Fábula de Félix María Samaniego, alavés de Laguardia.
Micifuz y Zapirón,
se comieron un capón,
en un asador metido.
Después de haberse lamido
trataron en conferencia
si obrarían con prudencia
en comerse el asador.
¿Lo comieron? -¡No, señor!
Era caso de conciencia.
Este es uno de los cuentos que recito, modifico y amplío para mis nietos. Su bisabuela de 90 años, que ejerció de maestra, aún la recita de memoria. Encierra una metáfora del riesgo de ser demasiado atrevido (y llegara a pensar en comerse todo el asador). Otra versión extensa de la fábula "Los gatos escrupulosos", con la escritura de "Micifuf", terminado en f. La imagen proviene de la Enciclopedia Álvarez Segundo Grado - Página 111.