El plástico, en forma de botellas, bolsas o tapones, es el principal “depredador” de los océanos. pic.twitter.com/UXBEGNtcbJ
— Daniel Senderos/♥️ (@danielsenderos) January 29, 2020
Bien por los tapones de plástico unidos a botellas o briks
Conversatorio #219 de Juan Carlos Pérez con Joseba Arregi sobre arquitectura y naturaleza en Getxo
Mi fiel pluma Parker aún tira ☺️👌🏼
— StiviAlgorta (@stivi) March 15, 2024
🎨@stivi
Palacio "Bake Eder", construido xa el armador Luis María Aznar en 1901. Otro ejemplo típico de fusión d arquitectura vasca e inglesa.#drawing #dibujo #pencil #ink #lapiz #tinta #architecture #arquitectura #getxo #art #illustration pic.twitter.com/NB0va4U5jH
Egun on!! Los acantilados de Getxo son alucinantes. Guardianes de historia y naturaleza por parte iguales. ¿Sabíais que además de ser parte importante del Flysch de Bizkaia, también son el hogar de varias parejas de cernícalos? pic.twitter.com/YeQprYKdEY
— TurismoVasco (@turismo_vasco) February 25, 2023
Acertijo en Twitter: ¿Asesinato o suicidio?
- Asesinato. Según la posición del bolígrafo sobre el papel se puede concluir que escribe con la mano izquierda. El arma está en su mano derecha, por lo que es comprensible que no se suicidara.
- Es un asesinato: suponiendo que estuviera sentada en el pequeño banco, escribió la nota y luego se pegó un tiro mientras estaba sentada, no habría mancha de sangre en la pared izquierda, ya que disparó en dirección opuesta con la mano derecha. Además, el cable de la lámpara sugiere que alguien quería oscuridad.
- Asesinato. Por el arma en la derecha y el cigarro en la izquierda sin soltarlo tras la muerte. Cocacola boli y tabaco indican que es zurda.Además si lo vas a hacer le metes las dos balas, (por si fallas). Las gafas están sobre la mesa a la derecha y la lámpara está desenchufada.
- Suicidio evidente porque hay dos cosas que nadie ha nombrado, la chancla y la bala en la mesa: Es ambidiestra; todo parece indicar que es zurdo y no se puede refutar o eso parece: el cenicero, la bebida, el boli, las gafas y la posición del flexo. Todo es correcto para un zurdo. Pero se olvida que a la derecha también están los libros (tienen notas y hojas sueltas, por lo tanto son para estudiar estando sentado en esa especie de escritorio y si los agarras cuando estás sentado pesan el doble y encima se nota por su grosor. necesitas tener fuerza en la mano derecha para ello. Si fuera zurdo del todo tendría los libros a su izquierda) y también está la papelera con la botella y la lata dentro. El problema también viene porque la gente piensa que nada más acabar de escribir se ha pegado el tiro en la misma posición y que parece un asesinato porque la pistola pesa y dan por hecho que su mano buena es la zurda y lo han dispuesto todo para que parezca asesinato. Se ha fumado varios cigarros mientras escribía la despedida, lo que demuestra nerviosismo y veracidad de su meta. Está decidido. Las colillas no estaban ahí de días anteriores porque la caja vacía de tabaco apoyada en la pared da a entender que se fumó lo que quedaba de esta, de lo contrario estaría más lleno el cenicero. Cuando acabó de escribir (mientras aún empezaba a fumar el "último cigarro") cargó una sola bala de dos que tenía inicialmente pensado usar en el cargador de la pistola. Con una sería suficiente; demuestra otra vez certeza en el acto que se va a cometer. Algo que ha pensado mucho. Acto seguido levantó la cabeza y vio su cara reflejada en la ventana encima del escritorio por la luz del flexo que dibujaba la expresión de su vergüenza (o miedo); desenchufó la lámpara, se dio la vuelta, dio otra calada al cigarro y se disparó en la sien. La gravedad hizo el resto. Tanto la posición de la silla como la mancha coinciden con el lado desde el que se disparó. El que se haya dado la vuelta también se ve en que la chancla es del pie derecho y es muy probable que la chancla del pie izquierdo esté debajo de su torso, detrás o simplemente ha salido del plano. El por qué sé que es otra bala y no un casquillo es porque las probabilidades de que NO haya podido acabar encima de la mesa en ese lado son muy altas. La salida del casquillo en el arma también lo tiene en su lado derecho que a su vez disparado desde su mano derecha es más que probable que acabe en alguna parte a su derecha también y bien lejos en otra parte de la habitación. Lo único que me confunde es que no se vea la marca de la bala en la pared al salir de la cabeza. Esto puede ser un error del dibujante o simplemente que la bala cambió de trayectoria al impactar de lleno en el cerebro y salir hacia arriba desde el lado izquierdo de su sien y tampoco salga en el plano. Pero lo achaco más a un error del dibujante porque coincide la altura de la salida de la sangre en la pared y la parte más ancha de la mancha.
Bienvenidos a #Crimenesilustrados1, una serie de misterios en forma de imagen, creados por mí e ilustrados por @javi_decastro.
— Modesto García (@modesto_garcia) March 25, 2020
En la imagen hay cuentas etiquetadas que os llevarán a más detalles de la escena del crimen. ¿Puedes resolver el misterio? La solución, en 6 días. pic.twitter.com/KiR3vBPDvG
¿Asesinato o suicidio? ¿Por qué? pic.twitter.com/wjrPawmhaY
— Acertijos y puzzles (@acertijosymas) March 16, 2024
Asesinato o suicidio?🕵️🔎
— 𝖪𝖾𝗇𝗂𝖺 𝗅𝗈 𝗁𝖺𝖼𝖾 𝗍𝗈𝖽𝗈 𝗆𝖺𝗅 (@RelatocuriosoK) February 21, 2022
Déjenme sus teorías, daré la respuesta correcta en la noche pic.twitter.com/O66zb3d3z8
Malcolm McLean, el inventor de los contenedores para barcos
Malcom McLean imaginó cómo lo contenedores podían crear un nuevo sistema de comercio internacional. El 90% del comercio internacional es transportado por el mar. Computadores de China, camisetas de Bangladesh, cobre de Chile, autos de Japón, tomates de España y todo, todo lo que se te pueda ocurrir, viaja en una de las 20.000 cajas de metal que puede llegar a transportar un buque de carga. Una caja de acero con 548.000 plátanos, 55 neveras, 400 televisores, 13.000 botellas de ron o un automóvil. Todo cabe en un humilde contenedor.
"La globalización, tal como la conocemos hoy, no habría sido posible sin el contenedor", Marc Levinson, economista, historiador, y autor de libros como "La Caja", donde explica cómo la innovación hizo posible la expansión del comercio internacional, y "Fuera de la Caja", donde reflexiona sobre la historia y el futuro de la globalización.
Poca atención le habíamos prestado a los contenedores, hasta que se produjo este año la famosa crisis de las cadenas de suministros (derivada de la pandemia de covid-19), dejando atascados muchos de los productos que consumimos regularmente en alguno de los puertos por donde transitan las mercancías. Efectivamente, no podemos vivir sin ellos. Aunque la historia nos dice que eso no fue siempre así.
El primer viaje de contenedores con éxito comercial ocurrió en abril de 1956 a bordo de un buque militar reconvertido, el Ideal X, que transportó 58 contenedores desde Nueva Jersey a Texas, donde 58 camiones estaban esperando su llegada para trasladar las mercancías.
El artífice de la travesía fue Malcom McLean, el visionario creador del sistema de transporte marítimo comercial moderno con contenedores. "Mr. contenedor", podríamos llamarle, reconociéndole que inventó el sistema logístico, más que la caja metálica propiamente tal.
Y se hizo multimillonario. Antes de que McLean -un empresario camionero nacido en 1914 en una familia de agricultores de Carolina del Norte- utilizara el contenedor como la pieza clave de su imperio comercial, el transporte marítimo era casi una pesadilla. En la década de 1950 sólo la logística de cargar y descargar barcos era un desafío gigantesco.
Los estibadores encargados de hacerlo apilaban, por ejemplo, barriles de aceitunas y cajas de jabón sobre un palé de madera. Éste se elevaba con una cuerda gruesa y era depositado en la bodega del barco, donde otros estibadores acomodaban cada artículo para optimizar el espacio al máximo y para que la carga no se moviera en alta mar.
Solía haber grúas y carretillas elevadoras disponibles, pero al final muchas de las mercancías terminaban siendo movidas a pulso. Era un trabajo mucho más peligroso que el de la manufactura o la construcción. En los puertos grandes cada pocas semanas había alguna víctima fatal. La carga y descarga de un barco demoraba la misma cantidad de días del viaje por mar.
Tenía que existir una mejor manera de hacerlo. Y esa respuesta fue la que encontró Malcom McLean. El empresario se había dedicado al negocio del transporte terrestre de mercancías. Comenzó con un camión durante los difíciles años de la Gran Depresión y terminó con una flota de 1.700 cuando vendió la compañía a mediados de los años 50.
McLean estaba convencido de que el uso de contenedores era el futuro del comercio internacional, pero para eso, requería toda una cadena logística que hiciera viable el modelo de negocio y convencer a todos los que participaban en el antiguo sistema de que debían transformarlo.
Para empezar, las compañías de camiones, las navieras y los puertos no se ponían de acuerdo en un estándar común para fabricar los contenedores. Después, estaban los poderosos sindicatos de los puertos, que se resistían a la idea porque la mayor parte de los estibadores perdería su empleo.
Por otro lado, las autoridades que regulaban la carga pesada en Estados Unidos también preferían el statu quo. Diferentes normativas establecían cuánto debían cobrar las compañías navieras y las empresas de camiones. ¿Por qué no permitir que éstas cobraran lo que el mercado dictara? ¿O permitir que se unieran y ofrecieran un servicio integrado?
No, la primera respuesta fue una frontal oposición a las ideas de McLean. Pese a las dificultades, el empresario continuó trabajando en la manera de fabricar contenedores que se pudieran ajustar a los requerimientos de un barco y los de un camión que pudiese transportar la misma caja metálica llena de productos. Hasta que llegó el día en que consiguió a su gran cliente: el ejército de Estados Unidos durante la guerra de Vietnam.
McLean aprovechó una laguna legal para obtener el control de una compañía naviera y de una empresa de camiones. Luego, cuando los estibadores entraron en huelga, aprovechó ese tiempo de inactividad para adecuar los barcos viejos a las especificaciones de los nuevos contenedores.
Pero la maniobra más importante ocurrió en 1960, cuando McLean le vendió la idea del transporte con contenedores a los militares. El ejército vio en la idea de McLean la solución a sus problemas para enviar equipamiento militar a Vietnam. El transporte con contenedores es mucho más eficiente si forma parte de un sistema integral de logística, de manera que el ejército de EE.UU. era el cliente ideal.
Además, Malcom McLean se dio cuenta que al regresar de Vietnam, sus buques podían traer los contenedores llenos de carga útil de la economía que más rápido estaba creciendo del mundo, la de Japón. Y así comenzó en serio la relación comercial transpacífica.
Una relación precipitada por una guerra que finalmente terminó convirtiéndose en la base de lo que actualmente es el sistema de comercio internacional. Hoy toda la gestión del transporte marítimo se dirige desde unas computadoras, que controlan cada uno de los contenedores que se mueven a través de un sistema logístico global.
Los contenedores refrigerados se colocan en el casco, donde hay electricidad y monitores de temperatura, y los más pesados al fondo. Y mientras las grúas cargan el barco, lo van descargando de otros contenedores. "Por supuesto que no todo el mundo disfruta de los beneficios de esta revolución", dice Tim Harford, uno de los autores de la serie de la BBC "50 cosas que hicieron la economía moderna". Muchos puertos de los países más pobres, como los de África Subsahariana, se parecen al de Nueva York durante la década de 1950. Sin embargo, con esas excepciones y para un número creciente de destinos, ahora las mercancías se pueden transportar de una forma más rápida y barata. Y eso es, en gran parte, gracias al contenedor", apunta Harford.
En la década de 1950 un hombre tuvo una idea que revolucionaría para siempre el transporte, el comercio internacional y el mundo: Malcom McLean, el inventor del contenedor marítimo. Tira del hilo 🧵👇🏽👇🏽👇🏽 pic.twitter.com/yxMZby4FKv
— Iván Fernández Amil (@ivanfamil) May 18, 2024
Paradoja de Teseo, los calcetines de Locke o el hacha del abuelo
- Los calcetines de Locke. John Locke propuso un escenario concerniente a un calcetín favorito al que le sale un agujero. Él reflexionaba sobre si el calcetín podría aún ser el mismo después de que se aplicara un parche en él. Si así era, ¿podría entonces seguir siendo el mismo calcetín después de que se le aplicara un segundo parche? ¿Podría, en efecto, seguir siendo el mismo calcetín varios años después, incluso después de que todo el material del calcetín fuera reemplazado por parches?
- La vieja hacha del abuelo. «La vieja hacha del abuelo» es una expresión coloquial de origen desconocido que describe algo a lo que le queda poco del original: «Ha tenido tres nuevas cabezas y cuatro nuevos mangos pero aún es la misma vieja hacha». La frase también ha sido usada en bromas como «Esta es el hacha original bicentenaria de George Washington…», mientras se sostiene un hacha evidentemente nueva.
Mezclar la paradoja del barco de Teseo con la inversión es como mezclar churras con merinas, ¿o no? Te lo contamos todo en nuestro #Invertips ⬇️📊.
— EVO Banco (@EVObanco) January 18, 2024
The Ship of Theseus: A New Era for Recycling Media
— David (@davidmdandrea) April 29, 2024
The world of media is entering a dramatic transformation, one that mirrors the philosophical paradox of the Ship of Theseus. In this thought experiment, a ship's parts are replaced one by one until none of the original parts… pic.twitter.com/K2ExczPnwQ
Esto es lo que se conoce popularmente como la paradoja de Teseo. Existen algunos enfoques para responder a ella cuando se trata de la identidad personal, siendo la continuidad psicológica el principal. De todas formas, lo que él plantea tiene fácil respuesta: pic.twitter.com/WmQ9we80mu
— Alberto D Nuno (@albertonuno7) April 30, 2024
Adelgaza con dos vasos de agua fría con el estómago vacío
Obituario de Alice Munro, la Nobel del cuento
- Nunca debemos subestimar el poder de la imaginación.
- La verdad puede ser dolorosa, pero también nos ayuda a crecer.
- La belleza está en los detalles, en las pequeñas cosas de la vida.
- El amor puede ser hermoso, pero también puede ser destructivo.
- El arte de contar historias consiste en sacar a la luz lo escondido.
- La vida no sigue un camino lineal, está llena de giros inesperados.
- El coraje no es la ausencia de miedo, sino la acción a pesar del miedo.
- La vida es una serie de despedidas, pero también de nuevos comienzos.
- La compasión y la empatía son fundamentales para una sociedad más justa.
- El miedo es una emoción poderosa, pero no debemos permitir que nos controle.
- El pasado siempre está presente en nuestras vidas, aunque tratemos de ignorarlo.
- Las apariencias pueden engañar, nunca juzgues a alguien por su apariencia externa.
- Las historias son como las personas; en cuanto a veces podemos hacerles frente, siempre se nos quedan cortas.
- La verdad está en el ojo de quien la mira, y cada uno tiene su propia verdad.
- La vida está llena de pequeños milagros, solamente hay que aprender a verlos.
- Las palabras tienen el poder de sanar y el poder de destruir. Las personas son mucho más complejas de lo que aparentan.
- Cada elección que hacemos tiene consecuencias, incluso las más insignificantes.
- Las mayores lecciones de la vida a menudo provienen de los momentos más difíciles.
- Las historias nos conectan con los demás y nos ayudan a comprendernos mejor a nosotros mismos.
- La felicidad no se encuentra en la perfección, sino en aceptar nuestras imperfecciones.
- El tiempo es un concepto relativo, a veces parece moverse lento y otras veces muy rápido.
- El destino tiene una forma misteriosa de entrelazarse en nuestras vidas.
- El perdón no siempre es fácil, pero es esencial para liberarnos del pasado.
- La memoria es a menudo selectiva, recordamos solo lo que queremos recordar.
- Las palabras no siempre son suficientes para expresar lo que sentimos.
- El amor no conoce fronteras, puede trascender el tiempo y el espacio.
- La vida es un constante balance entre el pasado, el presente y el futuro.
- Las mejores historias son aquellas que nos hacen reflexionar y cuestionarnos a nosotros mismos.
We are deeply saddened to hear of the death of Alice Munro, a Booker Prize shortlistee and International Booker winner in 2009.
— The Booker Prizes (@TheBookerPrizes) May 15, 2024
Her work highlighted the beauty in the everyday, and she leaves behind an extraordinary legacy. We extend our condolences to her family. pic.twitter.com/Z053LssSb4
Alice Munro recibió el Premio Nobel de Literatura en 2013 por «su maestría en el arte del relato». La recordamos con algunas de nuestras citas favoritas, de algunas de sus obras más emblemáticas. ¿Cuáles son las vuestras? 👇🧶#AliceMunro pic.twitter.com/XdCmq7NIvM
— Penguin España 🐧📚 (@penguinlibros) May 15, 2024
Niños en venta a lo largo de la historia
The story behind the infamous "4 Children for Sale" photograph in 1948 is heartbreaking.
— Fascinating (@fasc1nate) April 22, 2024
Lucille Chalifoux, the mother in the photo, was facing eviction from her apartment and, with no other options, made the difficult decision to sell her four children.
The photo captured… pic.twitter.com/4dBAJTMdGH
Café asiático, un delicioso invento de Cartagena
En 2019 fue publicado un libro en el que Juan Ignacio Ferrández y Ángel Vicente Roig adujeron, aportando una prueba documental, que al menos siete años antes el producto ya era servido en locales del centro histórico de Cartagena.
La razón del nombre «asiático» ha dado lugar también a diversas teorías, como la que sostiene que debe su nombre a la emulación del nombre «ruso» que se había dado a otra bebida surgida en una población cercana, o la que afirma que «ruso» era precisamente su denominación original, pero que debido a sus connotaciones políticas durante la dictadura franquista –al asociarse a la Rusia soviética– fue cambiado a «asiático».
- Café: Un espresso o café expreso fuerte.
- Licor 43: Un licor dulce y aromático con sabor a vainilla y especias, cuya fábrica principal está en el Acceso Este a Cartagena, en el polígono industrial de Los Camachos, visible desde la autovía de Cartagena a La Manga del Mar Menor y de aspecto llamativo multicolor barrado.
- (Coñac o brandy adicional optativo, pero innecesario).
- Azúcar: Al gusto.
- Granos de café: Para decorar.
- Canela en polvo: Para decorar.
- Cáscara o rayaduras de limón: Para decorar.
Así hacen nuestros baristas el asiático cartagenero con Café Pérez Campos. 🤩☕️ #asiaticocartagenero #cartagena #cafesperezcampos #cafecartagena pic.twitter.com/ASwJyMvoFk
— Cafés Pérez-Campos (@CafePerezCampos) January 21, 2022
🧐🇩🇰Tal día como hoy en 1940, abriría Pedro Conesa en El Albujón el típico BAR PEDRIN.
— Historias y Leyendas de Cartagena (@HyLdCT) May 5, 2024
Donde se hace un buen "Asiático", café típico cartagenero que te hace saborear la historia de la ciudad. pic.twitter.com/UfwVRgkECI