Joseph Campbell (1904-1987) fue un mitólogo, escritor y profesor estadounidense que dedicó su vida a estudiar cómo los mitos de culturas distantes y épocas distintas compartían una estructura común. Su obra más influyente, El héroe de las mil caras (1949), presentó la teoría del monomito o viaje del héroe, un patrón narrativo que describe el camino de transformación que siguen los héroes en mitos, leyendas y hasta en las historias modernas.
Gran admirador del novelista James Joyce, Joseph Campbell tomó prestado el término "monomito" de la novela de Joyce Finnegans Wake. Relacionado con el monomito se encuentra el término clásico de catábasis o descenso del héroe (Ulises, Orfeo, Eneas...) al inframundo o los infiernos.
Campbell sostenía que, detrás de cada relato heroico, late una misma aventura humana: la de enfrentarse a lo desconocido, superar pruebas y regresar con un conocimiento transformador. Tal como escribió: “El héroe se aventura desde el mundo cotidiano hacia una región de maravillas sobrenaturales; se encuentran allí fuerzas fabulosas y se obtiene una victoria decisiva; el héroe regresa de esta misteriosa aventura con el poder de otorgar dones a sus semejantes.”
Su pensamiento influyó no solo en la literatura y la filosofía, sino también en el cine. George Lucas reconoció que Star Wars no habría existido sin las ideas de Campbell. La estructura de “partida, iniciación y retorno” sigue marcando guiones, novelas y hasta videojuegos. Campbell nos recuerda que estas historias no solo hablan de héroes míticos, sino de todos nosotros: “El privilegio de una vida es convertirse en quien eres realmente.
Más allá de las artes, Joseph Campbell invitaba a cada persona a reconocerse en ese viaje:
-“Debes abandonar la vida que habías planeado para poder vivir la vida que te espera.”
-“Sigue tu dicha, y el universo abrirá puertas donde antes solo había muros.”
-“El privilegio de una vida es convertirse en quien eres realmente.”
Hoy, leer a Campbell es mirarnos en el espejo de los mitos y descubrir que, detrás de cada relato épico, late la aventura universal de ser humano. Joseph Campbell explicó que todo héroe, incluso en la cultura o vida actual, atraviesa tres grandes etapas del periplo: partida, iniciación y retorno. Esta estructura, llamada monomito, se reconoce en incontables historias modernas.
1. La partida. El héroe recibe una llamada a la aventura y debe dejar atrás su mundo cotidiano. El Señor de los Anillos: Frodo debe abandonar la Comarca para llevar el Anillo al Monte del Destino. Harry Potter: Harry cruza literalmente un umbral al entrar en Hogwarts y descubrir que es un mago.
2. La iniciación. Enfrenta pruebas, enemigos y aliados que lo ayudan a crecer y transformarse. Star Wars: Luke Skywalker aprende a usar la Fuerza, guiado por Obi-Wan y Yoda. Los juegos del hambre: Katniss sobrevive en la arena enfrentando la violencia, la traición y su propia capacidad de liderazgo.
3. El retorno. El héroe regresa con un don, un saber o un poder que beneficia a los demás. La Odisea: Ulises vuelve a Ítaca con sabiduría tras años de pruebas. Matrix: Neo regresa al mundo real transformado, con la misión de liberar a la humanidad.
Quizás por eso, cada vez que leemos una novela, vemos una película o atravesamos un reto personal, seguimos reconociendo en nosotros mismos el eco del héroe eterno que Campbell nos enseñó a descubrir.
Otra estructura clásica es el monomito (o viaje del héroe), descrito por Joseph Campbell en "El héroe de las mil caras" (1949).
— Bellatrix Energia (@BellatrixEnergi) January 14, 2024
La encuentras desde La Odisea hasta Star Wars... pic.twitter.com/hmBVMknp3b