Doble edadismo con el coronavirus

Parques infantiles cerrados, pero bares abiertos 
Vivimos en una sociedad adultocéntrica, que discrimina sin percibirlos o desdeñándoles a menores y mayores, un doble edadismo que se ha manifestado con toda su crudeza en este período del COVID-19, que quizá haya venido para quedarse. Todo pensado, organizado y calculado para el bienestar de quienes toman las decisiones: El resto es olvidado o, a lo sumo, paternalistamente contemplado.

En el discurso de las restricciones en los tramos de salida de los menores (incluidos adolescentes) o mayores, cada día son más perceptibles las disonancias cognitivas. Enumeremos algunas de estas paradojas incomprensibles, excepto bajo el sesgo de la edad:
La situación es peor para la infancia que para la madurez o vejez, por el simple hecho -corregible- de que no tienen capacidad de votar. Por ello, siempre hemos defendido el VOTO INFANTIL (post de 2004) que ejercerían los progenitores desde el nacimiento de cada niña o niño.
Doble edadismo con el coronavirus
Proseguimos con nuestra campaña a favor de las #MascarillasObligatorias en todos los lugares públicos, cerrados o abiertos. Casi estamos a punto de lograr nuestro objetivo,... en un tiempo de desescalada (web imprescindible por Distrito Postal) donde aumenta el contacto y la cercanía interpersonal. 
Para concluir, una maravillosa lección de resiliencia para la infancia o para cualquier momento de la vida. Aprendizaje básico de un experto como Boris Cyrulnik con una historia personal memorable.

0 comentarios:

Publicar un comentario