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El arte de educar
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Mezcolanza de pasado, presente y futuro para la felicidad
Sin gratos recuerdos, aunque sean contados, mal planificaremos cada día, porque uno de los objetivos cotidianos es sumar experiencias y encuentros felices que siempre nos acompañarán en la memoria. El futuro requiere esfuerzos constantes y cada jornada debe construir una ruta hacia ese destino buscado, más aún sabiendo que el proceso es más determinante que la meta.
Los mayores acostumbramos a abusar de la dosis de pasado, los jóvenes exageran quizá la tasa de futuro y solamente los niños ajustan bien que la felicidad y la alegría es, ante todo, presente.
Demasiado pasado en el cóctel diario agriará el día con melancolía y demasiado futuro eclipsará la jornada con retardos de ilusiones que, quizá, nunca vivamos. Sólo tenemos el presente, el hoy,... en términos de felicidad. El pasado es historia, el futuro un misterio, y cada instante -como ahora- es un regalo. Es por eso que a este momento se le llama presente. El presente es el tiempo más determinante.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos, señaló Pablo Neruda en su poesía. Pero podemos seguir siendo felices. Simplemente, seamos generosos y disfrutemos siéndolo. Si estamos presentes, o mientras lo estemos, no tenemos ninguna necesidad de esperar.
Prometamos vivir plenamente cada escurridizo instante y tratar e interactuar con todos los seres con esa doble mirada de admiración infantil y compasión sabia. Un proverbio irlandés dice: “Life is like a cup of Tea, it’s all in how you make it”, es decir, "La vida es como una taza de té, todo depende de cómo la hagas",...
"En tres palabras puedo resumir todo lo que he aprendido sobre la vida: sigue hacia adelante".
— literland (@literlandweb1) August 3, 2021
Robert Frost
📷Pentti Sammallahti pic.twitter.com/5dbnLBT3DS
VI Edición de la Carrera de los Cascabeles
Pasaje a Ítaca, por el Grupo Eos Theatron
El reto de transponer una obra épica como La Odisea atribuido al poeta griego Homero y condensar en una sola hora tan
Con la ayuda de la coreógrafa Cristina Arce (que incorpora mucho ritmo a los actos), se aúna teatro y danza contemporánea, recreando “la particular visión del viaje de la vida a través de los ojos del poeta caribeño Derek Walcott” según la obra que fue publicada en 1993 por este autor, premiado con el Premio Nobel de Literatura en 1992 .
Según la web de Pasaje a Itaca: "Versión moderna de la Odisea homérica cuenta en ocho escenas la vuelta del héroe griego Odiseo-Ulises a su patria, la lejana isla de Ítaca, tras diez años en la guerra de Troya. En su deambular por los mares vive múltiples aventuras y se enfrenta a obstáculos y seres extraordinarios de naturaleza humana y divina que tratan de retenerlo. La obra comienza en la playa, con Troya incendiada como telón de fondo y Odiseo presto a partir en su nave rumbo al hogar. Se despide de su compañero de batalla Tersites que no entiende sus ansias de paz y de vida tranquila. Una tormenta desvía la nave y Odiseo naufraga en la isla de los Feacios donde la princesa Nausicaa le pide que relate sus aventuras.
Odiseo recuerda como estuvo cautivo en brazos de la divina Calipso, cómo se enfrento al Cíclope Polifemo, evito que la hechicera Circe lo convirtiera en cerdo y descendió a los infiernos para que su madre Anticlea le mostrara el camino a casa. Tras despedirse de Nausicaa y evitar los escollos de las Sirenas Odiseo regresa a su hogar para enfrentarse a los pretendientes que asolan su reino y exigen la mano de su esposa Penélope en matrimonio. Odiseo mata a los usurpadores y trata de que su mujer lo reconozca tras veinte años de ausencia".
Fotos y cinco vídeos de la puesta en escena: la grabación completa (53:17) incluida en el inicio del post, y en HD pasaje 1º, escena 2ª, lapso 3º y final con saludos finales (que se puede ver bajo estas líneas).
Más entradas con otras representaciones teatrales escolares .
Makila (bastón típico vasco) de jubilación
La makila es un bastón de madera de níspero, flexible, nudosa y resistente, elegante y trabajada con gran mimo, naturalmente, realizada a mano. Como símbolo, la Makila significa nobleza, justicia, respeto y autoridad. Como utilidad, la Makila era compañera inseparable en todos los caminos y, además, elemento de seguridad. La Makila ha tenido una gran evolución a lo largo de la historia. La llevaron los pastores de nuestras montañas, aunque entonces eran más largas que las que se utilizaban en los pueblos y zonas urbanas. Aunque algunos han considerado la Makila como arma defensiva, no se puede decir que tuviera esta función, sino como valor complementario. Hasta principios de siglo, apenas se imaginaba uno al vasco ir de viaje o presenciar un partido de pelota sin su faja roja y su Makila en la mano.
La makila es un regalo para ocasiones importantes y personajes ilustres. Resulta apropiado para regalos de empresa, la jubilación de una persona, para despedidas de soltero o en las bodas... De sus manos han salido makilas para personajes tan ilustres como el Papa Juan Pablo II, a quien se le obsequió con una preciosa makila de cuero durante su visita a la Basílica de Loiola, siendo Lehendakari Carlos Garaikoetxea.
- Hitza hitz: La palabra es la palabra
- Hitzemana zor: Lo prometido es deuda
- Ihes etsaiak: Huid enemigos
- Nerekin beti zuzen: Conmigo siempre recto
- Nere bideko laguna: Mi compañero/a de camino
- Nerekin inoren beldur: Conmigo no hay temor a nadie
- Nere laguna eta laguntza: Mi amigo/a y ayuda
Envía una carta para una persona mayor en navidad
Envía Una Carta Para Un Abuelo 2023
Regala una sonrisa enviando “Una Carta Para Un Abuelo” 💌 Entra en la web https://t.co/DBmTAK1vpo Esta Navidad, la felicidad llega en un sobre 🎄 #UnaCartaParaUnAbuelo #AdoptaUnAbuelo #CartasNavidad #LosMayoresMolan pic.twitter.com/oLTFGZ8I5J
— Adopta Un Abuelo (@adoptaunabuelo) November 29, 2023
No elegimos todo lo que nos define
Pero hemos de jugar nuestra cartas. Sí podemos elegir qué hacemos con nuestras circunstancias. Podemos esforzarnos, podemos estudiar, podemos trabajar, podemos superar nuestras limitaciones. Sólo hay perfección donde hay elección.
Fauna humana de playa
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Carta abierta al Presidente de Audi España
Permíteme que te cuente los hechos: Con ocasión de mi 50º cumpleaños en abril de 2003 mi esposa se empeñó en comprarnos un Audi. Con los hijos ya encaminados, yo prefería un A3 o un A4, pero salimos con un flamante A6 adquirido en el Concesionario Premium del centro de Bilbao. Lo elegimos, entre otras marcas, porque su caja de cambios progresiva Multitronic parecía la tecnológicamente más avanzada, especialmente tras su campaña publicitaria de 2001 donde fue ganadora mundial con el célebre anuncio que incluyo (compramos el mismo modelo A6, color gris y caja Multitronic que el del spot). Ya habíamos disfrutado de una caja de cambios automática ZF en un coche anterior, un Renault 21 de impecable resultado, que se mantuvo en plena forma durante más de 200.000 km hasta que lo vendimos.
Nuestro Audi con Multitronic ha funcionado perfectamente durante seis años hasta cumplir 99.000 km. Todo iba de maravilla con un mantenimiento impecable, aunque nada barato, siempre en el concesionario oficial que pasó a ser en el Concesionario Alzaga, adonde se había trasladado el concesionario inicial.
Con 99.000 km y 6 años, comienzan los tirones y vibraciones del Multitronic. Diagnóstico: Sustitución integral del cambio con un coste de 7.272 € (incluso nos cobraron 62 € por hacer el presupuesto). Hablando desde hace semanas con el Servicio de Atención al Cliente de Audi, solicitamos, telefónica y por abogado, que Audi España y/o el Concesionario Alzaga de Bilbao se hagan cargo de todo o parte del presupuesto (o de las piezas, al menos), porque la avería -sin haber tenido ningún accidente- sólo es atribuible a mal diseño de Audi o mal mantenimiento de Alzaga. Tras supuestas consultas entre Audi España y el Concesionario Alzaga, telefónicamente deniegan la más mínima ayuda para paliar el coste de tan gravosa reparación.
Todo parece indicar, a menos que tú lo solventes, que la respuesta oficial de Audi España es que un cambio automático Multitronic sólo aguanta 100.000 km. a pesar de un mantenimiento impecable. Aquel anuncio de Audi ganó el Premio de Publicidad de 2001 y motivó hacia su compra a muchos clientes, como nosotros. ¿Habremos de concluir en que Audi: Publicidad, diez; mecánica, cero? ¿Tendremos que grabar un antispot para un marketing viral diciendo que Elvis Presley resucita y se pone a bailar a los 100.000 Km (con Multitronic de Audi)? Ya hemos localizado el muñeco de Elvis por eBay y estamos con el guión, pero preferiríamos no grabar nunca este contra-anuncio.
Porque seamos serios, Juan M. Baselga: No vale decir estos incidentes pueden pasarle a cualquiera. Los norteamericanos dicen, simplemente, “shit happens”, a veces las cosas simplemente salen mal. Pero esto no debiera valer para Audi, al menos para la mítica marca en la que nosotros confiamos hace seis años. Nadie de tu compañía se ha puesto en contacto con nosotros para ofrecer una atención al cliente, o para pedirme disculpas de ningún tipo, ni para compensarme en modo alguno todas las molestias – muchas – sufridas. Nadie. La única respuesta que he podido obtener, es que el coche tiene seis años...
Por el momento, preferimos no abundar en los numerosos casos que recoge la red con problemas buscando sólo en castellano relativos al Multitronic de Audi,... Posponemos, por el momento, la creación de un Grupo Facebook, en varios idiomas (inglés, francés, alemán, español) de damnificados por la caja Multitronic de Audi, porque aún nos queda un hilo de esperanza en que sepas resolver o paliar esta situación, para evitar acometer una reparación que casi supera el valor venal de este vehículo Audi. Impresionante. Por supuesto, estoy muy agradecido a tu compañía por recordarme cuáles son mis responsabilidades en mantenimiento,.... Ahora veremos qué ocurre cuando sea yo quien te recuerde las tuyas como Presidente de Audi.
Juan M. Baselga, tu compañía Audi nos ha fallado. Su comportamiento ante este problema hace que ya no merezca nuestra confianza. Se desentiende del problema, no aislado, de los fallos en la caja Multitronic de Audi. Tu compañía nos recuerda cuáles son nuestros deberes como clientes: Aparentemente sólo dos: pagar y callar. Pero ahora veremos qué ocurre cuando sean los clientes quienes recuerden a Audi sus responsabilidades.
Juan M. Baselga: Hoy en día, afortunadamente vivimos en un entorno en el que los clientes tenemos voz y capacidad de difusión, y resulta de lo menos recomendable hacer negocios de esta manera. Hoy soy yo quien te recuerda que lo has hecho mal, muy mal, manifiestamente mal, y que espero aportar pruebas concluyentes al respecto. Mañana serán más quienes cuenten y divulguen esta historia de los fallos y problemas de la caja Multitronic de Audi, y lo que es mucho peor, del trato con sus clientes de Audi aportando datos, fríos, fehacientes y comprobables. No lo hago para conseguir nada a cambio, sino para, basándome en mi experiencia, recomendar a todo aquel que me lea que tenga mucho cuidado y que, si puede evitarlo, no utilice los servicios de tu compañía. Audi me ha demostrado que antepone demasiadas cosas al bienestar de sus clientes, y que además, intenta eludir su responsabilidad cuando las cosas salen mal. Mientras tu compañía no demuestre haber cambiado su escala de valores, no gozará jamás de nuestra consideración.
Esperando que, al menos, esta mala experiencia pueda servirte de algo, me despido atentamente y quedo a tu entera disposición. Ya que no puedo agradecerte un buen servicio, al menos te agradezco la atención.
Nota bene: Esta misiva sigue el esquema de otra carta célebre de Enrique Dans, relatando otro de esos casos tan lamentables... como reales.
Se puede agitar la noticia en Menéame, Aupatu, Topsy,...
Grupo Facebook: Damnificados por el cambio Multitronic de Audi.
VI Encuentro Estatal de Orientación
Bilbao acogerá en su sexta edición el tradicional Encuentro Estatal de orientadores y orientadoras. La Asociación de Psicopedagogía de Euskadi (APSIDE) es la encargada de organizar este evento, que está auspiciado y promovido por la Confederación de Organizaciones de Psicopedagogía y Orientación de España (COPOE).
El amplio programa incluye muy esperadas conferencias como las de María José Díaz Aguado sobre la "Importancia de la orientación para la mejora de la convivencia en los centros educativos", Javier Elzo sobre " Cómo son los jóvenes a quienes orientamos" y de Francesco Tonucci (FRATO) sobre "Educar y orientar con ojos de niño".
Aún queda abierta la INSCRIPCIÓN en las modalidades de presencial o no. Agradecemos a Ernesto Gutiérrez-Crespo (Presidente de APSIDE) la invitación a participar, como en anteriores jornadas territoriales o autonómicas. Esperamos aportar algunas grabaciones de la sesión del domingo 13 de mayo de 2012. [Post reubicado junto a su crónica]
Cada mañana nacemos de nuevo
El mejor árbol de navidad
Perdona
Lee un buen libro. Canta en la ducha
Escucha a un amigo. Acepta un cumplido
Ayuda a un anciano. Cumple con tus promesas
Termina un proyecto deseado
Sé niño otra vez. Escucha la naturaleza
Muestra tu felicidad. Escribe en tu diario
Trátate como un amigo. Ama a los animales
Haz un álbum familiar. Date un baño prolongado
Por hoy no te preocupes. Deja que alguien te ayude
Mira una flor con atención. Pierde un poco de tiempo
Apaga el televisor y habla. Escucha tu música preferida
Aprende algo que siempre deseaste
Llama a tus amigos por teléfono. Haz un pequeño cambio en tu vida
Haz lista de las cosas que haces bien. Ve a la biblioteca y escucha el silencio
Cierra los ojos e imagina las olas de la playa. Haz sentir bienvenido a alguien
Dile a las personas amadas cuánto las quieres
Dale un nombre a una estrella
Sabes que no estás solo
Piensa en lo que tienes
Hazte un regalo
Planifica un viaje
Respira profundo
Siembra y cultiva el amor
Podríamos vivir más de 120 años. - Premio Nobel Ramakrishnan
Traducción de un gran artículo en el Sunday Times, del 24-3-24 (véase aquí).
La clave de una larga vida no es ningún secreto: comer y dormir bien, hacer algo de ejercicio, evitar que te atropelle un autobús y esperar que cualquier enfermedad hereditaria se salte tus genes. Venki Ramakrishnan, vegetariano que va en bicicleta todos los días a su laboratorio de Cambridge, hace todo esto y, a sus 71 años, se declara "filosófico" sobre su propia muerte. Pero también toma pastillas para la tensión arterial, el colesterol alto y los coágulos sanguíneos (blood clots): medicamentos mágicos que alargan nuestra vida y que toman millones de personas cada día.
Si al final de sus días le ofrecieran una píldora que, en lugar de prevenir la enfermedad, evitara el proceso de envejecimiento y le concediera diez años más de vida, ¿la tomaría? "Todos estaríamos tentados", afirma Ramakrishnan. "La voluntad de vivir más está profundamente arraigada en cada uno de nosotros". ¿Podría llegar a existir un fármaco así? "Tengo la sensación de que estamos en la cúspide de algo", afirma. ¿Cuánto tiempo podría vivir el ser humano? "No creo que haya ninguna ley científica que impida romper nuestra barrera natural de 120 años más o menos. Pero lo pondría en la misma categoría que ser capaces de colonizar Marte. No hay ninguna ley física que diga que no podemos hacerlo. Pero es muy difícil".
Pocas personas saben más de la vida -y del funcionamiento celular que la impulsa- que Ramakrishnan. Este biólogo molecular ganó el Premio Nobel de Química en 2009 por su trabajo para resolver la estructura del ribosoma, la parte de la célula que lee las instrucciones genéticas y utiliza esa información para fabricar proteínas. El ribosoma es crucial para el funcionamiento de nuestro cuerpo: determina el color de nuestros ojos, hace latir nuestros corazones y hace girar nuestras mentes. Fue un avance asombroso.
Ramakrishnan fue nombrado caballero en 2012, elegido presidente de la Royal Society en 2015 y en la última lista de honores de la Reina Isabel II fue nombrado miembro de la Orden del Mérito, de la que solo hay 24 miembros, entre ellos David Attenborough, el artista David Hockney y el arquitecto Lord Foster of Thames Bank. Tras el éxito que ha supuesto desenterrar los secretos de la vida, Ramakrishnan centra su mirada microscópica en las causas del fin de la vida. Ha escrito un libro titulado Por qué morimos.
Los egipcios construyeron las pirámides para preparar a sus faraones para la otra vida; los emperadores chinos fueron enterrados con ejércitos de terracota para defender sus cuerpos hasta el renacimiento. La reencarnación y el karma hindúes, el cielo y el infierno cristianos, el jardín de la paz eterna del Islam: estas doctrinas surgieron porque, como dice Ramakrishnan, "el conocimiento de la muerte es tan aterrador que vivimos la mayor parte de nuestras vidas negándola". Sólo el título de su libro basta para que muchos de nosotros entremos en pánico.
Sin embargo, al debilitarse el control de la religión, ha quedado un vacío en nuestra relación con la muerte. En lugar de sacerdotes y profetas, nos dirigimos cada vez más a un grupo de personas -muchos de ellos hombres ultra ricos- a los que Ramakrishnan llama "mercaderes de la inmortalidad".
Ramakrishnan creció en Vadodara (Gujarat) en el seno de una familia hindú, aunque con dos padres científicos -su padre era bioquímico y su madre psicóloga experimental- tuvo una educación relativamente laica. "Pero como dice el chiste, en las trincheras y en las salas de examen nadie es ateo".
Me reúno con él en el Laboratorio de Biología Molecular del Consejo de Investigación Médica de Cambridge, donde trabaja desde hace 25 años. Esta altísima institución, situada en el campus del Hospital Addenbrooke, es la cuna de 12 premios Nobel, entre ellos el de Francis Crick y Jim Watson en 1962 por descubrir la estructura del ADN. El laboratorio y sus 440 científicos pretenden "abordar los principales problemas de la salud y la enfermedad humanas". Pero fuera del mundo de la ciencia académica, los investigadores ya no se conforman con luchar contra las enfermedades, sino que quieren engañar a la propia muerte.
A tan solo 10 kilómetros de donde estamos sentados se encuentra Altos Labs, la empresa biotecnológica de nueva creación más financiada de la historia, con 2.400 millones de libras de inversores como Jeff Bezos, de Amazon, y el multimillonario ruso-israelí Yuri Milner. Las instalaciones, que abrirán sus puertas en Cambridgeshire en 2022, tienen como objetivo detener por completo el proceso de envejecimiento. En la última década se han fundado más de 700 empresas de "vida más larga". La Iniciativa Chan Zuckerberg -creada por el cofundador de Facebook Mark Zuckerberg y su esposa, Priscilla Chan- incluye en su cometido nada menos que curar, prevenir o gestionar todas las enfermedades para finales del siglo XXI. ¿Se trata de una quimera? "Estos multimillonarios de la tecnología a menudo han tenido un éxito muy rápido a una edad temprana", afirma Ramakrishnan. "Tienen la idea de que la vida no es más que un código que hay que piratear. Pero el envejecimiento es muy complejo. Hay una gran exageración en este campo, y gran parte de ella se aprovecha de la ansiedad que sentimos como humanos ante el envejecimiento y la muerte".
Pero en medio de la arrogancia, hay esperanza, afirma. "En los últimos 50 años la biología molecular y la genética han hecho enormes avances en la comprensión de los procesos de envejecimiento". Volviendo al título de su libro, que recuerda a la Parca: ¿Cómo morimos? ¿Qué sabemos ahora de lo que ocurre en nuestras células cuando hacemos ese último giro mortal? La muerte -si se excluyen enfermedades e inconvenientes como ser devorado por un león- es el resultado, en términos sencillos, del envejecimiento. Pero morir de "viejo" parece algo insatisfactorio. ¿Qué ocurre realmente en el interior de sus víctimas para que la vida se detenga sin más? "Se puede pensar en el envejecimiento como una acumulación de daños en nuestras células, su capacidad para funcionar, su capacidad para hablar entre ellas, su capacidad para regenerarse", afirma Ramakrishnan. "El envejecimiento es una acumulación de defectos químicos que hace que estas células empiecen a funcionar mal".
Cuando somos jóvenes, muchas de las células de nuestro cuerpo rejuvenecen de forma natural. Si se dañan, se dividen y la célula madre muere una vez sustituida por su descendiente. Pero uno de los marcadores del envejecimiento es la "senescencia" (posts). Las células senescentes pierden la capacidad de dividirse y poco a poco se van dañando y muriendo. Esto no es un problema al principio. Las células mueren a lo largo de nuestra vida. "Ni siquiera nos damos cuenta. Puedes perder un miembro entero y seguir viviendo. Pero en el momento de la muerte se produce un fallo crítico de los sistemas. Se pierde la capacidad de funcionar coherentemente como individuo". Ramakrishnan cita El sol también sale, de Hemingway, en la que un personaje explica cómo se arruinó: "De dos maneras. Gradualmente, luego de repente". El cuerpo envejece gradualmente, luego muere de forma abrupta".
Desenmarañar los procesos graduales de los repentinos -envejecimiento de la muerte final- es un punto clave de la investigación sobre longevidad. ¿Cuál de estos procesos se debe a una enfermedad -el cáncer o el Alzheimer, por ejemplo, que nos afectan a muchos, pero no a todos- y cuáles son simplemente envejecimiento, que es universal? Para separar estos factores, los científicos creen estar cerca de un gran avance.
Un obstáculo clave es que las fuerzas evolutivas no están preparadas para que vivamos eternamente. "Lo que le importa a la evolución es que te propagues, te reproduzcas y transmitas tus genes", afirma Ramakrishnan. "No hay ningún beneficio, en términos evolutivos, en gastar muchos recursos intentando vivir más". Estas fuerzas, sin embargo, podrían superarse.
Ramakrishnan divide a los súper ricos que buscan la vida eterna en tres categorías: chiflados, misioneros y racionalistas. "Los chiflados tienen ideas realmente extrañas que no tienen ninguna base real en la ciencia actual", afirma. Esto incluye el campo de la criogenia: congelar nuestros cuerpos tras la muerte hasta que la tecnología avance hasta el punto de que podamos volver a la vida. "No hay ni una sola prueba creíble de que la criogenia humana vaya a funcionar nunca". Una vuelta de tuerca a este planteamiento es un plan para cargar el cerebro en un almacenamiento digital basado en la nube, para descargarlo en una nueva forma de vida en una fecha posterior. Sam Altman, director general de OpenAI, está en la lista de espera de la empresa Nectome, de San Francisco, que pretende "respaldar, registrar y guardar" las mentes de sus clientes.
Ramakrishnan se muestra escéptico, y Johnson admite que el procedimiento, que cuesta 2 millones de dólares al año, apenas le reporta beneficios, pero hay estudios que demuestran que la sangre de ratones jóvenes puede prolongar la vida de ratones viejos. Los primeros resultados sugieren que la sangre joven reduce la actividad de los genes que causan inflamación. Aislar factores como éste podría ayudar a crear un tratamiento que ralentice el proceso de envejecimiento, afirma Ramakrishnan.
Sin inmutarse, la siguiente treta de Johnson tiene que ver con la ciencia en torno a los telómeros (posts), las puntas protectoras al final de nuestros cromosomas. A lo largo de nuestra vida, los telómeros se acortan cada vez que las células se dividen, lo que significa que ya no pueden proteger adecuadamente a los cromosomas y las células ya no pueden dividirse y reconstruirse. Una sustancia química del organismo llamada telomerasa permite a algunas células reconstruir los telómeros, lo que potencialmente permite a las células reponerse indefinidamente. Johnson pretende secuestrar este proceso. Sin embargo, también podría aumentar el riesgo de cáncer, ya que la telomerasa permite que las células tumorales se dividan indefinidamente. Ramakrishnan cree que, si se supera este obstáculo, se podrían abordar aspectos clave del proceso de envejecimiento.
Esto nos lleva a los racionalistas, categoría en la que se incluye Ramakrishnan. Este grupo se centra en la lucha contra las enfermedades como forma de alargar nuestra vida. "Para muchas enfermedades - cardiopatías, cáncer, demencia - el riesgo aumenta con la edad. Así que si el envejecimiento es un factor de riesgo común, quizá deberíamos pensar en qué podemos hacer para atajar el envejecimiento, de modo que podamos vivir más sanos".
Ramakrishnan parece estar en forma y sigue yendo de vacaciones de excursión con su mujer, Vera Rosenberry, ilustradora infantil y escritora de Ohio. Pero admite que "a veces da la sensación de que la vida es como estar limitado a una parte cada vez más pequeña de una casa, ya que las puertas de las habitaciones que nos gustaría explorar se van cerrando poco a poco a medida que envejecemos".
Pero, a decir verdad, Ramakrishnan no está interesado en la inmortalidad. Lo que le mueve es centrarse en los procesos celulares y moleculares que rigen el envejecimiento y la enfermedad, con la esperanza de que más personas puedan disfrutar de buena salud hacia el final de sus vidas. Si la búsqueda de la vida eterna nos lleva a esa meta, que así sea. "El libro se titula Por qué morimos, pero también podría llamarse Cómo vivir", afirma.
A sus 71 años, ¿no le tienta la perspectiva de aprovechar los rápidos avances de la ciencia del envejecimiento para alargar su vida y su carrera? Según él, ya vivimos lo suficiente. El peligro de una longevidad cada vez mayor es la creación de una sociedad estancada, en la que los ancianos se aferren a los recursos económicos y las posiciones de influencia. "Me jubilaré el año que viene. Mi laboratorio sigue publicando en buenas revistas. Pero una persona de 35 años podría crear un campo completamente nuevo. Es una cuestión de justicia generacional. Ya vivimos el doble que nuestros antepasados".
De todos los multimillonarios con complejo de dioses que invierten en longevidad, es Bill Gates, con sus mosquiteras contra la malaria y sus campañas de vacunación, por quien Ramakrishnan siente más respeto. "Se pregunta cómo podemos aumentar la esperanza de vida en los países pobres. Lo irónico es que probablemente él esté haciendo más por aumentar la longevidad humana que cualquiera de estos tipos". Así que en lugar de ocupar un valioso espacio en el laboratorio, Ramakrishnan va a aprender idiomas, leer y pasar tiempo visitando a sus hijos y nietos en Estados Unidos. Espera seguir el ejemplo de su padre, que a sus 98 años sigue viviendo de forma bastante independiente.
Como dice Ramakrishnan: "Mientras esperamos a que la vasta empresa gerontológica resuelva el problema de la muerte, podemos disfrutar de la vida en toda su belleza. Cuando nos llegue la hora, podemos adentrarnos en el ocaso con buen talante, sabiendo que hemos tenido la suerte de participar en ese banquete eterno."
Nobel Prize-winning scientist Venki Ramakrishnan focuses on a problem at the core of every life: why do we age and why do we die. #WIREDHealth. pic.twitter.com/TJ1H6wzAoI
— WIRED (@WIRED) March 19, 2024
‘We could live past 120’: the scientist discovering why we die. Podríamos vivir más de 120 años": el científico que descubre por qué morimos. #longevity #longevidad https://t.co/eQgvTwaGK7
— Mikel Agirregabiria (@agirregabiria) March 24, 2024
Play out: muriendo de éxito, en Getxo
Recomendamos esta amena comedia de la guionista y actriz Teresa Calo, bien interpretada por Lola Baldrich (siempre un placer verla), Diego Pérez (un habitual de ¡Vaya semanita!) y Gorka Mínguez (un portugalujo actor que codirige la obra con su autora).
La sinopsis oficial relata: "Carlos es un escritor que cosechó un gran éxito con su primera novela pero que últimamente no encuentra la inspiración y el respaldo de los lectores. Su editor (Koldo) y su mujer (Nora) tratan de cambiar la actitud de Carlos, que se ha alejado de la escritura y cuyo único interés es jugar con la Play Station… y es que Carlos está convencido de que sólo valorarían su obra si estuviera muerto. Tras confesar esa reflexión a Koldo, sufre un accidente y todos le dan por muerto. Los reconocimientos póstumos, premios, reediciones y ventas se suceden para gloria de Koldo y de Nora".
- Autora: Teresa Calo
- Dirección: Gorka Mínguez, Teresa Calo
- Antzezleak: Lola Baldrich, Diego Pérez, Gorka Mínguez
- Espacio sonoro: Adrián de los Ojos
- Escenografía: Gorka Mínguez
- Iluminación: Arantza Heredia
- Técnico: Eduardo Gracia
- Producción: Erre Produkzioak
- Duración: 80 minutos