La profusión de smartphones y tablets ha reformulado el uso de los diferentes equipamientos para acceder a Internet. Quienes somos usuarios intensivos de portátiles (los equipos de sobremesa son historia,... o el renting de instituciones o empresas poco dinámicas), y de hardware como el iPad y el iPhone, hemos ido alterando nuestros hábitos de uso.
A medida que el 3G es más barato y omnipresente, la consulta del correo electrónico (básicamente para que nos avise de los mensajes directos de Twitter, conversaciones de Facebook y movimiento en LinkedIn) se efectúa vía el móvil inteligente, bien a través de la conexión wifi o por 3G. La respuesta de emails, y las conversaciones por redes sociales se concentran en las tabletas (aprovechando algunos tiempos obligados).
Los portátiles quedan reducidos a determinadas lecturas de noticias sindicadas (otras, la mayoría, se tratan desde los tablets), a la escritura de posts, al tratamiento de imágenes y a programas específicos como edición de vídeos,...
Los netbooks es ese escalón perdido que ha quedado crecientemente en el olvido, aunque se distribuyen todavía para uso escolar de sistemas educativos que aún no han aceptado la conveniencia de ir acogiendo las tabletas (quizá a la espera de una esperada estandarización y abaratamiento en Android).
En definitiva, ya hay usuarios que prácticamente han olvidado el uso de portátiles (y más aún equipos de sobremesa). Algunos usuarios avanzados usan exclusivamente sus tablets, arrinconando a sus antiguos portátiles. Josu Sierra lo afirmaba en este vídeo.
Con procesadores potentes, como el A6 Dual-Core que se anuncia para el iPad 3, y sistemas operativos más avanzados pronto pasarán al olvido los portátiles, canibalizados por las tabletas. La movilidad de la conectividad está llevándonos a asistir al final de las líneas telefónicas fijas (que van desapareciendo) y de los equipos pesados de más de 150-200 gramos.