Fue un placer muy singular escuchar a Félix Goñi (Fundador y Director del Centro de Investigación de Biofísica CSIC-UPV y Premio Euskadi de Investigación 2002) en la presentación de su programada conferencia sobre La Universidad del futuro en la sociedad del conocimiento (ver convocatoria).
Rara vez se escucha a alguien tan cualificado hablar con conocimiento, sinceridad, crítica y humor, todo al mismo tiempo. Desde el minuto 12:20 del vídeo (arriba incluido que encarecidamente se recomienda visionar), y tras la presentación de José Luis Jiménez Brea y Jon Arrieta, se despliega con un guión detallado (foto) que fue distribuido entre los asistentes a su charla.
Acompañado de su esposa, y colega, Alicia Alonso, Félix Goñi expone sus tesis desde la declaración preliminar de que universidad implica investigación, citando a Juan Urrutia. Proclama el propio CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) como universidad. Comparó los rankings de las universidades con el que resultaría de medir la temperatura corporal de los asistentes. En el caso de la universidad española la semejanza relativa deriva que ninguna puede "ni elegir profesorado, ni elegir alumnado". Con metáforas físicas, de dinámica o termodinámica (quien no se entere,... que estudie Física), resalta el corsé común del sistema universitario de todo el Estado español.
Entre las lacras de la universidad pública española menciona el asamblearismo, la funcionarización (de docentes y no docentes), la financiación insuficiente y la pobre valoración de la investigación. Asamblearismo derivado de la LRU (Ley de Reforma Universitaria) de 1983 que ningún partido quiere cambiar, porque anula la capacidad crítica de la universidad (por anulación vectorial del sistema de fuerzas). Funcionarización que puede desalentar el esfuerzo permanente por seguir investigando con la misma energía que antes de lograr un puesto vitalicio. Compara la respuesta pública española respecto a la investigación como la resistencia del aire. No sólo no apoya, sino que frena,... y especialmente cuando se quiere avanzar a cierta velocidad.
Responsabiliza a quienes gobiernan la ciencia en los recientes tiempos de crisis y que, a su juicio, han provocado la destrucción del sistema científico español en el período 2009-2011, y todo para apenas conseguir un mínimo ahorro (apenas calderilla), en cifras absolutas (a pesar del 20% de reducción significativa para la inversión e inapreciable para la macroeconomía). En este caso, el símil de la irreversibilidad del daño es como poner biberones al alcance de un bebé ya muerto por inanición.
Denuncia los créditos de la ministra Cristina Garmendia no accesibles para los principales centros de investigación que son las universidades públicas y el CSIC. También ridiculiza la inmediatez de los políticos que no saben observar el ciclo largo de la educación o la ciencia, como cuando Margaret Thatcher no apreciaba descenso en publicaciones tras recortes... en el mismo año, desinteresándose del futuro inducido. Nos reímos, en una presentación muy severa, con las encuestas del CIS donde como las profesiones más valoradas aparecen científicos, médicos y profesores, dedicaciones del ponente.
Aún es más contundente su despiadada crítica en la conclusión final de perspectivas. Félix Goñi teme un negro porvenir de España con única salida turística como parque temático (toros sin lidia, reservas de fumadores de Ducados,...), y donde acaso Euskadi y Cataluña podrían ser islas donde refugiarse. Indica que las administraciones vascas y catalanas están actuando en sentido contrario respecto al esfuerzo en investigaciones básicas. Los últimos minutos, a partir del 53:00, los dedica a las diferentes respuestas en Europa respecto a estos temas y a las novedades de Bolonia. Apunta el caso de Finlandia con aporte a la investigación en los '90 con el gran fruto que ahora podemos apreciar en todos sus efectos.
Rara vez se escucha a alguien tan cualificado hablar con conocimiento, sinceridad, crítica y humor, todo al mismo tiempo. Desde el minuto 12:20 del vídeo (arriba incluido que encarecidamente se recomienda visionar), y tras la presentación de José Luis Jiménez Brea y Jon Arrieta, se despliega con un guión detallado (foto) que fue distribuido entre los asistentes a su charla.
Acompañado de su esposa, y colega, Alicia Alonso, Félix Goñi expone sus tesis desde la declaración preliminar de que universidad implica investigación, citando a Juan Urrutia. Proclama el propio CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas) como universidad. Comparó los rankings de las universidades con el que resultaría de medir la temperatura corporal de los asistentes. En el caso de la universidad española la semejanza relativa deriva que ninguna puede "ni elegir profesorado, ni elegir alumnado". Con metáforas físicas, de dinámica o termodinámica (quien no se entere,... que estudie Física), resalta el corsé común del sistema universitario de todo el Estado español.
Entre las lacras de la universidad pública española menciona el asamblearismo, la funcionarización (de docentes y no docentes), la financiación insuficiente y la pobre valoración de la investigación. Asamblearismo derivado de la LRU (Ley de Reforma Universitaria) de 1983 que ningún partido quiere cambiar, porque anula la capacidad crítica de la universidad (por anulación vectorial del sistema de fuerzas). Funcionarización que puede desalentar el esfuerzo permanente por seguir investigando con la misma energía que antes de lograr un puesto vitalicio. Compara la respuesta pública española respecto a la investigación como la resistencia del aire. No sólo no apoya, sino que frena,... y especialmente cuando se quiere avanzar a cierta velocidad.
Responsabiliza a quienes gobiernan la ciencia en los recientes tiempos de crisis y que, a su juicio, han provocado la destrucción del sistema científico español en el período 2009-2011, y todo para apenas conseguir un mínimo ahorro (apenas calderilla), en cifras absolutas (a pesar del 20% de reducción significativa para la inversión e inapreciable para la macroeconomía). En este caso, el símil de la irreversibilidad del daño es como poner biberones al alcance de un bebé ya muerto por inanición.
Denuncia los créditos de la ministra Cristina Garmendia no accesibles para los principales centros de investigación que son las universidades públicas y el CSIC. También ridiculiza la inmediatez de los políticos que no saben observar el ciclo largo de la educación o la ciencia, como cuando Margaret Thatcher no apreciaba descenso en publicaciones tras recortes... en el mismo año, desinteresándose del futuro inducido. Nos reímos, en una presentación muy severa, con las encuestas del CIS donde como las profesiones más valoradas aparecen científicos, médicos y profesores, dedicaciones del ponente.
Aún es más contundente su despiadada crítica en la conclusión final de perspectivas. Félix Goñi teme un negro porvenir de España con única salida turística como parque temático (toros sin lidia, reservas de fumadores de Ducados,...), y donde acaso Euskadi y Cataluña podrían ser islas donde refugiarse. Indica que las administraciones vascas y catalanas están actuando en sentido contrario respecto al esfuerzo en investigaciones básicas. Los últimos minutos, a partir del 53:00, los dedica a las diferentes respuestas en Europa respecto a estos temas y a las novedades de Bolonia. Apunta el caso de Finlandia con aporte a la investigación en los '90 con el gran fruto que ahora podemos apreciar en todos sus efectos.
Listado de asociados e invitados del Grupo Vasco del Club de Roma que hemos disfrutado con este encuentro: Jon Arrieta Mardaras; José Angel Icaza Arregui; José Luis Jiménez Brea; Paul Ortega Etxheverry; Mari Feli Ruiz de Gordejuela; Peio Salaburu; Jose Mari Ziarrusta; Arturo Rodríguez; Pedro Ruiz Aldasoro; Josetxu Villacorta; Ane Agirre; Gregorio Uribechebarria, Jesús Bezos; José Mari Goñi; Javier de la Rica y Mikel Agirregabiria Agirre.
Álbum con las fotos del evento y el vídeo íntegro de la exposición inicial previa a la comida. Web oficial: www.clubderomagv.org. Otros posts sobre el Grupo Vasco del Club de Roma.