Gracias a
Enekuri Motor hemos probado el
BMW i8, tras la conducción del
BMW i3 (que publicamos en un post anterior). Si bien ambos productos son relevantes, sin duda el
BMW i8 está destinado a convertirse en unos de los hitos del automovilismo híbrido, como el primer deportivo del futuro... que hoy se comercializa. Sin competidores aún en esta gama de más de 300 CV conjuntos. Que no se nos olvide que quienes deseen verlo de cerca podrán hacerlo en la
Visita Blogger a Torre Loizaga, que está programada para el próximo sábado 24-1-15, con
entrada gratuita e inscripción aún abierta.
Sin duda, ha sido el vehículo más emblemático de los coches que nos interesan, y que son aquellos que llevan motores eléctricos significativos para recuperar inercias de frenado, optimiza consumos y ser diseñados (y construidos como es el caso del
BMW i8 en
factorías eólicas autoestionadas energéticamente) bajo criterios de sostenibilidad (otra cuestión, paradójica o contradictoria, es la exuberancia de su potencia, coste,..., pero esto queda a criterio de sus potenciales compradores).
Por todo ello, este
post de análisis se etiqueta con el tag motor como la expresión máxima de todos los coches eléctricos y de los principales híbridos que se comercializan en nuestro mercado, todos los cuales han pasado por nuestras manos (eléctricos puros como
Renault Zoe,
Renault Twizy,
Nissan Leaf,... o híbridos como
Opel Ampera,
Toyota Prius,
Honda Insight,...
El
BMW i8 es un cupé de diseño espectacular, que parte en precio desde 127.000 €, con una habitabilidad de 2+2 plazas, incómodas las traseras para adultos en viajes largos. Mide 4,69 m de longitud, apenas 1,29 de altura, pesa 1.560 Kg (a pesar de las baterías iones de litio de 5 Kwh) distribuidos al 50% entre ambos ejes, maletero casi simbólico de 154 litros y su excepcional Cx es de sólo 0,26.
Dotado de una potencia combinada de 362 CV (231 CV de su motor central tricilindrico de 1.499 cc que propulsa el eje trasero y los 131 CV del motor eléctrico que traccionan desde el eje delantero), dispone de una autonomía de 600 kilómetros,.. con el depósito de combustible opcional de 42 litros de capacidad, y menor con el depósito de serie de 30 litros.
Acompañamos a
Dani Álvarez Lázaro, de Enekuri Motor, en una prueba de conducción -al tiempo que completaba la información, como se puede apreciar en los vídeos sobre estas líneas. requiere pensar un momento para salvar el estribo antes de entrar (salir tampoco es fácil), a través de las puertas basculantes -bien balanceadas, que se manipulan sin esfuerzo- y que se abren como un ala de gaviota hacia arriba (y hacia adelante).
Plagado de detalles, el
BMW i8 es un
compendio de innovaciones a cual más sorprendente. Novedades técnicas en aspectos muy diferentes, desde la opción de ser e
l primer coche que circula por nuestras carreteras con luces de láser (LaserLight), duplicando
el alcance de los luces LED,... pasando la luneta trasera de Gorilla Glass hasta esa imagen cenital que sabe componer con cuatro cámaras en las esquinas del coche y que nos ofrece una visión como tomada por un drone a a unos metros sobre el vehículo, algo muy útil para aparcar y al estilo (se puede ver en el último vídeo). O la posibilidad de adquirir llantas de polímeros de fibra de carbono,...
Goza de un diseño exterior indiscutiblemente llamativo, y dudamos que haya alguien a quien no agraden sus líneas aerodinámicas que canalizan el aire a través de su carrocería de fibra de carbono reforzada con plástico obre su chasis de aluminio. Destaca asimismo su salpicadero digital futurista, con colores y entornos cambiantes y un cúmulo de información. El
BMW i8, al no ser eléctrico, no cuenta con el sistema
"One pedal feeling", como su hermano menor.