOR: ¿Qué cuarto, qué casa, qué barrio, qué pueblo preferimos entre los millones que existen? ¿Por qué apreciamos a nuestras amistades por encima de todas las demás? ¿Por qué incluso llegamos a amar tanto esos pequeños objetos que atesoramos? ¿Qué tiene de especial esa concha marina que conservamos desde la niñez?
Nos sucede a todos. Extrañamente preferimos unos viejos zapatos, una prenda desgastada, nuestro humilde bonsái o el habitual paseo cotidiano frente a cualquier otra alternativa. A mí que no me quiten mi quebrantado sillón que tantas horas y veladas me ha soportado por otro más moderno. Sé que algún día me lo sustituirá mi esposa Carmen, pero será en mi ausencia y sin mi aquiescencia.
En cada persona, e incluso en cada objeto, amamos, en suma, lo que nosotros ponemos en él. Admiramos casi siempre por razones fundadas, pero generalmente amamos sin motivos inteligibles. Cuando amamos, el corazón es el que juzga principalmente. Sólo amamos de verdad, cuando aceptamos por lo que es a quien o a lo que amamos. Así se puede adorar una desvaída fotografía de nuestra madre, más que cualquier cuadro famoso y costoso.
PROYECTO AMOR: La polisemia de “proyecto”, nos ofrece una solución vital asequible y valiosa. Sumémonos al proyecto de decir “proyecto amor”. León Tolstoi dijo que “El único refugio contra la desesperación es proyectar el propio yo dentro del mundo”. Quizá así emulamos la descripción bíblica de que la Divinidad proyectó a la Humanidad como un remoto reflejo de su esencia.
Sólo odiamos, lo mismo que sólo amamos, lo que en algo, de algún modo, se nos parece; lo absolutamente contrario no nos merece ni amor ni odio, sólo indiferencia. El mundo se proyecta en nuestro yo, pero aún más el yo se proyecta hacia el mundo. La vida se vuelve gris sin amor. Jacques Brel cantaba que “Hay palabras negras y palabras blancas, y otras que vivimos cuando amamos o cuando sufrimos y que se vuelven de colores”.
Es fácil comprobar que todo funciona bien en la vida cuando realmente nos amamos, es decir, cuando nos aprobamos exactamente tal como somos. Aceptémonos a nosotros mismos y a los demás, tal como somos, lo que incluye una insaciable voluntad de mejora perpetua. Sólo vivimos en este mundo cuando lo amamos, aún en sus detalles más minúsculos. Únicamente es eternidad el tiempo en que perfeccionamos y amamos a quienes y a lo que tenemos cerca.
Versión final en: http://mikel.agirregabiria.net/2005/amor.htm
Hamor: Suma de humor y amor
El valor de esta tarea radica en que facilita al alumnado juvenil una teoría sobre el amor, una competencia que académicamente no ha merecido todo el interés que requiere para conducirse hacia una vida feliz y responsable.
Como plus un vídeo y una imagen.
Muchos más posts de amor y de humor.
Síndrome de Simón (3/4 Peter Pan, Wendy y Laura)

Materialista. La sociedad actual ha ido fabricando cada vez más hombres inmaduros –pero no mujeres–, viven centrados en sus trabajos, sus amigos, diversiones, algo de cultura y poco más. La mujer busca un amor, al contrario,verdadero, auténtico, pero se ha producido en los últimos años un aumento de la inmadurez sentimental en el hombre, divertida, juguetona, banal,… Busca el mejor coche, el mejor móvil,... y lo mismo en sus parejas temporales.
¿Hay mujeres que puedan tener el Síndrome de Simón? En principio, no es frecuente. Eso sí, cada vez más parece ser que por cada Simón aparece una Síndrome de Laura (Liberada, Autonóma, Universitaria, que Racionaliza el Amor -POST SIGUIENTE-). Pero, visto todo lo anterior, ser una Laura no es tan divertido como ser un Simón, aunque emocionalmente mucho más sano.
Amor fosilizado, lo más humano desde la prehistoria
.@mejorconecta2 de @Telefonica habló con el paleontólogo español, Ignacio Martínez, sobre como las ideas, los valores compartidos, el amor y la capacidad de trabajo en equipo han permitido al ser humano ser la especie dominante.
— Alfonso Gómez (@agomezpalacio) January 16, 2025
Conozca más en 👉 https://t.co/pZ9Sekj2tm pic.twitter.com/ySi097UAR3
Para saber quienes somos nos tenemos que preguntar de dónde venimos. Los humanos nos queremos tanto en vida que nos seguimos queriendo despues de la muerte -Única especie que lo hace. Los humanos somos lo que no nos pueden copiar- Ignacio Martínez Mendizábal 👏🏼👏🏼#GEFMadrid2024 pic.twitter.com/LjtqrfclG0
— JIMENA FERNANDEZ (@jimenafc) May 8, 2024
Poesía y literatura en Twitter
Potente metáfora sacada de la cotidianeidad, para aprovechar cada día y cada minuto. Carpe diem,... La vida no es "para llevar", sino para "comer aquí" y con todo.Nota del día vía @paito_b13 pic.twitter.com/kXHNeWWfmH
— Dr. Alberto Blázquez (@Dr_Blazquez) October 2, 2021
— literland (@literlandweb1) September 27, 2021Tres tuits de @Literland, una imprescindible dieta de aprendizaje y literatura para alegra cada día,... La literatura es el modo más elegante de ignorar la vida.
Y el amor, siempre el amor como el secreto de la felicidad, la esencia de la vida,... La felicidad es amor, no otra cosa. Quien sabe amar. es feliz."Alicia en el País de las Maravillas"
— literland (@literlandweb1) September 30, 2021
Lewis Carroll pic.twitter.com/isRxTYMCrt
Por último: el amor no necesita ser perfecto; basta que sea verdadero.“La felicidad es amor, no otra cosa. El que sabe amar es feliz”.
— literland (@literlandweb1) October 2, 2021
Hermann Hesse pic.twitter.com/pJ21DWaZWT
El amor no necesita ser perfecto, sólo necesita ser verdadero. #BuenosDias #BuenosDiasATodos #BuenosDiasMundo #FelizDomingo #3Oct pic.twitter.com/t8Mc68N2kl
— Imma Badia🌷 (@63imma) October 3, 2021
Amores humanos
Antes de morir, por una vez al menos, hemos de declarar nuestros amores. En público, ante el ágora de nuestro entorno, sin reparos ni escrúpulos. Lo más íntimo es para ser vivido y lo vivido sólo adquiere sentido si es compartido. El amor es como el fuego, que si no se comunica se apaga.
Los amores son algo personal, muy de cada uno, pero pueden clasificarse en dos categorías básicas. Hay amores humanos y querencias espirituales. Seguramente los deseos idealistas son superiores a las pasiones humanas, pero éstas son más universales y la base de otros anhelos más sutiles. La aspiración de inmortalidad, la fe en Dios, la admiración por la Bondad, la esperanza en la Humanidad, la propensión hacia la Verdad, el éxtasis con la Ciencia o la complacencia con el Arte,… son amores de los humanos, pero no dirigidos hacia otros humanos, sino a entes o conceptos que trascienden.
Entre los amores de humanos hacia humanos existen tres clases, muy diferentes pero no preferenciales. Se distinguen por el parámetro más dimensional de la existencia: el tiempo. Muy pronto todos seremos polvo de estrellas, pero antes en este breve lapso de vida terrenal, la edad es nuestro reloj implacable.
Los primeros amores son los más decisivos, propios de todas las personas que alcanzan la consciencia. Son el amor hacia nuestros padres, a nuestros abuelos y a nuestros familiares mayores, a quienes nos cuidan y a quienes nos enseñan. Este querer siempre lo llevaremos con nosotros, aún alcanzando las puertas de la muerte, allí nos acompañarán nuestros antecesores. Son los amores más hondos, más arraigados, más instintivos, más entrañables, más determinantes, los más sagrados.
Los segundos amores son a nuestros coetáneos, a nuestros hermanos, a nuestros primos, a nuestros amigos y, muy especialmente en el caso de personas emparejadas, a nuestros cónyuges. Estos amores son los más presentes, los más envolventes, los más elegidos, los más trabajados, los más forjados, los más recreados y reconstruidos.
Los terceros amores son hacia nuestros sucesores directos en la familia o en nuestro legado. Destacan, en el caso de personas con descendencia, el cariño de padres y abuelos hacia sus descendientes, pero este cariño también es vivificante con los sobrinos, con quienes nos relevan, con quienes han aprendido con nosotros (alumnos, lectores,…) o simplemente con quienes nos recordarán. Son los amores más alentadores, más gratificantes, más culminantes, los más esperanzadores.
Sólo hay vida donde hay amor. Quienes viven de amor viven de eternidad. El sentido de la vida radica en el amor, que sostiene el Mundo y mueve el Universo. Amar es el principio, amar es la fuerza, amar es el método, amar es el fin.
¿Qué haría Jesucristo?
Ambos contendientes Bush y Kerry han recurrido, para la movilización del electorado indeciso, a la búsqueda de todo tipo de aliados y simpatizantes, incluso en las instancias religiosas. Numerosas jerarquías y representantes de los diferentes cultos y sectores estadounidenses se han pronunciado a favor de uno u otro candidato, en función de su posicionamiento político.
Francamente, no vale la pena recopilar las exhortaciones de algunos prelados sugiriendo un aval del Dios universal a un candidato y comparando a su adversario con el mismo demonio. En plena batalla electoral y cuando parece que todo vale para ganar a cualquier precio, se desentierran grupos que han actuado incluso con parafernalia paramilitar de brazaletes con las siglas "QHJ" (¿Qué haría Jesucristo?, en Florida incluso en castellano). Intempestivas y desafortunadas opiniones que interpretan en clave partidista y unívoca la respuesta que Jesucristo podría ofrecer a sus seguidores.
Desde una perspectiva europea, todo ello denota el trasunto de la extendida percepción estadounidense de pueblo elegido y tierra prometida, como hebreos del Antiguo Testamento. Incluso hay quién se cuestiona si Dios es norteamericano. En ocasiones, los conservadores en USA actúan como ungidos por la divinidad con la Verdad absoluta. El fundamentalismo que combaten (el islámico ahora, el comunismo antes), se efectúa con una visión igualmente intolerante y fanática por parte de algunos máximos dirigentes, que se consideran “cruzados” del Bien categórico contra el Mal absoluto.
Somos mayoría en el mundo quienes creemos que, en una verdadera democracia y con el pleno respeto a la libertad religiosa (de creer o no creer), solamente cabe proponer claves éticas para guiar los pasos de de la ciudadanía ante sus problemas cotidianos. Cada uno puede elegir en quién se inspira para tomar sus resoluciones. Para los creyentes cristianos, Jesucristo respeta el libre albedrío personal, al tiempo que nos ofrece criterios de ayuda en nuestras decisiones.
Jesucristo no es una mala opción, creemos muchos; mas es difícil discernir con certeza cómo obraría Jesús en cada ocasión. La suya fue una revolución salvadora basada en el amor y la esperanza. Su mensaje evangélico de amor fraterno es grandioso, pero persiste la incertidumbre de cómo acertar en cada caso.
En cada situación podríamos traducir el "¿Qué haría Jesucristo?" por el equivalente ¿Qué haría una persona que ama a todos?" Jesucristo nos instó a amar aun en difíciles circunstancias (Lucas 6:27-33). “El amor se sacrifica y no exige recompensa; sólo el amor trasciende y nos trae una paz verdadera”. La injusticia crea conflictos; pero también es cierto que toda contienda puede hallar una solución pacífica, no violenta, de restitución de la verdad y de la justicia política, económica y social.
No es verosímil que Dios apueste por soluciones bélicas, ni guerras santas. Las citas bíblicas que abogan por el entendimiento son innumerables: "Busquemos, pues, lo que contribuye a la paz y nos hace crecer juntos” (Romanos 14, 17-19). El amor es el punto de partida de todo, con un querer que no excluya a nadie. No basta amar a familiares y amigos, ni a los de nuestra religión, etnia o grupo social. Derribemos los muros de prejuicios que nos hacen indiferentes ante el dolor ajeno, porque la pasividad siempre será culpable. Si anhelamos la paz, debemos practicar el amor hacia todos como si fuesen hermanos nuestros. Eso haría Jesucristo. Y nosotros somos las manos de Dios en la Tierra.