Luis Alfonso Gámezes periodista, trabaja en el diario 'El Correo', es autor del blog 'magonia.es' y recientemente ha presentado"Escépticos", un programa de EITB y de K2000 creado, escrito y dirigido por Jose A. Pérez (quien fuera nuestro ponente en la I Cita GetxoBlog). Se ha insertado unas líneas más abajo el primer programa de Escépticos, la primera serie de televisión dedicada al pensamiento crítico. Gámez, junto con el gran ilustrador Iker Ayestarán, ha publicado el recomendable libro "La cara oculta del misterio (Editorial Comares)", que esperamos leer y analizar en las próximas vacaciones con un rato libre, sean las fechas que sean.
Un reconocimiento, que sabemos que no lo es a título personal sino como uno de los miembros de los muchos equipos equipos y de una generación que ha trabajado décadas desde Getxo. Quizá y a lo sumo - por ese grado de representación de un getxoztarra promedio activo y conectado-, con presencia en esa híbrida realidad física y virtual que la maldita pandemia ha desvelado incluso a los más escépticos. Un humilde peón de ajedrez (peatón, decía nuestra hija Leire cuando era pequeña), la pieza menor pero constante, que siempre avanza al frente sin mirar atrás, y que unidos son el alma del juego,…
Este post se escribe para expresar toda la gratitud debida a este gran municipio de Getxo y a todas la personas y organizaciones que hoy nos han podido acompañar, así como a muchísimos otros familiares, amigos y colegas que no están hoy en este escenario Arrigunaga de Muxikebarri (Getxo). Comenzando por mi esposa Carmen de la Sen desde 1973, que es la que mueve a esta marioneta que es quien suscribe,...
Gracias a quienes habéis podido estar hoy aquí en esta feliz ocasión de un sombrío 2020: A Roberto Martínez Celorrio y Juan José Quiñones, Presidente y vicepresidente de Nagusiak Bizkaia, al tiempo que Presidente de Sarekide (no sabéis la que estáis armando proponiendo a un tal Mikel en la Secretaría desde la Asamblea General que celebraremos en el Euskalduna dentro de 16 horas); a Julio Usandizaga, Presidente de Euskadi&Internet; a Mónica Mediavilla, Secretaria de GetxoBlog; a Gorka Palazio, catedrático y futurista de Getxo; a Teresa García Oviedo, de eCivis; a mi “hermano digital” Venan Llona, su esposa Irune y mi prometedor “sobrino” Mikel Llona, que tanto han hecho, hacen y harán por Getxo,…
Demostráis generosidad e
inteligencia, el Jurado, esta Alcaldesa Amaia Agirre Muñoa y las concejalías presentes de
todos los partidos,... Entendemos que nos pedís seguir reenganchados en nuestra
labor. La respuesta es obvia y unánime: CONTAD CON NOSOTRAS Y NOSOTROS, seguid
contando, por favor.
Apenas soy un educador y divulgador de la ciencia, la tecnología y la innovación disruptiva y sostenible, un diletante apasionado por todo lo humano descubierto con el aprendizaje compartido,... Ha sido una casualidad ser un coprotagonista, un testigo de procesos relevantes (del 2º gobierno vasco en la transición, de los Pactos Escolares y las Leyes Educativas, de la política y la poLírica,…),... Comunicador leal e impenitente aprendiz de todo, maestro de nada: un museólogo sin museo, un escriba, un cronista, un viajero del paisanaje, un fotógrafo, un blogger, un conector, un nudo de las redes sociales y digitales, un nodo más en una redarquía que representa mejor la realidad contemporánea que las jerarquías anteriores.
Me siento un eslabón de la familia, biznieto de nuestros bisabuelos, nieto de nuestros abuelos, hijo de nuestros padres, hermano de mis hermanos, marido de Carmen con quien recorremos la vida desde 1973, padre de nuestros hijos, aitxitxe de nuestros nietos, amigos de mis amistades, convecino de nuestros vecinos,…
Aplausos finales.
Entre nuestras aficiones, concienzudas y constantes, está poner a Getxo en el ciberespacio. Lo hicimos desde 1994 con nuestro hijo Aitor (y el resto de la familia) en GetxoWeb, 338 calles recorridas y visibles en lo que fue un precedente de Google Street View que apareció en 2007,… Y desde 2009 con GetxoBlog, 12 ediciones anuales y centenares de eventos,… Y ahora con un proyecto nuevo, “Getxo-On”. También disfruto haciendo de fotógrafo, cicerone, anfitrión de Getxo atrayendo viajeros para que nos conozcan,…
Todo esto y nuestra trayectoria profesional nos llevó a conocer personalmente y a tratar a personas excelentes, como a Humberto Cirarda Ortiz de Antiñano (que nos enseñó la Alcaldía en una visita inolvidable), a Iñaki Zarraoa Zabala, a quien conocíamos desde 1977 en el Colegio Azkorri; a Imanol Landa Jauregi, con quien coincidimos en múltiples; al tantos años concejal de Cultura, Koldo Iturbe, que nos apoyó en muchísimos proyectos (para los que nunca pedimos subvención, pero sí otras ayudas como locales,...), a enlaces como Urtzi Altube Iparagirre y también con Amaia Agirre Muñoa, desde su etapa de concejala y con enlaces circunstanciales entre nuestros abuelos paternos. El suyo ilustre, que hizo de Getxo el único municipio de Bizkaia con un Alcalde que llegó a Lehendakari (como Arrasate y Laudio), y el mío Ezequiel también muy querido y recordado en casa).
Mikel Agirregabiria Agirre
(Bilbao, 1953) es un físico teórico, con estudios avanzados de Ingeniería
Industrial en Electrónica y Automática, de Informática (autor de HiperHiztegia, primer traductor automatizado desde y hacia el Euskera con otros tres idiomas, con sinónimos y antónimos, y
creador de la SoftKutxa),
así como experto y máster en Museología (especialidad de Museos de Ciencia,
Industria y Tecnología). Profesor Titular de Didáctica de las Matemáticas y las
Ciencias Experimentales en la UPV-EHU. Director de Formación en EITB (Radio
Televisión Vasca) durante ocho años entre 1991 y 1999. Su periplo por la administración vasca
abarca cuatro Departamentos: Educación donde fue Jefe de Servicio de Tecnología
y Educación; Cultura como asesor de Ciencia, Tecnología e Informática;
Presidencia en Prevención de Drogodependencias e Industria como Jefe de
Servicio de Euskadi en la Sociedad de la Información.
Ha sido funcionario en tres administraciones estatales y
autonómica vasca, además de emprendedor de kIDEAk,
una singular Academia de Inteligencia en Getxo (1995-2000), o el pionero de quienes
lograron el primer microordenador comercializado en 1981 hasta comercial de
grandes ordenadores Fujitsu. Precursor del teletrabajo, siempre ha sabido
simultanear trabajo y aficiones, que se entremezclan.
Autor de
numerosas publicaciones, ponencias, programas y obras, desde el primer libro
escrito sobre Logo (Urmo, 1984), editor de la obra "Tecnología y
Educación" (Narcea, 1988), hasta redactor de planes institucionales y
políticos, como "Hezkuntza XXI: Una
educación para el Siglo XXI" (2006). Activo e influyente blogger, es
miembro de Aprendices, fundador de Ikasbloggers, presidente de GetxoBlog y promotor de BlogEu (Bloggers de Euskadi), Premio
honorífico 2014 de Internet&Euskadi, Premio DEIA al mejor blog de 2015, además
de estar presente en casi todas las redes sociales.
Ha
organizado centenares de conferencias y eventos, dirigido cursos de verano,
siempre sobre el tema de las personas e innovación en las organizaciones. Entre
sus intereses actuales destacan la transformación digital en los diversos
ámbitos educativos y de aprendizaje, así como en los entornos culturales,
sociales, sindicales y políticos.
Hoy nos interesa el futuro, no el pasado. Seguimos diciendo en la actual época es
NUESTRA época, también de las personas mayores. Toda la vida anterior nos ha llevado hasta aquí: Ahora nace la
mariposa de la oruga de etapas anteriores y comienza lo mejor de la vida. No es
un final sino el principio de una fase de plenitud y felicidad con óptima dedicación y promesa máxima de aciertos.
Nuestro objetivo presente es despertar el dragón dormido de esa denominada “edad media” por la
OMS, entre 66 y 79 años, tras la jubilación para sumar talento y aportar
soluciones con la Silver Economy, o mejor con la Silver Innovation. Y seguir
colaborando desde el voluntariado en mejorar nuestro municipio,… y el resto del
planeta.
Nunca está de más recordar datos, en una fecha dada, de esa proyección de la identidad digital de Getxo que hemos recogido a lo largo de décadas:
“Arquitectura y Espacio Público”: Adi! Bulegoa, Servicios de consultoría en el diseño e implementación de procesos del ámbito del espacio urbano, de la arquitectura y el diseño.
“Cultura en la Educación y Valores”: Jaime Lafita Bernar“dalecandELA”, asociación sin ánimo de lucro cuyo fin es recaudar fondos para la investigación en la lucha contra la ELA y apoyar a quienes viven con la enfermedad.
“Cultura científica e innovadora”: Miren Lauzirika Jauregi, consultora de creatividad e innovación en Art for Life! y presidenta de Emakumeekin.
“Patrimonio cultural tangible e intangible”: Bego Salazar Romo, navarra afincada en Getxo que ha recopilado fotos antiguas del municipio y del Puerto Viejo en más de 200 álbumes hechos a mano.
El Wi-Fi, o wifi, nace en 1999 con la Wi-Fi Alliance (nombre actual) que buscaba hacer compatibles los diferentes estándares de comunicaciones inalámbricas. Las empresas 3com, Airones, Intersil, Lucent Technologies, Nokia y Symbol Technologies se reunieron para crear la Wireless Ethernet Compability Aliance, WECA, así llamada entonces. La Wikipedia habla extensamente de los "riesgos del Wi-Fi", pero se refiere a la seguridad en lo relativo a la transmisión de la información. Las redes Wi-Fi operan en la banda de 2.4 GHz, y la tercera generación (3G) de telefonía móvil en 3.5GHz, y la próxima cuarta generación (4G) en 3.9GHz.
El Wi-Fi pertenece a las radiaciones electromagnéticas (EM, no confundir con las ondas mecánicas como el sonido) de las microondas, que por su posición en el espectro general, que de menor energía a mayor abarca desde las ondas de Radio – TV – Microondas – Infrarrojos – Visible- Ultravioleta - Rayos X hasta los Rayos Gamma. El Wi-Fi es una de las Radiaciones NO IONIZANTES, que no penetran en las moléculas (algo probado por el efecto fotoeléctrico descubierto por Einstein, y por el que le otorgaron el Premio Nobel de Física de 1921). Las ondas no ionizantes por su frecuencia a la que emiten no son capaces de romper, ni de mutar las células. La energía de sus fotones es el producto de la constante de Planck por la frecuencia ν de la onda lumínica. Es cierto que con esta misma frecuencia operan los hornos microondas de la cocina, y son capaces de calentar el agua, pero la potencia aplicada es muy superior (de orden de 500 ó 1.000 veces, lo que dista de 0,1-1 W hasta 800-1.000 W), por lo que serían necesarios acumular centenares de emisores Wi-Fi en muy poco espacio para producir un calentamiento similar.
Es cierto que siempre se invoca el principio de precaución ante los riesgos desconocidos, pero conviene recordar que tras miles de investigaciones (y aún hay decenas en marcha), la ciencia NO HA HALLADO RELACIÓN entre estas ondas EM y ninguna enfermedad. No hay ninguna prueba científica convincente de que las débiles señales de RF, y bastaría una sola para prohibir estos equipamientos, procedentes de las estaciones de base y de las redes inalámbricas tengan efectos adversos en la salud.
Llevamos décadas conviviendo con estas radiaciones EM producidas por la humanidad: Hace más de 100 años comenzó la radio (usadas en 1897 por Marconi y desde 1906, en emisiones utilizando el principio heterodino, cuando Reginald Fessenden transmitió desde Brant Rock Station (Massachusetts) la primera radiodifusión de audio de la historia). Son más de 50 años de TV, 20 años de móviles, 11 de Wi-Fi, WiMax,...
La referencial Wikipedia se ocupa de la seguridad del Wi-Fi, pero de la seguridad de los datos, de la información transmitida,… Sólo en la versión inglesa se referencian algunos estudios relativos a la salud, sin pruebas fehacientes que superen el "método de doble ciego" (herramienta del método científico que se usa para prevenir que los resultados de una investigación puedan estar influidos por el efecto placebo o por el sesgo del observador). La hipersensibilidad electromagnética, está recogida en la Organización Mundial de la Salud OMS como una enfermedad mental, psicológica, propia de enfermos imaginarios que somatizan su miedo,… una percepción de riesgo, una auto-sugestión de algo amenazante subjetivamente,… Varias asociaciones que amparan estas fobias son de una fuente común y están movidas por intereses económicos, vendiendo "mantas" que protegen a los bebés,...
Decenas de estadounidenses que dicen haber caído enfermos por las consecuencias del wifi se refugian en la localidad de Green Bank, en West Virginia, un área de exclusión de 33.000 kilómetros donde están prohibidas por ley las emisiones de radio,... a fin de no perturbar las delicadas emisiones que recogen los potentes radiotelescopios allí instalados.
Es cierto que la OMS ha establecido en la categoría 2B al Wi-Fi entre los posibles carcinógenos aún bajo observación, al igual que el café, los vegetales encurtidos (conservados en vinagre), la gasolina, los tintes,… Está fuera del Grupo 1, carcinógenos para humanos; y del Grupo 2A, de "probables carcinógenos",... Lo que dice la Organización Mundial de la Salud, si consultamos su página web, es que la exposición a radiofrecuencia de estaciones (RF) de base oscila entre el 0,0002% y el 2% de los niveles establecidos en la directrices internacionales sobre los límites de exposición. Su conclusión es que «Teniendo en cuenta los muy bajos niveles de exposición y los resultados de investigaciones reunidos hasta el momento, no hay ninguna prueba científica convincente de que las débiles señales de RF procedentes de las estaciones de base y de las redes inalámbricas tengan efectos adversos en la salud». Ésa es la versión científica vigente a nivel internacional.
Para finalizar hay quienes, legítimamente, recomiendan sustituir las conexiones Wi-Fi por cables físicos con conectores RJ ethernet 45, a fin de disfrutar de Internet. Es cierto que con ello no renunciamos a todo el aporte de la realidad digital, pero sacrificaríamos algi tan esencial con la cultura científica que es una competencia básica. Porque aceptar riesgos infundados del Wi-Fi exigiría unas escuelas también sin bombillas (la luz visible es mucho más energética que el Wi-Fi), sin sol, sin teléfonos inalámbricos, Radio-TV, LEDs,… y sin m-learning. Sin contar que los accidentes (sí probados de caerse con 25 ó 30 conexiones por cable) que se producirían.
Dado que ya se ha hecho pública la convocatoria, anunciamos el próximo Internet Meeting Point 2011, #fimp, que tendrá lugar los días 7 y 8 de octubre de 2011 en el Hotel Silken Ciudad de Gijón (Asturias) en el que participaremos por invitación de Carlos Urioste, uno de sus activos organizadores. Mejorando en cada nueva edición, el encuentro aspira a ser más abierto y enredado que nunca, combinando reflexiones con acciones presenciales y virtuales con mucho humor, música y fotografía.
Con un impresionante plantel de ponentesse abordarán temas del momento en Internet, con foros que abarcan la política, escépticos, seguridad en el hogar, emprendedores, sectores industriales en dificultades, los cambios en la sociedad vinculados a las redes sociales, o la realidad sobre el asesinato de John Fitzgerald Kennedy, pasando por la fotografía,...
Todo ello aderezado con divertidos monólogos (Isasaweis, Antonio Cabronero de Blogpocket, Chiara Cabrera, Raul Ordoñez de Bitacoras.com, Leticia Blanco de Vintage and Chic o María Cañal de Escarabajos, Bichos y Mariposas), mucho humor, famosos, tweets, Internet & Sidras y como colofón a dos jornadas intensas un concierto con el grupo más popular de la red durante el año, los asturianos Stormy Mondaysque pusieron la banda sonora (Sunrise Number 1) al último viaje del transbordador Endeavour e Igor Paskual, colaborador de EL COMERCIO, hiperactivo bloguero y virtuoso guitarrista, habitual en la formación de Loquillo y los Trogloditas.
El 14 de agosto de 1912, un pequeño periódico de Nueva Zelanda publicó un breve artículo que anunciaba que el uso global del carbón estaba afectando la temperatura de nuestro planeta.
Esta gacetilla de hace 110 años ahora es famosa y se comparte a través de Internet todos los años como una de las primeras noticias de ciencia climática en los medios (aunque en realidad era una reimpresión de una nota publicada en una revista minera de Nueva Gales del Sur un mes antes).
La científica estadounidense y activista por los derechos de la mujer Eunice Foote ahora es ampliamente reconocida como la primera persona en demostrar el efecto invernadero en 1856, varios años antes de que el investigador del Reino Unido John Tyndall publicara resultados similares.
Sus experimentos rudimentarios demostraron que el dióxido de carbono y el vapor de agua pueden absorber calor, lo que, amplificado, puede afectar la temperatura de la tierra. Por lo tanto, conocemos la relación entre los gases de efecto invernadero y la temperatura de la Tierra desde hace al menos 150 años.
Cuatro décadas después, el científico sueco Svente Arrhenius hizo algunos cálculos básicos para estimar cuánto cambiaría la temperatura de la Tierra si duplicáramos la cantidad de CO₂ en la atmósfera. En ese momento, los niveles de CO₂ rondaban las 295 partes por millón de moléculas de aire. Este año, alcanzamos las 421 partes por millón, por encima del 50 % más que en la era preindustrial.
Arrhenius estimó que duplicar el CO₂ produciría un mundo 5℃ más caliente. Esta cifra, afortunadamente, es más alta que los cálculos modernos, pero no queda demasiado lejos, ¡considerando que no estaba usando ninguna computadora sofisticada! En ese momento, el sueco estaba más preocupado por la posible llegada de una nueva edad de hielo que por el calentamiento global, pero en la década de 1900 ya estaba sorprendiendo a sus alumnos con la noticia de que el mundo se estaba calentando lentamente debido a la quema de carbón.
La ciencia del clima, eclipsada por el auge del petróleo. El fragmento de Nueva Zelanda de 1912 probablemente se basó en un reportaje de cuatro páginas publicado en la revista Popular Mechanics, que a su vez se basó en el trabajo de Arrhenius y otros.
Cuando los defensores del clima recuerdan la existencia de artículos como este y dicen que ya sabíamos que habría un cambio climático, pasan por alto el hecho de que las ideas de Arrhenius generalmente se consideraban marginales, lo que significa que no mucha gente las tomó en serio. De hecho, hubo una violenta reacción sobre el papel del dióxido de carbono como gas de efecto invernadero.
Cuando comenzó la Primera Guerra Mundial, el tema perdió impulso. El petróleo comenzó a subir, dejando de lado tecnologías prometedoras como los automóviles eléctricos, que en 1900 tenían un tercio del incipiente mercado de automóviles de EE. UU. Frente a ello, tomaron ventaja los desarrollos tecnológicos sobre combustibles fósiles y objetivos militares. La idea de que los humanos pudieran afectar con estas actividades a todo el planeta permaneció al margen de cualquier debate.
Años 30: El Efecto Callendar.
No fue hasta la década de 1930 que resurgió el cambio climático inducido por el hombre. El ingeniero británico Guy Callendar reunió observaciones meteorológicas de todo el mundo y descubrió que las temperaturas ya habían aumentado.
Callendar fue el primero en identificar claramente una tendencia al calentamiento y conectarla con los cambios en el dióxido de carbono atmosférico, pero minimizó la importancia del CO₂ en comparación con el vapor de agua, otro potente gas de efecto invernadero.
Al igual que el artículo de 1912, Callendar también subestimó la tasa de calentamiento que veríamos en los 80 años posteriores a sus primeros resultados. Predijo que el mundo sería solo 0,39 ℃ más caliente para el año 2000, en lugar de 1 ℃ que observamos. Sin embargo, llamó la atención de los investigadores, lo que provocó un intenso debate científico.
Pero a fines de la década de 1930, el mundo entró en guerra una vez más. Los descubrimientos de Callendar rápidamente pasaron a un segundo plano frente a las batallas y la posterior necesidad de reconstrucción.
Entran en acción los mercaderes de la duda.
En 1957, los científicos comenzaron el Año Geofísico Internacional, que conllevó una intensa investigación de la Tierra, sus polos y atmósfera. Esto supuso la creación de estaciones de monitoreo atmosférico que rastrean el aumento constante de gases de efecto invernadero causados por los humanos. Y, al mismo tiempo, las compañías petroleras se estaban dando cuenta del impacto que su negocio estaba teniendo en la Tierra.
Durante estas décadas de posguerra, siguió habiendo poco debate político sobre el clima. Margaret Thatcher, difícilmente clasificable como izquierdista, vio el calentamiento global como una clara amenaza durante su tiempo como primera ministra del Reino Unido.
En 1988, el científico de la NASA James Hansen pronunció su famoso discurso ante el Congreso de los Estados Unidos afirmando que el calentamiento global ya había llegado.
El impulso a la concienciación sobre el problema estaba creciendo. Muchos conservacionistas se sintieron esperanzados por el Protocolo de Montreal, que más o menos detuvo el crecimiento del agujero en la capa de ozono. ¿Podríamos hacer lo mismo para detener el cambio climático?
Como ahora sabemos, no lo hicimos. La eliminación gradual de una clase de productos químicos era una cosa. Pero, ¿destetarnos de los combustibles fósiles sobre los que se construyó el mundo moderno? Eso sería mucho más difícil.
El cambio climático se politizó y los partidos conservadores proempresariales de todo el mundo adoptaron la doctrina el escepticismo climático. Los medios de comunicación a menudo incluían la versión de un escéptico en aras del "equilibrio". Esto, a su vez, hizo que muchas personas creyeran que el ‘jurado’ aún estaba deliberando, cuando en realidad la ciencia hablaba de forma cada vez más segura y clara.
Debido a este escepticismo se produjeron grandes retrasos en la toma de decisiones. El Protocolo de Kioto de 1992 destinado a reducir los gases de efecto invernadero tardó hasta 2005 en ser ratificado. La ciencia, y los propios científicos, fueron atacados. Pronto se puso en marcha una pelea feroz, con fuertes discusiones, a menudo financiadas por los intereses de los combustibles fósiles, que cuestionaban la abrumadora evidencia científica.
Lamentablemente para nosotros, estos ruidosos esfuerzos lograron retrasar la acción. Las personas que se niegan a aceptar la ciencia apoyaron la industria de los combustibles fósiles al menos otra década, incluso cuando el cambio climático siguió aumentando, con desastres naturales y olas de calor cada vez más intensas.
Evolución del sistema eléctrico español desde Diciembre de 2005 hasta Julio de 2024 (fuente).
El mejor momento para actuar fue 1912. El siguiente mejor momento es ahora.
Después de décadas de contratiempos, la ciencia del clima y los movimientos sociales ahora piden con más fuerza que nunca que se tomen medidas enérgicas y significativas.
La ciencia está fuera de toda duda. Mientras que el primer informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático en 1990 declaró que el calentamiento global "podría deberse en gran parte a la variabilidad natural", el último de 2021 afirma que los humanos "inequívocamente […] han calentado la atmósfera, el océano y la tierra".
Incluso hemos visto un cambio bienvenido en los medios de comunicación previamente escépticos. Y como vimos en las elecciones federales de mayo, la opinión pública está del lado del planeta.
Las políticas climáticas nacionales e internacionales son más fuertes que nunca, y aunque aún queda mucho por hacer, finalmente parece que el gobierno, las empresas y el sentimiento público se están moviendo en la misma dirección.
Usemos el 112 aniversario de este breve fragmento como un recordatorio para seguir hablando y presionando, finalmente, por el cambio que debemos conseguir.
Algunas informaciones más recientes, en forma de tuits, sobre el carbón y otros combustibles fósiles,...
El primero en utilizar el término de “gases de efecto invernadero” fue un científico sueco, Svante Arrhenius, en 1896. Ya entendía que los humanos tenemos el potencial de desempeñar un papel importante en el cambio de concentración del dióxido de carbono. https://t.co/fKJpHgxfR7pic.twitter.com/HhZ66VGcpx
#11f2024 Eunice Newton Foote (1819-1888), climatóloga descubrió que el CO2 en la atmosfera afectaba la temperatura de la Tierra. pic.twitter.com/wuKzPZQ3mR
La UE no cumplirá sus objetivos de reducción de emisiones de efecto invernadero ni de broma. Y un 24% provienen del transporte. pic.twitter.com/BqVgHZfMv8
Estos son los rubros de emisiones de gases de efecto invernadero que tenemos que reducir para *quizas* no extinguirnos. El más grande y probablemente más facil: el transporte terrestre por calles (11%). Y sin embargo ahí seguimos, negacionando pic.twitter.com/4LbVsSpJZF
Los factores de longevidad son bastante conocidos, como la herencia genética, hábitos saludables, peso y presión arterial correctos, alimentación sana, ejercicio diario o no fumar ni beber alcohol. También está demostrado que un buen nivel cultural y/o económico elevan la esperanza de vida.
Las estadísticas, siempre muy analizadas en Estados Unidos, han probado una inesperada relación entre la opción política y la longevidad. Alguien que vote al Partido Demócrata, viva en un condado demócrata y en un Estado demócrata tiene una esperanza de vida 20 años superior que otro compatriota que vote al Partido republicano y viva en un condado y Estado republicanos.
Esos veinte años en promedio que van desde los 66,8 a los 86,8 años de vida, es algo que da qué pensar sobre dónde vivir y formar una familia un ciudadano norteamericano. Esta es la diferencia de esperanza de vida entre demócratas y republicanos (fuente).
Naturalmente esto no es una consecuencia directa del voto particular y de los convecinos, sino un efecto derivado del contexto de circunstancias que diferencian esta esperanza de vida promedio entre las personas que viven en áreas fuertemente republicanas respecto a las áreas con una remarcada tendencia demócrata.
En un panorama político bicolor estos dos partidos casi únicos mantienen puntos de vista muy opuestos sobre diversos temas sociales, incluida las armas en manos particulares, la atención médica, los factores ambientales, la educación y muchas temáticas más, que son las causas que pueden contribuir a esta increíble distancia en la longevidad.
A continuación se detallan algunas de las razones por las que esto es cierto. Primera, algo nada europeo, como es la violencia armada. Las armas de fuego son la segunda causa principal de muertes relacionadas con lesiones en el país, con un promedio de 40.000 muertes al año. Es la principal causa de muerte entre niños y adolescentes. Los republicanos generalmente tienen una actitud más indulgente hacia el control de armas que los demócratas, lo que influye en la menor esperanza de vida en las áreas donde gobiernan. Los estudios han demostrado que los Estados con leyes de armas más permisivas tienen tasas más altas de muertes relacionadas con armas de fuego, según un estudio de la Asociación Estadounidense de Salud Pública.
En segundo lugar, el acceso a la atención médica. Este es un factor determinante en los resultados de salud a escala particular y colectiva. Los republicanos generalmente se oponen a políticas que aumentarían el acceso a la atención médica, como la Ley de Atención Médica Asequible (ACA). Por el contrario, los demócratas apoyan políticas que apuntan a mejorar el acceso a la atención médica. Un estudio realizado por la Oficina Nacional de Investigación Económica encontró que las personas que obtuvieron acceso a Medicaida través de la ACA tenían una tasa de mortalidad un 6% menor que aquellos que permanecían sin seguro. Muchas personas también se beneficiaron de la expansión de Medicaid durante la pandemia de Covid. Cuando la expansión de Medicaid expire después de Covid, especialmente en los estados del sur, las personas sin atención médica tienen más probabilidades de morir a una edad más temprana. Otro problema es que en algunas partes de EE.UU. los hospitales locales, especialmente los hospitales de maternidad, han cerrado, lo que aumenta el riesgo de muerte de las mujeres embarazadas y de sus bebés.
Además, las diferencias en las actitudes hacia las vacunas o la ciencia y el acceso a la atención médica también contribuyeron a una mayor tasa de mortalidad durante la pandemia en las comunidades republicanas (increíblemente negacionistas), en comparación con las comunidades de tendencia demócrata.
En tercer lugar, los hasta hace poco olvidados factores ambientales. En general, los republicanos se han mostrado escépticos respecto de las políticas ambientales que apuntan a reducir las emisiones de carbono y otros gases contaminantes para proteger el medio ambiente. Por el contrario, los demócratas apoyan estas políticas, especialmente en los Estados donde viven. Las investigaciones han demostrado que la exposición a la contaminación del aire y otros factores ambientales puede provocar una amplia variedad de problemas de salud, incluidas enfermedades respiratorias y cáncer. Un estudio realizado por la Revista Internacional de Investigación Ambiental y Salud Pública encontró que la exposición a la contaminación del aire se asociaba con un mayor riesgo de cáncer de pulmón.
Por supuesto, la concentración urbana da lugar a algunas ciudades altamente contaminadas, como Los Ángeles y Nueva York, que se encuentran en áreas de tendencia demócrata. Mientras que muchos republicanos viven en áreas rurales del Medio Oeste que pueden parecer tener menos contaminación del aire debido a la industria y los automóviles. Por otro lado, la gente de las zonas rurales tiene más probabilidades de verse expuesta a la contaminación agrícola, como los productos químicos que arrojan los fumigadores, que también pueden ser mortales. A pesar de la mayor contaminación del aire en ciertas ciudades demócratas, los estados de California y Nueva York todavía tienen la segunda y tercera esperanza de vida más alta de Estados Unidos (Hawái tiene la más alta). Cualquier daño a la salud causado por la contaminación puede compensarse con otras ventajas para la salud disponibles para los residentes de los Estados demócratas.
En cuarto lugar, la siempre decisiva educación, que conlleva un mayor estatus socioeconómico de un individuo y en sus resultados de salud generales. Los demócratas generalmente apoyan políticas que intentan aumentar el acceso a la educación, como matrículas universitarias asequibles y condonación de préstamos estudiantiles. En contraste, los republicanos son más reacios respecto de las políticas diseñadas para aumentar la igualdad de oportunidades educativas para todos. El problema de las menores oportunidades educativas en algunos Estados es que las investigaciones muestran que niveles más altos de educación están asociados con tasas de mortalidad más bajas. Un estudio del American Journal of Public Health encontró que las personas con un título universitario tenían una tasa de mortalidad un 28% menor que aquellos sin un título de escuela secundaria. Mejorar las oportunidades educativas y hacer que la educación superior sea más asequible es una forma de mejorar la esperanza de vida de los ciudadanos de un Estado.
En quinto lugar, la desigualdad de ingresos como otro factor que puede afectar la esperanza de vida de un individuo. Los republicanos generalmente apoyan políticas que favorecen a los ricos, como recortes de impuestos para los ricos y desregulación del sector financiero. Por el contrario, los demócratas apoyan políticas que apuntan a reducir la desigualdad de ingresos, como impuestos progresivos, aumento del salario mínimo y apoyo a programas como la Seguridad Social y redes de seguridad financiera para los estadounidenses más pobres.
Los investigadores han descubierto que la desigualdad de ingresos está asociada con tasas de mortalidad más altas, incluido un estudio del Journal of Epidemiology and Community Health que descubrió que la desigualdad de ingresos estaba asociada con una esperanza de vida más corta. Muchos Estados del sur de Estados Unidos, de tendencia republicana, incluidos Mississippi, Alabama, Luisiana, Virginia Occidental y Arkansas, se encuentran entre los eEtados más pobres y también tienden a ser lugares donde la gente no vive tanto tiempo. Es obvio que la pobreza mata.
Por último, el sexto elemento es el estrés crónico. Esto es algo que puede afectar tanto a republicanos como a demócratas, aunque a menudo tienen diferentes fuentes de estrés. Los republicanos que viven en áreas donde hay mucha pobreza pueden experimentar más estrés debido a la inseguridad económica, mientras que ciertos grupos de demócratas pueden experimentar más estrés debido a la discriminación y la desigualdad social. Diversos estudios han demostrado que el estrés crónico puede provocar una variedad de problemas de salud, incluidas enfermedades cardiovasculares y depresión. Un estudio del Journal of Occupational Health Psychology encontró que el estrés laboral se asociaba con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular. Es difícil evaluar cómo los diferentes tipos de estrés pueden afectar la esperanza de vida, pero independientemente de dónde viva, su esperanza de vida probablemente será mayor si se siente menos estresado.
En conclusión, y esto habrá que saber trasladarlo a una diferente realidad europea, el lugar donde se vive y su afiliación política pueden afectar a tu duración de vida, al menos en Estados Unidos. Por supuesto, el lugar donde vive no es el ÚNICO factor que determinará cuánto tiempo vivirá. Por tanto, los factores directos enunciados al principio deben ser seguidos escrupulosamente.