Hoy, como todos los 20 de marzo, se celebra el Día Mundial del Gorrión. Una especie que habita en nuestras ciudades, pero cuyas poblaciones se están reduciendo bastante en los últimos años a causa de la contaminación y otras agresiones. Esta conmemoración tiene como objetivo concienciar al público sobre la amenaza que enfrentan los gorriones en entornos urbanos contaminados y la falta de cuidado hacia la población de estas aves domésticas, así como otras especies de aves comunes.
Se busca llamar la atención sobre el grave declive de esta especie. Desde 1980 su población ha caído en más de 250 millones. Es como el canario en la mina que avisa con su muerte. De los gorriones comunes, la mitad de la población ha desaparecido, casi 250 millones de aves, según los datos de Seo Birdliferecopilados del censo europeo de aves y los informes de los Estados miembros.
A pesar de su aparente abundancia, los gorriones están viéndose amenazados por nuestras acciones humanas en todas partes del mundo. En España, los expertos alertan que las poblaciones han disminuido hasta en un 70%.
El declive del gorrión es 100% de origen antropogénico. Es fundamental examinar cuáles son las causas de la desaparición de estas aves urbanas. Y la primera de ellas es la falta de alimentos, ya que la cantidad de insectos está también en franco declive.
Tanto en las zonas urbanas como en las rurales, la contaminación proveniente de la agricultura intensiva y el creciente uso de pesticidas está haciendo estragos entre las poblaciones de gorriones. La tasa de nacimientos es baja y para colmo los padres no encuentran alimento para sacar adelante las nidadas.
A ello se le suma la intensificación de la urbanización y la renovación de los edificios que han reducido las cavidades que les sirven de lugar de nidificación. De hecho, los edificios nuevos son cada vez menos adecuados para la construcción de nidos.
Los gorriones necesitan nuestro apoyo para sobrevivir. Podemos ayudar instalando cajas nido al final del invierno, colocándolas horizontalmente con el orificio de vuelo hacia el lateral y en el frente, debajo de aleros a una altura mínima de dos metros. Durante la época de reproducción, es vital no manipular los nidos para preservar la tranquilidad de las aves y proteger a las crías en su momento de mayor vulnerabilidad.
Así que, en este Día Mundial del Gorrión, recordemos la importancia de cuidar y preservar a estas pequeñas aves urbanas.
Más posts iniciados, pero inacabados. Quisimos escribir y conversar sobre:
¿Poder... o amor? En la película "Lantana" una de las protagonistas, personaje de una célebre psicóloga, señala: "El amor es una cesión de poder". Hubiésemos querido glosar sobre la grandeza de esta concesión, tan grata, tan amable, tan fructífera,...
¿Cuánto vive un gorrión? Otra de nuestras obsesiones en forma de gorrión, con quienes tanto nos identificamos (véase en otras entradas). Comenzaba así: "Alegra ver por nuestras ciudades un gorrión, porque parece que se van extinguiendo en las urbes. Vivaz, en pleno invierno, en un entorno artificial que sólo habitan seres humanos y mascotas humanizadas. Un gorrión no está domesticado, no se rige por el reloj, no vive mucho, pero sabe recordarnos que la existencia debe ser alegre para merecer ser vivida".
Casi nos convencen de que los jilgueros son peligrosos
La comunidad estaba harta de disparos y fusiles. Todos querían desterrar las armas. Era un sueño pacifista: una utopía de paz. Pero no pudo ser, tampoco entonces.
El patrón, el de la escopeta más grande, advirtió que -aniquiladas las bestias más feroces- proseguiría las cacerías, porque eran ahora los pájaros quienes desafiaban el silencio con sus trinos amenazadores. Urdió una inicua patraña: “Las avecillas del bosque se están armando, sus gorjeos son cantos de guerra”. Ordenó exterminar a las malhadadas criaturas aladas, tergiversando con una “última cruzada para acabar con los trabucos… de los petirrojos”.
El embustero matón pidió escopeteros voluntarios para luchar contra los ruiseñores. Algunos serviles acudieron prestos en auxilio del seguro vencedor de tan desigual batalla. Allá marcharon, a la arboleda. Las descargas y los tiroteos fueron estruendosos. Mataron por millares alondras, mirlos y estorninos, pero no pudieron volver triunfantes del todo. Siempre quedaba alguna golondrina viajera para cagarles en la cabeza. Ello reafirmaba que las almas inocentes volarán eternamente por encima de los malvados culpables, quienes nunca podrán mirar al cielo sin temer su merecido castigo. ¿Cuándo entenderán los fantoches espantapájaros el secular proverbio: No pidas un cañón para matar un gorrión?
Hay quienes buscan mascotas, pero quienes amamos la libertad sólo admiramos a los celestiales pájaros.
Todos, cuando éramos niños, observábamos el vuelo del colibrí con envidia. Pensábamos que si el ruiseñor sabe volar, ¿por qué nosotros no? Además, los pájaros siempre parecen contentos y cantan, pero no cantan porque sean felices, sino que son felices porque cantan. Las gaviotas se contentan con ser pájaros, no quieren ser nubes. Intuyen que de oro sólo son las celdas, y que si engarzan en plata sus alas, nunca más volarán hacia las alturas.
Los pájaros son dichosos, mientras trabajan. Dios provee a cada ave con alimento, pero no se lo lleva hasta el nido. Lo que más diferencia a los hombres de los pájaros es que éstos dejan intacto el paisaje cuando construyen su hogar. Tampoco se engañan, más de dos días, con los espantapájaros; al tercer día, se posan y deponen sobre los monigotes. Las volátiles puede que ignoren las leyes físicas por las que vuelan, pero se saben más que artefactos funcionando bajo leyes mecánicas. Comprenden que las esperanzas sostienen las almas, como si fuesen alas.
Imitemos a los navegantes que estudiaron a las especies de aves. Así sabían que los cuervos marinos son signo de que la tierra firme está cerca, o que el infalible petrel blanco indica la presencia de témpanos. Para observar a los pájaros, es preciso silencio, quedarse quieto y esperar. Entre las aves, existe gran diversidad, desde águilas a pingüinos, desde avestruces a los pájaros mosca. Están las viajeras, que según su plumaje se unen en bandadas, pero también las sedentarias, que prefieren una estancia más limitada. También están las noctámbulas, como la lechuza, o las madrugadoras, como la alondra.
Los pajarillos comunes tienen lástima del pavo real, cargado así con su elegante cola. Parecen decir “llámame gorrión y échame trigo”. Confían en que nadie usará un cañón para matar un gorrión. Los pájaros corrientes intuyen que los más apuestos acaban enrejados. Así, por bellas que sean las jaulas sólo contienen cacatúas y presas grotescas. Mi predilecta es un ave suave, en clave de astronave más que de aeronave, que está siempre presente, no como una golondrina que anuncia, pero no hace el verano. Descarto al búho del crepúsculo, que volando en el ocaso se mezcla con el murciélago.
Ronda la ladrona alondra. Proclamo ganadora a la alondra que alza el vuelo hasta lo más alto. Su trino es dulce cuando llora, porque la alondra no sobrevive en cautiverio. Es el mejor símbolo del canto poético, que escapa azorada cuando repara en la masa humana. Me sumo a la vocación de Goethe, quien mantuvo un destino radical de alondra, y lo cumplió contraviniéndolo al recluirse en Weimar hasta su muerte. Como al pez las aguas del océano, y al pájaro la inmensidad del aire, así cualquier lugar de la Tierra le sirve de posada al ser humano. El mundo tiene mucho sitio donde posarse, si bien para personas y alondras el nido es algo único.
Otras imágenes de paravelismo, una actividad deportiva, también conocida como parascending, paraskiing, parakiting,... Tomadas en Torrevieja (Alicante).
Algunas recientes tomadas en La Zenia Boulevard (Alicante).
Un período de confinamiento es algo especial para quienes se consideren bloggers, aparte de jugar al sudoku (lo hemos agotado), ajedrez o backgammon. Una etapa en la que hay oportunidades de dedicar más tiempo a la lectura y escritura de blogs, pero simultáneamente en unas semanas sin posibilidad de acudir a eventos y encuentros... que no sean virtuales.
Algunos nos lo hemos tomado con una dedicación especial a lo cercano e introspectivo, pero sin descuidar la relación con los demás por la vía de las videoconferencias (incluso hemos creado esa etiqueta). En lo próximo, nunca como ahora hemos sido testigos del florecer de nuestros árboles de la avenida (comparar fotos del invierno con las de la primavera) o de conocer a nuestros vecinos desde los balcones. De las videollamadas grupales ya estamos comunicando todos los días cómo llenan nuestras agendas.
Aunque seguimos sin poder estar al día en la lectura de los feeds RSSde los aproximadamente un millar de blogs que "seguimos", hay algunas y algunos bloggers que han sabido relatar su cotidianidad de un modo especialmente adaptado a las mutaciones que están sucediéndose estos días. Iremos desvelando algunos blogs de interés renovado en los próximos posts, si bien hoy destacaremos y recomendaremos uno,...
Nuestra amiga y blogger Aïnhoa Lady, autora del blog "Con Diéresis en la Ï" ha sabido contarnos estos "Días extraños" desde su privilegiada profesión en un área tan esencial y vivencial como es una farmacia, entroncada en su barrio. Lectura obligada son sus descripciones cambiantes jornada a jornada, con su inefable estilo inmediato y descarnado, generosa tenacidad diaria, y como ella siempre apunta al final de sus entradas "No me funciona el corrector y sí la dislexia".
A partir de hoy, Día 41º de Aplauso Sanitario en Getxo, con independencia de la hora de publicación de post diario (antes o después de las 20:00 del Aplauso Sanitario), incorporaremos la grabación en el día que corresponde. Lamentablemente hoy no parece haberse grabado bien los primeros minutos, por lo que únicamente podemos aporta algunas fotos y un breve vídeo de las 20:10.
Rebuznamos como burros cuando enfatizamos con innecesarios pleonasmos.
Les propongo un reto desafiante: Identifiquen cuántas redundancias repetidas aparecen en este documento escrito. Les advierto por adelantado, y no se lo volveré a repetir, que será un juego divertido en mi opinión personal. Pueden usar un bolígrafo con tinta de color rojo para subrayar por debajo las duplicaciones reiteradas, pero no deben subir arriba para releer otra vez el artículo.
Para resolver el pasatiempo dispondrán de un breve lapso de tiempo. Si aciertan con la máxima excelencia recibirán una carta por correo con un obsequio completamente gratis. Si lo quieren recibir en su propia casa, pagarán el precio de los portes. La otra alternativa es presentarse en persona para que lo recojan ustedes personalmente. Si les parece totalmente perfecto, no habrá más sorpresas inesperadas con la garantía absoluta de que no pagarán nada al erario público.
Resumo brevemente cómo comenzó todo al principio. Fue una pasada historia, basada en el hecho real de una experiencia vivida. Les diré toda la verdad. No recuerdo de memoria ni qué hora del día fue, ni qué día de la semana, ni siquiera qué mes del año, pero ocurrió hace cuatro años atrás hacia la hora del mediodía. Nunca antes había sucedido. Escuchaba en la radio de sonido estereofónico una partitura musical y luego seguidamente las novedosas noticias de un nuevo récord olímpico de una joven promesa para el futuro, que no se alcanzaba el quórum mínimo en el parlamento y que el mercado de divisas extranjeras se hundía hacia abajo por no prever de antemano las importaciones desde el exterior.
Decidí apagar completamente el transistor y mirar hacia la línea del horizonte. Con mis propios ojos vi volar por el aire un gorrión, a quien di un saludo de bienvenida al acercarse hacia mí. Advertí, aunque se hallaba a una distancia de varios metros, que la pequeña avecilla tiritaba de frío mientras comía con su pico un mendrugo de pan. Allí estábamos ambos dos como protagonistas principales, intuyendo algún peligro potencial en nuestros planes futuros sin ninguna coordinación entre sí. Bajo una constelación de estrellas, dos seres vivos se miraron por un fugaz instante: un pájaro completamente desnudo con una hemorragia de sangre en un ala y una persona humana completamente segura de vencer una difícil crisis con nueva iniciativa y asiendo con sus manos el libro de la Biblia. Me juré a mí mismo no aceptar falsos pretextos como vacunas preventivas. Me comprometí personalmente con un proceso de aprendizaje durante un periodo de tiempo para crecer como persona individual sobre la base fundamental de que es mejor es salir afuera, aunque nos acosen regimientos de soldados con jaurías de perros, que permanecer encerrado dentro de uno mismo.
Antes de proseguir adelante y leer la conclusión final, recordemos que el antiguo proverbio, “no te fíes de las apariencias visibles”, sigue vigente en la actualidad. Dado que este texto manuscrito en el mes de septiembre en un campus universitario está completamente lleno de reiteraciones y es un pleonasmo puro al 100% con correcta ortografía, daremos un pequeño atisbo de la solución: Las redundancias inútiles superan por arriba el número de un centenar.